Los Xochimilcas se levantan
Publicado en Camino al Andar
Por Oralba Castillo Nájera
Xochimilco es territorio zapatista. En sus canales y humedales resuenan las gestas del Ejército Libertador del Sur. Será por eso que sus habitantes se sublevaron valientes y firmes, señalando a la jefa de gobierno, quien con mañas cuarta T pretendió validar una consulta e imponer el Programa General de Ordenamiento Territorial y el Plan General de Desarrollo de la CDMX (PGOT-PGD). Este Plan y este Programa abren la puerta a la privatización de tierras comunales, para robar a los pueblos su agua y ofrecerla a las inmobiliarias que han destruido la ciudad. Edificios de veinte pisos, tiendas gigantes, zonas tomadas por restaurantes y etcéteras han devastado el suelo de agricultura de los dueños originarios.
El sábado tres de diciembre dio inició la defensa del territorio y la autonomía. Los comuneros de San Gregorio cerraron calles con barricadas, instalaron un plantón, llegaron granaderos a golpear y reprimir. Por las redes se expandió la noticia del enfrentamiento. En pocas horas los comuneros de Milpa Alta estaban en pie de lucha. Los pueblos nahuas rechazaron la imposición de la jefa de gobierno a favor de la mafia inmobiliaria. A Sheinbaum la sorprendió la organización y bravura de los pueblos.
El abogado González afirma: “se debe exigir se restituya la legalidad de los derechos violentados por las autoridades, que se cancele la consulta, no solo se suspenda.”
El 4 de diciembre, asambleas y pronunciamientos de solidaridad seguían manifestándose. Ese día, esa fecha recuerda a Zapata y Villa entrando a Xochimilco, antes de llegar a la Ciudad; como si la rueda de la historia girara en los tiempos de la revolución popular, en 1914, cobrando fuerza.
¡SÍ SE PUDO!
En la mañanera, el Mesías del desarrollismo capitalista hubo de intervenir: “son alcaldes conservadores quienes dieron mal la información a los pueblos”. Claudia Sheinbaum repitió la misma cantaleta.
Una semana agitada, llena de reuniones, enfrentamiento con granaderos, cierre de calles, fogatas, ollas comunales, guardias día y noche dieron por resultado el fortalecimiento de la lucha comunal.
El 9 de diciembre se llevó a cabo una asamblea en Milpa Alta donde los comuneros celebraron el triunfo. Hubo mención especial a las mujeres que se pusieron al frente y aplausos a los jóvenes. El abogado Carlos González se congratuló de la justa alegría, pero alertó de no baja la guardia. Seguir organizados, no permitir que se cambie el uso de la tierra. Se ganó una batalla, no la guerra. Existen muchas mañas del gobierno para continuar con sus planes de desarrollo inmobiliario apropiándose de territorios indígenas.