El gobierno federal niega atención pronta y expedita a los pueblos del Congreso Nacional Indígena en Guerrero
Al Ejercito Zapatista de Liberación Nacional
Al Congreso Nacional Indígena
Al Concejo Indígena de Gobierno
A los pueblos de Guerrero
A los pueblos de México y del mundo
A la sexta nacional e internacional
A las redes de resistencia y rebeldía
A las redes de apoyo al CIG
A los medios de comunicación honestos
31 de Mayo del 2019.
Después de los cuatro asesinatos cometidos de la forma más vil y cobarde durante este mes de Mayo del 2019, donde perdieron la vida el concejal del CIG-CNI José Lucio Bartolo Faustino y el delegado del CNI Modesto Verales Sebastián el 4 de Mayo del 2019. Y posteriormente el 24 y 25 de Mayo fueron desaparecidos y ejecutados Bartolo Hilario Morales e Isaías Xanteco Ahuejote, ambos delegados del CNI y los cuatro también promotores del Concejo Indígena y Popular de Guerrero – Emiliano Zapata.
Las autoridades civiles y agrarias de la región Montaña Baja, junto con promotores estatales, regionales y locales, los niños, niñas, abuelos y abuelas, hombres y mujeres, las comunidades y pueblos Na Savi, Me´pháá, Nahua, Ñamnkué, Mestizos y Afros que integramos el Concejo Indígena y Popular de Guerrero – Emiliano Zapata, queremos hablarle hoy a los pueblos de México y el mundo para decirles que en México no existe ninguna cuarta transformación, al menos no para los indígenas pobres. A nosotros nos mantienen en la miseria, la marginación y solo cuando nuestros cadáveres molestan la fiesta de los poderosos voltean a vernos. Pero se tapan la nariz por el fétido olor de la muerte, se dan la vuelta y vuelven a lo suyo, a seguir celebrando que una nueva clase intelectual ahora se viste de gala.
Mientras, en nuestras montañas no importa si las y los niños crecen jugando desnudos entre la tierra y las lombrices, no importa si mueren por diarreas o por falta de médicos o están condenados a crecer para ser reclutados por los grupos criminales, no importa si nos sacan de las listas para entregar abono a mas de 600 campesinos que ahí nos traen, a las vueltas, caminando para juntar los papeles para poder sembrar nuestro maíz y frijol. No importa cuántas veces marchemos con nuestros pies descalzos sobre su pavimento caliente, siempre encontramos oídos sordos, no importa si comemos o morimos de hambre, no importa si en las lluvias tenemos techo o no lo tenemos, no importa si nuestras mujeres son violadas y torturadas por los narcoparamilitares, no importa si el ejército mexicano las viola. Sr López Obrador, seamos sinceros, parce que nuestras vidas no le importan y nuestras muertes, ni siquiera son motivo de su lastima. entiéndanse de una vez ustedes los jefes de Estado, que las niñas y niños por la inseguridad y el terror de los grupos criminales han dejados de asistir a la escuela. También los compañeros no pueden bajar hacer su compra en su cabecera municipal porque el estado de sitio de estos grupos criminales es latente.
Hemos tenido que soportar la burla y el cinismo de altos funcionarios del estado de Guerrero encabezados por el Presidente Municipal de Chilapa de Álvarez, Jesús Parra García quienes se trasladaron al lugar para tratar de extorsionar a los familiares de nuestros hermanos asesinados, para canjear sus cuerpos ya sin vida a cambio de los criminales que planificaron y ejecutaron estos cobardes crímenes. Esa es la burla más cruel y sínica. ¿Porque? Porque somos indígenas, porque igual que Hernán Cortez quieren poner el ejemplo de las cabezas decapitadas, para que otros pueblos no se organicen y no vean lo inevitable, lo que no se puede esconder más; el estado mexicano está podrido y la solución no es maquillarlo con nuevos colores.
Las amenazas de los grupos criminales de «Los ardillos» y «Los Rojos» de incursionar para asesinar a la población, las amenazas contra la vida de nuestros promotores estatales y regionales, continúan circulando públicamente para intentar callarnos. Esta Guerra ha cobrado muchas más vidas de las que hoy se conocen, y además el estado de Guerrero mantiene activas 67 órdenes de aprensión en contra de hombres y mujeres inocentes, derivadas del primer enfrentamiento que tuvieron con estos grupos criminales el 8 de Febrero del 2015, en aquella ocasión con «Los rojos». Así nuestros pueblos han sobrevivido por décadas, en un territorio que está en medio de la disputa de los grupos narcoparamilitares de «Los ardillos» y «Los rojos», además de estar sitiados por el ejército mexicano, y golpeados por los gobiernos locales, estatales y federales.