Este 11 de febrero, frente al palacio de Bellas artes en la CDMX, la vocera del CNI  acompañada por concejalas  del CIG, compartieron su palabra  al lado de Don Pablo González Casanova, Juan Villoro y Gilberto López y Rivas.

 Los primeros en dar la bienvenida a la vocera  y a su comitiva fueron las y los  auxiliares de Marichuy de  la mesa permanente en la explanada de Bellas Artes, quienes en  su palabra compartida,  nos mostraron  las grandes diferencias entre  la ciudad de ensueño y la ciudad pesadilla:

 “Frente  a la ciudad de ensueño de los empresarios y las inmobiliarias, se vive la pesadilla de niños , niñas y familias enteras, de jóvenes victimas  del crimen organizado o de la policía, de  miles de mujeres víctimas de la violencia y  de familias indígenas migrantes tratados como delincuentes”.

Poco después, Gilberto López y Rivas  en su participación habló del recorrido de CNI por el país  y del extenso memorial de agravios recolectados en sus caminos; Pablo González Casanova anunció la urgencia de una revolución no violenta; Juan Villoro reconoció la labor de las  y los asistentes en la recolección de firmas y comparó el proceso de los candidatos “independientes” punteros en la recolecta  -los cuales ya lograron rebasar la meta utilizando las  mismas formas  corrupto-partidistas para lograrlo-, con el caminar del Marichuy y el CNI, quienes librando las trampas impuestas para la recolección  harán un esfuerzo adicional hasta el último segundo del 19 de febrero .

Concluyendo  la participación de  las y los auxiliares  dió  inicio la compartición de las Concejalas:

Reyna Cruz, concejala Chontal, narró a los presentes la forma en cómo su pueblo la eligió para ser su vocera y culminó  reiterando  los derechos que todas y todos tenemos para luchar unidxs;  la palabra fue retomada por Guadalupe Vázquez Luna, ( Lupita era una niña de 10 años cuando vio morir a su papá, a su mamá y a cinco de sus 10 hermanos);  es ella quien nos recordó la masacre de Acteal y la participación del PRI en la misma. Fue ella,  ahora concejal de su comunidad, quien anunció “Ya no estoy dispuesta a que me quiten lo que es mío”. A Lupita le siguió  Francisca Álvarez,  indígena Nahua de la comunidad de Tlanixco , quien denunció el abuso de autoridad y la corrupción  que mantiene a miembros de su comunidad como presos politicos. Continuó con la compartición Magdalena García,  quien  narró  a los presentes la forma en como ella misma padeció  la “justicia del estado” , la cual  la mantuvo  más de un año en prisión  solo por ser quien es: mujer,  indigena, sensible y solidaria  ante los acontecimientos en San Salvador Atenco.  Yamili Chan, indigena Maya,  cerró la participación de las concejalas y nos recordó que “Los pueblos venimos caminando desde ayer, desde antier… el  CNI tiene 20 años caminando sin parar”.

Después de estar atenta  a cada una de las palabras compartidas ,  Marichuy a  nombre del CNI y de la A.C. “Llegó la hora  del florecimiento de los pueblos”, dió las gracias  a  los presentes y reconoció cada una de las palabras que la antecedieron: “Justamente todo lo que han dicho ,  justamente por eso surge la propuesta , una propuesta diferente , desde abajo, conjunta , para desmontar ese poder de arriba…”

El evento culminó con las palabras de los y las asistentes de Marichuy de  la mesa permanente de recolección de firmas  en Bellas Artes. Sus palabras recorrieron los tiempos, el tiempo de la imaginación,  de la voz colectiva, de la creatividad , de la responsabilidad ,  de demostrar de lo que somos capaces, es tiempo,  de hacer nuestra la historia.

Palabras de Marichuy en la explanada de Bellas Artes de la Ciudad de México (11/02/18):

Buenas tardes hermanos, hermanas, compañeros, compañeras, niños, niñas, medios que nos acompañan, gracias por estar aquí, gracias por este recibimiento. A nombre de nuestro Concejo Indígena de Gobierno, de la asociación civil que acompaña este proceso, les damos las gracias por escuchar esta palabra que hemos traído recorriendo por gran parte de este país y justamente todo lo que han dicho ya los que me antecedieron la palabra es cierto.
Justamente por eso surge esta propuesta, una propuesta diferente, una propuesta desde abajo, una propuesta conjunta, una propuesta para desmontar ese poder que está arriba y que nos quiere imponer a como dé lugar formas, desde arriba, que tenemos que obedecer. Y no tiene que ser así, nosotros anhelamos y pensamos que puede haber formas distintas de construir el poder desde abajo, un poder conjunto, un poder colectivo, un poder donde quepamos todos y que el gobierno obedezca a ese pueblo organizado.
Pero solamente lo vamos a lograr si tenemos la capacidad de podernos organizar y yo creo que sí, porque ya lo están demostrando y están aquí presentes y están dispuestos a que más allá de las firmas hay un compromiso más por este México que lo tienen secuestrado los de arriba. Se los vamos a quitar junto con ustedes, porque este México nos pertenece, porque los pueblos originarios que habitamos este país creemos que nos están acabando y no lo vamos a permitir, no los vamos a dejar.
Por eso pedimos que ustedes también nos acompañen a construir ese México diferente desde abajo, y solamente lo vamos a lograr si empezamos a confiar en el que tenemos al lado, ese no es nuestro enemigo. Nuestro enemigo está arriba y está preparando leyes, reformas, y todo lo que se le ocurre contra el pueblo que está abajo, todos los trabajadores, todos los jóvenes estudiantes, los maestros, las mujeres, todos, entonces por eso nos toca decidir el rumbo de este México y lo vamos a diseñar juntos porque los pueblos indígenas solos no vamos a poder.
Por eso hemos salido a recorrer el país, a llevar  la palabra y a escucharla, que es lo más importante, y juntos buscar formas, buscar estilos, a nuestros tiempos, a nuestros modos, pero organicémonos que es lo más importante, pensemos en el que tenemos al lado, pongámonos a platicar cómo le vamos a hacer para organizarnos y desmontar esto que nos está oprimiendo.
Ya es tiempo y decimos es el tiempo de los pueblos, pero yo también digo es el tiempo de todos los que estamos abajo, es el tiempo de las mujeres, es el tiempo de los estudiantes, es el tiempo de los obreros, es el tiempo de los maestros, es el tiempo de todos los que estamos abajo. Hay que organizarnos porque solamente así vamos a salir adelante, organizados y poniéndonos de acuerdo, porque atrás están nuestros niños y muchos que todavía no nacen. Tenemos que dejarles un México diferente, tenemos que tomarlo en nuestras manos y conducirlo a nuestros modos, a nuestros tiempos, a nuestras formas y luchando por la vida, porque los pueblos ya iniciamos y no nos vamos a detener y nadie nos va a parar, y vamos a continuar construyendo un México diferente donde quepan todos, donde estemos todos conviviendo, donde no haya más muertos, donde no haya más desaparecidos y desparecidas, donde el trabajador tenga su salario digno, donde haya qué comer, donde haya ese respeto.
Eso es lo que queremos construir y eso es lo que estamos invitando en este recorrido donde hemos caminado, porque hay mucho dolor por donde hemos pasado, pero también hay mucha esperanza y están dispuestos a construirla junto con nosotros. Entonces, hermanos, esa es la invitación, eso es lo que queremos con esta propuesta, no queremos estar allá arriba, queremos estar abajo con todo el pueblo y queremos construir esa fuerza que solamente el pueblo sabe por dónde.
Entonces esa es la invitación, esa es nuestra propuesta y se completen o no las firmas ya cumplimos un objetivo, es dar a conocer los problemas que tiene el pueblo y aquí está presente la gente que está dispuesta a seguirnos y juntos construir esa esperanza para todos. Entonces esa es la invitación, esa es la propuesta, no hay otra, solamente la organización desde abajo es como vamos a salir adelante, hermanos, si están de acuerdo entonces caminemos juntos a sus formas, a sus tiempos, diseñando cada quien desde el lugar donde estamos cómo lo vamos a construir, cómo vamos a caminar. No queda de otra, mas que es trabajo lo que les traemos, no traemos como dicen por ahí cachuchas, playeras, traemos trabajo y es una invitación a que juntos vayamos construyendo nuevas formas, porque solamente así vamos a lograr lo que tanto anhelamos, un México diferente, un México desde abajo
Gracias hermanos.