solidaridad
Desde Noruega: Todo nuestro apoyo para lxs maestrxs en pie de lucha en México
Para todxs lxs corazones rebeldes en México y en el mundo
Para todxs lxs maestros que defienden una educación pública y emancipatoria.
Para todos los medios libres e independientes
Para La Sexta
Todo nuestro apoyo para lxs maestrxs en pie de lucha en México. 23.06.16
Con una preocupación profunda vemos como el estado mexicano de nuevo usa la fuerza bruta para reprimir a manifestaciones pacíficas e legitimas en el país. Lxs maestrxs en México han por mucho tiempo visibilizado las consecuencias de las reformas educativas del gobierno actual liderado por Enrique Peña Nieto. Es obvio que el deseo del gobierno de privatizar el sistema educativo no encuentra resonancia entre lxs maestrxs del país.
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) ha estado de huelga y manifestándose en varios estados, principalmente en el sur como en Oaxaca y en Chiapas. No hay justificación de la violencia ejercida por el estado para acabar con las protestas. Desde helicópteros han estado tirando gas lacrimógeno, afectando a todxs, desde maestrxs, niñxs, periodistas y gente solidaria. Han detenido y encarcelado maestrss y periodistas de forma brutal y sin explicación ni justificativa. Lo que despierta la rabia y el asco hacia el gobierno es ver como la policía anda armada en varias ciudades en Oaxaca, y hasta ahora mínimo ocho personas han perdido la vida. Fueron ejecutadas por la policía el 19 de junio.
RvsR: Ante la represión contra el movimiento magisterial y ante la criminalización de la solidaridad y de la libre manifestación
Hemos sido testigos de como la maquinaria represiva y criminal del Estado mexicano se ha agudizado notablemente contra los movimientos sociales y políticos. El sistema moviliza todas las instancias del Estado mexicano para la represión; las fuerzas federales y las fuerzas locales actúan brutalmente contra las movilizaciones civiles de protesta (no así, extrañamente, contra el llamado crimen organizado). Las detenciones y encarcelamientos sin argumentos jurídicos; las desapariciones forzadas; la tortura sexual como acto represivo y de disuasión política; los “arrases” de poblaciones, como sucedió en Salvador Atenco, Estado de México, y en Tlapa, Guerrero, por ejemplo, son actos que comienzan a ejercerse descaradamente, de manera sistemática y continua. Hemos denunciado públicamente las Reformas Judiciales y la Ley de Seguridad Nacional que permiten, dentro de un marco legal, a las fuerzas del Estado cometer toda clase de delitos contra la población civil en nombre de la”seguridad”, claro está, no de la nuestra, de abajo, sino la de arriba.
Las brutales represiones del 19 de junio en diversos estados del país nos ha traído indignación y dolor. Los asesinados en Oaxaca nos duele: maestros, padres de familia, estudiantes que protestaban contra la mal llamada “Reforma Educativa” y que ejercían su derecho a manifestarse, nos causa rabia, la digna rabia como sabiamente se dice en el Sureste mexicano. Los medios de comunicación desesperadamente intentan disfrazar el crimen. Intentan criminalizar a los asesinados, intentan criminalizar la lucha por la justicia. Hacen de la solidaridad también un crimen. Desde allá arriba, lo es. Ahí está Miguel Ángel Mancera y su cuerpo criminal policiaco que, de manera autoritaria, detuvo una manifestación de solidaridad con la lucha magisterial; arrestó a manifestantes que se dirigían en la Casa de Representación del Estado de Oaxaca en la Ciudad de México. Arrestó ahí compañeros de los medios libres y les robó equipo. A la mujeres arrestadas se les agredió física y verbalmente: las manosearon y amenazan con violarlas. Uno de los criminales de Mancera amenazaba: “deja que te coja a ver si se te quita lo revolucionaria”.