EZLN
“EZLN: no están sol@s”, un mensaje solidario global
Jornada de movilización global contra los proyectos de destrucción y en defensa de la madre tierra, CDMX. Foto: RZ.
Ciudad de México, 25 de enero 2019.
Texto, audios y fotos: Colectivo RZ.
Quien habite el palacio nacional que enmarca el zócalo de la Ciudad de México habrá podido leer desde sus ventanas una frase pintada a brochazos en el arroyo vehicular con grandes letras blancas: #EZLNNoEstánSolos. Decenas de manos rebeldes la estamparon en el pavimento justo cuando nacía una tarde soleada de cielo clarísimo que acompañaba a una pequeña multitud de personas convencidas de que los megaproyectos que enarbola el actual gobierno de México sólo traerán consigo destrucción.
La “Jornada de movilización global contra los proyectos de destrucción y en defensa de la madre tierra”, convocada desde las Redes de Resistencia y Rebeldía para este 25 de enero, responde al mensaje lanzado por el zapatismo el pasado 31 de diciembre, cuando el Subcomandante Insurgente Moisés se dirigió al Ejército Zapatista de Liberación Nacional en el 25 aniversario de su levantamiento. En ese mensaje, el Sub Moi lanzó fuertes críticas a proyectos impulsados por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, como el tren maya y la guardia nacional, al tiempo que enfatizaba una y otra vez que el zapatismo está solo. Como respuesta inmediata a su mensaje, miles de voces en diversos países se unieron a la crítica y decidieron organizarse para buscar maneras de hacer sentir al EZLN, y a ellas mismas, que la solidaridad global con la lucha zapatista y la necesidad de organización propia están de pie.
Intelectuales, académicos, artistas y activistas del mundo en solidaridad con la autonomía zapatista
Carta de solidaridad y apoyo a la resistencia y la autonomía zapatista
Nosotros, nosotras, intelectuales, académicos, artistas, activistas y personas de buena voluntad, así como organizaciones, asociaciones y colectivos de varios países manifestamos nuestra solidaridad con el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en este momento crucial de su historia y rechazamos tajantemente la actual campaña de desinformación, mentiras y calumnias dirigida en contra del zapatismo.
Para nosotras, nosotros, al igual que para mucha gente en el mundo, la lucha zapatista representa un gran ejemplo de resistencia, dignidad, congruencia y creatividad política. Hace 25 años, su ¡Ya Basta! fue un acontecimiento de gran trascendencia y una de las primeras reacciones contundentes a nivel planetario frente a la globalización neoliberal, por lo que contribuyó a impulsar el rechazo y la crítica de un modelo que, en ese entonces, parecía incuestionable. Fue también, y sigue siendo, expresión de la lucha legítima de los pueblos originarios en contra de la dominación y el desprecio sufridos durante siglos y hasta hoy, así como en favor de sus derechos a la autonomía. El auto-gobierno popular que los y las zapatistas han puesto en práctica con las Juntas de Buen Gobierno en sus cinco caracoles constituyen un ejemplo de democracia verdadera y radical, digno de inspirar a los pueblos del mundo y de ser estudiado en todas las facultades de ciencias sociales del planeta. La construcción de la autonomía zapatista representa para nosotros, nosotras, la búsqueda constante, honesta y crítica de un proyecto alternativo y emancipador de suma importancia a la hora de enfrentar los desafíos de un mundo que parece hundirse cada vez más en una profunda crisis, a la vez económica, social, política, ecológica y humana.
Por eso, expresamos nuestra preocupación por la situación que enfrentan las comunidades zapatistas y los pueblos indígenas de México, al ser atacados sus territorios y comunidades por proyectos mineros, turísticos, agro-industriales, de infraestructura, etc., tal como lo ha denunciado el Congreso Nacional Indígena (CNI) y el Concejo Indígena de Gobierno (CIG). En este momento, nos preocupa especialmente los grandes proyectos impulsados por el nuevo gobierno mexicano, como el Corredor Transístmico, el millón de hectáreas de árboles comerciales y el llamado “Tren Maya”, recientemente denunciado como una humillación y una provocación por el subcomandante Moisés, vocero del EZLN, ya que afecta gravemente los territorios de los pueblos mayas que habitan en el sureste mexicano.