Pueblos Indígenas
Wallmapu en alerta: huelgas de hambre y avanzada racista
Vía Asamblea Anarquista del Biobío | Radio Kurruf
Wallmapu en alerta: huelgas de hambre y avanzada racista
Es común escuchar en estos días lo que sucede en Wallmapu como el «conflicto mapuche», una definición en concordancia con la postura del poder, que desde su concepción ha monopolizado el discurso. Esto no es nuevo, en el siglo XIX cuando nacía el Estado chileno, desde el poder hablaban de “pacificación de la Araucanía”, lo mismo cuando llegaron los imperialismos inca y español declarando la guerra. Pero las invasiones al territorio mapuche no se limitan a cuestiones bélicas, sino que implican un choque civilizatorio entre formas culturales jerárquicas-autoritarias, como las imperialistas y formas no estatales-federativas, como las practicadas por las diversas comunidades mapuche. Siguiendo la costumbre occidental, el acto fundacional del Estado chileno se basa en la centralización del poder en una estructura, con una “raza”, una lengua oficial y un territorio determinado. La expansión del imperio de la ley ha provocado la reducción y división del territorio mapuche junto con la culturización patriarcal y el establecimiento de las relaciones sociales capitalistas, que determinaron históricamente la campesinización de las comunidades y la proletarización mapuche en las urbes.
El proceso de revitalización cultural mapuche y lucha por la tierra que tomó fuerza desde la década de 1990, ha recibido como respuesta desde el poder el racismo judicial, montajes, militarización y muertes. El actual episodio nos muestra las incoherencias del imperio de la ley, ya que los 27 presos políticos mapuche, entre los que se encuentra el Machi Celestino Córdova, solicitan al gobierno cumplir con la protección de los derechos que el Estado prometió garantizar mediante el convenio 169 de la OIT. Para hacerse escuchar han recurrido a interminables huelgas de hambre que ponen en peligro su vida.
Anuncian Caravana nacional por una vida digna para los pueblos indígenas – 10 de septiembre de 2020
Caravana nacional por una vida digna para los pueblos indígenas.
¡Alto a la guerra narco-paramilitar contra los pueblos indígenas de México!
Como hombres, mujeres, niños, niñas, abuelos y abuelas de nuestras comunidades indígenas que somos; Na Savi, Me´pháá, Nahua, Ñamnkué, Mestizos y Afro mexicanos del estado de Guerrero, y que estamos organizados en el Concejo Indígena y Popular de Guerrero – Emiliano Zapata (CIPOG-EZ), en conjunto con nuestros pueblos hermanos del Frente Nacional Por la Liberación de los Pueblos (FNLP) y la Organización Campesina de la Sierra del Sur (O.C.S.S.), no olvidamos que sufrimos una guerra en contra nuestros pueblos. Una guerra que inicio hace 527 años y que se continúa, gobiernos van, gobiernos vienen, son de un color, de dos colores o de tres colores, no importa; su patrón es el mismo.
Seguimos muriendo de hambre, por falta de hospitales y médicos y por la miseria, pero no solo; literalmente nos están asesinando. Como si fuéramos animal, como si fuéramos algo que no vale, que no es humano. Los narco-paramilitares nos cazan en los caminos, en nuestras casas y nuestras familias, tienen que huir, son los que se llaman desplazados, y ahí van, caminando desterrados de su tierra, comunidades enteras sin casa, con el dolor de sus familiares asesinados, y sin saber si comerán mañana o si podrán dormir bajo un techo, peor que animales.
Este mal es provocado por los malos gobiernos al solapar y permitir a los grupos narco-paramilitares en nuestros pueblos de la Costa Grande, en Chilapa, y en la Sierra de Guerrero, y bien sabemos que por lo menos también pasa en los estados de Michoacán, Oaxaca y Chiapas. ¿Y cuántos de nuestros hermanos que están desaparecidos? Y no es que se perdieron, es que les hicieron un mal, y lo hicieron con plena impunidad, lo hicieron en el día, en lugares públicos y no pasa nada.