Chiapas
A última hora, Senado discute acceso de militares extranjeros a México
Fuente: Avispa Midia
Por Santiago Navarro F
En portada: Militares de EEUU y México en reunión de preparación para los ejercicios “Tradewinds 2022”
A pesar de que el gobierno de México se ha comprometido con los Estados Unidos para ser coanfitrión de los ejercicios militares denominados “Tradewinds 2022”, a última hora, el Senado de la república mexicana discute si se permite el acceso a 341 militares extranjeros a territorio mexicano. No obstante, una delegación de 84 militares extranjeros ya hizo acto de presencia entre los días 31 de enero al 5 de febrero en Chetumal, Quintana Roo, momento en que arrancó la primera fase de este programa militar.
Tradewinds es un ejercicio multidimensional centrado en la seguridad del Caribe que se lleva a cabo en los dominios terrestre, aéreo, marítimo y cibernético. Las fuerzas estadounidenses comandan estos ejercicios con las naciones participantes como un entrenamiento conjunto, combinado e interagencial.
Ver también: Comando Sur de EEUU realizará ejercicios militares en territorio de México
Desde el pasado 8 de abril, el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), envió el Oficio no. 100-125 a través de Adán Augusto López Hernández, secretario de gobernación, para solicitar al Senado la autorización para permitir que 128 elementos de la Armada de México pudieran salir de los límites del territorio mexicano para poder participar en los ejercicios multinacionales “Tradewinds 2022”.
AMLO también ha solicitado que se permita el “ingreso de las tropas y buques militares extranjeros (341 elementos) para el mismo ejercicio”, que se llevara a acabo entre los territorios fronterizos de México y Belice del 7 al 21 de mayo de 2022, de manera simultánea.
El mandatario mexicano argumenta que la petición se desprende de una invitación que le hace el Comando Sur, uno de los diez comandos de combate unificado de los EEUU. “En ese sentido, hago de su conocimiento que se recibió invitación del Comando Sur de los Estados Unidos, para que México participe y organice de manera conjunta con Belice y el referido Comando, el Ejercicio Multinacional Tradewinds 2022”, justificó AMLO a Olga María del Carmen Sánchez Cordero, presidenta del Senado.
La presidenta presentó al parlamento esta petición el pasado 19 de abril, no obstante, solo se determinó que es de competencia de la fracción parlamentaria que se ocupa de estos asuntos, “la Comisión de Marina”, quien tiene en sus manos la última palabra para que las tropas puedan ingresar a México.
El acuerdo
Aunque el permiso se ha solicitado hasta este momento, desde el 31 de enero al 5 de febrero, en Chetumal, Quintana Roo, la marina mexicana, el Comando Sur e integrantes de Seguridad Pública de las regiones del Caribe, Centroamérica y Europa, realizaron reuniones previas para estos ejercicios.
Participaron 84 militares de las Fuerzas Armadas de 23 países tales como: Belice, Canadá, Colombia, Estados Unidos, Francia, granadinas, República Dominicana, Reino Unido y Reino de Países de Bajos.
Esta es la primera vez que México es coanfitrión de Tradewinds, desde que el ejercicio se realizó por primera vez en 1984. Para este ejercicio se espera la participación de, al menos, 1,500 militares y civiles, de los cuales 341 pisarán territorio mexicano.
AMLO, en el documento que envió al senado, argumenta que este programa militar permitirá fortalecer la capacidad de las fuerzas armadas participantes, “para contrarrestar amenazas comunes, tales como el crimen transnacional y desastres naturales”.
El mandatario mexicano también sostiene que las fuerzas armadas de México ya han sido participes de estos ejercicios militares en otros países, al menos, en seis ocasiones. Parte de los 341 militares provienen de Belice, una sección de 24 elementos de las Fuerzas Armadas con 24 fusiles M4, calibre 5.56 milímetros (mm), y 32 pistolas Glock 19 mm, calibre 9 mm, todas ellas sin munición.
Mientras que de Colombia participaran 32 militares con las mismas armas, salvo el agregado de ametralladoras M-2HB/QCB, calibre 7.62 mm, también sin municiones.
Canadá participará con 83 elementos y el buque llamado Harry Dewolf HMCS “que significa, navío canadiense de su majestad, en referencia a la reina Elizabeth II del Reino Unido”, un tipo de embarcación que ha brindado apoyo a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) tras el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Los militares de EEUU son 100 y portaran las mismas armas, además de equipo táctico de la Guardia Costera y el buque USCGS “ISAAC MAYO”. También, de Reino Unido, se suman el buque llamado Medway y 24 militares más, el buque Pelikaan de Países Bajos, con 26 militares armados; nueve elementos más de Surinam y dos de Guayana.
En 2017, el jet Gulfstream IV (C20-F) de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF), ingresó a territorio mexicano, aterrizando en el hangar de la Marina en la frontera sur en la ciudad de Tapachula, Chiapas. En esta aeronave viajaba Lori Robinson, la entonces jefa del Comando Norte de Estados Unidos y Kurt Tidd, ex comandante del Comando Sur, así como la Embajadora, Roberta Jacobson. Fue una reunión con autoridades mexicanas. De acuerdo con fuentes del medio británico, Reuters, los asistentes pidieron el anonimato.
Inversiones de EEUU
Mientras se crea el escenario de un teatro de operaciones bélicas en el mar Caribe, EEUU y Canadá pretenden reafirmar y reforzar los acuerdos de seguridad con el gobierno de AMLO, ya que, aparte del ejercicio Multinacional Tradewinds 2022, también se le suman las operaciones de la iniciativa para la Protección Marítima de América del Norte (NAMSI por sus siglas en inglés), que comprenden procedimientos normalizados en un tiempo de reacción mínima, con los cuales responden a las amenazas y operaciones marítimas.
NAMSI es coordinado por EEUU, Canadá y la Armada de México, como parte de la Alianza para la Prosperidad y la Seguridad de América del Norte (ASPAN), un acuerdo establecido desde el año 2008 entre los tres países. México seguirá participando cada año en los programas militares NAMSI.Aunque la alianza no solo es de seguridad de América del norte, también implican acuerdos comerciales, como el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que inició en julio del 2020, que reemplaza al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA).
Además, el mandatario mexicano se reunió este 22 de abril, en el estado de Veracruz, con políticos y empresarios de los Estados Unidos y Canadá para llevar a cabo la Cumbre de Desarrollo del Istmo en San Juan de Ulúa, donde se anunció la apertura de este territorio franco a la inversión nacional y extranjera.
Previo al evento, el mandatario mexicano, en su conferencia de prensa, expreso que, el “Plan del Istmo”, que incluye toda la región sur-sureste de México, participan el secretario de la Defensa y Marina, porque “la secretaría de Marina es la encargada de atender toda la zona del Istmo y el proyecto en general”, para cuidar casi mil kilómetros de vías férreas.
Mientras tanto, el secretario de la Marina, José Rafael Ojeda Durán, informó que en 20 días se estarán licitando 800 kilómetros del tren del Istmo de Tehuantepec para su rehabilitación, puntualizando que ya hay “seis empresas que están concursando”.
Durante esta reunión el embajador estadounidense, Ken Salazar, también anunció que la empresa cervecera Constellation Brands invertirá, en el sureste mexicano, mil 300 millones de dólares. “Va a crear dos mil empleos directos, más de diez mil empleos indirectos y mil 300 millones de pesos en inversiones”, señaló el embajador.
Ken Salazar también sostuvo que EEUU ve un futuro compartido en la región Sur-Sureste de México. En la Cumbre también hicieron acto de presencia más de 30 empresarios norteamericanos, canadienses y mexicanos, de las industrias automotriz, de autopartes, alimenticia, energética, química, transporte, logística y comunicaciones.
Entre ellos estuvieron representantes de: Cargill; American Chamber of Commerce México; Constellation Brands México; Pacific Limited; Invenergy; AES México; EDP Renewables para América del Norte; AECOM; Kansas City Southern Mexico; Freightliner & Detroit Diesel; AT&T; FedEx; TC Energy, entre otros.
Rafael Marín Mollinedo, director general del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, anunció a las empresarios participantes en esta cumbre que los 10 predios para los parques industriales están listos para que puedan inicar con sus actividades. En conjunto abarcan 3,378 hectáreas. También agrego que “en el norte del Istmo es muy factible que se desarrolle un corredor energetico, dada la vocación de la zona donde tenemos gas, pétroleo, petroquimica”.
El embajador estadounidense por su parte, calificó esta Cumbre como “histórica”, ya que según él, “es muestra del compromiso de nuestros gobiernos con la prosperidad de su gente. Junto con sus inversiones, las empresas estadounidenses apoyan el desarrollo del capital humano mexicano y de la economía digital”.
Ver también: Puente comercial del mundo arrasará con los pueblos y la biodiversidad
“A través de la inversión estamos avanzando las prioridades conjuntas de Estados Unidos y México para abordar la prosperidad económica del istmo y de México”, dijo el embajador, mientras tanto, la decisión del Senado, en cuanto a la presencia de militares extranjeros a territorio mexicano, esta por decidirse.
Chiapas: Zoques remarcan sus luchas a 40 años de la erupción del volcán Chichonal
Fuente: Avispa Midia
Por Jeny Pascacio
Fotos de Amehd Coca
Para construir salidas colectivas ante la imposición de proyectos extractivos, el desplazamiento forzado, la agudización de la migración, así como el interés por privatizar el agua, las tierras y el propio volcán Chichonal, los pueblos del norte de Chiapas realizaron el Segundo Congreso Zoque.
Fueron convocados pueblos, comunidades, barrios y rancherías zoques para reunirse en Chapultenango y crear un análisis propio sobre las distintas amenazas a la vida y el territorio, “a cuarenta años de la erupción del volcán Chichonal, queremos denunciar las opresiones de hoy”.
Te puede interesar → En Chiapas, comunidades Zoques emiten alerta por incursión de mineras
En el evento recordaron que el 28 de marzo de 1982, además de la erupción del volcán Chichonal, inició un proceso mayor de fragmentación comunitaria y control de la población que enmarca la actualidad de las comunidades zoques.
En documento, difundido por el Congreso Nacional Indígena, mencionan que la fecha del fenómeno natural fue convertida en un ‘mero espectáculo folclorista’ que busca legitimar una visión histórica acorde al poder en turno.
El texto dirigido a la sociedad civil enumera las situaciones que amenazan al pueblo originario y está firmado por la parroquia Nuestra Señora de la Asunción, Chapultenango, Mujeres defensoras de Nasakobäjk, Atención Primaria de Salud APS “wabä ijtkuy”, integrantes de Zodevite y el Centro de Lengua y Cultura Zoque.
Además de acordar la preservación de la lengua a través de compartir el conocimiento a los más jóvenes, los zoques decidieron llevar a cabo diversas acciones para enfrentar las problemáticas actuales, desde la creación de reglas internas hasta la realización de talleres para llevar conocimiento a las nuevas generaciones; todas las actividades serán evaluadas en un año.
Denuncias
La primera denuncia que realizó el pueblo zoque es la violencia contra las mujeres que se “cristaliza”, pues además de ser física y verbal, no se les permite tomar decisiones y en consecuencia tampoco tienen acceso a la tierra, ni a derechos básicos como a la salud y atención jurídica.
“También hemos visto cómo las ambiciones e intereses personales se han manifestado a lo largo de este proceso, lo cual significó utilizar el movimiento zoque para fines electorales y partidistas. Desde aquí lo decimos claro: no vamos a permitir que la defensa y la organización zoque se conviertan en una moneda de cambio por puestos políticos en el gobierno o para conseguir recursos económicos a través de proyectos ‘comunitarios’ que solo buscan fortalecer las agendas de los intereses capitalistas”, enfatiza el documento.
En el 2016, los pueblos zoques iniciaron un proceso de organización y lucha por la defensa del territorio en Chiapas que impidió la concesión de tierras para la explotación de doce pozos petroleros.
Pero también se enfrentan a la minería promovida por los consorcios transnacionales y autorizada por las instituciones del Estado mexicano, a pesar de las amenazas en los territorios de las comunidades de Buenos Aires, Valtierra y Caracol en el municipio de Chapultenango, así como en Ixhuatán y Pantepec.
Los zoques advirtieron que también analizaron los intereses de extraer los hidrocarburos en Francisco León, municipio también localizado en las montañas del norte de Chiapas. Asimismo, la situación de Zacalapa, municipio de Copainalá, que enfrenta un grave conflicto por la escasez y el monopolio en la gestión y distribución del agua.
En el tema ambiental alertaron sobre el deterioro generado por el incremento descontrolado de basureros públicos como en Rayón y Chapultenango, promovidos por las propias autoridades municipales, que contaminan manantiales y ríos que proveen de agua a las comunidades.
A esto se le suma la reactivación de proyectos energéticos con la construcción de nuevas presas hidroeléctricas en los municipios de Chicoasén, Copainalá y Francisco León, “sabemos que esos proyectos de energía eléctrica se hacen a costa del desplazamiento y la precarización de la vida zoque”.
Este contexto les acarrea divisiones internas, inseguridad y violencia a los ojos de las autoridades, como el desalojo de familias por parte de grupos armados el 21 de noviembre de 2021 en el ejido Esquipulas Guayabal, municipio de Chapultenango,
La división de la comunidad también la provocan los programas sociales y la cooptación de las comunidades bajo la promesa de empleo, caminos y proyectos. Mientras, en lugares como Tectuapan municipio de Pichucalco, el poder permite que el monopolio del transporte público provoque violencia y terror contra los habitantes.
Te puede interesar → Chiapas: A un año de la devastación por Eta, familias zoques desplazadas continúan en el abandono
Los pueblos zoques también lamentaron que a dos años del impacto ocasionado por el huracán Eta, sigan sin atender a la población afectada. En Pantepec, Rayón y Tapalapa, los caficultores tuvieron grandes daños que perturbaron la economía familiar.