Dia 14: Clausura del encuentro de Resistencias y Rebeldías “Las partes del todo”
Palabras del Subcomandante Moisés y miembros del CCRI-CG sobre la pirámide, el común y la tormenta. Parte 1: (Descarga aquí)
Palabras del Subcomandante Moisés y miembros del CCRI-CG sobre la pirámide, el común y la tormenta. Parte 2: (Descarga aquí)
Palabras de Clausura: (Descarga aquí)
Ejido Morelia, Altamirano Chiapas. 16 de agosto.
Hoy los zapatistas clausuran el Encuentro de Resistencias y Rebeldías “Las partes del todo”, que inició el pasado 3 de agosto. Sí, fueron dos semanas de análisis, reflexiones, de fraterna compartición con diferentes colectivos nacionales e internacionales. En un contexto donde se prioriza lo inmediato, las y los zapatistas, como es su costumbre, se toman su tiempo para platicar con una sociedad civil organizada que viene desde diferentes puntos del planeta.
Después de viajar algunos kilómetros o en algunos casos miles, cada participante espera con emoción la hora en que sea llamado o llamada y pueda exponer la forma en la que se organiza y resiste contra lo que llaman la hidra capitalista. Su lucha es por la vida, se escucha con frecuencia en cada una de las participaciones.
Han sido dos semanas en los que los visitantes han estado en geografías y calendarios diferentes a los que cotidianamente están acostumbrados, se escuchó en las pláticas durante las reuniones en el comedor. Como las nuevas generaciones de Bases de Apoyo Zapatistas, al semillero Comandanta Ramona también han llegado jóvenes hijos y nietos de aquella generación que ha visitado y acompañado a los rebeldes chiapanecos desde el levantamiento armado de 1994.
¿Qué es lo que hace que, en plena era digital de espectáculos y comodidades de las grandes ciudades, un grupo de personas de diferentes partes del mundo decida asistir al Caracol de Morelia, en el municipio de Altamirano, Chiapas? La respuesta quizás sea la esperanza de que no todo está perdido, de que como especie humana no sólo podemos causar destrucción, sino también dejar un lugar digno en dónde vivir a las nuevas generaciones, como reiteradamente nos han dicho los pueblos originarios.
A más de treinta años de la aparición pública del EZLN, la sociedad civil organizada que convivió con ellos en estos días se dio cuenta de que la apuesta de los zapatistas no es por las armas, sino por educación, salud, justicia y una vida digna en común: experiencia que cada participante, colectivo y organización asistente al encuentro habrá que llevar a cabo en su lugar de origen, sin seguir recetas, enfatizaron los zapatistas.
Más allá de los proyectos sexenales neoliberales de antes y de ahora, como los califica el EZLN, la apuesta de los zapatistas es por la vida, y con cada una de sus comparticiones demuestran que ese propósito lo comparten con muchas Resistencias y Rebeldías en todo el mundo.
En el encuentro las y los jóvenes zapatistas compartieron sus experiencias y reflexiones por medio de obras de teatro, donde la autocrítica estuvo presente. De igual forma las comandantas y comandantes, junto con el Subcomandante Moisés, respondieron a los cuestionamientos que los asistentes externaron de manera directa en materia de derechos de las mujeres, educación, salud, entre otros temas.
Una pirámide de madera fue derribada en el encuentro, en alusión al sistema capitalista. El mensaje de los zapatistas es a organizarse de forma diferente al modelo hegemónico neoliberal y contruir lo que denominan el común en defensa de la vida.
El encuentro estuvo enmarcado por la solidaridad para con el pueblo Palestino, el cual sufre un genocidio por parte del gobierno de Israel, denunciaron los indígenas chiapanecos junto con los demás asistentes al evento.
“Por eso este lugar se llama semillero, porque a ver qué semilla encuentran acá”, explicó Moisés a los asistentes.
Video: TejeMedixs
Fotos de Radio Pozol







