¡Samir vive, la lucha sigue! Pronunciamiento de la Tercera Asamblea Nacional del Congreso Nacional Indígena, el Concejo Indígena de Gobierno y el EZLN.
¡SAMIR VIVE, LA LUCHA SIGUE!
PRONUNCIAMIENTO DE LA TERCERA ASAMBLEA NACIONAL DEL CONGRESO NACIONAL INDÍGENA, EL CONCEJO INDÍGENA DE GOBIERNO Y EL EZLN.
A los pueblos del mundo
A las organizaciones y colectivos en resistencia y rebeldía
A las redes de resistencia y rebeldía
A la sexta nacional e internacional
A los medios de comunicación
A casi 100 años del asesinato del general Emiliano Zapata, estando reunidos los pueblos ayuuk, binizza, chinanteco, chol, chontal, guarijío, maya, mayo, mazahua, mazateco, mixteco, nahua, nayeri, otomí, popoluca, purépecha, raramuri, tepehuano, tlapaneco, tojolabal, totonaco, tzeltal, tsotsil, wixárika, yaqui, zoque y quichua (Ecuador) para celebrar la Tercera Asamblea Nacional del Congreso Nacional Indígena y el Concejo Indígena de Gobierno, nos encontramos en el dolor y la rabia ante la guerra en contra de nuestros pueblos, ante el asesinato del compañero Samir, muerto por defender a la tierra y a su pueblo. Desde nuestra asamblea nacional enviamos un abrazo solidario y combativo a su familia y a la comunidad de Amilcingo, Morelos. Les enviamos un abrazo solidario del CNI-CIG y el EZLN, donde el compañero siempre será una vela encendida.
A Samir lo mató el régimen neoliberal; no sabemos si el gobierno, si los empresarios, si sus cárteles delincuenciales, o, si los tres juntos. Los ofrecimientos hechos por AMLO, no a los de abajo, sino a los dueños del dinero y del poder, las veladas amenazas en contra de quienes defendemos la vida, sentaron las bases del artero asesinato. Es, en el caso del nuevo titular del ejecutivo federal, la promesa de entregar a los grandes empresarios y a las cúpulas militares lo que no han podido quitarnos el capitalismo neoliberal y sus malos gobiernos que entran y salen. Ofrece a los empresarios poner a su disposición la tierra con la supuesta nueva Ley de Desarrollo Agrario, para terminar de desmantelar la propiedad y organización colectivas, llamando “desarrollo” al robo descarado y a la destrucción, amenazando militarmente a nuestros pueblos con su Guardia Nacional y reconfigurando nuestro país.
Lo que arriba llaman “transformaciones” para nuestros pueblos siempre han significado que nosotros ponemos los muertos en función de los intereses de las oligarquías y de los que tienen el poder, que son cada vez más poquitos y grandes, que no dejan de vivir de la opresión, explotación, y destrucción por los mismos de siempre.
La llamada “Cuarta Transformación” sigue el mismo camino de sus 3 predecesoras, aunque con más brutalidad y cinismo si posible fuera.
En la guerra de Independencia fueron los explotadores locales, hijos de los invasores europeos, quienes tomaron el poder y se repartieron nuestras tierras, tratando de invisibilizar la existencia de nuestros pueblos sobre la base del discurso liberal que hasta el día de hoy es el discurso del Poder.
En la Reforma nuestras tierras comunales, sagradas para nosotros, fueron proscritas para entregarlas a los mismos saqueadores, las leyes de Reforma y las posteriores leyes de baldíos y colonización propiciaron el crecimiento de las grandes haciendas bajo el régimen porfiriano.
Durante la Revolución Mexicana, mientras arriba se repartieron el poder político, abajo con nuestra sangre defendimos y regamos la tierra. Mientras Madero y Carranza traicionaban y asesinaban a Zapata, nuestros pueblos exigían una radical y profunda transformación social y agraria que nunca llegó.
Así, en cada “transformación” se acrecentaron y recrudecieronla explotación, el despojo, la discriminación y el desprecio contra nuestros pueblos.
No tenemos duda que esta nueva etapa de gobierno profundiza el neoliberalismo y la integración forzada de nuestro país a la órbita imperial de Estados Unidos, pues, se ha comprometido fielmente a dar continuidad a las políticas macroeconómicas de los anteriores gobiernos, estableciendo una austeridad y restricciones fiscales que no se veían desde el gobierno de Miguel de la Madrid; garantizando la autonomía del Banco de México, el respeto a las inversiones extranjeras y el impulso del libre comercio. Va contra nosotros y nuestros territorios, va por el exterminio de nuestros pueblos en cada rincón, y para ello tiende una guerra que sufrimos hoy con luto y coraje. Nos vemos en esta asamblea general y en el conjunto de nuestros dolores vemos que es una guerra hecha de muchas guerras funcionando de forma integral, como si fuera una sola.