Hermosillo, Sonora
Jueves 15 de noviembre
11:00 pm

El día jueves 15 de noviembre a las 23 horas, fueron detenidos dos autobuses en los que se trasladaban personas integrantes de este éxodo, incluyendo mujeres, niñas y niños. El operativo fue realizado por personal del Instituto Nacional de Migración y Policía Federal en la Carretera Hermosillo-Nogales, 28 km antes de llegar a Santa Ana, Sonora. Inmediatamente después de los hechos se dio aviso a la Comisión Nacional de Derechos Humanos que ha venido acompañándonos en las últimas semanas.

A las personas del primer autobús, incluidas mujeres y niños, las bajaron y las subieron a perreras de migración. Las del segundo autobús se resistieron a bajar así que personal de INM se subió y dio instrucciones al conductor de seguir a las perreras. Fueron escoltados por policía federal y llevados a Hermosillo donde les dijeron que quedaban asegurados para comenzar su proceso de deportación.

Una vez en las instalaciones de migración José Alfredo Lopez Mota de la CNDH pidió a la gente bajar del autobús, la gente no quiso hacerlo y comenzaron a usar la fuerza para hacerlos bajar.

Consideramos sumamente grave que se solicitara el apoyo de la CNDH para monitorear el debido respeto a los derechos humanos de las personas migrantes y el propio personal de la CNDH haya colaborado con el personal de INM para hacer bajar a las personas del autobús.

Exigimos que no se les deporte ya que se tiene que garantizar el derecho a solicitar y recibir asilo de las personas que requieran protección internacional, así como respetar y garantizar los principios de unidad familiar y del interés superior del niño.

Hemos estado en contacto con las personas detenidas y a las 3:00 am del viernes 16 de noviembre están siendo trasladadas de nuevo en perreras sin haberles informado su destino.

Consideramos necesario señalar que estos mismos autobuses se habían negado previamente a detenerse en la caseta de cobro en el km 15 de la Carretera Hermosillo-Nogales para que la gente recibiera agua y alimento, pues quienes se trasladaban llevaban sin comer, por lo menos, un día entero. Agentes de la Policía Federal obstruyeron a las personas que estaban ahí para ayudar, con el argumento de que les darían los servicios en Pesqueira, situación que no sucedió.

Por lo que nos preocupa la integridad de quienes están detenidos al llevar casi dos días sin alimento, agua, ni un lugar seguro para descansar. Sobre todo, de las niñas, niños, mujeres y personas enfermas.

Hacemos un llamado a la sociedad en general a exigir el respeto de los derechos humanos de todas las personas en territorio nacional sin importar su condición migratoria, tal y como lo establecen las leyes mexicanas y los tratados internacionales a los que México se encuentra adscrito.

Comisión de gestión y diálogo del Éxodo Centroamericano