Chiapas
¡Alerta! Ataque armado contra zoques de Chiapas
Reporte 15:00 hrs
A la comunidad internacional
A los medios de comunicación
Hoy, 21 de noviembre de 2021 desde las 10:00 horas, un grupo armado atacó a hombres, mujeres, niños y ancianos zoques del Ejido Esquipulas Guayabal, municipio de Chapultenango, Chiapas al sur de México.
Resultado del ataque las muejeres zoques heridas fueron llevadas a casas particulares por la flata de condiciones adecuadas del hospitl básico de Chapultenango; además, hay mujeres y niños desaparecidos y casas quemadas. Hasta el momento, el grupo armado mantienen sitiada la comunidad.
El ataque deriva de la incorfomidad de la resolución del expediente 476/2019 del tribunal agrario por la disputa de más de 2 000 hectáreas sobre las tierras del volcán, donde de manera dolosa y bajo engaños el Registro Agrario Nacional y Procudaduria Agraria han confrontado a los campesinos del lugar por la ejecución del programa PROCEDE desde el año 2002.
¡Responsabilizamos al Estado Mexicano por su negligencia para resolver el conflicto agrario que data de hace mas de 19 años!
Ejido Esquipulas Guayabal, Chapultenango, Chiapas.
Fuente: Congreso Nacional Indígena
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Actualización 18:00
El grupo armado con fusiles de asalto de alto calibre atacó a hombres, mujeres, niños y ancianos zoques, hasta las 18:00 mantiene tomado el pueblo del ejido Esquipulas Guayabal, municipio de Chapultenango, Chiapas.
La mayoría de las familias zoques se encuentran desplazadas en la cabecera municipal y continúan personas desaparecidas, entre ellas las autoridades comunitarias del ejido.
¡Exigimos el desarme inmediato del grupo armado!
¡El retorno de la paz en las tierras zoques del volcan!
Esquipulas Guayabal, Chapultenango, Chiapas
Foto de portada: Radio Zapatista
Nuestro viaje fue como una odisea
Por Isabel Cortés
Isabel Cortés vive en Londres y es parte de los colectivos Chile Solidarity Network y Bordando por la Memoria. También colabora con el sindicato United Voices of the World (Voces del Mundo Unidas).
Nuestro viaje fue como una odisea.
El trayecto duró una hora y tomamos tres trenes para llegar a nuestro destino.
No dormí mucho la noche anterior. Tenía esa sensación familiar de cuando estoy a punto de llegar a un entorno repleto de amor en el cual uno se siente acogido. Me parece que tuve ‘the channels’, que según el camarada Mcintosh, es una sensación que los marineros tienen antes de comenzar una travesía.
Pelusa y yo llegamos temprano, primera y segunda generación juntas, sentadas lado a lado, caminando codo con codo, riendo y hablando; y aunque haya 30 años de diferencia entre nosotras, estamos unidas porque las mismas circunstancias revolcaron nuestras vidas, como revolcaron y siguen revolcando la de tantos otros.
Estábamos camino a un evento que sabíamos que iba a ser una experiencia de aprendizaje y al que, definitivamente, era un gran privilegio asistir. Precisamente íbamos comentando esto en nuestro trayecto.