Después de los 17. (La Sección Miliciana Ixchel-Ramona).
Septiembre del 2021.
Como parte de La Extemporánea va una sección de milicianas. Además de formar parte de los grupos de “Escucha y Palabra”, se encargarán de la seguridad de la aerotransportada y de sostener uno o varios encuentros de fútbol con equipos femeniles de la geografía europea.
Había 196 milicianas apuntadas para viajar. Unas 20 tenían menos de 18 años, pero se prepararon para viajes posteriores y para los continentes de Asia, Oceanía, África y América, previendo que para entonces ya tendrían la mayoría de edad para conseguir el pasaporte.
Las dificultades para obtener sus papeles (todas son extemporáneas) y el constante ir y venir por las ocurrencias de los “funcionarios”, las obligaron a abandonar el intento. Algunas son madres solteras y deben trabajar para mantener a sus crías. La mayoría trabaja en apoyo a sus madres y hermanos menores. La preparación también fue un problema, porque resulta que no era paseo, sino que había que prepararse para hacer trabajo de Escucha y Palabra. Lo que les costó más trabajo es aprender a escuchar.
Quedaron 37. Se sumaron dos menores: Defensa (15 años) y Esperanza (12 años). Así que, en total, son 39 milicianas. Llevan 3 meses acuarteladas en el Semillero, practicando, aprendiendo, ensayando, y esperando que se abriera la posibilidad del viaje: un lugar donde llegar en Europa. Todas son de raíz maya y hablan tzeltal, tzotzil, cho´ol, tojolabal y castilla. Unas pocas tienen arriba de 25 años, la mayoría son de entre 18 y 21 años. Sus habilidades futbolísticas son un secreto de Estado, pero su disposición a luchar es visible.
Al lugar donde estuvieron acuarteladas no podía ingresar ningún varón adulto sin permiso. En caso de que algún hombre, desubicado, ingresara, inmediatamente era rodeado por un grupo de milicianas y era “exhortado”, con el sólido argumento de los bastones y las tiradoras, a salir inmediatamente.
En su preparación y adaptación, los primeros días fueron difíciles. Los siguientes lo fueron más aún. Lejos de sus familias, amores y comidas de sus pueblos, aguantaron la incertidumbre, el hambre, las enfermedades, los cambios de clima, el desconcierto de convivir con otras diferentes, la sorpresa de aprender cosas nuevas y la maravilla de darse cuenta de que podían hacer lo que no sabían que podían hacer. Por ejemplo: escuchar. Y disculpen si una y otra vez insisto en lo de escuchar, pero es que miro hacía allá afuera y oigo a todo el mundo queriendo hablar –más bien, gritar–, y a nadie, o a casi nadie, con la disposición a escuchar.
Estas mis compañeras combatientes, dejaron atrás, cerca o lejos en el calendario, los 17 años. Su identidad no está en duda: son ZAPATISTAS.
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Tras que no.
Una miliciana toma la palabra en la Asamblea General de La Extemporánea, cuando se valora lo logrado o no en el curso de “Escucha y Palabra”:
La situación del derecho a la comunicación con énfasis en las y los comunicadores indígenas y afrodescendientes de América Latina.
La situación de la comunicación indígena en el plano internacional, nacional y local es altamente preocupante. Ante eso, se creó el libro La situación del derecho a la comunicación con énfasis en las y los comunicadores indígenas y afrodescendientes de América Latina, que busca, primero, visibilizar la situación en que viven y llevan a cabo su quehacer las y los comunicadores indígenas y afrodescendientes de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Venezuela. Segundo, poner al alcance los conocimientos de algunos instrumentos legales tanto nacionales como internacionales, así como estadísticas e información derivada dede las mismas comunidades, colectivos, confederaciones y movimientos miembros de la Coordinadora Latinoamericana de Cine y Comunicación de los Pueblos Indígenas (Clacpi). Tercero, abonar al fortalecimiento y la protección de nuestro derecho a la comunicación.
La Coordinadora Latinoamericana de Cine y Comunicación de los Pueblos Indígenas (CLACPI) y el PVIFS les invita a ver el siguiente video sobre La situación de los derechos a la comunicación, con énfasis en las y los comunicadores indígenas y afrodescendientes de América Latina.
Participan: Mariano Estrada (coordinador general de CLACPI), el PVIFS-CLACPI, David Hermández (wayuú, CLACPI-Venezuela), Bashe Charole (qom, CLACPI-Argentina), Mary Flores (quechua, CEFREC-CLACPI-Bolivia), Gerardo Berrocal (mapuche, CLACPI-Wallmapu), Geovanny Bernárdez (garífuna, OFRANEH-Honduras) y Jesús González (vasco, Mugarik Gabe).
(Éste y otros libros para descargar en Radio Zapatista aquí.)
Basilea, Suiza. 30 de agosto 2021. Un Campamento por la Vida y una marcha de protesta tuvieron lugar este fin de semana con la participación activa de la delegación marítima del EZLN y alrededor de quinientos activistas anticapitalistas, antipatriarcales, antifascistas, anticoloniales e internacionalistas quienes luchan en Suiza y Europa, siendo hablantes del suizo alemán, el español, el francés y el italiano entre otras lenguas como el kurdo, el turco y el árabe. Mientras el Escuadrón 421 visitaba cooperativas agroecológicas cerca de Ginebra y el lago Leman, cerca de cincuenta personas surgieron y armaron un gran campamento el jueves 26 de agosto en un parque de la ciudad fronteriza de Basilea (Basel, Bâle) en Suiza, a un lado del río Rin que divide Francia y Alemania de la Confederación Helvética, sede de empresas multinacionales como Novartis y Nestlé, así como de innumerables bancos y marcas de lujo. En suizo alemán, inglés y español, un letrero cerca de la tienda de información, entre la cocina y el templete, da la bienvenida en el campamento zapatista:
“Hemos tomado este espacio para llamar la atención sobre diferentes formas de resistencia, de autonomía, de vivir de forma diferente. Tenga en cuenta que queremos crear aquí un espacio libre de discriminación, donde todes se sientan cómodes y segures. ¡Creemos un mundo diferente aquí y ahora!”
“Vinimos a escuchar, vinimos a aprender”, dijeron lxs zapatistas este 13 de agosto en la Plaza de Colón de Madrid. Escuchar y aprender de quienes luchan, resisten y crean alternativas para nuestro mundo en Slumil K’ajxemk’op, la Europa insumisa.
Entre el 11 y el 13 de agosto, previo al encuentro con el “Escuadrón 421” zapatista, colectivxs, organizaciones, movimientos, familias y personas de la Europa insumisa organizaron una jornada de tres días intitulada No claudicaremos. Lavapiés y otros lugares de resistencia se convirtieron nuevamente en puntos neurálgicos para el hospedaje y la convivencia, como centro de medios libres y para la expresión artística y los (re)encuentros.
Centros Sociales Autogestionados como ‘3 peces 3’ , La Tabacalera , la Oficina de Derechos Sociales la Ingobernable, el Centro Social La Villana de Vallekas, el pueblo okupado Navalquejigo y los jardines comunitarios como el de ‘Esto es una Plaza’ fueron los espacios solidarios para ello. Cercano también el Auditorio Pilar Bardem en el pueblo de Rivas-VaciaMadrid en donde tuvo lugar el concierto de Bienvenida de la Gira Zapatista organizado por la Confederación General del Trabajo (CGT) con la participación de las bandas Boikot y Amparanoia.
Apenas 500 años después | Escuadrón Marítimo Zapatista / En voz de Lupita (5/7)
Escuchamos las palabras del movimiento zapatista, el 13 de agosto pasado en Madrid, luego de una marcha histórica en las calles de la capital española, dos semanas después del Encuentro de mujeres, personas trans, inter y no binarias de la otra Europa, en la Zona a Defender de Notre-Dame-des-Landes. La compañera Lupita habla la lengua tsotsil y el español con fluidez. Es base de apoyo del EZLN y ha sido coordinadora regional de jóvenes y administradora local de trabajo colectivo en el Caracol de Oventik. Se preparó durante seis meses para ser delegada de la Travesía por la Vida y fue voluntaria para viajar en barco a Europa con el Escuadrón 421. Navegó a bordo del velero La Montaña que partió el 2 de mayo de Isla Mujeres en la península yucateca y desembarcó en Vigo, Galicia, el 22 de junio, donde se desempeñó como Tercia Compa. Lupita camina escuchando, desde Madrid en la geografía que se llama España y desde la Zona a defender en la geografía que se llama Francia, en estos suelos y bajos estos cielos renombrados como Slumil K’ajxemk’op, o tierra insumisa.
No nos conquistaron / Madrid 13 de agosto de 2021
Voces de la delegación marítima del EZLN en Plaza Colón, Madrid, capital del estado español, después de una marcha histórica el 13 de agosto del 2021, a 500 años de la llamada caída de Tenochtitlán (ahora Ciudad de México) en manos de los invasores de Hernán Cortés.
Madrid, Agosto, 2021. En la Puerta del Sol, la histórica plaza en el hoy centro de Madrid, danzantes reproducen rituales mexicas y danzan al ritmo de los tambores.
En la misma plaza, una carroza-navío inicia su recorrido rumbo a la Plaza de Colón. A bordo, siete indígenas mayas provenientes del sureste mexicano, miembrxs del denominado Escuadrón 421, la avanzada marítima de la Travesía por la Vida zapatista. Con ellas y ellos, algo más de un millar de personas en alegre procesión.
Es el 13 de agosto de 2021, y este día se cumplen 500 años de la caída de Tenochtitlán, la capital del imperio azteca, a manos de los conquistadores españoles liderados por Hernán Cortés. Las fechas, más allá de los hechos que en ellas sucedieron, son símbolos. Y los símbolos, tanto como los espacios físicos, son territorios disputados por las luchas de poder.
En marzo de 2019 el presidente de México le envió una carta al rey Felipe VI y al Papa Francisco exigiéndoles que pidieran perdón por la conquista, presumiblemente con el objeto de que el año del 500 aniversario de la caída de Tenochtitlán fuera el año de la “reconciliación histórica” a pesar de que México no existía en ese entonces y a pesar de que el México de hoy, que sí existe, continúa pisoteando, despojando y despreciando a los pueblos originarios.
Mientras tanto, para la derecha en España la caída de Tenochtitlán significa la heroica y generosa liberación de “millones de personas del régimen sanguinario y de terror de los aztecas”. Ambos polos simplifican y tergiversan una historia mucho más compleja y la utilizan para sus propios fines políticos, evocando un nacionalismo ramplón que divide al mundo en “buenos” (nosotros) y “malos” (ellos), aunque ni el nosotros ni el ellos hayan existido en la época ni quede muy claro a qué se refieren dichos términos en el presente.
En ese escenario irrumpe un pequeño grupo de rebeldes indígenas mayas, que hicieron el recorrido marítimo de la conquista en sentido inverso, que llegaron a las costas de Galicia el pasado 22 de junio, que tuvieron la osadía simbólica de renombrar el antiguo continente, que anuncian una “invasión” para escuchar y aprender, y que ahora “navegan” en una manifestación cuyo lema es: “No nos conquistaron”.
¿No nos conquistaron? ¿Qué significa eso? ¿Otro acto de demagogia? ¿Quién es el “nosotros” que el “nos” implica? El nosotros que el “nos” implica es amplio. Los pueblos indígenas de América, para empezar, que resistieron y resisten y seguirán resistiendo. Pero no sólo ellos. El “no nos conquistaron” significa, también, el desafío a la historia única, al sistema único, a la homogeneidad colonial y postcolonial, a los valores hegemónicos que constituyen los pilares del capitalismo, a la visión única que pretende regir el mundo único: el Universo.
El “nosotros” no conquistado se encuentra en las grietas, en los intersticios, en los abajos, en los márgenes, en la pluralidad jovial de la multiplicidad y la divergencia, en la vitalidad de la vida que se niega a ser enterrada bajo el asfalto del “progreso”, en la pulsión del encuentro ante la dictadura del individualismo, en la efervescencia de la memoria ante la dictadura del olvido, en el respeto, el cuidado y el amor ante el desprecio, el odio y la indiferencia, en la consagración de la vida ante el imperio irracional de una razón totalizadora, en la mirada y la escucha ante la ceguera y la sordera de la verdad absoluta.
Y es ese, precisamente, el sentido de esta gira: el encuentro de los nosotros no conquistados. Los muchos nosotros que nos insurgimos ante el desatino de un sistema mundo que, según nuestro análisis y nuestro dolor, ha perdido el rumbo. Pero en la soledad de nuestras pequeñas o grandes luchas no atinamos a vislumbrar una salida para el desatino de nuestra humanidad, porque la Hidra es inmensa y luchamos apenas contra una o algunas de sus cabezas. Sabemos que es tan enorme aquello a lo que nos enfrentamos, que nuestros pequeños esfuerzos jamás lo podrán derrotar, y si seguimos caminando es sólo por necios, por tercos, porque no tenemos otra opción, porque no nos rendimos, no nos vendemos y no claudicamos. Porque las generaciones venideras merecen una esperanza y para eso es necesario plantar semillas, aunque a veces nos parezca casi imposible que puedan germinar.
¿Pero qué sucede cuando las soledades se encuentran? ¿Qué sucede cuando las semillas se reúnen, cuidan y reproducen en más y más semilleros?
Desde hace casi un año, muchos nosotros se han encontrado para hacer posible esta gira, y en esos encuentros algo se gesta. Se generan oleadas de alcances imprevisibles. Por toda Europa, colectivos, organizaciones e individuos organizados en torno a una gran multiplicidad de luchas se articulan motivados por la provocación de esta Travesía por la Vida. Que los zapatistas sean el catalizador de esas oleadas se entiende: con el gobierno autónomo, la justicia autónoma, la salud autónoma, le educación autónoma, la producción y economía autónomas, con el pensamiento crítico, con sus encuentros de mujeres, de artes, de ciencias, con su construcción laboriosa de otro mundo posible, son ejemplo y prueba de que es posible crear alternativas al mundo único que se nos impone.
En la Plaza de Colón, frente al Monumento al Descubrimiento de América, lxs miembros del Escuadrón 421 dieron su palabra. Reiteraron que ellxs son sólo “el antecedente de un grupo más grande”, y anunciaron que “por partes” llegarán a Europa 501 delegadxs no sólo zapatistas, sino también miembros del Congreso Nacional Indígena y del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua. Y dieron a entender que ese sería el último de los grandes actos, y que en adelante los encuentros serían más íntimos. “El mañana no se gesta en la luz. Se cultiva, se cuida y se nace en las sombras inadvertidas de la madrugada, cuando la noche empieza apenas a ceder terreno. Los terremotos que sacuden la historia de la humanidad empiezan con un ‘ya basta’ aislado, casi imperceptible. Una nota discordante a mitad del ruido. Una grieta en el muro.”
Y también dejaron claro a qué vienen y a qué no vienen: “…no venimos a traer recetas, a imponer visiones y estrategias, a prometer futuros luminosos e instantáneos, plazas llenas, soluciones inmediatas. Ni venimos a convocarles a uniones maravillosas. Venimos a escucharles.”
Sabemos que la multiplicidad de los nosotros es riqueza pero también fuente de divisiones y desencuentros, y así lo reflexionaron lxs zapatistas. “Sólo una amenaza más grande, un dolor más terrible, una rabia mayor, es la que puede hacer que nos pongamos de acuerdo en dirigir esa rabia y ese dolor más arriba… de lo que hablamos las comunidades zapatistas es de una causa, de un motivo, de una meta: la vida.”
Cada pequeña lucha es una lucha por la vida. Y sólo en el encuentro de los muchos nosotros se podrá reinventar la vida. Sólo en el encuentro será posible destruir a la Hidra. Sólo en el encuentro habremos de reinventarnos y transformarnos en semillas que, algún día, de alguna forma, en algún lugar, habrán de florecer.
“Porque vivir no es sólo no morir, no es sobrevivir. Vivir como seres humanos es vivir con libertad. Vivir es arte, es ciencia, es alegría, es baile, es lucha.”
Catorce mujeres y disidencias con tres veleros tomaron el mar para visibilizar sus luchas. Navegaron para tomar su lugar en un mundo marítimo marcado por la dominación patriarcal y colonial. Las reciben cuatro mujeres y unoa otroa del #Escuadrón421 del #EZLN en la ciudad de Couëron cerca de Nantes, Francia, Slumil K’ajxemk’op.
#LaGiraZapatistaVa
París, 20 de julio de 2021. Una semana de acciones europeas inició hoy ante consulados y embajadas de Francia en distintas ciudades de Slumil K’ajxemk’op (antes llamada Europa). Exigen que el gobierno de Emmanuel Marcon permita que la Fuerza Aérea Zapatista ingrese al espacio aéreo del territorio francés a la brevedad.
En Alemania, colectivas que invitaron a delegaciones del Ejército Zapatista Nacional de Liberación Nacional (EZLN) se concentraron ante edificios diplomáticos de Wendland, Münster, Fráncfort, Leipzig, Weimar y Bremen. En Italia, la primera protesta se realizó en esta tarde ante el consulado de Génova. Mañana, activistas convocan ante la embajada gala en Bruselas, Bélgica a las 11 hrs. y, en el estado español, ante el consulado de Valencia a las 11:15 hrs.
El jueves a las 10 hrs., las danesas y los daneses se aglutinarán frente a la embajada francesa en Copenhague, mientras en París se concentrarán fuera del Ministerio de Gobernación (Ministère de l’Intérieur) en la Place Saint Augustin a las 17:30 hrs. con la consigna “traigan su avioncito de papel” en el cartel que aclara “que el racismo de Estado no impida que les zapatistas entrar en Europa”. Se organizarán estas concentraciones para exigir que el gobierno de Macron no se oponga a la entrada de la delegación rebelde en #slumilkajxemkop.
El viernes y sábado se multiplicarán las acciones de protesta ante la diplomacia del gobierno macronista en Bilbao, Euskal Herria, en Barcelona, Cataluña, en Granada, Andalucía, en Islas Baleares, en Helsinki, Finlandia, en Hannover y Hamburgo, Alemania. Más información en: https://viajezapatista.eu/es/
El Escuadrón 421 del EZLN a su llegada a tierras de Extremadura, en su recorrido de bienvenida por el Estado Español. Foto: Caracol Extremadura.
En el país de la muerte soñaron un planeta vivo. Y para contagiar a mucha gente de ganas de habitarlo de nuevo, pues optaron por compartir ese sueño, así que desde el cementerio gigante en que se ha convertido México, desde su esquina más olvidada por lo que sea que signifique la justicia, diseñaron una travesía por la vida. Se reunieron durante meses para sacar acuerdo en lenguas diversas, en asambleas de gente libre que se ha procurado un buen gobierno. Conscientes de la profundidad del dolor que nos inflama las venas, las comunidades rebeldes autónomas de Chiapas eligieron a quienes llevarían la voz, la escucha y la fuerza del zapatismo a diversas partes del mundo.
Y llegó a buen puerto el sueño. Un escuadrón de siete personas fue el primero en cruzar el Océano Atlántico para desembarcar en Vigo, Galiza, el 22 de junio pasado, y renombrar Europa como Slumil K’ajxemk’op: “Tierra Insumisa”, o “Tierra que no se Resigna, que no Desmaya”. Carolina, Bernal, Ximena, Marijose, Yuli, Lupita y Felipe (Escuadrón 421 del EZLN) navegaron siete semanas con el capitán Ludwig y su tripulación aventurera. Otras personas llegarán por aire. Comenzará entonces esta travesía por la vida, diseñada en medio de una pandemia que, aquí en México, ha dejado centenares de miles de muertes y de familias rotas por la negligencia criminal de un gobierno inútil que ha estimulado la violencia, ha militarizado el país como nunca, ha paralizado el sistema de salud pública, ha desdeñado la dignidad de todas nuestras luchas y ha facilitado la consolidación de la hegemonía económica y política del narcotráfico.
En espera de sus compas que llegarán por aire y de camino hacia París, Francia, el Escuadrón 421 comenzó a fines de junio un recorrido por comunidades autónomas del Estado Español que les han dado la bienvenida en actividades públicas diversas. Como si fueran olas que empapan y golpean la tierra firme, la colectividad zapatista y su obstinación por la vida están alborotando a muchos grupos que llevan tiempo organizándose, trabajando y soñando también con el planeta vivo que merecemos habitar. La diversidad de luchas, cantos, poemas, danzas, pinturas, aplausos o gritos que han recibido al zapatismo tras su llegada a Galiza, han hecho vibrar calles, museos, teatros, ramblas, puertos y plazas con el mensaje articulado de rebeldías y resistencias organizadas que, desde muchas lenguas y distintas expresiones corporales, no dejarán morir la flor de la palabra. He aquí una pequeña ventana para asomarnos a esas entrañables bienvenidas.
Mérida
Síntesis en audio de la bienvenida en Mérida (3:32 min): (Descarga aquí)
Hay cuatro Méridas en el mundo. Esta Mérida de la provincia de Badajoz, Comunidad Autónoma de Extremadura, Estado Español, lleva en su nombre la huella de la colonización romana. Las otras -en México, en Filipinas, en Venezuela– se nombraron a partir de ella, de la Emérita Augusta que nació como símbolo de la presencia militar romana en el año 25 a.C., para luego repartirse por los continentes como símbolo de la colonización española. Ese enclave ubicado a unos 500 km del puerto de Vigo, donde pisara tierra el Escuadrón 421 del Ejército Zapatista de Liberación Nacional hace dos semanas, preserva un espectacular Teatro Romano que sigue vivo como espacio para representaciones. El 30 de junio llegaron hasta él Yuli, Lupita, Ximena, Carolina, Marijose, Felipe y Bernal. Les acompañó el Caracol Extremadura (la articulación que se conformó para recibirles en Europa) con visita guiada del lugar y su historia, fotografías sobre el escenario y buen ánimo, como el que usó un compa del caracol para hablar de una “invasión a la inversa”, y luego afirmar: “aquí es donde vendremos a celebrar la caída del imperio”.
El Escuadrón 421 del EZLN visita el Teatro Romano de Mérida, Estado Español. Foto: Caracol Extremadura.
Con los grupos visitantes y locales sentados en la ‘cavea’ (nombre en latín para las gradas del teatro) hubo más explicaciones históricas, aplausos y las infaltables consignas libertarias, seguidas por una visita al Museo Nacional de Arte Romano que alberga el famoso mosaico en cuyas teselas se ilustra el origen del nombre de este continente. Allí pudo ver el Escuadrón 421 la imagen del “Rapto de Europa”, la hermosa princesa fenicia secuestrada por Zeus, ese dios que se ocultó en la figura de un toro blanco para llevar a la joven Europa hasta la isla de Creta, donde pudo violentarla.
Extremadura como comunidad autónoma, con sus dos provincias de Cáceres y Badajoz, se encuentra al centro-sur del Estado Español y tiene su propio estilo para hablar el “castilla”. Ese estilo propio recibió a la representación zapatista el miércoles 30 de junio en la estación de trenes de Mérida con una ‘marcha reivindicativa y pasacalles lúdico’ hasta la plaza de Santa María. Portando mantas que resumían luchas: “Por un mundo donde quepan muchos mundos. Caracol Extremadura”, “No al tren maya. No al A.V.E. Sí al tren que une a los pueblos”. Durante la marcha retumbaron fuerte por las calles de Mérida varias consignas: ¡Anti-anti-anticapitalistas!, ¡NO a la mina, Sí a la vida!, ¡Que vivan las luchas de las mujeres!, ¡Ninguna persona es ilegal!, ¡Zapata vive, la lucha sigue!, ¡De norte a sur, de este a oeste, la lucha sigue cueste lo que cueste!, ¡EZLN!”
A la llegada a la plaza hubo rap feminista, lectura de poemas y palabras del Caracol Extremadura y sus luchas desde varias plataformas colectivas, antifascistas, ecologistas y de mujeres, refugiadas de las dos provincias de Cáceres y Badajoz.
Para el Caracol Extremadura, “esto es un regalo” pues “nos comenzamos a juntar las invisibilizadas, las ecologistas, las feministas, las anticapitalistas. Invitamos a todoas a que se junten. Somos varios colectivos, no todos han podido venir.”
El Caracol Mérida tomó la palabra y señaló que “toda la gente que estamos en esta plaza somos de luchas desde abajo. Damos la bienvenida a vosotras, vosotros y a Marijose. Pero sobretodo que vengáis a traernos agua fresca de allá de este México lindo que no es tan lindo pero que su lucha es grande. Bienvenidas todas las luchas, porque si no estamos organizadas nos vencerá el capital que tiene nombre y apellidos y lugar de residencia.”
La CNT de Extremadura celebró que haya tantas mujeres reunidas y agradeció al EZLN “sus años de resistencia”, su “estar aquí” y “haber sido tanto tiempo una luz”. Luego agregaron: “compartimos con ustedes el rojo y el negro. Es la primera vez que vemos una convocatoria con tantas mujeres.”
En el mismo tono de reconocimiento a la lucha de las comunidades zapatistas hablaron el CSOA de la Algarroba Negra, Mujeres Sembrando, el Frente Sur Andalú, el Ateneo Libertario Mérida, Ecologistas en Acción, el Colectivo de la Vera, la Red Solidaridad, el Campamento Dignidad así como muchas compañeras y compañeros a título personal.
Sus participaciones han coincidido en celebrar la presencia zapatista como un impulso para la reciprocidad organizativa en la que se escuchan frases como “queremos aprender de ustedes” y entregar todo “lo que podamos aportar”, “su llegada es una inspiración muy grande para juntar esfuerzos”, “esperamos hacer un mundo mejor”, “les recibimos con ilusión”, “habéis empezado una revolución porque se están juntando los colectivos y aunando los esfuerzos, “la defensa de la vida nos la jugamos también aquí”, “el capitalismo no es compatible con la vida”, “ustedes nos inspiran”, “estamos en la lucha del pueblo”, “gracias por haber venido”.
Una modesta multitud muy combativa acompañó con palmas las intervenciones de cierre, cuando varias compañeras leyeron poemas, danzaron y taconearon, cuando rapearon como mujeres que luchan.
Síntesis en audio de la bienvenida en Madrid (2 min): (Descarga aquí)
“Gracias por traer vuestro mundo a nuestro mundo”, dijo uno de los niños que cargaban un gran barco de cartón con una estrella roja, un caracol, la bandera zapatista y la palabra “Europa” en grandes letras. Enseguida, otros niños entregaron, a lxs visiblemente emocionadxs miembrxs del Escuadrón 421, dibujos de la travesía marítima, seguidos por una niña con una bandera negra con las 12 estrellas de la rebautizada Unión Europea, con las palabras “Slumil K’ajxemk’op” escritas en el centro: Tierra Insumisa.
Era el 3 de julio de 2021, y la delegación marítima zapatista se acababa de presentar, a su llegada a la capital del Estado Español después de su paso por Extremadura. La bienvenida era en el Teatro del Barrio, en el barrio de Lavapiés, en el centro de Madrid. No es casual que estuvieran allí, en ese teatro y en ese barrio. Lavapiés ha sido y es barrio y barriada o, como dirían los tepiteños del otro lado del charco, barrio bravo, barrio macabrón. Barrio obrero, de migrantes y contracultural, ‘periférico’ en pleno centro, donde en otros tiempos proliferaron las “corralas”, el equivalente de las vecindades mexicanas, paupérrimas estructuras habitacionales pero llenas de vida y convivencia vecinal. Durante la Guerra Civil el franquismo mantuvo al barrio en completo abandono. Pero la decadencia y el abandono de muchos inmuebles dio lugar, en la década de 1990, al surgimiento de okupas libertarias, asociaciones y movimientos vecinales, haciendo de ese barrio uno de los más combativos de Madrid. Hoy Lavapiés enfrenta y resiste las políticas gentrificadoras que intentan desplazar a sus habitantes para convertirlo en centro inofensivo para consumo turístico. Lavapiés, sin embargo, resiste.
Uno de los focos de resistencia y reexistencia es justamente el Teatro del Barrio. Fundado en 2013 como forma de combatir “la ignorancia, el miedo y la apatía”, el Teatro del Barrio se organiza como cooperativa y se autodefine como “asamblea permanente”. Además de la programación de teatro, música, poesía y baile, el proyecto incluye talleres de formación artística, una Universidad del Barrio (espacio de encuentro, debate y difusión de cultura histórica, económica, política y artística) y los Martes Ciudadanos (donde colectivos, organizaciones y grupos de personas realizan proyecciones, debates, mesas redondas, coloquios, presentaciones de libros y más).
“Os damos la bienvenida desde la recién bautizada por vosotras Tierra Insumisa. No más Europa, no más La Europa fortaleza. Nos habéis dado un regalo, porque renombrar las cosas nos permite nuevos imaginarios, nuevos mundos, nuevos marcos para pensar”, dijo la activista antirracista Mónica Gortayre, quien condujo el acto de bienvenida, y añadió: “Madrid os recibe en lucha”, antes de dar un breve resumen del contexto en el que en Madrid reciben a lxs zapatistas.
“El Covid nos pilló de sorpresa pero reaccionamos rápido. Nos organizamos en redes vecinales de apoyo, en cajas de resistencia, comida, ropa y medicinas, pero sobre todo calor humano”, dijo. Y es que Madrid es la ciudad en donde la pandemia se ha cobrado más vidas en el país mientras la derecha, que gobierna Madrid y la Comunidad Autónoma del mismo nombre, la ha utilizado como instrumento político, extenuando y precarizando su sistema de salud, manipulando su incidencia y relajando medidas de seguridad para fomentar la llegada del turismo supeditando la salud a la economía. Las esperpénticas manifestaciones en contra de las restricciones pandémicas en los barrios más acaudalados y privilegiados de la ciudad en sus autos de lujo con banderas españolas y franquistas clamando ‘libertad’ constrastaron con la dignidad de los barrios populares y de clase trabajadora que se auto organizaron para construir redes de cuidados comunitarios:
“Defendemos cada centro de salud de cada calle en cada barrio”, dijo Mónica. “Luchamos para evitar los desalojos y los desahucios, contra la destrucción de barrios y del tejido asociativo, defendiendo la educación, contra las fronteras, que causan muerte cada día en el mar, contra el racismo y el machismo y todas sus violencias.”
La intención de la travesía zapatista por la vida en Europa tiene como objetivo compartir experiencias y enlazar luchas, para enfrentar el sistema global de muerte. Los testimonios que escuchamos en Madrid dan cuenta de que esto ya está sucediendo, de hecho desde antes de la llegada del Escuadrón 421. El proceso de organización para recibir a la delegación zapatista dio lugar a debates, charlas, exposiciones, murales colectivos. “Vivimos un 1 de Mayo interseccional maravilloso, como no se había visto en Madrid hace mucho tiempo. Estábamos unidas en la inmensa diversidad, al mandato que nos dijisteis cuando venías: organícense.”
De la comisión jurídica, Aránzazu repasó la lucha zapatista y su resonancia en Slumil K’ajxemk’op. “La revolución zapatista nos despertó para recordar que lo político no está arriba, sino con los de abajo. Vuestra lucha también es nuestra.”
Entrelazando luchas, Nuria Álvarez, del colectivo Acción Poética Revolucionaria, en una de las tres intervenciones poéticas del día, creó un puente entre Ayotzinapa y la lucha colombiana actual, con los poemas “Ayotzinapa a un año” y “Los desaparecidos de Colombia”.
Pablo Mayoral, miembro de la Comuna de presos y presas represaliados por el franquismo, reconoció que la travesía zapatista los motivó a volverse a encontrar y a continuar la lucha por la memoria histórica y contra la dictadura franquista, que “hoy vuelve a estar presente en nuestras instituciones políticas”.
Tati, de la Plataforma de Encuentros Bolleros, un “espacio de mujeres y otroas que se identifican como lesbianas” fundado hace tres años, dijo que “la lucha zapatista ha sido rayo de luz que nos va guiando con su hacer, con los siete principios y, para nosotras, especialmente con la Ley revolucionaria de mujeres. Eso nos ha cambiado la vida.” Y Mirayes, del Movimiento Marika, dijo: “El eco rebelde de vuestras palabras influye en lo que nosotras hoy somos. (…) Sus palabras nos resuenan tanto que nos hacen pensar, reflexionar, mirarnos de frente para reconocer quiénes somos y cómo nos gustaría ser”.
Rafaela Pimentel, de Territorio Doméstico, una organización de trabajadoras del hogar fundada en 2006, insistió en que todas las luchas son para todos y todas. La osadía zapatista de atravesar el Atlántico y cruzar fronteras resuena con los miles de migrantes que cruzan las fronteras todos los días, arriesgando (y muchas veces entregando) sus vidas, enfrentando racismo, explotación y violencia, como buena parte de las trabajadoras del hogar.
Desde luego, la fiesta y la alegría no podían faltar, con la música de los grupos Puerto Vaivén y Calle Siete.
Más tarde, el Escuadrón 421, acompañado de lxs organizadores y demás presentes, se dirigieron a la Plaza Arturo Barea, mejor conocida como Plaza Agustín Lara, en el mismo barrio de Lavapiés, para una breve pero emotiva despedida.
Allí, un mensaje de los colectivos de apoyo a Kurdistán y a la revolución de Rojava, justamente en ese 3 de julio, día de acción global por la defensa de Kurdistán:
“Damos la bienvenida a La Montaña. Deseamos que vuestro viaje por la Europa de abajo y a la izquierda traiga la brisa limpia de la Selva Lacandona a esta vieja Europa enferma de egoísmo y soberbia. Muy al oriente de aquí, allá donde Europa se junta con Asia, se encuentran las altas montañas de Kurdistán. En esas montañas y en las planicies que la rodean se expandió la revolución neolítica hace 10 mil años. Y desde hace 40 se gesta una nueva revolución, hermana de la revolución zapatista. La democracia de base, la liberación de género y la defensa de la tierra son los pilares de la revolución de Rojava, que hoy se encuentra en peligro inminente a causa de la invasión de Turquía y sus hordas yijadistas.”
Finalizando la jornada, Marijose, a nombre del Escuadrón 421, compartió unas palabras de despedida, recordando que, aunque el Escuadrón partía, ellas u otra delegación zapatista regresarán en los próximos meses.
Síntesis en audio de la bienvenida en Valencia (2 min): (Descarga aquí)
La gran Plaza de la Virgen (Plaça de la Mare de Déu) resonó con vivas y aplausos de cientos de personas cuando llegó el Escuadrón 421, este 5 de julio, resguardado por el equipo de seguridad como medida sanitaria ante la pandemia.
Fotografía de Raúl Ruiz
La Plaza de la Virgen es punto neurálgico de la vida social de la ciudad de Valencia, provincia que junto con la de Alicante y Castellón configuran la Comunidad Valenciana. La Plaza es punto en donde confluye y se entrecruza la historia citadina desde la época romana en el siglo II A.C., con importantes emblemas como su Catedral y la Plaza de L’Almoina, herencia de 2 mil años de historia. Al igual que otros barrios como el de Benimaclet, Russafa o el marítimo de El Cabanyal, el centro histórico al que pertenece la plaza ha sido afectado por la gentrificación y la turistificación.
No fueron pocos los esfuerzos previos para hacer posible no sólo esta bienvenida, sino también los encuentros posteriores cuando la Travesía por la Vida zapatista regrese, después de la llegada de la delegación aérea del EZLN, Congreso Nacional Indígena y el Frente de los Pueblos en Defensa de la Tierra.
Desde hace muchos meses se conformó en el País Valencià la Xarxa Solidària Gira per la Vida(Red Solidaria Gira por la Vida), un espacio donde se encuentran más de 40 colectivos, asambleas, organizaciones y personas, aglutinando luchas en defensa del territorio y la vivienda, por la soberanía alimentaria, migrantes y antirracistas, feministas, ecologistas, de solidaridad internacionalista, de economía social, centros sociales ocupados y autogestionados y más.
Como en las demás geografías por donde ha pasado hasta ahora la delegación zapatista, el eje fundamental de la lucha por la vida es la convergencia en la divergencia, la politización de la diferencia. “Vertebrarnos desde la diversidad de las luchas, re-conocernos y fortalecernos desde las diferencias de todo aquello que nos hace iguales”, así lo expresaron cuando se presentó la Xarxa en la Plaza Poeta Miguel Hernández en Valencia el pasado 2 de mayo, el mismo día en que el navío La Montaña zarpó rumbo a Europa llevando consigo al Escuadrón 421.
Así, la bienvenida en la Plaza de la Virgen fue punto de encuentro de una gran diversidad de luchas. La migración y la lucha antirracista estuvieron de nuevo presentes con las participaciones de la Caravana Abriendo Fronteras (Obrint Fronteres) y Regularización Ya. Emilia, de la Caravana Abriendo Fronteras, hizo hincapié en la criminal hipocresía de los Estados europeos, que, mientras explotan los recursos y riquezas de otros países, reprimen a los migrantes que huyen de esa misma devastación, causando “la muerte de miles de personas en el mar, en el desierto, en los bosques, de frío, de hambre, ahogada”.
“Hoy les recibimos con dolor y con rabia”, saludaron las compañeras de Regularización Ya, un movimiento de trabajadoras y trabajadores, jornaleros, del hogar y cuidados, sexuales, manteras y manteros y activistas antirracistas. Denunciaron que el pasado 31 de diciembre de 2020 España se abstuvo de la resolución de la ONU por la lucha contra el racismo, posicionándose así del lado de la opresión y el racismo institucional, “en este país donde los migrantes mueren privados de asistencia médica de urgencia, donde la policía mata por el color de piel, donde no se respetan los protocolos para el derecho al asilo y al refugio”.
La migración también estuvo presente con dos miembros senegaleses de la comunidad Baay Faal en Valencia, que encontraron un paralelo entre su travesía de un mes en el mar para llegar al Estado Español y la travesía zapatista a bordo de La Montaña. Entre cantos religiosos, explicaron el sentido del culto Baay Faal, una de las tres grandes hermandades islámicas de Senegal, derivada del muridismo.
El vínculo entre la migración y la lucha feminista encontró voz con la colectiva Mujeres, Voces y Resistencia, “que acoge diversas expresiones feministas y antirracistas y que busca denunciar las violencias (…) que atraviesan las vidas y procesos de las mujeres migrantes racializadas en el territorio español”. En el acto, las compañeras leyeron un extracto de la obra “La isla de los lobos” de Constanza Carlesi. También presente estuvo la Assemblea Feminista València, que nació a partir de la organización de la Huelga Feminista de 2018 y mantiene una lucha anticapitalista, antirracista y decolonial desde un enfoque feminista.
La lucha por la soberanía alimentaria estuvo representada por Ecollaures, un colectivo de proyectos agroecológicos organizados en asamblea alrededor de Valencia.
También estuvo presente La Verdulería, un centro social autogestionado donde se reúnen varios colectivos: un colectivo transfeminista, un grupo de consumo solidario, una biblioteca, un fondo de resistencia y, más recientemente, un grupo transfeminista de apoyo a la gira por la vida.
La Koordinadora de Kolectivos del Parke es un proyecto comunitario establecido desde 1985 para enfrentar la pobreza y defender los derechos de los más vulnerables en el barrio periférico de Parque Alcosa, al sur de Valencia. “Un barrio abandonado por las instituciones, pero con mucha organización vecinal ante problemáticas sistémicas: desempleo, exclusión, empobrecimiento, vivienda, prisión y represión.”
El Centro Social Ocupado Anarquista L’Horta es una casa del pueblo que resiste la urbanización en el barrio de Benimaclet y que incluye biblioteca, patrimonio restaurado, zona agrícola, talleres comunitarios, reuniones y educación.
Luchando también por la vida digna en Valencia, EntreBarris es una red de colectivos y asociaciones vecinales de varios barrios que luchan contra la turistificación de la ciudad.
La Comissió Ciutat-Port, conformada por asociaciones ecologistas, vecinales y de defensa del territorio, lucha contra la ampliación del puerto de Valencia, “como icono de una actividad completamente destructora del territorio”.
Desde 2012, la Plataforma para la Defensa y Protección de Les Moles de Paterna, ha luchado contra la construcción de un gran centro comercial en un territorio lleno de vida. Después de casi 10 años de lucha, dos semanas antes de este encuentro, los esfuerzos se vieron coronados con la cancelación del proyecto.
Frenem la Contaminació del Grau de Castelló, es una organización vecinal que lucha contra la contaminación por parte de un gran complejo petroquímico industrial.
También estuvo presente la recién creada Plataforma contra la ampliación del by-pass (No a l’ampliació del by-pass) de Valencia (un tramo de la autovía A-7 que rodea la ciudad), un proyecto de 144 millones de euros con graves efectos ecológicos.
Los medios libres también dieron su palabra: Radio Malva, radio libre y feminista de Valencia; La Directa, medio libre de investigación, independiente, asambleísta, autogestionado y feminista en catalán; la Coordinadora Obrera Sindical de clase y feminista de los países catalanes y la CGT (Confederación General del Trabajo).
La lucha internacionalista estuvo presente con varias organizaciones de solidaridad con la lucha zapatista como la Asamblea de Solidaridad con México PV y otras luchas en el mundo, incluyendo al Grupo autogestionado de Boicot, Desinversions i Sancions (BDS) a Israel del País Valencià o la Xarxa Internacionalista Valenciana que trabaja “desde perspectivas anticolonialistas, feministas, anticapitalistas y de defensa del territorio”. Las expresiones de apoyo resonaron fuerte: “¡Sahara Zapatista! ¡Kurdistán Zapatista! ¡Palestina Zapatista! ¡País Valencià Zapatista!” Otras organizaciones internacionalistas incluyeron la Coordinadora AMANDLA, CEDSALA, EntrePobles PV, Pau i Solidaritat, la Intersindical de Dones y Perifèries del Mòn.
Como siempre, la música y la poesía no podían estar ausentes, con las participaciones de La Postissa, la rapera Tesa, el músico Xavi Sarrià, Los Chatarreros y el poeta Enrique Falcón. Al final del evento, Marijose dio unas palabras de agradecimiento a nombre del Escuadrón 421.
Síntesis en audio de la bienvenida en Barcelona (3:46 min): (Descarga aquí)
Bienvenida al Escuadrón 421 del EZLN en la Plaza Catalunya, Barcelona. Foto tomada de: Assemblea catalana de suport a la Gira Zapatista 2021.
Ha habido un alegre alboroto en las ramblas. El Escuadrón 421 del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, que representa a miles de personas que habitan las comunidades en lucha de Chiapas, México, fue recibido y acompañado en el puerto de Barcelona por las plataformas organizadas en Catalunya. Se dieron cita el 6 de julio bajo la enorme estatua dedicada a Cristóbal Colón, 57 metros de altura que simbolizan el alcance de vista de la ocupación que lleva su apellido. Fue bajo este monumento, que mira hacia las tierras colonizadas, que resonó el ‘yo vengo a ofrecer mi corazón’, cantado al unísono por luchas e historias diversas.
Tras el canto, a unos metros de la playa que baña el Mediterráneo, partió una bicifestación por las ramblas hacia la Plaza de Catalunya, una rodada de más de un kilómetro, mientras se escuchaba de fondo el himno zapatista. Bajo un cielo nublado, se marchó respetando protocolos por la pandemia de Covid-19. El Escuadrón 421, de camino hacia París, marchó en cordón de seguridad, levantando todo el tiempo sus puños en un coro de “vivas” y seguido por una gran manta de EZLN abrigada por el canto de Víctor Jara: “El derecho de vivir en paz”. Estas famosísimas ramblas de Barcelona suelen estar llenas de turistas, pero también hay en ellas migrantes, gente haciendo magia, música y malabares para subsistir en un entorno de extremos y contrastes. Fue aquí y en la plaza en donde se reprimió la voz del voto independentista en el referendo de 2017.
Tras llegar a la Plaza Catalunya, comenzaron las “buenas tardes” (bona tarda) y los “bienvenidas, compañeras” (benvingudes, companyeres), para luego llevar a cabo el acto en distintos idiomas. Así como ha ocurrido en actos de bienvenida de días anteriores, el Escuadrón 421 saludó a sus anfitriones en voz de Marijose, Yuli, Ximena, Felipe, Carolina, Lupita y Bernal en castellano, ch’ol, tzotzil y tzeltal.
A lo largo de varias horas de evento de bienvenida, se escucharon las expresiones y participaciones que denotan una amplia gama de luchas colectivas.
El Movimiento de Migrantes denunció los dolores que causa la Ley de Extranjería, que propicia persecución y expulsión de personas ‘sin papeles’, así como mano de obra barata: “Las migrantes no nos rendimos y buscamos un caminar conjunto sabiendo que este camino no es nada fácil por las conciencias que hay que despertar (…) En el centro de la vida también están los cuidados (…) Nos convocamos desde nuestras resistencias y cosmovisiones para seguir en la lucha y en nuestro caminar”.
El Sindicato de manteros agradeció al EZLN “por cruzar las fronteras y compartir experiencias” pues, dijo, “tenemos la misma historia de esclavitud, colonización del saqueo y del desplazamiento forzado”. Por eso agregó: “Tenemos que unir todas las luchas del mundo, porque se trata de defender los derechos humanos en esta revolución que es para mejorar la vida humana”. El sindicato informó que se reunieron “para trabajar en varios ejes, educación, soberanía alimentaria, feminismo”, es decir, “lo básico para asegurar la vida”.
El grupo de Poetisas Feministas y Antirracistas de México habló de los “dolores y las penas arrancadas”, pero también de la forma en que “las compas zapatistas nos hacen tener la esperanza bien agarrada” y “aferrarnos a lo que nos quede de vida”. Luego acompañaron sus palabras con el poema ‘Ustedes son mis maestras y maestros’, escrito a partir del genocidio en Guatemala y ahora dedicado al Escuadrón 421.
Vinieron luego varias horas de participaciones de voces colectivas que hablaron desde espacios ocupados, desde el Ripollés, desde espacios sociales autogestionados como Can Batlló, desde la Plataforma de Afectados por las Hipotecas, la PAH.
Espacios ocupados: “Tampoco pedimos permiso para ser libres, tomamos espacios y ocupamos para vivir la vida en libertad y autogestionarnos para solucionar nuestra necesidad de vivienda, para el desarrollo del arte, conciertos, talleres de oficios, espacios no mixtos de mujeres, bibliotecas, comedores populares, ocupamos para huertos urbanos y para hacer espacios de comunidad, gimnasio y un cine en Sant Andreu (…) Somos un magma, un espacio diverso que sigue tras 25-30 años ocupando y liberando espacios y aun con los desalojos de ayuntamientos que se dicen progresistas como el que hay aquí (…) Esta mañana bajé al huerto y vi que el maíz había florecido (…) Más seres les están dando la bienvenida, la lucha sigue.”
Desde el Ripollés hablaron 2 compañeras: “Hoy acercamos nuestras voces desde la ruralidad del norte, ríos que nutren y recorren la Garrotxa, ríos que se despiden en l’Empordà y llegan al mar Mediterráneo. Son tierras que escuchan a sus abuelas, sus nietas, campesinas, que escuchan sus sabidurías (…) Tierras llenas de vida que se encuentran con un modelo extractivo, que se encuentra con nuestros cuerpos, que nos tritura día a día, nos oprime y nos ciega este modelo heteropatriarcal. Tierras que germinan para romper la violencia (…) Las ruralidades despertamos, recuperando procesos de gobernanza cooperativa, somos pueblos, barrios y ríos que despertamos. Hoy estas tierras les abrazan y dan la bienvenida. Les acompañamos a crear este mundo en donde quepan muchos mundos.”
Can Batlló dijo: “Gracias por venir a traer la fuerza de los pueblos originarios y zapatistas (…) Venimos de un espacio autogestionado (…) Catalunya aglutina colectivos diversos: de autogestión, espacios de cuidado, artes, transfeminismo, vivienda, memoria histórica, cultura, soberanía energética y alimentaria. Trabajamos interaccionando para la transformación, para una economía cooperativa, una educación autogestionada, para el asociacionismo”. Entonces llamaron a “generar lazos de comunicación” porque hay “ganas de compartir saberes, ignorancias y pesadillas (…) para continuar navegando en la corriente zapatista en la libertad, la democracia y la justicia.”
La PAH (Plataforma Afectados por las Hipotecas) dijo: “La lucha es por la vivienda (…) Nuestro problema de vivienda afecta a toda la clase trabajadora, sobre todo a mujeres y migrantes” que han perdido la vida. “Sufrimos la crisis provocada por la especulación, la salvación de la banca por dinero público (…) Paramos los desahucios, no hemos parado tampoco de crecer como plataforma.” Terminaron su participación afirmando que hay que defender “el derecho a habitar en este mundo”.
Hubo también una amplia participación de quienes luchan desde el arte, la música, la poesía, la escritura. David Fernández citó, entre otros poemas, uno del italiano Erri de Luca intitulado ‘Després’ (después) entonando algunos vernos en catalán como el de ‘cuando la humanidad será poca e irá a pie’. De Mireia Calafell retomó versos del ‘porque hay revoluciones que son monosilábicas’. También recitó el contundente ‘NO’, acerca de la represión del 1 de octubre de 2017 recitando ‘No levantéis la voz’ ‘no hagáis memoria’ ‘no despertéis los muertos’ ‘no queréis un SÍ que se pone en duda y que tiene identidades’ ‘regresad a casa, no lo queráis todo, que todo está en camino y no hay tanta prisa’. David finalizó dirigiéndose al Escuadrón 421 para decirles: “no tengáis tanta prisa en regresar”.
Bienvenida al Escuadrón 421 del EZLN. Plaza Catalunya. Barcelona. Foto tomada de: Gira zapatista Catalunya @girazapatistac1
Unao compañerao leyó después el poema “Ancestra del futuro”con ‘Devuélvannos el oro’ como un grito de dolor, una herida colonial no cicatrizada. “El futuro está en el pasado” fue leído en inglés y en lengua castellana: “Si mi voz te incomoda prepárate, en el futuro seremos muchas (…) seguiremos disputando el tiempo robado (…) confrontaremos la imposibilidad del habla (…) el futuro está siempre en el pasado.”
También cantó Adala su ‘música d’arrel’, música de raíz, que dio la bienvenida a las zapatistas: “¿Quién puede comprar o tomar el cielo o la tierra? (…) No somos amos del aire y el reflejo del agua (…) Cada parte de esta tierra es sagrada para mi pueblo porque vive de la tierra y del río (…) Somos iguales por dentro y es el mismo sol el que nos despierta (…) Conserven la tierra para vuestros hijos”. Su último canto fue una versión en catalán de “Todo cambia”, de Mercedes Sosa. ‘Si tot canvia en aquest món, que jo canvi no es estrany’, dijo al final.
Bruno, poeta palestino y activista transfeminista, agradeció a Marijose especialmente por ser un referente, pues “el binarismo es un invento colonial, las personas trans siempre hemos existido y estamos por todas partes”.
El colectivo transfeminista ‘MariCarmen’ llegó desde Collserola para recordar que “nos queremos vivas, no queremos machos ni TERFS (habla del asesinato de un compañero Samuel en A Coruña por su orientación sexual). “Que nadie nos cuestione nuestra identidad. Cuestionémonos los privilegios, apoyemos, amor y cariño para todos, todas y todes. Nos queremos vives”.
Montserrat Vilaplana del Grupo ‘Llibertat per la Juani’ hizo un llamado a la solidaridad con Juana Ruiz y todas las presas políticas palestinas. Juana Ruiz será juzgada por Israel el 27 de julio. Fue detenida el pasado 13 de abril por 30 militares. Desde entonces, “Juani ha sufrido vulneraciones de derechos humanos, sin lentes para leer, y no solo lo vive Juani, es una constante de Israel a la población palestina en general. Juani es internacionalista que apoyaba al pueblo palestino y por eso la detuvieron, está este proceso de enjuiciamiento y los canales diplomáticos prometidos por el gobierno no hacen nada. La organización para la que trabajaba también la arrasaron (…) La lucha es una misma lucha. ¡Visca Palestina Lliure!, ¡Solidaritat amb el poble palestí!, ¡Juani, t’estimem i et volem a casa!
Es entonces cuando mujeres migradas cantaron juntas “Sin Miedo”, de Vivir Quintana, con mantas de “México Feminicida”, “Furia Mexicana, al sororo rugir del amor”. Tras el canto, gritaron al unísono sobre el escenario: ‘Europa, Europa, cuestiona tu riqueza, tu comodidad es nuestra pobreza’ (…) y cantaron ‘Hay que quemar, hay que quemar, hay que quemar el sistema por racista, colonial y patriarcal’.
Llegó el turno de Cumbia Kaos, cumbia chilena, música combativa que entonó letras en donde se escuchó ‘mar Mediterráneo como mar muerto y podrido, como las democracias en las que hemos vivido’. ‘¡Renuncia, Piñera, asesino! Que renuncien todos los asesinos, que aguanten las luchas de este territorio y las del otro lado del charco (…) Es la cumbia antisistema y la canto pa’ vencer. Asambleas libertarias otra vez’ (…) ‘Expropiar a los burgueses su poder’. Mientras la gente bailaba, Marijose grababa con su teléfono celular.
Para cerrar, hablaron mujeres migrantes y racializadas: “La otra Europa también nos violenta, no vamos a permitir más, ya son más de 500 años, aquí están sus hermanas y hermanos”. Nos hablaron de las resistencias en Colombia, de la Europa extractivista, “la Europa que acosa en el metro llamándonos sudacas, la Europa que nos ve y se agarra el bolso. Abrazamos a los hermanos y hermanas de Abya Yala, indias, campesinas. Que esto nos dé fuerza, ya nos está dando fuerza. Y de nuevo se escucharon fuerte las exclamaciones en la plaza ¡Hay que quemar el sistema por racista y colonial! ¡De sur a sur, de este a oeste, la lucha sigue, cueste lo que cueste!
Llegó entonces el momento de la partida del Escuadrón 421, tras haber recorrido diversas regiones del Estado Español. Como en todos los eventos de bienvenida, estxs siete navegantes levantaron olas en tierra y se retiraron escuchando consignas que empapan acantilados en muchas lenguas: ¡Visca, Visca, Visca, la lluita zapatista!
Mural colectivo sobre la travesía zapatista en la comunidad autónoma Nuevo San Gregorio. Foto: Sexta Grietas Norte
La comunidad de Nuevo San Gregorio, en el Caracol 10 Zapatista, denuncia el creciente hostigamiento que vive después de que la despojaran de sus tierras. Pone en el centro el trabajo organizativo y la travesía del Escuadrón 421 en Europa para librar los ataques del grupo “Los 40 invasores”, que desde noviembre del 2020 les despoja de tierras, alimentación, trabajo, educación…
Por Daliri Oropeza
Fotos: Sexta Grietas Norte
Video: School For Chiapas / Summer 2021 Delegation
CIUDAD DE MÉXICO.- Las familias de Nuevo San Gregorio, Caracol 10 Patria Nueva, pintan un mural. Lo hacen sobre una de las paredes de madera de “La Casa de Todos”. Dibujan colectivamente los sueños que les provoca el viaje de las delegaciones zapatistas a Europa. Llenan de color un barco y un avión. Trazan con brochas después de dialogar lo que quieren plasmar y reflexionar sobre el despojo de tierras que sufrieron.
Pedro asegura que en el mural están todos los continentes, pero sobre todo se encuentra presente la selva y las montañas; los jaguares, tucanes, hongos, escarabajos y flores. Lo que van a compartir las delegaciones zapatistas en su travesía por el mundo.
Hay tres palabras en las trabes que conectan el barco y el mar con el avión y el cielo: lucha, resistencia y rebeldía, las cuales decidieron en colectivo resaltar con pintura en rojo. Dibujan una frase con letras grandes y negras: “Queremos un mundo nuevo donde no se distingue raza y color”.
Pedro participó en la creación de este mural colectivo. Es habitante de Nuevo San Gregorio. Asegura que para ellos, como habitantes del Caracol 10 Patria Nueva, el mural significa que “no estamos solos” y “que andamos en otro lugar”.
“No me siento triste, solo, aunque los invasores siguen haciendo todo esto, quebrando alambrados, quitaron sus herramientas para la milpa, saquearon el ganado que pastan en terrenos a un costado de la carretera”, asegura en entrevista.
Nuevo San Gregorio se encuentra en una parte boscosa del Municipio Autónomo Rebelde Lucio Cabañas, entre pinos, sabinos y cipreses. Las bases de apoyo zapatistas tsotsiles y tseltales que aquí habitan llevan un año y siete meses bajo el asedio de un grupo que llaman “Los 40 invasores”. Es el grupo que señala Pedro como principal agresor de la comunidad, que se encuentra en el municipio oficial de Ocosingo, Chiapas.