Chiapas
20 años de crímenes de lesa humanidad en la zona Norte de Chiapas
Susuclumil, Tila, Chiapas, México.
21 de octubre de 2016
Boletín de prensa No. 21
Sucuclumil conmemoración de la memoria
20 años de crímenes de lesa humanidad en la zona Norte de Chiapas
Desde abajo se empieza.
Ésta palabra es semilla, la sembramos y cuidamos
porque es memoria, esperanza, justicia
Para este Centro de Derechos Humanos los trabajos de la memoria histórica representan la acción continua, viva para el andar diario, para la creación de alternativas frente a la impunidad del Estado mexicano, cuyas palabras están manchadas de sangre, con todo y sus instituciones.
Es por ello que traemos a la memoria en esta Tierra Blanca, Susuclumil, lugar de memoria, en este sitio de conciencia en donde el Tribunal Permanente de los Pueblos1 escuchó la palabra de hombres y mujeres, sobre los caídos, víctimas y sobrevivientes de la estrategia contrainsurgente implementada por el Estado mexicano en el marco del Conflicto Armado Interno no resuelto en Chiapas.
Aquí se comparten un mismo camino, la palabra, La Otra Justicia, manteniendo en su lucha la esperanza de verdad y justicia frente a la impunidad.
Recordando que con la aparición del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) el 1 de enero de 1994, y en medio de las negociaciones para la búsqueda de una salida política al conflicto armado interno en Chiapas, la violencia en la región aumentó. El control militar era parte del intento de dominio de la situación por parte del Estado mexicano. Con la puesta en marcha del Plan de Campaña Chiapas 94, el Estado mexicano a través del Ejército mexicano, creó paramilitares delegando en ellos el uso de la fuerza, tolerando, permitiendo y facilitando sus operaciones y mostrando una incapacidad para combatirlos.
Indígenas víctimas de tortura obtienen libertad condicionada; violaciones de DH permanecen impunes
Los indígenas tsotsiles Margarita Gómez y David Hernández, víctimas de tortura, obtuvieron su libertad el pasado 14 de octubre por sentencia suspendida. Este mecanismo no reconoce su inocencia, a pesar de que ambos se autoinculparon a consecuencia de la tortura, y deja impunes las violaciones a derechos humanos que sufrieron: detención arbitraria, faltas al debido proceso y violaciones a los derechos humanos de las mujeres.
David fue detenido sin órdenes de aprehensión por la policía especializada el 24 de abril de 2014 en la agencia del MP de Teopisca mientras realizaba los trámites para la entrega del cuerpo de su hermano Juan Pérez Gómez, asesinado un día antes. El mismo día, Margarita fue detenida también sin órdenes de aprehensión, junto con su hijo de un año y siete meses, en el cementerio de Teopisca.
Ambos fueron torturados hasta lograr que se autoinculparan por el homicidio de Juan Pérez y sentenciados a ocho años de prisión.
Lee los detalles de la detención arbitraria y tortura aquí.
El caso de Margarita y David no es aislado; representa un patrón sistemático ámpliamente documentado de tortura como medio de fabricar delitos y crear “culpables”.
Este 20 de octubre, en conferencia de prensa en el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba), se dieron a conocer los detalles del caso. Escucha aquí y lee el comunicado del Frayba abajo.
Gil Hernández, abogado del Frayba, Zona Altos: (Descarga aquí)
Ángel Gómez Coronel, Comité de Derechos Humanos jCanan Lum: (Descarga aquí)
Hermana Patricia Camacho, Parroquia de San Agustín: (Descarga aquí)