democracia
EZLN: No es decisión de una sola persona
No es decisión de una persona.
Noviembre del 2016.
Para l@s racistas:
Pues lo hemos estado leyendo y escuchando todo lo que dicen y leyendo lo que escriben.
Todas sus burlas, sus desprecios, su racismo que ya no pueden esconderlo.
Creo que también los compañeros y, sobre todo, las compañeras del Congreso Nacional Indígena, también lo están leyendo y escuchando.
Y es claro que salió cierto como pensaron y nos dijeron el CNI que hay mucho racismo en la sociedad.
Y creo que se divierten y se aplauden entre ustedes de qué buen chiste que hicieron con su burla de izquierda, dicen, que llaman “la candigata” del EZLN.
Y se festejan como muy machitos que se burlan así de las mujeres indígenas.
Y dicen que pinches indios que nos dejamos manipular y no tenemos buen pensamiento propio, sino que como borregos vamos donde dice el pastor.
Pero creo que es que se ven en un espejo cuando dicen eso.
Así salieron: machitos y racistas sinvergüenzas.
Y ustedes, tanto que hablan y dicen que el racismo está sólo en la clase explotadora, y no se dan cuenta de que ya se les metió en el cuerpo y el alma, en su modo de ustedes de pensar, de decir, de ver cómo está la vida.
Y no les dejan ver otra cosa o de otra manera, por su individualismo, por sentirse mucho, creídos y creídas, como si pudieran solos salvarse y salvar a los seres vivos.
No se dan cuenta de que ya son sólo personas individualistas y no se dan cuenta de que ya está por terminar lo poco que queda, encerrados como están en su vida de sí mismos.
Entonces pues les decimos que primero aprendan a leer, luego léanlo bien, luego aprendan a entender lo que leen.
Varoufakis: Tsipras está destinado a fracasar: los verdaderos vencedores en Grecia son los prestamistas
“Actuar es fácil, pensar es difícil y actuar según se piensa, terriblemente incómodo”, decía Goethe. Del exministro de finanzas griego y colaborador habitual de SinPermiso, Yanis Varoufakis, pueden decirse muchas cosas. También que es un raro representante en nuestros días del tipo humano retratado por aquella máxima tan característicamente emblemática de los grandes valores de la Ilustración.
Sin permiso
Alexis Tsipras ha arrancado una victoria resonante de las fauces de la humillante rendición de julio ante la Troika de los prestamistas de Grecia. Desafiando a los partidos de la oposición, a las encuestas de opinión y a los críticos presentes en sus propias filas (entre ellos, quien esto escribe), se ciñó a un gobierno con una mayoría reducida, aunque manejable. La pregunta es si puede combinar seguir al frente del gobierno con estar en el poder.
Los mayores perdedores fueron los partidos menores que ocupan los extremos del debate que siguió al referéndum. La Unidad Popular fracasó de modo increíble a la hora de explotar la aflicción que sintió una mayoría de los votantes del “No” después del giro radical que dio Tsipras en favor de un acuerdo que recortaba aún más la soberanía nacional y que incrementaba los niveles ya despiadados de austeridad. Potami, partido que se ubica a modo de niña bonita reformista de la Troika, tampoco logró reunir el voto, más reducido, del “Sí”. Con un victorioso Tsipras ahora firmemente al timón con el programa de la Troika, los partidos pro-Troika de última moda no tenían nada que ofrecer.
La gran ganadora es la Troika misma. A lo largo de los últimos cinco años, las proyectos de ley firmados por la Troika se aprobaron en el Parlamento con mayorías absolutamente exiguas, lo que dejó noches sin dormir a sus responsables. Hoy, los proyectos necesarios para apuntalar el tercer rescate pasarán con cómodas mayorías, pues Syriza está comprometida con ellos. Casi todos los diputados de la oposición (con excepción de los comunistas del KKE y los Nazis de Amanecer Dorado) se encuentran también de acuerdo.