I. Asesinan en DF a Rubén Espinosa, fotoperiodista desplazado por violencia en Veracruz (Regeneración Radio)

ASESINAN EN DF A RUBÉN ESPINOSA, FOTOPERIODISTA DESPLAZADO POR VIOLENCIA EN VERACRUZ

Fotografía: Ehécatl Ríos

«La muerte escogió a Veracruz como su casa y decidió vivir ahí.» Rubén Espinosa

Por Carlos Ogaz

El 1° de agosto por la mañana en diferentes medios se reportó el hallazgo de cinco cuerpos sin vida —cuatro mujeres y un hombre— en un departamento de la Colonia Narvarte, en la Ciudad de México. Uno de los cuerpos correspondía al fotógrafo Rubén Espinosa, reportado como desaparecido por sus familiares horas antes, confirmó Artículo 19 en una alerta.

Los familiares de Rubén, quien vivía en el DF desde hace un mes, luego de haberse «autoexiliado» deVeracruz debido al hostigamiento y las amenazas que recibía por su labor, supieron de él por última vez el viernes a las 14:00 horas, cuando les avisó en un mensaje que se dirigía a su hogar. Luego de percatarse de la ausencia, los familiares lo reportaron como desaparecido.

Fotoperiodista de ProcesoCuartoscuro AVC Noticias, Rubén «abandonó Veracruz tras agresiones en su contra. A mediados de junio pasado, Espinosa salió del estado (…) para refugiarse en el Distrito Federal…», señala la alerta. Rubén se especializaba en la cobertura de protestas sociales y mantenía unapostura crítica frente al gobernador del priista Javier Duarte.

«El miércoles 10 de junio, por la mañana, el fotoperiodista notó a una persona afuera de su casa, en Xalapa. “No le di mucha importancia y seguí camino a realizar mi trabajo”, relató (…) En la tarde, dos individuos más permanecían frente a su hogar. “Tres me veían de manera agresiva, ahí se encontraba el primer sujeto, quien aparentemente me tomó una foto y me hizo una seña como de ‘¿Qué pedo?’”. En la noche, cuando regresaba a su casa, dos personas lo siguieron, por lo que se refugió en una tienda de artículos para bebé. Minutos después, el fotoperiodista continuó su camino. Antes de llegar observó que afuera de su casa otras dos personas lo esperaban. Cuando lo vieron caminaron hacia él y Espinosa se hizo a un lado para dejarlos pasar. Éstas se detuvieron, lo miraron fijamente y se fueron.», agrega el comunicado.

Un día antes, el comunicador encabezó el acto de la recolocación de una placa en honor a la periodista Regina Martínez, asesinada en la entidad el 28 de abril de 2012.

De acuerdo con Artículo 19, «El homicidio de Rubén Espinosa marca un nuevo hito en la violencia contra la prensa en México. Es la primera vez que un periodista desplazado internamente es asesinado en el Distrito Federal. La violencia que había sufrido Espinosa era conocida públicamente, por lo que el homicidio del fotorreportero se produjo sin que las autoridades encargadas de proteger periodistas en este país movieran un solo dedo a favor de Espinosa.»

VERACRUZ Y LA VIOLENCIA CONTRA LOS PERIODISTAS

La muerte de Rubén se suma a las 14 ocurridas durante el gobierno de Javier Duarte (y a las 88 a nivel federal): en su mayoría casos sin resolver que hacen de Veracruz el lugar más peligroso de América Latina para ejercer el oficio periodístico. Paradójicamente, también es un sitio donde el gobernador es «reconocido» por la prensa afín a su mandato por «defender la libertad de expresión», como ocurrió en 2013 con la Asociación Mexicana de Editores de Periódicos, AC.

En su afán por encubrir la verdad, Duarte ha caído en el ridículo y la burla, comprando reconocimientos y redacciones. A estas acciones ha sumado la impunidad como carta de gobierno. Apenas el 30 de junio pasado, se dirigía a los periodistas con un «Pórtense bien», en un discurso ofrecido en Poza Rica con motivo del Día de la Libertad de Expresión:

«Pórtense bien. Todos sabemos quiénes andan en malos pasos (…) Todos sabemos quiénes de alguna u otra manera tienen una vinculación con estos grupos (…) Todos sabemos quiénes tienen vínculos y quiénes están metidos con el hampa (…) Pórtense bien, se los pido. Vienen tiempos difíciles (…) Vamos a sacudir el árbol y se van a caer muchas manzanas podridas.»

Así, las muertes y las desapariciones siguen ocurriendo y el gobernador hace oídos sordos. Apenas en julio pasado se reportó la desaparición de Juan Mendoza Delgado, director del sitio Escribiendo la verdad. Al día siguiente su cuerpo fue hallado sin vida, atropellado. Lo mismo ocurrió con Armando Saldaña Morales, de la estación La Ke Buena, quien fue asesinado en mayo. Su cuerpo fue hallado con señales de tortura y con cuatro impactos de bala.

Apenas dos casos de una larga cadena.

A pesar del riesgo de ejercer el periodismo en contexto así, Rubén Espinosa era de los pocos periodistas comprometidos con la producción de información referente a movimientos y protestas sociales, además de dar seguimiento a los casos. Fue uno de los contados periodistas que denunció la brutal golpiza que recibieron estudiantes universitarios organizados en Xalapa, por parte de paramilitares, en junio pasado.

Hasta la capital lo alcanzaron los sicarios. Fue desaparecido, torturado y ejecutado con dos tiros de gracia en la cabeza.

La muerte decidió salir de Veracruz para buscar bajo encomienda a Rubén Espinosa.

II. ¿Quiénes eran las cuatro mujeres asesinadas junto a Rubén Espinoza? (Regeneración Radio)

Por Sandra

El 1° de agosto se reportó el hallazgo de cinco cuerpos sin vida en un departamento de la Colonia Narvarte. Horas después se supo que uno de los cuerpos correspondía a Rubén Espinosa Becerril, fotoperiodista autoexiliado en el Distrito Federal debido al hostigamiento que recibía en Veracruz. No obstante, y a más de 24 horas del hallazgo, las autoridades no habían revelado información sobre lascuatro mujeres asesinadas.

De acuerdo con la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), Rubén y las cuatro chicas recibieron un disparo en la cabeza —a manera de tiro de gracia— con una pistola calibre 9 milímetros. Los cuerpos presentaban golpes en el cuerpo. En una conferencia de prensa ofrecida este domingo, el titular de la PGJDF, Rodolfo Ríos, reveló las edades de las mujeres: 18, 29, 32 y 40 años, así como sus lugares de procedencia: Baja California, Chiapas, Estado de México y Colombia.

El funcionario señaló que la dependencia tiene abiertas “todas las líneas de investigación”, y agregó que una hipótesis es que el móvil de los crímenes haya sido el “robo”. Sin embargo, no ofreció más elementos, y omitió responder a los señalamientos hechos por los reporteros sobre la salida de Rubén de Veracruz debido al hostigamiento y la presión recibida en los recientes años.

Rodolfo Ríos también dijo que la identidad de las mujeres no sería revelada, y que ya se activaron protocolos por feminicidio.

Usuarios de redes sociales, activistas y organizaciones han difundido información sobre las mujeres, por lo que se sabe que una de ellas era Nadia Dominique Vera, amiga de Rubén Espinosa, antropóloga de 32 años que participó en el movimiento YoSoy132 Xalapa y en la ocupa Centro Cultural Casa Magnolia, conformada principalmente por estudiantes y egresados de la Universidad Veracruzana, de donde ella egresó.

“Ocuparon una casona vieja en la calle de Magnolia; daban talleres y promovían la cultura y el activismo hasta que fueron reprimidos también”, relató a Regeneración Radio una mujer que llegó a cruzarse con Nadia en Xalapa, y que pidió se omitiera su nombre. “Tenía un carácter fuerte. Así, entrona. Hasta la voz algo rasposa. Se hacía notar. Siempre estaba en las manifestaciones. Hacía mucho activismo político”, recuerda.

La fuente menciona que Nadia trabajó hace algunos años como bartender en el bar El Conspirador, ubicado en el Centro de Xalapa, un lugar en el que se llegaron a juntar “periodistas incómodos [para el gobierno del priista Javier Duarte], activistas y artistas”. En 2012 Nadia fue uno de los estudiantes golpeados por la policía durante una manifestación en el marco del desfile por el 20 de noviembre en Xalapa, según registró el portal de noticias Plumas Libres.
Una amiga de Nadia, de quien también se reserva el nombre, aseguró a Regeneración Radio que la activista y promotora cultural “Era de esas para las que la lucha social era un compromiso y que no tenía miedo de gritar las cosas que están mal en este estado”. Actualmente Nadia Vera trabajaba en la Muestra Internacional de Cine y Video Independiente, Oftálmica, y coordinaba el Festival Internacional de Artes Escénicas “Cuatro x Cuatro”.
Nadia se encontraba de visita en la Ciudad de México y dormía en el departamento 401 del edificio con el número 1909 de la calle Luz Saviñón, en la Colonia Narvarte, a donde Rubén llegó por la noche del jueves. Al día siguiente, a las 2:13 de la tarde, el fotorreportero envío un mensaje a un amigo fotógrafo, diciéndole que iba de salida “a la calle”. Sin embargo, horas después sus cuerpos aparecerían sin vida, con signos de tortura, y en el caso de Nadia de violación.

Otra de las mujeres sobre la que se conoce su identidad es Yesenia Quiroz Alfaro, de 18 años, originaria de Mexicali, Baja California, quien también vivía en el departamento y se dedicada al maquillaje, de acuerdo con la PGJDF.  En su perfil de Facebook Yesenia publicó que era estudiante de belleza en el Instituto de Diseño de Imagen Profesional, ubicado en Polanco.
Según datos de La Izquierda Diario México, Quiroz era prima de Daniel Ramos Alfaro, maestro desaparecido en Michoacán en 2013, en presencia de militares.
“Me siento muy enojado, esta noche fue encontrada muerta esta chica de nombre Yesenia Quiroz Alfaro, desnuda, amarrada, con signos de tortura y tiro de gracia. Fue encontrada en su departamento de la Colonia Narvarte, estudiaba algo, tenía aspiraciones y tal vez ideales, un mundo por delante…”, menciona el perfil de Facebook de Carlos Flores Guillén, uno de los primeros usuarios en difundir la fotografía de Yesenia el 1 de agosto.

Hasta el momento se desconocen los nombres de las otras dos mujeres. Una de ellas originaria de Colombia, de 29 años de edad, quien también vivía en el departamento, junto a Yesenia y Nadia. La cuarta mujer fue identificada como empleada doméstica, tenía 40 años de edad, provenía del Estado de México y fue localizada en el cuarto de baño del departamento.

III. Galería fotográfica: Justicia para Rubén (Somos el medio)