San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México
05 de marzo de 2015

Boletín de prensa No. 05

• Ineficiencia en la impartición de justicia motiva impunidad y violencia tolerada
• Desplazados, en su mayoría menores y mujeres, afrontan precarias condiciones alimentarias y de sanidad
• Autoridades de Yashtinin continúan con amenazas de agresión y muerte a familias desplazas de El Bosque

El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba) recibió información sobre el desplazamiento forzado de 300 personas, indígenas tseltales de la comunidad El Bosque, municipio de San Cristóbal de Las Casas. Los hechos ocurrieron el pasado 19 de febrero cuando un grupo de personas de la comunidad de Yashtinin, del mismo municipio, amenazaron de muerte y con quemar las viviendas de las familias hoy desplazadas en una de las montañas de la región.

Testimonios refieren que el pasado 18 de febrero de 2014, habitantes de la comunidad El Bosque detuvieron a Aurelio Pech Palé y Julio Pech Muñoz, originarios de Yashtinin, quienes habían talado una hectárea de árboles de manera ilegal en terrenos de la comunidad El Bosque. Por este hecho, estas dos personas fueron puestas a disposición del Ministerio Público de la Fiscalía de Justicia Zona Altos bajo la Averiguación Previa No. 64/AL54-T1/2015 por el delito de Ecocidio, y en su declaración manifestaron que habían talado la madera por órdenes del señor Santiago Ramiro Moshan Álvarez, Comisariado ejidal de Yashtinin.

Al día siguiente, 19 de febrero, cuatro peritos designados por la Fiscalía de Justicia realizaron una inspección judicial para verificar los daños ocasionados. Sin embargo alrededor de las 16:00 hrs. les fue informado que aproximadamente 150 personas de Yashtinin, habían llegado al centro de la comunidad El Bosque buscando a los peritos y a los pobladores para reclamar y tomar represalias por la detención de las dos personas que habían sido sorprendidas talando árboles el día anterior.

Acto seguido, tras una hora y media de espera para que volviera la comisión que estaba acompañando a los peritos, el grupo de Yashtinin comenzó a amenazar con detener a las mujeres, quemar las casas y matar a los pobladores que se encontraban escondidos en los alrededores de El Bosque. Estas amenazas motivaron que todas las personas se desplazaran a las montañas para resguardar su vida e integridad física. Finalmente los pobladores de Yashtinin, que llegaron a bordo de tres camiones de plataforma que usan para comercializar madera, se llevaron dos vehículos que estaban en la comunidad, una camioneta del personal de la Fiscalía y otra camioneta Nissan color azul propiedad de Juan Gómez Santiz; también se llevaron dos mochilas con documentación legal de identidad, propiedades y bienes del señor Braulio Navarro Escandón que le fueron arrebatas a su esposa mientras abandonaba su casa para resguardarse.

Al día siguiente, 20 de febrero, los habitantes de El Bosque fueron a la Fiscalía Zona Altos para sumar a la denuncia el robo de los dos vehículos, la documentación arrebatada y las amenazas de muerte y desalojo que motivaron el desplazamiento de la comunidad. Sin embargo, al preguntar por las dos personas detenidas el Ministerio Público les informó que ya habían sido liberadas por falta de pruebas, a la vez de comunicarles que el vehículo de los peritos ya les había sido entregado, no así el otro vehículo que había sido retenido, propiedad de un poblador de El Bosque.

Actualmente se cuenta con información referida en testimonios, que las personas de Yashtinin mantiene vigilados los caminos de acceso y el transporte público buscando detener a alguno de los  pobladores de El Bosque.

Ante estos hechos de impunidad y complicidad de las autoridades responsables de procuración e impartición de justicia en el estado de Chiapas, integrantes de este Centro de Derechos Humanos realizaron una visita para documentar las condiciones de las familias tseltales que, desde el 19 de febrero, se encuentran en las montañas de la región con temor a volver a su comunidad para evitar que el grupo de Yashtinin los agredan y cumplan sus amenazas de muerte.

De la documentación realizada, la mayor parte de personas desplazadas son niñas, niños y mujeres que ahora padecen enfermedades del estómago y vías respiratorias, además de precarias condiciones de alimentación y sanidad. Las edades fluctúan entre un menor de cuatro días de nacido hasta personas adultas mayores que afrontan condiciones del desplazamiento forzado bajo techos de plástico, expuestos al frío de la región, privadas de agua potable y carencia de alimentos.

Para este Centro de Derechos Humanos resulta grave y lamentable el hecho de que autoridades estatales se vean rebasadas para atender y dar curso legal a las demandas penales que la población interpone, al negarse a actuar en la investigación y no sancionar a los responsables de las agresiones y el desplazamiento forzado.

Exigimos al gobierno del estado de Chiapas adopte las medidas necesarias para garantizar los derechos humanos de las personas en situación de desplazamiento forzado, acorde con los Principios Rectores de los Desplazamientos Internos y demás tratados internacionales firmados y ratificados por el Estado mexicano; a que brinde atención integral en los aspectos de ayuda humanitaria y de reparación del daño e indemnización para resarcir los derechos privados y  el retorno con  seguridad de las familias desplazadas.

Recordamos que el 23 de febrero de 2014 denunciamos también el desplazamiento forzado de familias tojolabales del poblado Primero de Agosto[1], municipio de Las Margaritas, sin que hasta la fecha las autoridades estatales hayan podido resolver las condiciones para que retornen a su comunidad, situación que marca un patrón de violaciones a los derechos humanos no atendidos por el gobierno.

Antecedentes:

Desde el año 2003 la comunidad tseltal de El Bosque, marcó sus límites territoriales de la comunidad tsotsil de Yashtinin, ambos del municipio de San Cristóbal de Las Casas. Esta acción derivó en un juicio ante el Tribunal Unitario Agrario para definir la posesión legal y legítima de las tierras delimitadas. Desde entonces los tribunales y autoridades municipales han reconocido la titularidad de los pobladores de El Bosque, no obstante hasta la fecha el proceso continúa en su fase de amparo y las tierras en disputa legal.