Migración
Comunicado de NNIRR sobre la tragedia en el Centro de Detención del INM en Ciudad Juárez
El Paso, Texas – La Red Nacional por los Derechos de Inmigrantes y Refugiados (NNIRR) expresa su más sentido pésame a las familias de los 39 migrantes que perdieron la vida, y a los 29 migrantes que resultaron heridos en el incendio dentro de un centro de detención de migrantes en Ciudad Juárez el lunes por la noche.
En este momento trágico, alzamos la voz para condenar la naturaleza dual y desigual del régimen migratorio que facilita la movilidad de aquellas personas privilegiadas de poseer pasaportes y visas mientras, que controla y criminaliza la movilidad de las personas que escapan de la pobreza, los desastres sociales, climáticos y militares.
El Instituto Nacional de Migración de México (INM) confirmó que había un total de 68 hombres de Centro y Sud América en el centro de detención, lo que indica que todas las personas detenidas resultaron heridas o perecieron en el incendio.
Esta tragedia, como muchas otras que se han convertido en una característica normal del sistema norteamericano de inmigración, continuará ocurriendo si los gobiernos no están dispuestos a hacer la transición real hacia políticas centradas en los derechos para abordar la migración internacional. A pesar de las miles de muertes, de las desapariciones y de los abusos sistemáticos contra las personas documentadas, la administración Biden continúa promulgando políticas que restringen el acceso y la protección y externalizan las responsabilidades de protección a otros países. El desplazamiento internacional y la migración como supervivencia no debe criminalizar a las personas en situaciones migratorias de vulnerabilidad y nunca deben ser detenidas.
NNIRR se solidariza con las familias de las personas migrantes que fallecieron, las que resultaron heridas y las miles de personas que han desaparecido o que perdieron la vida a lo largo de la jornada migratoria. Las políticas de control, la militarización de las fronteras y la criminalización de las comunidades migrantes no pueden seguir siendo la respuesta a la migración. Instamos a la administración de Biden y a los gobiernos regionales a abordar la doble crisis humanitaria y de derechos humanos en la frontera.
NNIRR se une a las organizaciones aliadas para urgir a la administración y al congreso que salven vidas y generen las vías para una migración segura y regular y que tomen medidas que garanticen el pleno reconocimiento de los derechos humanos de las personas migrantes, su dignidad, su integridad y bienestar. ser, independientemente de su estatus migratorio.
Foto de portada: Reuters