Radio Zapatista
Chalchihuitán y Chenalhó: ¿Una masacre anunciada?
“Estamos sufriendo mucho. Se quemó mi frijol y mi maíz, se quemó mi casa, ahí se quedó mi marranito, mis pollos. Ahora ya no tengo nada. Estamos sufriendo con mis hijos, estamos sufriendo mucho, estamos sufriendo de hambre.”
Estas son algunas de las palabras de una mujer tsotsil entrevistada por el padre Marcelo Pérez Pérez, párroco de Simojovel, Chiapas, a finales de noviembre. Ella tiene dos hijos pequeños y ahora no tiene casa, duermen en la montaña, donde en la noche la temperatura baja a veces a menos de cero grados. No tienen cobijas, no tienen alimentos. Perdieron todo, no saben qué hacer y viven con el miedo constante por los disparos de armas de alto calibre que se escuchan todos los días y todas las noches.
Como ella, casi 6 mil indígenas tsotsiles (5023 de Chalchihuitán y 950 de Chenalhó) sobreviven en las montañas de Los Altos de Chiapas en condiciones de extrema precariedad. Entre ellos, miles de niños y 114 mujeres embarazadas, algunas a punto de parir.
Todos ellos fueron expulsados de sus tierras por un grupo armado que, según denuncias de los propios desplazados y diversas organizaciones, cuenta con el apoyo y está al servicio de Rosa Pérez, la presidenta municipal de Chenalhó por el Partido Verde Ecologista (PVEM), impuesta por la fuerza hace tres años tras lo que sus opositores aseguran que fue un fraude electoral.
La violencia y el desplazamiento forzado tienen que ver con un conflicto agrario creado por el gobierno federal hace 45 años, pero que se detona en tiempos recientes por la muerte de Samuel Pérez Luna, campesino de Chalchihuitán, asesinado con ocho balazos por el grupo armado de Chenalhó mientras trabajaba una de sus parcelas el 18 de octubre de este año. Semanas después, entre el 12 y 13 de noviembre, el grupo armado sitia a Chalchihuitán, cierra todas las entradas, corta con maquinaria pesada la carretera que da acceso a la cabecera municipal, quema casas y milpas, amenaza a la población de asesinarla, la aterroriza con disparos de armas largas y provoca el desplazamiento forzado de miles de indígenas que vivían en la zona limítrofe entre ambos municipios.
Hoy, a mes y medio del inicio del desplazamiento forzado, y pesar de los llamados de la población y de organizaciones nacionales e internacionales, el gobierno finge actuar y no hace nada por solucionar las causas fundamentales del conflicto, de las que él mismo es responsable.
Raíces del conflicto agrario – Responsabilidad del gobierno federal
Gobierno Indígena de Cohuirimpo denuncia intentos de despojo en territorio yoreme mayo
Desde mayo de 2017 los pobladores de Cohuirimpo, Sonora, advirtieron excavaciones con la intención de construir una laguna de oxidación, que afectaría gravemente su territorio, en violación tanto de la legislación mexicana como el Convenio 169 de la OIT y otros acuerdos internacionales. A pesar de los diálogos con Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y otras dependencias públicas, los intentos de despojo continúan.
A continuación, la denuncia del Gobierno Indígena de Cohuirimpo (Fuente: CNI).
(Ve también: El pueblo de Cohuirimpo denuncia intimidaciones del CDI.)
El Recodo, Pueblo de Cohuirimpo, Río Mayo, Sonora a 28 de noviembre de 2017.
MANIFIESTO
NO A LA LAGUNA DE OXIDACIÓN EN EL TERRITORIO YOREME MAYO DE COHUIRIMPO, SONORA
A finales del mes de mayo de este año los pobladores advirtieron excavaciones en el camino que une a las comunidades de Nachuquis y la Punta de la Laguna, no hubo anuncios, ni información por vía alguna, hasta que miembros del gobierno Tradicional, acompañados de un grupo de habitantes de la segunda comunidad ya mencionada, interrogaron a los encargados de las excavaciones, conociendo así, que se trataba de la introducción del drenaje. En ese momento, la obra se detuvo, solo para continuar 3 meses después, -en septiembre- ésta vez trazando la construcción de la laguna de oxidación en un predio de uso común de pastoreo perteneciente al territorio de Cohuirimpo y situado en las cercanías de la comunidad de Rancho Camargo, congregación integrante del citado Pueblo ancestral.