El 14 de Mayo, aproximadamente a las 8 de la noche fue puesto en libertad nuestro compañero Juan Pérez Álvarez quien se encontraba en huelga de hambre en el CERSS nº10 de Comitán de Domínguez dentro de la organización Viniketik en resistencia. El pasado 8 de mayo le había sido notificada su libertad depués de llevar más de 16 años recluido, ya que bajo los beneficios penitenciarios por trabajo, buena conducta, ect., su pena se encontraba saldada del delito por el cual había sido condenado. Horas después le es notificado que tiene otra acusación por un delito de secuestro que supuestamente cometió en el año 2.003, de este delito argumentan que desde el 2.018 se había girado una orden de aprehensión pero que no se pudo notificar por desconocimiento de su paradero. Poco después es trasladado al Ministerio Público para tomarle declaración. Todo esto 16 años después de ese supuesto delito. Ante esta disparatada situación, Juan decide lanzarse a huelga de hambre aún siendo diábetico y representando esto una grave situación de riesgo a su salud y a su vida. Por falta de elementos, finalmente el 14 de mayo le vuelven a dictaminar la libertad a nuestro compañero, pero todavía el Ministerio Público puede apelar esta decisión y por ello le piden que se presente dentro de 20 días para ver si tiene que volver a ser encarcelado. Juan argumenta que fue detenido sin orden de aprehensión mientras se trasladaba a su lugar de trabajo , obligado a firmar papeles en blanco y a autoincumparse bajo tortura de un delito que no cometió. Ante un careo la parte acusatoria dice no reconocerlo, y aún con todo eso fue sentenciado a 30 años. Han sido 16 años y dos meses de vida robada, largos años en los que nuestro compañero ha tenido que vivir separado de su familia, privado de ver crecer a sus hijos. Años de encierro y de injusticia que no hay manera de recuperar, graves daños a su vida y a su integridad imposibles de reparar. Su dignidad y su lucha ponen de manifiesto la crueldad de su historia, y de muchas más que se esconden detrás de los muros de la prisión. A día de hoy las acciones de lucha y la huelga de hambre en exigencia de justicia y libertad sigue en el CERSS nº10 de Comitán y en el CERSS nº5 de San Cristóbal de las Casas.