En una sesión ordinaria que se llevó a cabo en línea el 7 de octubre, el Congreso Nacional de Honduras modificó el código penal e incrementó las penas por el delito de usurpación de 4 a 6 años.
El delito de usurpación se puede definir constitucionalmente como apoderarse de una cosa inmueble con el objetivo de causar un perjuicio a otro, que ahora se extiende “se trate de bienes del Estado o destinados al servicio público como son el derecho de vía, carretera, calle, jardín, parque, área verde, paseo u otros lugares de uso o domino público o de cualquier otro bien raíz del Estado”, que se ve agravado cuando “cuando intervengan dos o más personas”. En reducidas palabras, se restringe el derecho a la manifestación social.
A menos de dos semanas de las elecciones populares que se celebrarán el 28 de noviembre (para elegir jefe de Estado, diputados, alcances y vicealcaldes), parece evidente que el Estado se está blindando para evitar movilizaciones como las que se observaron en 2017, cuando hubo acusaciones de elecciones fraudulentas. Si antes el gobierno fue capaz de reprimir a los manifestantes violentamente, ahora se coloca en una posición donde la brutalidad ispo facta es únicamente la antesala de una posible condena de cárcel por ejercer el derecho a manifestarse.
Al deslegitimizar el derecho a las protestas se intenta infundir miedo para la ciudadanía en general, pero sobre todo es una amenaza contra los campesinos, pueblos indígenas, pueblos negros, activistas y víctimas de delitos que encuentran en la manifestación su arma más efectiva para defenderse no sólo de sus agresores, sino del mismo gobierno que se niega a hacerles justicia o a veces es el propio victimario.
Justamente el delito por usurpación ha sido el pretexto predilecto para cometer injusticias en contra de las minorías y organizaciones civiles. En marzo de este año, las lideresas de la Organización Fraternal Negra Hondureña (OFRANEH), Marianela Mejía Solórzano y Jennifer Mejía Solórzano, fueron interceptadas por la policía nacional acusadas del delito de usurpación, sin siquiera especificarles las características de los cargos que se les imputaban (a quien o en donde fue el daño).
Estas privaciones de la libertad sucedieron justamente un día antes de que la Corte Interamericana de Derechos Humanos diera seguimiento a una sentencia que tenía como responsable al Estado por violar el derecho de propiedad colectiva de la comunidad Garífuna. Finalmente fue la difusión internacional del caso lo que ayudó a la liberación de las mujeres.
En tanto, el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) se ha manifestado a través de su cuenta de Twitter que este hecho “es una acción para arremeter en contra de las luchas emblemáticas que lideran los pueblos originarios por la defensa de los territorios”.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) externaliza igualmente una enorme preocupación por los posibles actos de criminalización que se orquestaran si esta reforma no es discutida “en condiciones y tiempos que permitan el debate y el escrutinio público, instando a que se reconsideren estas normas”.
Por su parte la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras ha lanzado un comunicado para hacer un llamado a la comunidad internacional para enfocar su atención en lo que acontecerá en el país centroamericano en las próximas semanas.
Entre otras alarmantes reformas se encuentra el hecho de que la lucha por la corrupción se ha entorpecido deliberadamente, dado que a partir de ahora se limita el acceso a información de casos de tal índole.
En este video de 49 minutos, el Grupo de Trabajo “Cuerpos, Territorios, Resistencias” aborda sentipensadamente, de mano de liderezas y pueblos en resistencia, los despojos y las luchas por la vida que se dan en diferentes geografías, tiempos y modos. De esta forma se suman a la Travesía por la Vida que los pueblos zapatistas y el Congreso Nacional Indígena, así como mujeres indígenas y afrodescentientes a la vez que diversidades sexo-genéricas, dan en estos momentos de crisis pandémica y colapso civilizatorio.
Escucha en este video las voces y análisis de mujeres mayas de Chiapas, Guatemala y Yucatán, así como de mujeres mapuches del Wallmapu y arahuacas de la Sierra Nevada de Santa Marta. A la vez, conoce los aportes de las y los trabajadores de las ciencias sociales que co-laboran con ellas.
Este 12 de octubre decimos SÍ a la VIDA, NO a los proyectos de muerte. Conoce cuáles son esos proyectos de muerte en los diferentes territorios-cuerpos-tierra.
Un grupo de mujeres jóvenes se manifestó en la explanada del Templo de Santo Domingo, en la capital de Oaxaca, para exigir justicia para Fanny Guadalupe, de 16 años de edad. “Desde nuestra digna rabia nos unimos al llamado de exigencia de justicia por el feminicidio de Fanny Guadalupe, mujer indígena ayuuk”, gritaron desde las escaleras de la explanada, “así como un alto a la ola de violencia feminicida que azota nuestro estado”.
La muerte de Fanny es investigada bajo protocolo de feminicidio por la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) desde el 29 de septiembre de este año, luego de que activistas exigieron se investigara como feminicidio y no como suicidio.
Los hechos sucedieron el 26 de septiembre de 2021, en la comunidad de El Porvenir, perteneciente al municipio de San Juan Cotzocón, en la zona Mixe de Oaxaca. Sin embargo, denuncian que casi un mes antes Fanny Guadalupe López Nolasco había denunciado ante la FGEO violencia de género, amenazas y abuso por parte de un agente municipal de su localidad.
Las mujeres reunidas en la explanada explicaron que poco antes de su muerte, “tras la denuncia presentada, Fanny Guadalupe sufrió hostigamiento y acoso para que se desistiera del proceso legal que había iniciado, temiendo por su integridad y su vida”. Algo similar está sufriendo ahora su familia por denunciar su muerte: “desde la muerte de Fanny se han acrecentado los actos de hostilidad contra su familia”, denuncian las jóvenes.
También se manifestaron por el reciente “hallazgo de una mujer de 27 años y una menor de un año en un camino de terracería entre Nazareno, Etla y Alemán, Zautla, con lo que se registran 558 feminicidios en lo que va del actual sexenio del gobernador Alejando Murat Hinojosa”.
Desde el 1ro de diciembre de 2016, día en que Alejandro Murat tomó protesta como gobernador de Oaxaca, la Plataforma de Violencia Feminicida en Oaxaca ha documentado 3,030 agresiones contra mujeres en el estado, de las cuales 558 son feminicidios.
Al final, las manifestantes conmemoraron a Angélica Flores Villa, María del Sol Cruz Jarquín, Fanny Guadalupe López Nolasco y “todas aquellas que nos han arrebatado” con una ofrenda de velas y consignas hechas con gis de colores en el suelo. “Hoy las nombramos y exigimos justicia”, concluyeron.
La delegación aérea La Extemporánea llegó a Europa unos días después del regreso a México del Escuadrón 421. Antes de dividirse en grupos para recorrer todos los territorios de Europa que fueron invitados a visitar, participaron en encuentros con varios movimientos, organizaciones e internacionalistas en la capital austriaca, así como en diversas protestas. Su llegada estuvo marcada por el secuestro de dos compas zapatistas de la Junta de Buen Gobierno en Patria Nueva, Chiapas, un territorio al borde de la guerra civil, donde las comunidades zapatistas de raíces mayas se enfrentan a un número creciente de agresiones por parte de grupos paramilitares y narcotraficantes.
En plena Europa Central, el 14 de septiembre de 2021, un centenar de mujeres, hombres y niños zapatistas aterrizaron en Viena, Austria, la sexta ciudad más poblada de la Unión Europea, cerca de las fronteras con Hungría, República Checa y Eslovaquia. Organizados, con pasaportes, vacunas, protocolos sanitarios, cuarentena, documentación completa y boletos en mano, los compas zapatistas lograron romper el racismo transatlántico que intentó todo para impedir este viaje. El racismo de un México que considera a sus pueblos originarios “extemporáneos” (en el sentido de “inoportuno, inconveniente”, de “uno que no pertenece a estos tiempos”) y el racismo de la Fortaleza Europa que, escudándose en las normas sanitarias, no considera que cientos de reuniones con cientos de organizaciones, pueblos y movimientos en todo el continente sean un caso de fuerza mayor para conceder la entrada de esta delegación de 177 zapatistas.
En el aeropuerto de Viena, decenas de colectivos vieneses y de toda Europa -o Slumil K’ajxemk’op (“Tierra Insumisa” en lengua maya), como la rebautizó al continente el Escuadrón 421 a su llegada a Vigo el 22 de junio-, esperaban ansiosos al primer grupo de La Extemporánea. La delegación aérea cruzó las puertas de llegadas alrededor del mediodía, entre aplausos y cánticos de “¡Zapata vive, la lucha sigue!”, “EZLN”, “Los pueblos unidos jamás serán vencidos” y canciones revolucionarias en varios idiomas.
Fotos de Isabel Mateos
En las afueras del aeropuerto de Viena, la delegación zapatista fue recibida con mucha emoción y cálidas palabras por mujeres y migrantes austriacos que les dieron la bienvenida “a su casa” en alemán y español. Sin quitarse las mochilas, el Subcomandante Insurgente Moisés tomó el micrófono para dirigirse a sus anfitriones en Europa y hablar de la defensa de la naturaleza y la Madre Tierra. “La naturaleza perecerá. Esto es lo que hemos venido a deciros. ¿No lo creéis? Lo veréis”, advirtió. “Su nombre ya lo conocemos: es el capitalismo. Es el capitalismo el que está destruyendo la vida y la naturaleza”. Con camisa azul, gorra, visera de protección sanitaria y el rostro cubierto sólo por una máscara, prescindiendo por primera vez del pañuelo rojo y el pasamontañas, el Subcomandante Insurgente Moisés fue aplaudido durante su discurso de 13 minutos.
“Nosotros, los zapatistas, estamos aquí gracias a nuestros compas que cayeron en el levantamiento de 1994 cuando salimos a luchar contra el mal gobierno (…) Estamos aquí gracias a los compas que cayeron resistiendo y rebelándose. Nuestra rebeldía, nuestra resistencia, es que queremos gobernarnos como pueblos. (…) No queremos matar, no queremos morir. El problema es que no nos dan la oportunidad de hacerlo como nosotros, como hombres y mujeres, creemos que debe ser. Y es lo que llevamos haciendo desde hace 28 años: no disparamos, no matamos y no queremos morir. Queremos la Vida”, afirma el portavoz del EZLN.
Fotos de Amehd Coca e Isabel Mateos
Bajo un sol sorprendentemente fuerte para esta época del año en esta geografía, las mujeres mayas se protegieron del intenso calor con carpetas llenas de documentos, prueba de su lucha por entrar en Europa. Tras el discurso, se refugiaron a la sombra de un edificio y descansaron mientras los grupos se organizaban para llevar a las compas a sus alojamientos en distintos barrios de Viena, hasta donde se desplazaron en transporte público.
La Fuerza Aérea Zapatista aterrizó en una tierra insumisa cuya historia de dolor y resistencia va más allá de los valses y los palacios rococó a las orillas del río Danubio, el más grande de Europa después del Volga. Ricardo Loewe, del Comité de Solidaridad México-Salzburgo, explicó a los medios de comunicación independientes que “junto con Polonia y Hungría, Austria es un país del antiguo imperio de los Habsburgo que hoy lleva la bandera del racismo de Europa; es más que triste, es indignante, enfurece, porque aquí hay dramáticas reminiscencias del fascismo que todavía se sienten. Y, sin embargo, estamos recibiendo a la delegación zapatista; no es casualidad que vengan a Viena, donde hay muchos grupos que tienen gran simpatía por el zapatismo.”
Aparte de la Cripta Imperial, donde los turistas pueden visitar la tumba de Maximiliano, archiduque de Viena y emperador del Sacro Imperio Romano Germánico de 1493 a 1519, el Museo Etnográfico exhibe su eurocentrismo y su narrativa colonial “con el Penacho de Moctezuma que parece un pollo muerto, tumbado, porque se está deshaciendo”. Las palabras de Loewe nos recuerdan también el pasado de la “Viena roja”, anterior a la dictadura fascista de Dolfus, así como el marxismo austriaco cristalizado, por ejemplo, en la plaza Friedrich Engels y el complejo multifamiliar Karl-Marx-Hof. Una compa austriaca, de 80 años, recuerda también los movimientos feminista y queer, el movimiento okupa y la cultura de la lucha anarcocomunista, “pequeña pero bien estructurada, no partidista”.
Algunas personas esperaban en el aeropuerto la recepción del segundo grupo, que se esperaba para la tarde del 14 de septiembre. Aunque este grupo no consiguió embarcar en Madrid en el vuelo de conexión a Viena, el acto cultural se celebró como estaba previsto. Además de la música, la poesía, la percusión y los cánticos colectivos, también hubo intervenciones en varios idiomas que expresaron no sólo la revuelta por el hecho de que el segundo grupo no haya podido embarcar en Madrid, sino también la alegría por la esperada llegada. Un compa migrante exclamó con vehemencia: “Si los zapatistas están atrapados en Madrid, en el corazón del colonialismo, entonces debemos ir por ellos, ¡aunque tengamos que ir caminando!”
No fue necesario porque, un día después, también alrededor del mediodía, más de 70 zapatistas aterrizaron y formaron alegremente una fila que salió del aeropuerto de la capital austriaca en otra mañana soleada. A pocos metros de la puerta de las llegadas internacionales, un grupo de anfitriones migrantes tomó la palabra:
Querido Compas, los migrantes de lengua española y portuguesa en la geografía de Viena te saludan y te dan la bienvenida. Somos un colectivo que se ha reunido para conocer y acompañar a ustedes, la delegación zapatista. Queremos que la voz de los migrantes se escuche en los diferentes frentes de la organización de la Jornada por la Vida en Austria. Nos preguntamos: “¿Cómo nos hubiera gustado ser recibidos al llegar del otro lado del océano?”. Y la respuesta fue que alguien nos hubiera dicho las siguientes palabras: ‘nosotros, los precarios, nosotros, los racializados, nosotros que luchamos por una voz migrante, nosotros que hablamos alemán con acento en la geografía llamada Viena, ¡os saludamos y os damos la bienvenida! Nuestra casa es vuestra casa”.
El equipo de streaming se instaló durante dos días consecutivos frente a las puertas de las llegadas internacionales bajo la mirada incrédula de los viajeros y de los policías del aeropuerto. Con varias cámaras, el equipo pudo documentar las emociones de grandes decenas de activistas y simpatizantes del movimiento zapatista al ver las columnas rebeldes, mientras ambos grupos se fotografiaban y filmaban con sus teléfonos. Antes de acompañar a los grupos en los transportes públicos hasta sus alojamientos, los medios independientes realizaron pequeñas entrevistas a los presentes y documentaron los actos de recepción y las actividades culturales y artísticas que marcaron la historia de una invasión muy diferente. Documentaron el reparto por parte del Subcomandante Insurgente Moisés de los billetes de tren a los recién llegados que, a pesar de los largos viajes, se mostraban sonrientes y alegres por pisar por primera vez, tras una larga espera, el “verde pasto” europeo.
Fotos de Lorena Salamanca, Isabel Mateos, Amehd Coca y Lukas David Beck
En ambos actos, estuvieron presentes colectivos y organizaciones internacionalistas, feministas, antifascistas y anticapitalistas de Austria: Zapalotta, Compas Zapatistas Viena, Asamblea Latinoamericana-Viena, Comité de Solidaridad México-Salzburgo, Ni Una Menos Austria, EKH, Frauenzentrum, KomIntern-y de toda Slumil K’ajxemk’op-Colectivo Acción Solidaria, Mujeres y Disidencias de la Sexta en la Otra Europa y Abya Yala-RRR, RAZB (Bélgica), Café Libertad Kollektiv de Hamburgo, y asambleas zapatistas de Berlín, Frankfurt y Wendland (Alemania), LAPAZ (Italia), Yretiemble, ¡Compas Arriba! , Medios de Comunicación Independientes con la Gira, y personas de diferentes organizaciones implicadas en la organización de esta Jornada por la Vida desde Portugal hasta Finlandia, desde el Estado español hasta Eslovenia y Grecia.
Mujeres zapatistas participan en protesta contra los feminicidios en Austria
Foto de Guilhotina.info
A poco más de 48 horas de haber llegado a la capital austriaca, un gran contingente de mujeres mayas zapatistas se unió a una protesta a última hora del jueves 16 de septiembre para exigir justicia por Shukri y Fadumo, dos mujeres de origen somalí asesinadas dos días antes en Viena, y que este doble feminicidio no quede impune. Esta protesta fue convocada por Ni Una Menos-Austria, que agradeció “a los compas zapatistas su apoyo en nuestra concentración y marcha en este triste día”.
Frente a la monumental iglesia de Karlsplatz, las compas escucharon, aplaudieron y filmaron diferentes intervenciones de mujeres somalíes y de otros países de Europa y África que se expresaron en sus diferentes idiomas, especialmente en somalí, árabe, español y alemán austriaco. Cientos de jóvenes feministas e internacionalistas portaban banderas y carteles contra el patriarcado y el racismo. Gritaron consignas y corearon una versión en alemán de “Canción sin miedo” de Vivir Quintana, antes de encender en silencio las luces de sus teléfonos al caer la noche.
Tras escuchar historias de sufrimiento en varios idiomas, los miembros de La Extemporánea continuaron el recorrido de la marcha de mujeres austriacas y migrantes por las grandes calles rodeadas de imponentes edificios.
Foto de Guilhotina.info
El tañido de la campana de la iglesia de Karlsplatz no pudo ahogar las voces fuertes ni los silencios de las mujeres que expresaban su dolor y que los teléfonos de los compas zapatistas y la cámara de video del compa de Tercios Compas intentaron captar. Asignado con el deber de documentación audiovisual de la delegación del EZLN, fue el único hombre zapatista presente en la concentración y la marcha nocturna. Las vibraciones antipatriarcales, antirracistas e internacionalistas de la primera marcha europea de la Sección Miliciana de Ixchel-Ramona pudieron percibirse en el streaming realizado por los medios de comunicación independientes desde Karlsplatz en Viena, con comentarios en español de los anfitriones de Zapalotta y del Comité de Solidaridad México-Salzburgo, explicando el contexto y el significado de las protestas contra los 21 feminicidios ocurridos en Austria en 2021.
Sin duda, mucha emoción marcará el recuerdo de las compas milicianas, vestidas con camisetas rosas, vaqueros y botas de cuero, dispuestas a caminar y a escuchar, intercambiar y aprender de las luchas de cientos de colectivos insumisos europeos que las invitaron y exigen incansablemente “¡Ni una menos!”, “¡Alerta Feminista!” y “¡Detengan los feminicidios!”
Fotos de Lorena Salamanca
Llegada de La Extemporánea marcada por el secuestro de dos zapatistas en Chiapas
El 17 de septiembre, medio centenar de zapatistas, mujeres y hombres, reforzaron el contingente internacional reunido frente a la embajada de México, en el lujoso centro histórico de la antigua capital del Imperio de los Habsburgo. Esta protesta encendió una campaña internacional para denunciar el paramilitarismo y exigir el regreso con vida de José Antonio Sánchez Juárez y Sebastián Núñez Pérez, compas de la Junta de Buen Gobierno “Nuevo Amanecer en Resistencia y Rebeldía por la Vida y la Humanidad” del Caracol 10 “Floreciendo la Semilla Rebelde”, en Chiapas
Fueron secuestrados el 11 de septiembre en la comunidad 7 de Febrero, municipio de Ocosingo, Chiapas. Esta comunidad es la sede de ORCAO, organización paramilitar que desde hace varios meses viene perpetrando una serie de acciones criminales contra las Bases de Apoyo del EZLN en la comunidad autónoma de Moisés-Gandhi.
Fotos de Guilhotina.info and Pozol.org
Frente al edificio monumental de la diplomacia mexicana, decenas de activistas de toda Europa denunciaron con el megáfono, pancartas y carteles, la implicación del gobierno en la violencia antizapatista. Las intervenciones en español, alemán, griego, francés, portugués y gallego, así como la reciente declaración de las organizaciones que acogen al EZLN y al CNI, denunciaron la complicidad tanto del gobierno federal de López Obrador como de Rutilio Escandón, gobernador de Chiapas, en los ataques paramilitares realizados no sólo contra los campesinos mayas zapatistas, sino también contra los defensores de los derechos humanos.
Al final de la manifestación, el Subcomandante Moisés, vestido de negro y cerrando la columna zapatista, se dirigió al edificio diplomático y, a modo de despedida, levantó dos veces el dedo medio, momento que captamos en video y que publicamos aquí con su consentimiento.
Los zapatistas visitan el campamento contra un megaproyecto en Viena
En la mañana del sábado 18 de septiembre, una delegación zapatista tuvo por primera vez un encuentro público con un movimiento de resistencia que, desde abajo y a la izquierda, se enfrenta al mal gobierno en esta Tierra Insumisa. El escenario es un campamento en Lobau, en las afueras de Viena, con una impresionante infraestructura -cocina, cafetería, puntos de información y una treintena de tiendas de campaña-, montado para proteger un raro ecosistema en lo que es uno de los grandes centros de la Hidra capitalista que, en su afán de crecimiento desenfrenado e infinito, se traga montañas, pastizales, ríos y humedales para sustituirlos por metrópolis, desiertos de concreto, agroindustrias, minas y un sinfín de megaproyectos que siembran la muerte donde antes había vida.
Alrededor de 60 zapatistas, hombres y mujeres, se reunieron con jóvenes ambientalistas que, con amplio apoyo de la población local, resisten desde agosto contra los planes del gobierno austriaco de construir una autopista que atraviese la mayor reserva natural de la ciudad, zona protegida desde 1978 y parte del Parque Nacional Danubio-Auen desde 1996.
En un primer momento de intercambio, los participantes en la acampada contaron a los zapatistas la historia del lugar, el proyecto y por qué defienden el que es el único paisaje de este tipo que permanece ecológicamente intacto no sólo en la ciudad, sino en toda Europa Central. Esta zona alberga 800 especies de plantas, así como 100 especies de aves nidificantes, más de 50 especies de mamíferos, reptiles y anfibios y 67 especies de peces.
Entre intervenciones y preguntas de ambas partes, se discutieron las estrategias de resistencia para defender el territorio: se habló de pacifismo, desobediencia civil, ocupación y violencia. Los activistas locales explicaron que todo el movimiento en Lobau es pacífico y que ésta es una condición fundamental para mantener el amplio apoyo de la comunidad. Aunque la mayoría de los acampados son jóvenes, los vecinos han colaborado y ayudado, permitiendo, por ejemplo, que los jóvenes acampados se duchen en sus casas.
Incluso se ha llegado a un acuerdo con la policía para que, si la protesta se mantiene sin violencia, avisen a los ocupantes con un día de antelación en caso de orden de desalojo.
Si esto resulta extraño para alguien que viene de una geografía del sur de Europa y, a diario, ve imágenes de policías reprimiendo y agrediendo violentamente a una población indefensa, no podemos imaginar lo extraño que suena para alguien de México, donde la violencia es una certeza cotidiana, y la policía una fuerza más de represión y violencia gratuita.
“¿Y si no se van?”, preguntan los zapatistas.
Explican que, si se enfrentan a una orden de desalojo y no se van por su cuenta, serían detenidos durante 24 horas y luego liberados, sin ninguna acusación. Lo que significa que “no pasa nada y volvemos a acampar”.
“Es como si yo te dijera ‘te voy a dar una paliza’, y tú me dijeras ‘no, no lo hagas’, y entonces no lo hago”, comenta SubMoy, sorprendido, preguntando entonces si este tipo de acciones tienen algún resultado. Lo cierto es que, desde el inicio de las ocupaciones en Lobau, las obras de construcción de la autopista y sus accesos están paradas.
Después de una buena hora en la que ambos movimientos compartieron sobre sí mismos e intercambiaron ideas e impresiones sobre la resistencia, los zapatistas recibieron un recorrido por el sitio de acampada. Luego partieron hacia un segundo sitio ocupado, a 15 minutos a pie, el patio de construcción con todas las máquinas. Allí, los zapatistas y los demás presentes se dividieron en dos grupos y conocieron los dos campamentos instalados allí, más pequeños que el principal.
Fue en uno de esos campamentos donde todos se reagruparon frente a una torre, construida por los manifestantes, para grabar un video en apoyo a la resistencia de Lobau.
Hasta que, de repente, empezó a llover a cántaros y las decenas de personas tuvieron que refugiarse bajo una larga lona, lo que no impidió que la mayoría se empapara.
En ese momento, la mayoría de los compas zapatistas decidieron regresar a sus alojamientos. Un grupo de mujeres zapatistas alojadas en el Frauenzentrum (Centro de Mujeres) decidieron quedarse en Lobau mientras esperaban la comida a la que habían sido invitadas.
En esa hora de espera, hubo otro momento de discusión e intercambio, esta vez más informal, en el que los compas compartieron la historia del movimiento zapatista desde 1986, la preparación para el levantamiento de 1994 y el papel de sus promotores de salud y educación, poniendo especial énfasis en la participación de las mujeres en todo el proceso. También abordaron el tema del consumo de alcohol en las comunidades, los problemas que surgieron de él tanto en el ámbito militar como en el familiar, y cómo, como comunidades y pueblos, decidieron enfrentarlo.
Un compa menciona que “Los zapatistas vienen a dar esperanza y a inspirarnos con todo lo que ya pudieron construir en Chiapas. Son una verdadera biblioteca ambulante”. Para concluir, los zapatistas subrayan que por el momento son un movimiento pacífico y que se resisten a tomar las armas a pesar de las provocaciones.
La zona de Lobau, en el Parque Nacional Danubio-Auen, es lo que queda de un enorme ecosistema húmedo que se extendía por las márgenes del Danubio, destruido en el proceso de movimiento de tierras para la expansión e industrialización de la capital austriaca a finales del siglo XIX.
Fue en este lugar tan especial donde se produjo el primero de los encuentros entre zapatistas y movimientos y resistencias en la Europa Insumisa, objetivo principal de este primer capítulo del Viaje por la Vida. Fue también en este Parque Nacional donde, en 1984, tuvo lugar uno de los principales procesos de resistencia de la historia reciente de Austria. El plan de construcción de una central hidroeléctrica en el límite oriental del parque desencadenó una oleada de protestas que culminó, en diciembre de ese año, con la ocupación del lugar que las máquinas estaban dispuestas a destruir. El 8 de diciembre, 8.000 personas se manifestaron en el lugar y algunos cientos iniciaron una ocupación permanente del espacio, obligando a detener la construcción.
El 19 de diciembre, un contingente de 800 policías expulsó violentamente a los 3000 manifestantes que permanecían en el lugar. Los enfrentamientos se saldaron con dos docenas de heridos y una ola de indignación en Viena, donde 40 mil personas se manifestaron esa misma noche. Temiendo una revuelta, el gobierno anunció la suspensión del proyecto un par de días después y, a principios de enero, el Tribunal Supremo anunció la prohibición de cualquier construcción en la zona. La ocupación terminó y, meses después, el proyecto se abandonó definitivamente.
Esta lucha se recuerda como uno de los momentos más importantes del proceso democrático en Austria, y fue la primera vez que la desobediencia civil fue ampliamente aceptada como estrategia para hacer valer la voluntad del pueblo frente a las intenciones del mal gobierno. Desde ese año, casi todos los megaproyectos en Austria se han enfrentado a algún grado de resistencia popular. En 1996, la construcción de una central hidroeléctrica en Lambach se retrasó debido a una ocupación y, en 2003, un proyecto similar para la zona de Lobau también se detuvo tras una ocupación simbólica del lugar.
El CNI y el FPDTA llegan a Austria y se unen al EZLN para la manifestación de la Huelga Climática en Viena
Los grupos de Escucha y Habla que conforman La Extemporánea comenzaron, el 22 de septiembre, a viajar a las geografías que constituyen la primera zona de este Viaje por la Vida -Alemania, Escandinavia, Europa del Este y los Balcanes-. A última hora de la tarde de ese mismo día, aterrizó en Viena la delegación de 16 personas del Congreso Nacional Indígena (CNI-CIG) y del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua (FPDTA) que acompañan al EZLN en este Viaje.
Dos días después, la delegación del CNI y el FPDTA participaron, junto con decenas de zapatistas presentes en la ciudad, en la manifestación de la Huelga Climática. Veinte mil personas salieron a las calles de la capital austriaca exigiendo un cambio urgente para enfrentar la crisis climática.
Foto de Guilhotina.info
La manifestación partió hacia la 1 de la tarde de Praterstern y cruzó las grandes avenidas de Viena en una caminata de 4 km llena de consignas en inglés y alemán que exigían justicia climática, una acción urgente para combatir el calentamiento global, un cambio de sistema y en apoyo de la resistencia en Lobau, en las afueras de la ciudad, contra la construcción de una autopista en su reserva natural más importante. Terminó en el Parlamento austriaco, donde los últimos manifestantes llegaron dos horas y media después del inicio de la marcha.
Tras los discursos de la organización y la actuación de una banda local, los compas subieron al escenario y compartieron el mensaje de los indígenas en México con miles de personas, frente a ese mismo majestuoso balcón desde el que Hitler habló en 1938, siendo aplaudido por cientos de miles de personas y consumando la anexión de este territorio por la Alemania nazi.
Esta vez el mensaje fue muy diferente. Primero habló Libertad, una compa zapatista que contó la historia de una mujer.
No importa el color de su piel, porque tiene todos los colores. No importa su lengua, porque escucha todas las lenguas. No importa su raza ni su cultura, porque en ella habitan todas las formas de vida. No importa su estatura, porque es grande y, sin embargo, cabe en una sola mano. Cada día y cada hora, esa mujer es violada, golpeada, herida, violada, engañada, despreciada. Un macho ejerce su poder sobre ella, cada día y cada hora. Ella viene a nosotros, nos muestra sus heridas, sus dolores, su pena, y nosotros sólo le damos palabras de consuelo, de lástima, o la ignoramos. Tal vez, como una limosna, le damos algo para aliviar sus heridas, pero el macho continúa con su violencia.
Nosotros y tú sabemos cómo terminará esto. Será asesinada y, con su muerte, todo morirá. Podemos seguir dándole palabras de esperanza y remedios para sus dolencias. O podemos decirle la verdad: la única medicina que puede tratarla y curarla por completo es enfrentar y destruir al que la viola. Y también podemos, en consecuencia, unirnos a ella y luchar a su lado.
Nosotros, los pueblos zapatistas, llamamos a esta mujer “Madre Tierra”. Para los machistas que la oprimen y humillan, usen el nombre, la cara y la forma que quieran. Nosotros, los pueblos zapatistas, llamamos a este macho asesino con un nombre: capitalismo.
Y llegamos a esta geografía para preguntarle: ¿vamos a seguir pensando que con pomadas y tranquilizantes podemos resolver los golpes de hoy, aunque sabemos que mañana la herida será más grande y profunda? ¿O lucharemos a su lado?
Nosotros, las comunidades zapatistas, decidimos luchar junto a ella, en su nombre y por ella.
Libertad termina su discurso entre aplausos y cánticos de: “Ah, Anti, Anticapitalistas”. A continuación, Isabel, una mujer otomí residente en la Ciudad de México que forma parte del CNI, toma la palabra y se dirige a la multitud, primero en otomí y luego en español:
Hoy estamos viendo que los que vivimos en la ciudad no tenemos derecho a ella, y los que vivimos en nuestros pueblos estamos desposeídos. Hay muchas empresas que nos han estado engañando sobre el progreso. Tenemos la termoeléctrica, el tren maya, los parques eólicos, los padres de Ayotzinapa, y los agroquímicos que aquí en los países desarrollados ya no se venden y se llevan a nuestros pueblos para matarnos a todos.
Hoy estamos aquí los pueblos del otro lado del mundo para caminar juntos. Por eso nosotros, el Concejo Indígena de Gobierno, estamos caminando al lado de nuestras hermanas y hermanos zapatistas. Esta es una Jornada por la Vida porque, si la Madre Tierra perece, si la matamos todos juntos, pereceremos con ella, moriremos con ella. Por eso le decimos al capitalismo y al patriarcado que lo único que queremos es nuestra autonomía, nuestros pueblos, nuestras aguas libres de contaminación, nuestros ríos. No queremos más capitalismo, no queremos más empresas. Y también decimos que no olvidamos y no nos rendimos y hasta la victoria… ¡Zapata vive!
Y el público responde: “¡La lucha sigue!”
Fotos de Guilhotina.info
A diferencia del discurso de Hitler, estos dos discursos no serán cubiertos por los medios de comunicación, no aparecerán en los libros de historia, pero cumplen la función de, a través de la escucha y la palabra, sembrar esa resistencia y rebeldía, que es el objetivo principal de esta Jornada por la Vida.
Estas dos mujeres indígenas, con sus palabras, conmovieron a miles de personas, la mayoría de ellas jóvenes y niños. Muchos son conscientes de los problemas del mundo, críticos con el sistema capitalista y ansiosos por ver un cambio que sabemos urgente y necesario pero que, en estas tierras europeas, aún no sabemos cómo construir. En el corazón de la bestia, estas dos mujeres indígenas sembraron en la nueva generación la esperanza y la certeza de que la única forma de evitar el colapso colectivo al que se dirige la humanidad -y el planeta- es organizarse y construir esa solidaridad entre los pueblos que no mira fronteras ni distancias, y caminar juntos hacia ese “mundo donde caben muchos mundos”.
Un poco después de estos discursos, mientras comenzaba otro acto musical, los compas zapatistas, el CNI y el FPDTA, junto con otras personas y colectivos solidarios, caminaron hacia la Embajada de México. Como parte de una acción convocada por el EZLN en su último pronunciamiento, “Chiapas al borde de la guerra civil”, que se realizó ese día en más de cincuenta ciudades del mundo, la manifestación exigió el cese inmediato de los ataques a las comunidades zapatistas de Chiapas, que han sido objeto de reiteradas agresiones y provocaciones por parte de grupos paramilitares con el apoyo, cuando no la colaboración directa, de los gobiernos federal y de Chiapas.
Durante estos días, a puerta cerrada, las zapatistas, el CNI y el FPDTA celebraron otros múltiples encuentros de Escucha y Habla con mujeres palestinas, con mujeres de habla hispana y portuguesa, y con otras comunidades y luchas en Viena, para discutir los asuntos que traen estos pueblos indígenas a Europa en esta Travesia por la Vida.
Partes de este artículo se basaron en notas escritas colectivamente por los medios independientes presentes en Viena, publicadas originalmente en español y portugués en Radio Zapatista, Pozol.org y Guilhotina.info.
En portada: Claudia Uruchurtu, activista de Nochixtlán, es víctima de desaparición forzada desde el 26 de marzo de 2021. Foto cortesía de la familia Uruchurtu.
“¿Es un huesito de pollo o de mano?”, pregunta una de las mujeres que busca a sus familiares desaparecidos en el basurero de residuos orgánicos en los Valles Centrales de Oaxaca.
–¿A ver? –responde su compañera, y suelta la pala con que cava.
Ambas analizan el hueso detenidamente, lo comparan con su propia mano.
–No –concluye la segunda– es de pollo. Déjalo allá para que las demás lo vean.
Es 13 de agosto de 2021. Ocho mujeres y dos hombres, integrantes de la asociación civil Sabuesos Guerreras, participan en las primeras jornadas de búsqueda de la recién creada Comisión Estatal de Búsqueda de Personas del Estado de Oaxaca.
Van vestidas para aguantar el sol, con gorras y botas. También llevan cubrebocas y alcohol para evitar un posible contagio de covid-19. Llegaron de madrugada en tres camionetas cargadas con picos, palas y varillas que ellas mismas consiguieron.
En este tercer día de la jornada de búsqueda se les notificó que no contarían con la custodia de la Guardia Nacional, que las había escoltado por barrancas y ríos durante las dos jornadas previas. Tampoco acudirá la titular de la Comisión Estatal de Búsqueda. La expedición queda, hoy, completamente en manos de los y las rastreadoras:madres, hermanas, esposas e hijas que se han visto orilladas a buscar por cuenta propia a los seres que aman.
“¿A quién buscan esta ocasión?”, les preguntó la prensa unos días antes, cuando anunciaron la jornada.
“A todos”, respondieron ellas, inmediatamente.
Jornada de búsqueda y aprendizaje de técnicas para rastrear fosas clandestinas, realizada por familiares de personas desaparecidas en el estado de Oaxaca, el 13 de agosto de 2021. Foto: Rafael E. Lozano / UIP.
Claudia Uruchurtu
El caso más reciente de desaparición forzada por motivos políticos en Oaxaca es el de Claudia Uruchurtu Cruz, una mujer de 48 años de edad. Antes de ser desaparecida en Nochixtlán, su lugar de residencia en la región mixteca del estado, documentó y denunció la corrupción en el gobierno municipal encabezado por la alcaldesa Lizbeth Victoria Huerta.
La noche del 26 de marzo de 2021 Claudia participaba en una manifestación en la plaza central de Asunción Nochixtlán. Al terminar, hombres desconocidos la forzaron a subir a una camioneta roja. Desde entonces está desaparecida.
Elizabeth Uruchurtu Cruz explica que su hermana Claudia había documentado el desvío y malversación de fondos del gobierno municipal, durante la administración de Lizbeth Huerta, quien en 2021 hacía campaña para reelegirse en el cargo.
Claudia había regresado a Oaxaca luego de visitar a sus hermanas en el Reino Unido en 2018. Volvió con el propósito de votar por Andrés Manuel López Obrador en las elecciones presidenciales.
“Le dijimos: ‘Quédate, ya va a empezar el verano’ –recuerda Elizabeth–. Nos dijo que no, que ella se tenía que regresar porque López Obrador estaba de candidato y tenía que ir a votar, porque una vez que llegara López Obrador las cosas iban a cambiar”.
Antes de ser víctima de desaparición forzada, Claudia Uruchurtu documentó irregularidades en el manejo de recursos públicos en el municipio de Nochixtlán, durante la administración de la alcaldesa Lizbeth Huerta, del partido Morena. Foto: Cortesía de la familia Uruchurtu.
Ese mismo día, primero de julio de 2018, Lizbeth Victoria Huerta fue electa presidenta municipal de Asunción Nochixtlán a través de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena, PT y PES). Era la primera vez que una mujer ocupaba la presidencia municipal y la primera vez que Nochixtlán era gobernado por un partido diferente al PRI.
Pero poco cambió. Cuenta Elizabeth: “Cuando empieza la nueva administración y Claudia se da cuenta de que, en lugar de que estén invirtiendo el dinero en mejorar el pueblo se lo están gastando en pendejadas, ahí empieza la denuncia…”
Claudia detectó que, con la llegada de Victoria Huerta al gobierno municipal, sus familiares estrenaron motocicletas, otros recibieron cargos públicos y la misma alcaldesa adquirió un reloj valuado en más de 160 mil pesos, entre otros lujos.
Claudia acudió a los tres niveles de gobierno para denunciar los hechos: presentó quejas ante el Órgano Interno de Control del Ayuntamiento de Nochixtlán, la Secretaría de la Contraloría y Transparencia Gubernamental, el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de Oaxaca, al Congreso del Estado de Oaxaca, la Secretaría General de Gobierno de Oaxaca, la Secretaría de Gobernación federal y la Fiscalía General de la República, entre otras instancias. Nadie le respondió satisfactoriamente.
“Claudia nunca caracterizó su trabajo como activismo porque, en su pensar, toda la gente debería de estar luchando por sus derechos. Ella, simplemente, lo veía como su deber, como algo que cada uno debería estar haciendo para mejorar las condiciones en las que vives”, cuenta su hermana.
“Yo creo que, ahí, lo que pasó es que empezaron a ponerle presión al municipio por la cuestión de las auditorías. Llegó un momento dado en que las autoridades municipales decidieron que Claudia era muy incómoda”.
Las labores de búsqueda realizadas por la Guardia Nacional tras la privación de la libertad y desaparición forzada de Claudia Uruchurtu se realizaron al azar, sin responder a una investigación científica, denunció su hermana Elizabeth. Foto: Cortesía de la familia Uruchurtu.
La alcaldesa Lizbeth Victoria Huerta fue detenida el 7 de mayo de 2021, junto con dos de sus colaboradores cercanos, acusados de la desaparición forzada de Claudia Uruchurtu. Otras dos personas fueron detenidas el 22 de julio del mismo año. Todas están en espera de sentencia. La audiencia de defensa está prevista para el próximo miércoles 13 de octubre.
Elizabeth advierte que esto es inédito, en comparación con la impunidad que prevalece en el resto de los casos de desaparición en Oaxaca. Respecto del caso se han pronunciado la Oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), el Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU, Amnistía Internacional y parlamentarios del Reino Unido.
“Hemos tenido un acceso a las autoridades que no toda la gente tiene. Es, realmente, lamentable que tenga que ser así”.
Pese a todo, Claudia Uruchurtu sigue desaparecida.
El tamaño de la impunidad
Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, desde 1964 han sido reportadas como desaparecidas o no localizadas 3,629 personas en Oaxaca. El 90% de los registros corresponden a los últimos 10 años, durante los gobiernos de Gabino Cué Monteagudo (2010-2016) y Alejandro Murat Hinojosa (que empezó en 2016 y termina en 2022).
El mismo registro indica que 362 personas aún permanecen en calidad de desaparecidas o no localizadas. Sin embargo, diversas organizaciones no gubernamentales coinciden en que la cifra real es mayor. La Plataforma de Violencia Feminicida en Oaxaca, por ejemplo, ha documentado la desaparición de 1,415 mujeres sólo en lo que va del gobierno de Alejando Murat.
Por otra parte, en las últimas dos décadas (entre el 2000 y el 30 de julio de 2021) sólo 35% de las personas que fueron reportadas como desaparecidas, no localizadas y localizadas, cuentan con una investigación abierta en la Fiscalía General del Estado de Oaxaca, según informó la propia institución.
Al mismo tiempo, el Poder Judicial del Estado informó que en los últimos 21 años únicamente ha iniciado 34 juicios por desaparición, pero no ha emitido una sola sentencia condenatoria.
Aprender a rastrear
Sabuesos Guerreras AC es una de las diversas organizaciones que buscan personas desaparecidas en México. La fundó en Sinaloa María Isabel Cruz Bernal, madre de Yosimar García Cruz, desaparecido en Culiacán el 26 de enero de 2017.
En 2020 la organización llegó a Oaxaca. Seis de sus integrantes viajaron al estado del sureste para capacitar a otras madres buscadoras.
“Llevamos, hasta la fecha –con cuatro años y seis meses desde su creación–, más de 180 cuerpos localizados. Tenemos más de 18 mil fragmentos calcinados y seguimos encontrando”, explica María Isabel.
Con el apoyo de las madres de Sinaloa, las buscadoras oaxaqueñas crearon Extensión Oaxaca. Marta Pablo Cruz es su representante. Ella busca a su hijo Jassiel Vladimir Florean Pablo, desaparecido el 21 de mayo de 2019 en Tlapa de Comonfort, Guerrero.
A María Isabel y a Marta las une haber nacido en Oaxaca y la convicción de buscar a sus hijos desaparecidos. Como ellas, sus demás compañeras buscan a familiares, cargan con ellas sus fotos y los nombran todo el tiempo: Félix Arturo Ayala Tamayo, José Manuel Macías Mendoza, Ángela Sánchez Cruz, Miguel Enrique Cárdenas Echavarría, Luis Alberto Hernández López.
La alianza entre las familias sinaloenses y oaxaqueñas se comenzó a cocinar a principios de 2020, durante un taller en el que compartieron experiencias de búsqueda, y se formalizó en septiembre del mismo año, cuando nombraron a Marta coordinadora general en Oaxaca.
Marta cuenta que las Sabuesos Guerreras de Sinaloa les enseñaron a enfrentar a servidores públicos, a solicitar las carpetas de investigación de su hijos –que no les habían entregado–, a exigir avances y a presentar quejas en las comisiones estatal y nacional de derechos humanos.
Con apoyo de familias de buscadoras de Sinaloa, las madres y padres de personas desaparecidas en Oaxaca aprenden técnicas de rastreo, identificación de fosas y anatomía humana. Foto: Rafael E. Lozano / UIP.
Se acompañan a las fiscalías cuando es posible y se esperan hasta que salgan, aunque llegue la noche. “Esas muestras de cariño, esas muestras de apoyo… Tengo más con esta gente que no es mi familia… Son hermanas del mismo dolor que estamos pasando porque hay esposas, hay madres, hay hermanas que buscan”, dice Marta.
Apenas llegan a la entrada del basurero de residuos orgánicos, las rastreadoras de Sinaloa descargan picos, palas, cernidores, varillas, radios y silbatos. También traen un dron para exploración aérea.
Reconocen el terreno y se dividen: un grupo irá al área de restos animales, llena de huesos; y otro grupo se irá más al fondo, a las pilas hediondas de basura orgánica, que desprenden vapor por la putrefacción.
Enseñan a las oaxaqueñas a identificar posibles fosas: zonas en las que la vegetación cambia o se hunde un poco, debido a las excavaciones. Les muestran cómo limpiar el área, cómo excavar, cómo usar y oler la varilla con la que punzan la tierra para diferenciar los olores del subsuelo e identificar el singular tufo de la descomposición humana.
Les comparten, con rabia y cariño, los conocimientos y la experiencia que han acumulado luego de tantos años de buscar “tesoros”, como llaman a sus seres queridos.
–¿No se entristecen cuando, después de una búsqueda, no encuentran nada? –les pregunta uno de los hombres oaxaqueños que está aprendiendo a oler la tierra para rastrear fosas, sorprendido de que las sinaloenses no suelten la herramienta ni en sus momentos de descanso.
–Nos entristecemos cuando encontramos algo –responde una de ellas, sin detenerse.
Lo que no hace el Estado
A raíz de la desaparición forzada de Claudia Uruchurtu, las autoridades federales realizaron diligencias de búsqueda, para las cuales solicitaron la colaboración de la Fiscalía estatal y de la Secretaría de Gobierno de Oaxaca.
El personal enviado para apoyar en un primer momento, recuerda Elizabeth, hermana de Claudia, fueron las secretarias administrativas del gobierno estatal. “Entonces, ahí, vienen todas las secretarias de la oficina a hacer labor de campo”.
Es desesperante, lamenta Elizabeth, que la búsqueda no se apoye en una la investigación judicial y científica, sino en acciones improvisadas: “Nos ha parecido muy triste el desperdicio de recursos. Si no hay líneas de búsqueda que salgan de la investigación, ¿a qué chingados vienen (a buscar)? Es como si pusieran un dedo al aire y dijeran ‘ahí vamos a buscar’, y entonces ahí viene la Guardia Nacional, y ahí vienen los dos binomios caninos que hay en el Estado, y ahí viene todo mundo”. Se trata, en suma, de una búsqueda a ciegas.
Esos recursos, en cambio, faltan ahí donde las búsquedas no cuentan con el interés de las autoridades, como es el caso de la jornada que realizan las Sabuesos Guerreras en el basurero orgánico.
Abrir paso a la esperanza
Al terminar el día las Sabuesas Guerreras han rastrillado la zona entera.
De los 3,629 reportes de personas desaparecidas y no localizadas registrados en Oaxaca desde 1964, el 90% ocurrieron en la última década, en los gobiernos de Gabino Cué y Alejandro Murat. Foto: Rafael E. Lozano / UIP.
“Parece que no logramos nada, pero hicimos un chingo”, dice una de ellas durante una reunión final en la entrada del basurero. Han pasado horas extenuantes de trabajo bajo el sol para abrir la tierra y darle paso a la esperanza con cada golpe de pala. En medio de la basura y la podredumbre reaccionan visiblemente nerviosas ante cada camioneta que se acerca y pasa de largo. No olvidan que buscar desaparecidos es una labor peligrosa, que es un trabajo que no les corresponde. Años y años de negligencia y desprecio gubernamental les ha dejado una convicción: “Si no los buscamos nosotras –dicen–, nadie lo va a hacer”.
La Convención Constitucional en Chile sigue avanzando rápidamente, tanto por la aprobación de su Reglamento interno de funcionamiento como por la votación sobre las comisiones temáticas, haciendo que la discusión que se tendrá sobre los contenidos de la nueva constitución se vuelva cada vez más cerca.
No obstante, más allá de esa discusión de fondo que se tendrán en las comisiones conformadas, como son las de Sistema Político, Principios Constitucionales, Forma de Estado, Derechos Fundamentales, Medio Ambiente, Sistema de Justicia y Sistema de Conocimientos, el debate sobre el cómo se escribirán aquellos nuevos artículos es crucial.
Lo planteo, ya que el tipo de lenguaje que se usará para redactar la nueva constitución, debiera estar situado desde una mirada inclusiva y transformadora, que visibilice a sectores que históricamente han sido negados por un constitucionalismo moderno, el cual se ha sostenido por sistemas patriarcales, eurocéntricos, capitalistas, racionalistas y antropocéntricos, que han usado la violencia física y simbólica para imponer un orden especifico.
De ahí que las constituciones que se han escrito antidemocráticamente en Chile, como son los casos de las de 1833, 1925 y 1980, hayan sido redactadas de manera racista, clasista y sexista, por un tipo de individuo (hombre, blanco, cuerdo, heterosexual y de clase alta). No es casualidad por tanto, que todas esas constituciones no hayan nombrado a las mujeres, LGTBQ+, locos, pueblos indígenas, afros, ecosistemas y otros animales.
Frente a esto, usar un lenguaje en la nueva constitución que plantee explícitamente a lo largo de todo el texto, expresiones y nociones como Madre Tierra, Ñuque Mapu, Sumak Kawsay, Pachamama,Küme Mognen, Todes, Nosotres, Neurodivergentes, Disidencias Sexuales, entre muchas otras, será un paso enorme para democratizar la forma como nos nombramos en esta nueva carta fundamental.
Se podrá decir, sobre todo desde los sectores más conservadores y negacionistas en Chile, que el lenguaje es neutro políticamente y que plantear algo así sería ir contra la RAE (Real Academia Española) y contra las bases mismas de la República de Chile, cuando justamente es eso lo que se trata. Es decir, despatriarcalizar, descolonizar y desantropocentrar el lenguaje, el cual evidentemente ha sido excluyente con amplios sectores existentes en el país, tanto humanos como no humanos.
En consecuencia, lo que se trata es de usar el lenguaje políticamente en la nueva constitución, para incorporar una amplia diversidad de seres y personas, más allá de lo que digan o no abogados constitucionalistas positivistas, a los cuales poco y nada les ha importado los planteamientos de movimientos sociales, como son los feministas, animalistas, socioambientales, indígenas, afro, migrantes, locos, al creer que las palabras son una mera representación de la realidad.
Por el contrario, como bien ha mostrado la sociolingüística, el lenguaje crea realidades, ya que son construcciones culturales, históricas y dinámicas, que lo que buscan es generar sentido de pertenencia y comunidad, por lo que es fundamental impulsar un lenguaje inclusivo y transformador para darle visibilidad en la nueva constitución, a quienes han quedado fuera por siglos.
Por lo mismo, se vuelve importante la reciente aprobación de un artículo en el reglamento sobre mecanismos de transversalización de parte de les constituyentes, en donde los enfoques de derechos humanos, género, inclusión, plurinacionalidad, socioecológico y descentralización, estarán presentes en la nueva carta magna, para evitar así que predominen tecnicismos jurídicos y economicistas, que solo benefician a las elites imperantes.
En definitiva, nos encontramos como país en un momento demasiado importante como para descuidar el uso del lenguaje en la nueva constitución, la cual si bien se vio fortalecida democráticamente, tanto con la elección paritaria de constituyentes como por los escaños reservados para los pueblos indígenas, es posible y deseable ir mucho más allá de eso.
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Communique from communities and collectives of Oaxaca denouncing the state-organized “Indigenous Encounters Canada-Oaxaca 2021,” and calling for the construction of affinity and reciprocity between Indigenous peoples of so-called Mexico and Canada through solidarity and resistance
To the Media
To the General Public
To our Brothers and Sisters of Turtle Island
Within the context of the “Indigenous Encounters Canada-Oaxaca 2021,” a celebration organized by the Canadian and Mexican states taking place from September 20 to October 8 in Oaxaca City, we have decided share some relevant information that has been omitted and misrepresented in the official announcements and press conferences for the event.
What they call the “state of Oaxaca” is one of the most culturally and linguistically diverse places in the world, thanks to the ongoing Indigenous resistance against extermination, which began with European expansion into the territory now known as Mexico. It is this very diversity which the governments of Oaxaca and Canada figure as the principal motivation to carry out this event.
However, what they call diversity is much closer to Mexican nationalism, constructed with the blood and bones of our ancestors. The reason for this is that the governments see the Indigenous and the Afro as a profitable cultural expression, as a discourse, as an image, etc.
We, those who for generations have resisted their necropolitics, racism, classism, and sexism, not only refuse to nurture that nationalism, but we also repudiate the commodification of our life forms. We want all those who prefer to ignore reality to know that for generations we have witnessed the expulsion and marginalization of Indigenous people in the territory invaded and now called Oaxaca. We have been subject to the dispossession of our lands, which we watch with sadness and rage as they are converted into objects of financial speculation.
If we have anything to share with our brothers and sisters from Turtle Island, it is this history of pain and colonial violence. They too were dispossessed, massacred, and forced to live on reservations. What they call “Canada” hides under its soil thousands of bodies of Indigenous children, men and women, assassinated for the misfortune of not being white and not thinking like whites. Although the state tries to hide it, this violence endures and manifests in different ways.
This shared history of dispossession invites us on this occasion to say in unison, to those whose laws justify or facilitate Indigenous extermination, to those who confuse our history of resistance with folklore, and to those who hide their business interests behind the expression of “cultural fraternity,” WE WILL NOT ALLOW IT, NEITHER MATERIALLY NOR SYMBOLICALLY.
WE DENOUNCE that these same people have been the masterminds of the worst environmental and social tragedies that we have seen in recent times. An example of which is the installation of mines for mass mineral extraction, through the exploration and implementation of mining concessions and mining projects.
En portada: Manifestación realizada en Oaxaca por comunidades indígenas en contra de la minera Cuzcatlán, filial de la canadiense Fortuna Silver Mines. Foto: Santiago Navarro F.
A unos días de concluir el evento denominado ‘Encuentros Indígenas Canadá-Oaxaca 2021’ organizado por el gobierno de México y Canadá entre el 20 de septiembre y el 8 de octubre de 2021, diversos pueblos, colectivos y comunidades indígenas de Oaxaca se deslindaron y denunciaron una “simulación de hermandad” con la que se pretende “desviar nuestra atención de los problemas estructurales y las situaciones de despojo y saqueo de las que pretenden hacernos objeto”.
En un posicionamiento firmado el 29 de septiembre por autoridades de San Pedro Apóstol y San Pedro Mártir, Ocotlán y de Capulálpam de Méndez, así como por las comunidades El Rebollero, Río Minas y Los Arquitos, San Pablo Cuatro Venados, Zaachila, se advierte que “el Estado Canadiense y el Estado Mexicano, a través del gobierno de Oaxaca, pretenden lavar sus rostros en lo que respecta a su relación colonial con las comunidades indígenas y afros”.
Comuneros, comuneras y pobladores hacen un recuento del dolor y la violencia colonial que han sufrido los pueblos y comunidades indígenas de ambos países, desde el reciente descubrimiento en Canadá de fosas con cientos de cuerpos de infantes en antiguos internados para niñas y niños indígenas, hasta las concesiones mineras en México que han sido otorgadas a empresas canadienses en tierras comunales sin el consentimiento de los pueblos, las cuales han causado conflictos socioambientales que han provocado el asesinato de defensores y la contaminación impune de ríos y suelos.
“Según datos del Observatorio de Conflictos Mineros de América Latina, en México, el 50% de los conflictos mineros está relacionado directamente con empresas canadienses; de acuerdo con información contenida en el Sistema Integral Sobre Economía Minera, de las 242 empresas extranjeras con proyectos mineros en el país, 160 corresponden a Canadá; además de que el 74% de las concesiones para explotación mineras son otorgadas a empresas de dicho país” recalcan.
El comunicado también es firmado por el Comité Ixtepecano en Defensa de la Vida y el Territorio, el Espacio de Mujeres en Defensa de la Madre Tierra “Las Meñas”, el Colectivo Matza, San Miguel Chimalapas y la Articulación Por la Vida, Contra la Minería en el Valle de Ocotlán.
En el documento, los colectivos y las comunidades que han vivido en carne propia el embate de megaproyectos de capital extranjero con la anuencia de las autoridades locales, advierten que no le van a permitir ni material ni simbólicamente el avance “a quienes con sus leyes justifican o facilitan el exterminio indígena (…) a quienes confunden nuestra historia de resistencia con folklor y a quienes ocultan sus negocios tras la expresión “hermandad cultural”.
Los “Encuentros Indígenas Canadá-Oaxaca 2021” surgieron “gracias a la invitación del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, al Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, a sumarse a las diferentes conmemoraciones que México celebra este 2021”. Así lo establecen en su página web. “En ese contexto, se decidió hermanar al pueblo de Canadá con el pueblo oaxaqueño”.
Mientras tanto, las comunidades señalan que se encuentran en alerta máxima ante este acto de simulación de hermandad. “Sabemos que sus intereses son y serán siempre otros. Los lazos de afinidad y reciprocidad con lxs indígenas de Isla Tortuga los tejeremos nosotrxs, con el objetivo de extender nuestra resistencia, hasta que las praderas, montañas, ríos y animales vuelvan a ser libres, hasta que la resistencia nos permita vivir con dignidad, y no a la sombra de un deber ser impuesto y construido por aquellos que duplican sus inversiones gracias a nuestro exterminio”, finaliza el documento de denuncia.
La ineficacia y simulación de las acciones del Estado mexicano sigue favoreciendo un ambiente de violencia y terror contra las comunidades mayas tsotsiles de Aldama y Santa Marta.
La implementación de las Medidas Cautelares 284-18 dadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a favor de familias Tsotsiles de las comunidades de Aldama, no impidió la muerte de Domingo Santíz Jiménez.
El Frayba solicita a la CIDH pida a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH), adopte Medidas Provisionales frente a la extrema gravedad, urgencia y perjuicio irreparable que viven las comunidades.
El 28 de marzo de 2018 las familias tsotsiles de las comunidades de Aldama presentaron ante la CIDH solicitud de Medidas Cautelares (MC), frente al riesgo a la vida e integridad física y psicológica por los constantes ataques de arma de fuego que estaban – y continúan – recibiendo por parte de grupos armados de corte paramilitar con acción en el municipio de Chenalhó, Chiapas, que ocasiona desplazamiento de personas.
Tres años después de la solicitud y de múltiples comunicaciones enviadas por parte del Frayba y del Estado mexicano, el día 23 de abril de 2021 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) bajo la resolución 35/2021 decidió otorgar medidas, registradas con en numero MC-284-18.
A partir de la adopción de las MC, hoy en día suman un total de 121 agresiones por disparos de arma de fuego que han ocasionado la pérdida de la vida de 7 personas[1] y por lo menos han resultado heridas otras 22[2] como resultado del ataque con armas de fuego del grupo armado ilegal que actúa desde Chenalhó, Chiapas.
La más reciente violencia y terror sufrida por los pobladores de las comunidades de Aldama fue perpetrada el 15 de septiembre de 2021; narran los 115 comuneros del lugar que Domingo Sántiz Jiménez, acompañado de otras personas, venían de regreso del municipio de San Andrés Larráinzar, lugar en el que habían realizado compras de mercancías para surtir su tienda abordo de un vehículo de redilas marca Nissan, para posteriormente dirigirse a la comunidad de Xuxch’en municipio de Aldama. Mientras iban pasando el camino, a la altura de la Escuela de Tabak los empezaron a agredir con disparos de armas de fuego en ráfagas, desde los puntos Volcán, Telemax y Tok’oy del sector Santa Martha. Al llegar a la altura del puente Tabak, el vehículo fue alcanzado del lado del copiloto por las múltiples disparos de armas de fuego, aunado a esto por el mal tiempo y los trabajos que se está realizando para la construcción de los 2 km de pavimentación y la destrucción y construcción de un nuevo puente de tabak, por el lodazal que existe, al momento de cruzar el río del puente Tabak, el vehículo quedó atascado en medio del río, los tripulantes descienden del vehículo para resguardarse de los disparos de armas de fuego dirigidos hacia ellos. Al mismo tiempo que el nivel del agua del río subía y por su fuerza arrastro al vehículo unos metros logrando algunos de sus tripulantes salvar su vida con ayuda de habitantes del lugar. Domingo Santíz Jiménez no corrió con la misma suerte, ya que por querer rescatar a sus compañeros fue alcanzado por una bala, cayó y fue arrastrado por el río. Su cuerpo fue localizado el 16 de septiembre del 2021.
Las agresiones armadas han ocasionado desplazamientos forzados de por lo menos 4399, quienes se refugian en las montañas para proteger su vida y que permanecen en un constante estado de angustia y alerta por las agresiones que les hace desplazarse de manera intermitente, sin que se les haya reparado los daños y perjuicios individuales, y comunitarios. Todos estos hechos han sido informados oportunamente a la CIDH.
Por estos hechos y frente a la extrema Gravedad, Urgencia y Perjuicio irreparable que viven los beneficiarios de las comunidades de Aldama, el Frayba ha solicitado a la CIDH pida a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, adopte Medidas Provisionales a favor de las 12 comunidades beneficiarias de Aldama dentro de la Medida Cautelar 284-18, a fin de garantizar su vida, su seguridad e integridad física.
La Corte IDH en el caso Asunto del Internado Judicial Capital El Rodeo I y El Rodeo II ha establecido: Que en asuntos como el presente la extrema gravedad de la amenaza se debe evaluar en función del contexto específico, siendo evidente que si derechos fundamentales como la vida y la integridad física se encuentran sujetos a dicho tipo de amenaza se está, en principio, ante un contexto que amerita considerar medidas provisionales.[3]
Así también en el caso de Juan Almonte Herrera refiere que: La información presentada por la Comisión demuestra, prima facie, que las personas indicadas en su solicitud de medidas provisionales y en la Resolución del Presidente de 24 de marzo de 2010 se encontrarían en una situación de extrema gravedad y urgencia, puesto que sus vidas e integridad personal estarían amenazadas y en grave riesgo.[4]
Desde este Centro de Derechos Humanos no nos cansaremos de denunciar a los gobiernos del estado de Chiapas y Federal que no cumplen con respetar, proteger, y garantizar los derechos humanos y la consideración más elemental que los pueblos de Aldama y Santa Martha vivan en paz.
[1] Manuel Gómez Pérez, Alonso Gómez Hernández, Isidro Gómez Hernández y/o José Antonio Gómez Hernández (11 años de edad), Martín Ruiz Sántiz, Filiberto Pérez Pérez, Pedro Lunes Pérez y Domingo Sántiz Jiménez.
[2] Carlos Sántiz Ruiz, José Hernández Sántiz, Juan de Jesús Sántiz Pérez, Emiliano Sántiz Hernández, Alonso “N” Jiménez Gómez, Ignacio Pérez Jiménez, Pascual Pérez Pérez, Apolonia Santiz López, Marcos Gómez López, Rosa Hernández Ruiz, Santos Armando Ruiz Hernández (3 años de edad en el momento de los hechos), José Guadalupe Sántiz Jimenez, Juan Lunes Sántiz, María Luciana Lunes Sántiz (13 años en el momento de los hechos), Mario Pérez Gutiérrez, Juan Pérez Gutiérrez. Andrés Ruiz Sántiz, Raymundo Pérez Sántiz, Armando Pérez Sántiz, Artemio Pérez Pérez, María Isabel Hernández (Religiosa de la iglesia católica, cuando iba a entregar ayuda humanitaria), y Andrés Jiménez Pérez de las comunidades de Aldama, Chiapas.
[3] Asunto del Internado Judicial Capital El Rodeo I y El Rodeo II respecto de Venezuela, resolución de la Corte de 8 de febrero de 2008.
[4] Asunto Juan Almonte Herrera y otros respecto de República Dominicana, resolución de la Corte de 25 de mayo de 2010.
Jueves 23 de septiembre 17hrs MX, conversatorio + estreno en línea del documental “Thelma Cabrera: curar el territorio”. Las mujeres indígenas que recuperamos las tierras robadas, somos alternativas vivas a la #CrisisClimática.
Rumbo al 2do Encuentro Global de Mujeres Indígenas #CuraDaTerra 2021. En vivo por facebook.com/crfger