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(Español) El lavado verde de Iberdrola desde el Istmo hasta Glasgow
Por Samantha Demby
Más de una docena de rostros blancos recorren sin esfuerzo las laderas escocesas en bicicletas eléctricas de alta gama. Sus uniformes, una paleta de tonos verdes, llevan el logotipo del gigante energético español Iberdrola, junto al emblema de la Conferencia de las Naciones Unidas, comúnmente conocida como la COP, que se celebra actualmente en Glasgow (Reino Unido) hasta el 12 de noviembre.
Cada año, Iberdrola organiza la rodada a la COP para “concienciar en la lucha contra el cambio climático”, según la propia ONU. Este mes la empresa multinacional anuncia en tuits decorados con corazones verdes y emojis de bicicletas: “Lideramos la lucha contra la #EmergenciaClimática con las #renovables, pero no es suficiente: ¡TODOS debemos acelerar la transición energética!”. Con el objetivo declarado de hacerlo, Iberdrola patrocina a sus empleados de alto nivel, junto con representantes de la ONU y otras instituciones ambientales influyentes, para que acudan a la COP 26 en bicicleta eléctrica para entregar un “manifiesto para la acción climática”.
Iberdrola proyecta una imagen de empresa líder en energías renovables. La asociación de la empresa con la ONU contribuye en gran medida a esta imagen.
La filial de Iberdrola, Scottish Power, es un “socio principal” de la COP 26. Durante la conferencia, el Grupo Iberdrola organiza eventos con actores clave en la toma de decisiones en torno a la crisis climática, como el gobierno británico, el país anfitrión de la conferencia este año. Además, el “Auditorio Scottish Power” es la sede de “sesiones interactivas” organizadas con instituciones como el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD). Finalmente, Iberdrola cuenta con una caseta en la “Zona Verde” de la COP 26, donde visibiliza su propio “liderazgo climático”.
Lejos de la pompa verde de Glasgow, en México, casi el 90% de la energía que produce Iberdrola no es renovable. De un total de 10.511 megavatios generados por la empresa en el país, 9.146 proceden de 12 centrales de ciclo combinado, mientras 4 plantas de cogeneración producen otros 202 MW. En cuanto a las energía renovables, Iberdrola – que ha jugado un papel destacado en el sector energético del país desde los 1990 – opera 7 parques eólicos con una capacidad total de 693 MW, además de 3 parques fotovoltaicos capaces de producir 470 MW, lo que supone una producción total de 1.163 MW en energías renovables.
Defensoras indígenas denuncian a Iberdrola
De los 7 parques eólicos de la empresa en México, 4 se encuentran en la región del Istmo de Tehuantepec en Oaxaca, donde el aprovechamiento de las intensas ráfagas de viento por empresas como Iberdrola ha provocado intensos conflictos territoriales.
El 4 de noviembre, un par de días antes de que la rodada de Iberdrola partiera de Edimburgo hacia Glasgow, defensoras y defensores indígenas se concentraron frente a las oficinas de la empresa en la Ciudad de México para denunciar “el engaño, el despojo, la destrucción y la contaminación” ocasionados por Iberdrola.
En el marco del día de acción contra el lavado verde, convocado por el Encuentro de los Pueblos que se celebra paralelamente a la COP 26 en Glasgow, integrantes de la Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (APIDTT), la Coordinadora de Pueblos y Organizaciones del Oriente del Estado de México en Defensa de la Tierra, el Agua y su Cultura y del Congreso Nacional Indígena precisaron en un comunicado que las “Soluciones Basadas en la Naturaleza”, así como “las supuestas ‘energías limpias’ como los parques eólicos y fotovoltaicos también despojan, contaminan y matan la tierra fértil, lo mismo que explotan y desplazan a los pueblos.”
Usando un megáfono para tapar el sonido de los coches que pasaban por la autopista, una miembra de la APIDTT leyó una carta que se entregó a los directores de la empresa, en la que se expresa “nuestra indignación porque empresas trasnacionales como Iberdrola y su filial Scottish Power, responsables de tales delitos en contra de los pueblos en México…sean los socios principales de la Organización de las Naciones Unidas-ONU en la Cumbre Climática Mundial COP 26.”
En el Istmo, Iberdrola actualmente opera 4 parques eólicos: Bii Nee Stipa en el Espinal; Dos Arbolitos en Juchitán; PEM (Parques Ecológicos de México), antes conocido como La Ventosa, en Juchitán; y el Parque Eólico La Venta III en Santo Domingo Ingenio. Desde que Iberdrola comenzó a operar en la región, ha sido acusada de corrupción, falta de transparencia y graves impactos ambientales y sociales.
Como documenta el investigador Luis Miguel Uharte Pozas: “En los proyectos eólicos que Iberdrola tiene en Oaxaca…los testimonios recogidos en el marco de nuestra investigación indican que Iberdrola sobornó a las autoridades municipales para que convencieran a los ejidatarios de alquilar sus tierras para instalar los molinos de la empresa.”
Uharte Pozas agrega: “La Asamblea de los Pueblos del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (2011) tiene registradas diversas denuncias contra ‘el representante en la región de Iberdrola’ por haber intimidado y amedrentado a los ejidatarios del parque La Venta III. En el parque de La Ventosa, también gestionado por Iberdrola, el proceso fue muy similar, según testimonios de habitantes del municipio.”
Los impactos ambientales de los parques eólicos están bien documentados. Un ejemplo que atañe a Iberdrola es la muerte de unas 3 mil 900 aves y 6 mil murciélagos al año como consecuencia de la colisión con las turbinas del parque eólico La Venta II, en el que Iberdrola participó. Al mismo tiempo, en la COP 26 la multinacional promueve actos con su socio Birdlife International, una mega-asociación de grandes organizaciones de conversación dedicada a la protección de las aves.
A estas acusaciones se suma la evidencia de las puertas giratorias que han existido entre Iberdrola y el gobierno mexicano durante décadas, como documenta el informe “La insolación mexicana de Iberdrola” (2020). Por ejemplo, hasta 2015, el presidente de la filial mexicana de Iberdrola fue Herminio Blanco Mendoza, jefe negociador del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCAN) y ex-Secretario de Comercio y Fomento Industrial de México en el gobierno de Ernesto Zedillo (1994 – 2000). Entre 2016 y 2019, el ex presidente mexicano Felipe Calderón (2006 – 2012) – cuyo sexenio dio lugar a la adjudicación de varios contratos para Iberdrola – se desempeñó como consejero independiente de Avangrid, la filial estadounidense de la empresa.
COP 26: Plataforma para el lavado verde
Mientras la COP 26 llega a su fin este viernes, los activistas indígenas y medioambientales siguen denunciando que la conferencia es una plataforma para las estrategias de lavado verde de empresas contaminantes como Iberdrola.
Como resume la destacada activista climática Greta Thunberg: “Los líderes no se están quedando de brazos cruzados, sino que están creando activamente lagunas y configurando marcos para beneficiarse a sí mismos y seguir sacando provecho de este sistema destructivo”.
Las y los defensores del territorio tampoco se quedan de brazos cruzados. Más allá de manifestarse en contra de Iberdrola y sus socios en la ONU y en la COP, buscan generar salidas alternativas a la crisis climática. Como dicen los propios pueblos en su carta a los directores de Iberdrola, “soluciones reales y verdaderas (…) apegadas a la Naturaleza y en defensa de la Vida.”
(Español) Wixárika-Tepehuana: 8 años de gobierno autónomo
Por Renata Bessi
Municipio de Villa Guerrero, Jalisco, un estado al norte de México. Una zona alta, 2800 metros sobre el nivel del mar, cercada por bosques de pinos. Una zona baja, con selva mediana caducifolia, localizada al fondo del cañón de Bolaños. En estas localidades, donde impera una diversidad de climas y vegetación, viven desde hace siglos los pueblos Wixárika y Tepehuana, que hace ocho años consolidaron la Comunidad Autónoma Wixárika – Tepehuana de San Lorenzo de Azqueltán.
Son dos pueblos hermanados en una misma comunidad. Los Wixárikas están concentrados en la parte alta, principalmente en las localidades de San Antonio, Cerro del Medio, Los Carretones y Los Valles. Los Tepehuanas están principalmente pegados al rio Bolaños, en las localidades de Azqueltán, de Izolta, La Guacima.
Entre sus cultivos resalta la pitaya y el orégano en la parte baja, y los hongos comestibles en la parte alta, donde también nacen los manantiales que abastecen la comunidad. Además viven de la pesca que obtienen en el rio Bolaños.
Cada localidad se organiza por asambleas y posee un comisario que ejerce el gobierno local. Además existe un gobierno tradicional para toda la comunidad, con una asamblea general.
Justamente el 10 de noviembre la comunidad Wixárica-Tepehuana conmemora el hecho de haberse declarado formalmente una comunidad autónoma. En aquella ocasión, en 2014, el Congreso Nacional Indígena se dio cita en la comunidad y reconoció mediante un acta sus autoridades comunitarias, el gobernador tradicional, los jueces, la guardia comunitaria, su comandancia comunitaria y el comisariado agrario autónomo.
“Esto está conmemorando la comunidad en estos días, la consolidación de su autonomía como una institución comunitaria para la defensa del territorio”, explicó Cristian Chávez, integrante del equipo jurídico de la comunidad.
La comunidad tomó este fin de semana, del 5 a 7 de noviembre, para celebrar una amplia agenda conmemorativa. Entre las actividades estuvo la inauguración de la clínica autónoma de los pueblos, completamente gestionada por la comunidad, con la solidaridad de colectivos y organizaciones de muchas partes del mundo.
La ayuda no vino solamente de la donación de recursos económicos. Se conformó una brigada de salud multidisciplinaria en herbolaria, partería, en medicina alópata, para formar promotores de salud comunitarios, inspirados en las clínicas autónomas de las comunidades indígenas zapatistas. La clínica ya está lista y los promotores ya están listos para recibir la capacitación de la brigada.
Chávez puntualiza que en estos días no se realizaron solamente actividades conmemorativas, sino también una “asamblea profunda con sus deidades, con sus dioses, con la madre tierra para determinar los pasos que siguen, con la solidaridad de los colectivos y de las organizaciones que, no solamente se han identificado con nuestra lucha, la han apoyado determinantemente, entre ellos el Congreso Nacional Indígena y el EZLN”, dijo Chávez.
Agresiones y violencia
Por estas mismas fechas también fue el punto de cierre de la Campaña por la Justicia y el Territorio en Azqueltán, iniciada por la comunidad en abril de este año 2021.
Esta campaña se inició después de que la comunidad concluyera una serie de trabajos tradicionales sagrados en su territorio. Estos trabajos fueron hechos por la comunidad “por mandato de sus deidades en ceremonias tradicionales”, explica Chávez. “Se señalaba que era necesario reconocer las mojoneras antiguas de la comunidad. Las mojoneras son lugares sagrados donde se hace ceremonia de los varios pueblos de la región y que delimitan el territorio. En cada lugar, las cuatro esquinas de la comunidad y el centro, en cada lugar se hicieron sacrificios de animales”, cuenta.
“Hay personas con una economía pudiente que agarran tierras de manera ilegal y con violencia, como el cacique Fabio Flores Sánchez, que intentó asesinar a varias autoridades, que estuvieron al borde de la muerte. Los compañeros están vivos pero con muchas secuelas de estos ataques”, sostiene Chávez.
Ha habido impunidad. “Los jueces han respondido criminalizando la lucha de la comunidad. No hay justicia o acción legal contra los que perpetran ataques armados, golpean, amenazan de muerte”, dijo.
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La cuestión de la tierra
Las agresiones y violencias son resultado del no reconocimiento por parte del Estado mexicano de las tierras de la comunidad autónoma Wixárika-Tepehuana, lo que ha favorecido la especulación y el despojo territorial.
Las comunidades históricamente han habitado esta región y han vivido autónomamente de acuerdo con sus usos y costumbres. Su territorio fue reconocido en el año 1733 por el gobierno colonial y hasta hoy posee el título virreinal emitido en esta época.
“Estos documentos coloniales siguen teniendo valor legal en México. De hecho la propia ley establece que para que tenga su reconocimiento y titulación de los bienes comunales, el título virreinal constituye una prueba plena de su identidad indígena y de su territorio que está delimitado por este mismo título”, explica el asesor jurídico.
El embate de los indígenas lleva décadas. La comunidad empezó el procedimiento de la titulación agraria cuando todavía estaba en curso la reforma agraria en el país, iniciada con la Revolución Mexicana y finalizada en 1992, en el marco de las reformas neoliberales.
El abogado explica que antes de 1992 el reconocimiento de los bienes comunales era realizado, en un proceso burocrático, por instancias del poder ejecutivo y había dos tipos de figuras: la confirmación y titulación de bienes comunales y la otra era la restitución de bienes comunales. Y de ambas salía una resolución presidencial reconociendo una comunidad indígena y su territorio.
En el caso de la comunidad se intentó el trámite de restitución de bienes comunales, porque personas externas a la comunidad ya habían invadido el territorio. Básicamente casi todo el municipio de Villa Guerrero estaría dentro de los terrenos de Azqueltán, incluso la cabecera municipal, que es un núcleo urbano, también forma parte de este territorio ancestral. Son 94 mil hectáreas las que tiene reconocido el titulo virreinal.
Antes de 1992, la Comisión Agraria Mixta y el Cuerpo Consultivo Agrario eran las instancias del estado mexicano para la titulación de los bienes comunales. Hicieron estudios topográficos, agrarios, dentro de la superficie de las 94 mil hectáreas.
De acuerdo con Chávez, se localizaron posesiones de pequeñas propiedades bien consolidadas en el territorio. “Varios de estos pequeños propietarios interpusieron un amparo contra la titulación de los bienes comunales de Azqueltán. Entonces la Comisión Agraria Mixta sacó una determinación señalando que al existir el amparo debía continuarse por la vía de dotación de ejidos en la superficie donde no hubiera conflicto”, explica.
En este proceso el territorio se redujo a 38 mil hectáreas. Son estas 38 mil hectáreas que la comunidad tiene actualmente en posesión, son las que están en el juicio agrario del tribunal unitario agrario distrito 16, en la ciudad de Guadalajara, ya que después de 1992 las tierras pasaron a ser reconocidas y tituladas mediante un juicio en un tribunal agrario. “Dentro de esta superficie de 38 mil hectáreas es donde se da el jaloneo y los intentos de despojo y de privatización”, explica Chávez.
El abogado sostiene que el intento de despojo del territorio Wixárika – Tepehuana de San Lorenzo de Azqueltán es un intento de “robo descarado”, ya que convenios internacionales y jurisprudencias en tribunales mexicanos otorgan pleno valor probatorio a las comunidades que están en un juicio de reconocimiento y titulación de bienes comunales. “Si la comunidad, su gobierno tradicional determina que un terreno lo tiene en posesión determinado comunero esto es equivalente a una constancia de posesión de una comunidad formalmente constituida”.
Ataque institucionalizado
Según la ley en México, existen tres tipos de propiedad. La pequeña propiedad, la ejidal y la comunal. Si una tierra no está en ninguna de estas tres categorías, se considera que son bienes nacionales. La ley de bienes nacionales le otorga facultades al gobierno federal y a los gobiernos de los Estados para entregar títulos de propiedad sobre estos terrenos. En el caso de Jalisco hay el Programa de Reglamentación de Predios Rústicos, con el cual el Estado empezó a promover la necesidad de que las tierras tuvieran escrituras en esta zona.
“Pues entonces quienes tienen el dinero, los abogados, con los huecos de la corrupción del estado – porque no se puede hacer de otra manera más que por la corrupción por ser tierras indígenas -, logran títulos de propiedades”, explica el asesor jurídico. La comunidad ha interpuesto recursos de amparos, para que se nulifiquen estos presuntos títulos de propiedad que están dentro de las 38 mil hectáreas.
En pie de lucha
Pese a las agresiones múltiples que ha recibido la comunidad por parte de los tres niveles de gobierno, por parte de los magistrados agrarios y de los jueces penales, de los intentos de homicidios, de las amenazas de muerte, “la comunidad está de pie, está con la determinación de no permitir más despojos territoriales y ni violaciones a sus derechos humanos colectivos e individuales”, añade Chávez.