
(Español) Policía reprime manifestación contra Temer en Brasil y detiene a 27 personas
Criminalizan a grupos de acción directa y dividen al movimiento

Manifestante detenido por la Policía Militar el domingo, en Sao Paulo, Brasil. Foto: CMI Sao Paulo
Por: Eliana Gilet
Siete días de manifestaciones diarias se vivieron en Brasil durante la última semana, desde que asumió Michel Temer, el político que vino a ocupar la presidencia de la Federación, una vez que un Congreso ultra conservador – que incluye partidos de iglesias evangélicas, por ejemplo, pero no sólo – sacó de su cargo a la presidenta Dilma Rousseff, por medio de un proceso amañado.
La del domingo fue clave: más de cien mil personas se manifestaron en Sao Paulo, la gran metrópoli, rechazando a Temer y al proceso político que se vive en el país. Dos grandes federaciones de organizaciones son las responsables de convocar a las marchas: el Frente Povo Sem Medo (Pueblo Sin Miedo) y el Frente Brasil Popular. Ambos autodefinidos como defensores de la democracia, que sienten atacada por el “Golpe de Estado” que entienden ha sufrido el país.
También lo fue por las 27 personas que fueron detenidas arbitrariamente antes y después de la manifestación, y por la represión policial que se desató contra los cien mil.
En los días previos, Temer encabezó una campaña mediática denostando las movilizaciones y reduciendo el descontento de miles a “40 o 50” personas. Temer también se encargó de señalar que el problema en todo caso era la “violencia de los manifestantes”. El argumento no es nuevo, ya que Brasil conoce una larga historia de criminalización de todo grupo de acción directa, particularmente los Black Blocs, que han tenido una importante participación en las manifestaciones masivas del 2013 a la fecha. Tal vez de antes incluso.