contrainsurgencia
Organizaciones e individuos exigen: Alto a la guerra contra las comunidades zapatistas
Este 2 de noviembre, en San Cristóbal de Las Casas, diversas organizaciones e individuos recordaron a los muertos zapatistas que, con sus vidas, dejaron el legado de tierras recuperadas el 1 de enero de 1994, en las que desde entonces se ha estado construyendo la autonomía: salud, educación, justicia y mucho más. Hoy esa construcción pacífica se expande mediante la práctica que los zapatistas llaman “el común”, para incluir a comunidades y personas no zapatistas de cualquier parte que buscan transformar las relaciones sociales y construir juntas un mundo más justo y más digno.
Ante eso, el gobierno de la 4T se empeña en destruir toda alianza que se oponga a la lógica capitalista, extractivista, empresarial del proyecto desarrollista que, desde la visión de los pueblos, sólo beneficia a las grandes empresas, de la mano de los intereses del crimen organizado. Esto, entregando documentos de “propiedad” a individuos y organizaciones ajenas sobre tierras recuperadas por el EZLN desde 1994, provocando conflictos agrarios, despojando tierras y desplazando poblaciones, con la participación activa del ejército, Guardia Nacional, policías estatales y municipales y el aparato jurídico del Estado.


En el evento, se leyó el siguiente pronunciamiento, firmado por colectivos, organizaciones e individuos de muchas partes de México y del mundo.
Pronunciamiento por La Vida y El Común
San Cristóbal de Las Casas, Chiapas. A 02 de noviembre de 2025.
A los Pueblos Zapatistas
A las Asambleas de Colectivos de Gobiernos Autónomos Zapatistas (ACGAZ)
Al Congreso Nacional Indígena
A la Sexta Nacional e Internacional
A las Redes de Resistencia y Rebeldía
A l@s firmantes de Una Declaración por la Vida en los cinco continentes.
A los organismos y colectivos defensores de derechos humanos.
A las personas que luchan y resisten en todo el Mundo.
Este 02 de noviembre, con nuestra dignidad organizada y nuestros corazones unidos, nos manifestamos para recordar a todas las personas del mundo que han caído en las luchas por la libertad de sus pueblos y para exigir que se detenga la Guerra Contrainsurgente contra los Pueblos Zapatistas.
Denunciamos que ha pasado ya más de un mes, desde que la Asamblea de Colectivos de Gobiernos Autónomos Zapatistas (ACGAZ), nos alertó del proceso de despojo legalizado, que realizan los 3 niveles del mal gobierno, en el poblado Belén, ubicado en el Caracol 08 Dolores Hidalgo, municipio oficial de Ocosingo en Chiapas, sin que hasta el momento se de solución a favor de las Bases de Apoyo del EZLN, a quienes legítimamente pertenecen esas tierras. Por el contrario, se sigue con la narrativa de una dotación/restitución de tierras. Con la maña de entregar a extraños documentos de propiedad sobre tierras recuperadas por el EZLN desde 1994.
La clase política en el poder, cínicamente, dice que su 4T representa un cambio profundo. Pero nosotras y nosotros lo que vemos en este ataque, es la continuidad de viejas tácticas contrainsurgentes que el EZLN ha enfrentado desde su levantamiento armado: 1)la creación de supuestos conflictos agrarios para enfrentar al EZLN con población civil, a la cual se le ofrecen tierras zapatistas como botín, 2)quema de casas, robo de cosechas, desplazamiento forzado, 3)intervención a sus territorios usando al ejército, policiáss estatales y municipales, 4) uso del aparato jurídico para legalizar sus crímenes, 5) uso de las instituciones agrarias para legalizar despojos.
Esta vez, de manera cínica y criminal, se busca detener el avance de la nueva propuesta de lucha por la vida, que el EZLN comparte con el mundo. Propuesta a la que llaman: “EL COMÚN”. Las comunidades zapatistas nos invitan a reconocer que, la tierra no debe tener dueños sino tener cuidadores. Pues nos encontramos frente a efectos dañinos ocasionados a la madre Tierra que aunados al avance de la violencia del crimen organizado y al aumento de las guerras en el mundo dejan un resultado dramático entre pobreza y hambrunas que viven grandes mayorías mientras que muy pocos pueden disfrutar de lo que es portadora la naturaleza. Nos encontramos frente al avance de la destrucción, ese es el modelo de desarrollo capitalista.
Por eso El COMÚN, planteado por los zapatistas, invita a personas no zapatistas que tienen necesidad de trabajar la tierra, a hacerlo junto a ellas, ellos y elloas, cambiando la idea de ‘tu tierra ‘ o ‘mi tierra’.
El COMÚN es una práctica de SIEMBRA.
SIEMBRA MEMORIA al reconocer que hubo un tiempo en que ancestras, ancestros y ancestroas de los Pueblos Originarios, a los que pertenecen las bases de apoyo del EZLN, reconocieron la tierra como un bien compartido. El trabajo era realizado en común y sus frutos repartidos. Se ponían reglas propias para convivir en respeto y vivir de manera digna.
SIEMBRA FORMAS MÁS JUSTAS DE SER Y ESTAR EN EL MUNDO, al volver a una mirada, sentimiento y pensamiento que pone la vida colectiva por encima del enriquecimiento de unos pocos.
SIEMBRA LIBERACIÓN pues su práctica, es la semilla de otra relación entre las personas y con la Madre Tierra. La de cuidar, sembrar, compartir, sin patrón, ni permiso. Con lo que se crece ahí: milpa, café, hortalizas, ganado, educación, salud, derechos de las mujeres, etc., se puede sostener la vida sin depender del gobierno y, cada vez menos, del capitalismo. O sea que, se trata de la construcción de una base material para la libertad verdadera.
Es a eso, a la construcción de formas de vida y de gobiernos autónomos a lo que el mal gobierno y los otros intereses capitalistas le tienen tanto miedo. Porque los Pueblos Zapatistas son ejemplo para la humanidad de que es posible ser libre, autogobernarse, autodefenderse, organizarse, articularse con diferentes, desde formas comunitarias, priorizando la palabra, la construcción de acuerdos y defendiendo sus territorios del saqueo del desarrollismo extractivista y la violencia criminal. La Autonomía Zapatista es ejemplo de que es posible construir otros mundos que resistan al capitalismo y por eso buscan destruirla.
Por todo lo anterior:
Reiteramos que las tierras del poblado Belén le pertenecen a las Bases de Apoyo del EZLN, por derecho ancestral como Pueblos Originarios, por haberlas recuperado desde 1994 y porque son quienes por más de tres décadas las cuidan y respetan.
Exigimos se detenga este despojo legalizado y cualquier otro tipo de acto contrainsurgente contra los Pueblos Zapatistas.
Nos mantenemos en alerta e invitamos a todas las organizaciones, colectivos y personas de buen corazón a seguir protestando ante cualquier ataque al EZLN y sus Bases de Apoyo.
Declaramos que hoy, nuestra memoria viva, camina un corazón, pasos y rumbo que tiene una raíz profunda en lo que representa el alzamiento zapatista. Lo que representan los Pueblos Zapatistas y la generación de compañeras, compañeros y compañeroas que decidieron poner un ¡Ya Basta! a la muerte impuesta y recuperar a la Madre Tierra. Quienes pusieron su vida como hilo para la memoria viva de nuestros pueblos originarios y de las nuevas generaciones.
Les invitamos a que busquemos formas de sembrar la semilla del COMÚN en nuestras vidas, para que florezca nuestro compañerismo. La lucha es nuestra y nuestra la posibilidad de ser libres. Las, los, loas zapatistas no están solos.
Nuestra rabia no será silencio.
Nuestra resistencia no será apagada.
La vida no se rinde, nuestros corazones y muchos más le abrirán paso.
Por la memoria, por la vida, por EL COMÚN.
Adherimos al presente pronunciamiento:
(Continuar leyendo…) Organizaciones de Chiapas se movilizan ante ataques a comunidades zapatistas
El 11 de octubre de 2025, colectivos, organizaciones e individuos se movilizaron en San Cristóbal de Las Casas para denunciar las agresiones, despojo y desplazamiento forzado cometidos en el poblado de Belén, pereneciente al Caracol de Dolores Hidalgo, en el municipio oficial de Ocosingo.
Enseguida, el pronunciamiento leído durante la acción colectiva:
Pronunciamiento de resistencia y memoria ante los ataques en tierra recuperada zapatista en Belén, Chiapas.
Valle de Jovel, 11 de octubre.
A la Sexta Nacional e Internacional.
A la sociedad civil nacional e internacional,
A los pueblos de México y el mundo.
A los medios independientes, colectivos y redes de solidaridad:
Hoy levantamos la voz,con la digna rabia que lxs zapatistas nos han enseñado, donde la ternura organizada tiene un importante lugar. Desde aquí, denunciamos lo que está pasando en Belén, en el corazón del Caracol 8 Dolores Hidalgo, Chiapas (municipio oficial de Ocosingo). Ahí, se llevó a cabo: despojo violento, hostigamiento sistemático,quema de viviendas y desplazamiento forzado de compañeras y compañeros bases de apoyo zapatistas y campesinos indígenas no zapatistas con quienes trabajan en ese territorio. Todo lo anterior, son actos de guerra contra la vida colectiva y la propuesta zapatista del Común.
Esta es una ofensiva, dentro de una estrategia continua contra los derechos de los pueblos, principalmente su derecho a la Tierra y el Territorio. No se trata de un ataque aislado, forma parte de una estrategia de contrainsurgencia renovada: blandir la ley como garrote, usar el poder judicial y otros cuerpos del Estado para sembrar impunidad, terror y fragmentar el tejido de lo común.
Desde abril de este año,se han documentado incursiones, amenazas, destruccción de letreros, mediciones de territorio, robo de cosechas, quemas de casas. Todo ello presentado, desde el discurso del mal gobierno, como un conflicto agrario. Narrativa que busca ocultar la estrategia de guerra continua contra las comunidades zapatistas. Una muestra clara de su verdadera intención, es el involucramiento de policías municipales de Ocosingo, fuerzas de seguridad estatales, ejército mexicano y la Fiscalía General del Estado de Chiapas, en la legalización de tierras recuperadas por lxs zapatistas, para facilitar su despojo y orillar al EZLN a defenderse por las vías que sean necesarias.
Debemos recordar que este territorio fue recuperado en 1994 y ha sido sostenido en común, desde entonces, entre zapatistas y no zapatistas. También recordamos que, en 1996, el Estado realizó la llamada “indemnizacion”. Mecanismo a través del cual, se pagaron todas las tierras recuperadas a quienes, en ese momento, fueron reconocidos por el Estado como los propietarios “legales”. Hoy, ese mismo Estado y su mal gobierno de la supuesta Transformación, pretende arrebatar las tierras recuperadas por el EZLN. De tal modo: pisotea la historia de luchas por la tierra en Chiapas, muestra su desprecio por un proyecto político que genera condiciones de convivencia pacífica y vida digna, además de que traiciona la lucha agraria reivindicada desde el zapatismo de 1910.
Quieren transformar territorio recuperado, puesto en común, en tierras de finqueros otra vez. Buscan convertir la memoria en papel de desecho. Usurpan lo que no les pertenece para entregarlo al gran capital, al turismo que irremediablemente es extractivista y a los megaproyectos. El despojo de territorios de los pueblos para el gran capital, es una estrategia mundial. La vemos en su expresión más cruda y violenta, en el genocidio contra el digno pueblo palestino.
Por todo lo anterior, exigimos:
- Que se respete la integridad física y territorial de las bases de apoyo zapatistas y de las familias que trabajan con ellas en El Común. Comenzando por restituirles de manera inmediata las tierras del Poblado Belén.
- Que se retiren inmediatamente todas las fuerzas policiales, militares y fiscales que se han hecho presentes en Belén.
- Que se suspendan mediciones agrarias o cualquier otro acto que pretenda legitimar y legalizar el despojo del territorio recuperado.
- Que el Estado mexicano detenga, de una vez por todas, los ataques a las comunidades zapatistas.
- En lo internacional, nos sumamos a la exigencia de ruptura de relaciones con Israel y el alto al genocidio.
Por último, queremos reiterar que éste no es un conflicto local, sino que es parte del modelo de despojo de la 4T. Despojo que avanza disfrazado de democracia y pretende repetir historias de dominaciones que lxs zapatistas han desafiado con la autonomía. El proyecto de lxs compañerxs zapatistas es el Común y el del mal gobierno es el de la propiedad privada al servicio del que allá arriba sigue construyendo pirámides.
Que resuenen todas nuestras voces y que nuestros corazones latan para defender cada territorio recuperado. Que aquí, como en otras partes del mundo, dejemos claro que las comunidades zapatistas no están solas y junto a ellas defenderemos El Común.
Les invitamos a que sembremos estas semillas de indignación para que florezca ser compañerxs de lucha. Porque la lucha es nuestra y no sólo defendemos un pedazo de tierra. Defendemos, también, la construcción de ese otro mundo posible donde depositamos nuestros sueños.
Nuestra rabia no será silencio.
Nuestra resistencia no será apagada.
La vida no se rinde, nuestros corazones y millones más le abrirán paso.
Por la memoria, por la vida, por el Común…
!Vivan los Pueblos Zapatistas y viva Palestina libre!










