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(Español) Comunicado del Concejo Autónomo del Pueblo de San Luis Tlaxialtemalco. 21 de octubre del 2019
Comunicado del Concejo Autónomo del Pueblo de San Luis Tlaxialtemalco. 21 de octubre del 2019
Por órdenes de José Carlos Acosta Ruiz, Alcalde Xochimilco, y Abraham Morales, Director de Participación Ciudadana, el día de hoy aproximadamente a las 09:00 horas fueron cerradas de forma arbitraria e ilegal las instalaciones del edificio de la Coordinación Territorial del pueblo.
El Concejo agotará las instancias legales correspondientes, ya que con esta medida se priva al pueblo de la realización de distintos servicios y trámites, además de que, por mandato de la asamblea del día de ayer, y como consecuencia de la resolución del Tribunal Electoral, el Concejo electo asume las funciones que tenía el anterior cargo de Coordinador Territorial.
Con esta medida, las autoridades de la Alcaldía se niegan a permitir la organización y el desarrollo de nuestro pueblo, por lo que hacemos un llamado a establecer el diálogo y ordenar la apertura inmediata.
A pesar de lo anterior, desde el día de hoy el Concejo estará trabajando por el bienestar del pueblo, con la convicción de servir a la comunidad.*
Les pedimos estar atentos a cualquier convocatoria a la asamblea del pueblo, a fin de determinar las acciones a seguir.
*Recordamos que nuestro cargo siempre será honorífico, y como ya no existe el cargo de Coordinador Territorial, no recibiremos ningún sueldo de la Alcaldía ni de nadie.
Declaración desde varias latitudes del planeta Tierra en apoyo a la “Rebelión de las Flores Nativas” y exigencia de respuesta a sus demandas históricas y actuales.
Las y los abajo firmantes trabajadoras(es) de las ciencias sociales, las humanidades, las artes y la comunicación desde diferentes latitudes del planeta Tierra acompañamos y apoyamos a las mujeres autoconvocadas de diversas naciones indígenas de Argentina provenientes de territorios en conflicto, en su ocupación realizada desde el 9 de octubre, de manera pacífica, del ministerio del interior en Buenos Aires. Exigimos al Estado argentino, al gobierno y a sus funcionarios que se abran todas los vías necesarias y exigidas por ellas para que de manera expedita y urgente se den respuestas a sus demandas históricas y actuales porque como ellas afirman en su pronunciamiento intitulado “La Rebelión de las Flores Nativas”:
El actual “sistema capitalista, racista y patriarcal […] está poniendo en riesgo la vida del planeta” […] “Los gobiernos y las empresas están llevando a cabo un terricidio” […] “Están asesinando nuestros territorios” […] destruyen pueblos enteros que son los guardianes de un modo de entender el arte de habitar, que es necesario para poder emplazar una nueva matriz civilizatoria”. Destruyen -agregan- a “todas las fuerzas que regulan la vida en la tierra”.
Con base en la encuesta realizada por el 2do Parlamento de Mujeres Indígenas afirman: “ocho de cada diez mujeres indígenas sufren violaciones, abusos y violencia física. Siete de cada diez lo sufren por parte de policías y fuerzas de seguridad del Estado. De cada ocho mujeres, siete no pueden acceder a la justicia. Cinco de cada ocho mujeres violadas y asesinadas son ancianas, en la mayoría de los casos autoridades espirituales”. Concluyen: “Nosotras las mujeres indígenas somos los cuerpos que mas padecemos estas atrocidades” [ya que] “nos toca a nosotras históricamente sostener y guardar la vida y la de nuestras familias”.
Al tiempo denuncian la militarización en sus territorios: “cotidianamente [sufrimos] detenciones y allanamientos arbitrarios; desapariciones y torturas; desalojos a nuestras comunidades que son una violación a nuestros derechos y leyes vigentes que nos resguardan”. Una evidencia más de lo que llaman “la imposición de un sistema de muerte, que ha desnaturalizado a la humanidad”.
Las mujeres indígenas autoconvocadas parten de la denuncia del terricidio, del feminicidio y del terrorismo de Estado para exigir el reconocimiento de un Estado plurinacional y el “buen vivir” como derecho, al tiempo que afirman tener propuestas para contribuir a la lucha contra el cambio climático, para recuperar las prácticas de sociedades recíprocas con la naturaleza que sostienen la vida como principal valor y así restablecer la equidad y reciprocidad entre los pueblos y con las mujeres.
En estos tiempos de muerte, horror y guerras, demandas, análisis y propuestas como éstas tienen que ser escuchadas por el Estado/gobierno argentino y por la sociedad civil nacional e internacional. Son voces rebeldes y disidentes que nos llegan desde el confín del mundo para todo el planeta Tierra.

































