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Agentes secretos estadounidenses se niegan a pagar servicios sexuales

* Trabajadoras sexuales detenidas al estilo paramilitar

Por Jaime Montejo de la Agencia de Noticias Independiente Noti-Calle, 22 de abril de 2012, México, D.F. – La policía colombiana anda visitando bares y discotecas en Cartagena para encontrar a las 21 trabajadoras sexuales participantes de la fiesta sexual promovida por agentes de seguridad de los Estados Unidos, a cargo del presidente Barack Obama, durante la VI Cumbre de las Américas, señaló  Joaquín Torres, abogado de las mujeres involucradas en el escándalo.

Dicha fiesta sexual, se llevó a cabo en un hotel del puerto el pasado 13 de abril, como ya lo han reiterado diversas agencias de información en todo el mundo, pese a la prohibición que tienen de hospedarse en dichos establecimientos, motivo por lo cuál su dormitorio se asignó al interior de una base militar colombiana.

El abogado señaló que la policía realiza las pesquisas con lista en mano, incluyendo nombres propios, al mejor estilo paramilitar, después las saca del lugar y… Y hasta ahí se sabe lo que está ocurriendo.

Respecto al paradero de las trabajadoras sexuales ubicadas por la policía, hasta el momento no se sabe cuál es su paradero y cuáles han sido las represalias contra ellas por haber difundido dicha situación.

El escándalo:

Los agentes de seguridad estadounidenses instalados en un hotel, hicieron una fiesta con cerca de 21 trabajadoras sexuales. El asunto es que después del sexo, los hombres se negaron a pagar, frente a lo cuál las mujeres reclamaron su derecho y por caminos que no conozco aún del todo, la información llegó a la prensa y la bomba explotó, aclaró el abogado Torres.

El otro asunto, es que norteamericanos con cámara espía, andan fotografiando a las trabajadoras sexuales de Cartagena, haciendo indagaciones sobre las mujeres sexuales que se vieron invlucradas en el escándalo, entroemiéndose en asuntops internos colombianos.

Cabe aclarar, que los hombres fueron castigados por el servicio secreto, sin embargo no hubo disculpas, ni restitución de derechos a las mujeres a quienes no se les pagaron sus servicios sexuales.

Por lo pronto, la Red Mexicana de Trabajo Sexual y Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer “Elisa Martínez” A.C., condenan la persecución de que son objeto las trabajadoras sexuales colombianas involucradas en este escándalo que muestra la hipocresía del gobierno norteamericano, que por un lado dice promover la abolición de la prostitución y por el otro utiliza servicios sexuales y se niega a pagarlos.