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Estamos aquí «para que no se pierdan en la soledad del olvido, ni sus sueños, ni sus cuerpos. Sin nada que festejar porque no les hemos recuperado» afirman las madres de las víctimas de desaparición forzada en un mitin realizado al pie del Ángel de la Independencia en la Ciudad de México, después de marchar desde el Monumento a la Madre.

«Hijo, escucha, tu madre está en la lucha» se escucha mientras caminan. Con lágrimas en los ojos, flores en las manos, un bebé en la espalda, una fotografía que cargan en un viaje de más de 24 horas, un bordado que cuenta una historia, una manta con características físicas y la esperanza de encontrar, mujeres de diferentes puntos del país claman el regreso de sus hijos: algunas los esperan con vida, otras exigen, al menos el cuerpo para velarlo con dignidad.

Ellas envían un mensaje al gobierno de Andrés Manuel López Obrador: «¿Qué le importa más al señor presidente? ¿Su gasolina o las víctimas de este país?», además mencionan que en la actualidad no existen los mecanismos adecuados para la investigación y la búsqueda.

«Si promete un cambio debe de comprometerse a cambiar este infierno». Las buscadoras dicen que el actual gobierno debe asumir la responsabilidad, dejar de simular. No fingir que depuran instancias que «solo reciclan a funcionarios omisos y responsables del horror que deberían combatir». Además gritan: «¡No!» al perdón que propone la nueva Ley de Amnistía.

El arzobispo Raúl Vera, recuerda durante el mitin, que hace falta un país que base su administración pública en el respeto a la dignidad humana, por encima de todos los intereses, con honestidad, claridad y transparencia. «Solo así habrá paz y garantías de progreso social y seguridad para nuestras vidas».

Antes de culminar, las convocantes agradecen y reconocen algunas fortalezas: «Encontrarnos a quienes nos acompañan y eligen darnos un abrazo solidario en lugar de salir a comer o a festejar este día».

Con lágrimas en los ojos, flores en las manos, un bebé en la espalda, una fotografía que cargan en un viaje de más de 24 horas, un bordado que cuenta una historia, una manta con características físicas y la esperanza de encontrar a sus hijos, mujeres de diferentes puntos del país marchan por sus hijos.

 

Fuente: Regeneración Radio