Sorry, this entry is only available in Español. For the sake of viewer convenience, the content is shown below in the alternative language. You may click the link to switch the active language.

NO AL BASURERO EN TILCAJETE, LA LUCHA HA COMENZADO

San Martín Tilcajete es un pueblo zapoteca del valle de Ocotlán que vive de las artesanías

principalmente, en el pasado fue un pueblo de campesinos que cultivaban la tierra en todo su

Las cosas han cambiado, ahora en el pueblo se ven turistas por todos lados, la gente vive de la

artesanía, muchos se van a la ciudad y muchos más han llegado a cruzar la frontera.

Aunque la vida en el pueblo ha cambiado, y en los últimos años el territorio de Tilcajete ha sido

mutilado por las invasiones de paracaidistas y el pueblo no ha podido evitarlo, la tierra se sigue

defendiendo y el pueblo va aprendiendo a organizarse.

Ahora el gobierno estatal ha decidido imponer le construcción del basurero municipal de la

ciudad de Oaxaca dentro del territorio de este pueblo originario y sin consultarlos mediante

engaños y desinformación ha intentado iniciar los trabajos.

Los efectos de la contaminación del todavía actual basurero, con el colindan, ya son muy

notorios en el pueblo, en especial las afectaciones socioculturales, ha habido una invasión de

paracaidistas desde hace varios años que han llegado a la confrontación con pobladores que ya

han causada la pérdida de vidas.

Por esta razón en la última asamblea comunitaria el pueblo de Tilcajete decidió defenderse de

este megaproyecto que amenaza no solo la tranquilidad de la comunidad sino toda la naturaleza,

la vida, el agua y por supuesto el derecho a la tierra y el territorio.

La gente ha decidido hacer vida en el espacio donde se pretende construir el nuevo basurero, ha

regresado a sus orígenes, que es la tierra misma y recuperar la relación con la madre tierra con

una campaña de reforestación que no se queda solo en plantar un arbolito en el cerro sino que

implica un compromiso con la tierra.

Así es como decenas de hombres, mujeres, niños, niñas, ancianos y ancianas desde el domingo

19 de junio hicieron presencia en este lugar donde el gobierno del estado en complicidad con el

gobierno municipal de la ciudad de Oaxaca por vías legaloides asegura haber comprado cerca de

60 hectáreas de territorio ejidal en una operación totalmente ilegal.

La lucha ha comenzado y la gente de Tilcajete está decidida a defender la tierra y el territorio,

una tierra que es herencia de sus ancestros, de los abuelos y abuelas que les costó mucho

sacrificio preservar.

La gente, el domingo pasado, tenía la consigna de bajo ninguna circunstancia permitir que se

construya el basurero en su territorio, desde los más pequeños hasta los y las mayores decían que

no permitirán esta imposición del gobierno.

Los señores grandes contaban su historia, recordaban sus anécdotas de chamacos en estos cerros,

la riqueza natural y sobre todo los lugares donde brota todavía el agua se encuentran por todos

lados, también son muy consientes de que la afectación no se quedará solo en Tilcajete sino en

todo el valle de Ocotlán.

Tilcajete hace un llamado a todos los pueblos del valle de Ocotlán, en espacial a los más

cercanos a apoyar su lucha, a unirse y defender la vida, a la madre tierra y el agua.

Dicen que a partir del domingo pasado estarán todos los fines de semana sembrando vida en este

hermoso lugar que el gobierno quiere contaminar y destruir.

Tilcajete ha decidido y las mujeres, que eran mayoría el pasado fin de semana, quisieron mandar

un mensaje a todos y todas para que lo sepan bien, “nosotras no permitiremos el basurero en

nuestro pueblo y no seremos las traidoras del valle, no queremos que en un futuro la

contaminación acabe con nuestro valle”.

Y la lucha es en todos lados ya que mientras en Tilcajete la gente zapoteca del pueblo sembraba

vida en otro pueblo, en otra región, los mixtecos de Nochixtlán y sus pueblos vecinos de manera

solidaria salieron a hacer frente a las fuerzas represivas del estado y como hace 10 años fueron

masacrados jóvenes valientes ante la sed de sangre de los gobierno estatal y federal.

Y aunque nos encontrábamos a cientos de kilómetros de distancia la lucha por la vida nos

hermana y con toda seguridad sabemos que el pueblo se levantará por todos lados donde se

pretenda imponer proyectos de muerte.