Mexico
Gasoductos en México: la realidad detrás de los 20 mil km de infraestructura
Fuente: Avispa Midia
Por Renata Bessi
Julia Bernal es una mujer nativa que pertenece a las Naciones indígenas de Sandia Pueblo y Yuchi, uno de los 19 pueblos originarios que habitan lo que hoy se conoce como el estado de Nuevo México, en Estados Unidos. Ahí los pueblos viven en las orillas de los ríos. “No somos pueblos nómadas, somos agricultores”, cuenta al equipo de Avispa Mídia. Poseen su soberanía alimentaria, siembran principalmente maíz, calabaza y frijol.
“Sobrevivimos a las colonizaciones de España y Estados Unidos, y estamos sobreviviendo hace un siglo a la explotación de recursos energéticos”, comparte Bernal, que hace parte de la organización Alianza de Pueblos en Acción.
En sus territorios fue detonada la primera bomba atómica, la bomba Trinity, en 1945, la primera experiencia nuclear, antes de ser usada contra las poblaciones de Hiroshima y Nagasaki, en Japón. Fue parte del Proyecto Manhattan, impulsada por el gobierno de Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial. Todavía hoy existen laboratorios de producción de energía nuclear, cuya basura radioactiva es almacenada en los territorios que pertenecen a estos pueblos.
En el centro de la comunidad de otra joven indígena, Alicia Gallegos, de los Pueblos de Acoma y Laguna, en las orillas del llamado Río Puerco, está una mina de Uranio, mineral usado en la producción de la energía nuclear. “Ha contaminado mucho y no ha habido ninguna indemnización. Utilizamos solamente agua subterránea, la de los ríos está altamente contaminada”, comparte Gallegos al equipo de Avispa Mídia.
Estos pueblos también tienen en común el hecho de que están asentados sobre la mayor reserva energética de Estados Unidos y una de las de mayor producción de gas y petróleo del mundo. Ahí está la cuenca Pérmica, que se extiende hasta Texas, abarcando los dos estados. “Los proyectos empezaron en 1912, justamente cuando Nuevo México fue transformado en un Estado más de los Estados Unidos”.
(Continuar leyendo…)RESONANCIAS DEL CARACOL POR NUESTR@S DESAPARECID@S MEMORIAL MUSICAL
Primera llamada
A las madres y familias buscadoras
Al Ejército Zapatista de Liberación Nacional
Al Congreso Nacional Indígena – Concejo Indígena de Gobierno
A las personas y organizaciones firmantes de la Declaración por la Vida
A las personas de buen corazón en México y el mundo
Nosotros, nosotras, nosotroas, integrantes de la Red Universitaria Anticapitalista, vemos que hoy en México las violencias se siguen desplegando por todo el territorio nacional y que, como siempre, son las personas más desposeídas quienes las padecen. Vemos con alarma cómo los pueblos de todas las geografías de este país sobreviven a una guerra que, por más que desde arriba trata de ocultarse, sigue lastimando a nuestra sociedad.
Vemos, también, que frente a esas violencias, son los pueblos originarios y las madres y familias buscadoras quienes en el país nos marcan un horizonte de esperanza, un paso digno e incansable en una lucha que hoy es una lucha por la vida.
Vemos cómo, movidas por el amor y la justicia, madres y familiares de personas desaparecidas se organizan para buscar a sus seres queridos. Desde hace más de 50 años las familias de personas desaparecidas durante el terrorismo de Estado, se articularon en colectivos y organizaciones que investigan, denuncian, buscan justicia y a sus seres queridos, construyen memoria, una labor que no han dejado de hacer y que abrió camino para entender al México de nuestros días. Hoy, miles de familias más realizan las tareas que las instituciones de gobierno no hacen, se forman en el día a día como forenses, crean metodologías de búsqueda, acuden a los lugares más recónditos para destapar una realidad innegable: que México es una fosa. Los familiares de personas desaparecidas también se encuentran con otras y otros que como ellos viven el dolor de la incertidumbre y convocan a procesos de unificación de sus luchas, como ocurrió este año cuando más de 200 colectivos declararon el 19 de abril como el Día de las Familias Buscadoras.
Vemos que hoy, como ayer, miles de personas siguen siendo desaparecidas y siguen sin ser encontradas, a pesar de todo el esfuerzo de sus madres y familias. Vemos que estamos frente a un problema transexenal que desde arriba se han negado a nombrar y con ello se invisibiliza y se les vuelve a desaparecer. Encontrar a esas personas sigue siendo el horizonte, como lo son la verdad, la justicia, la reparación del daño y la garantía de no repetición.
Nosotros, nosotras, nosotroas, pensamos que la memoria no es sinónimo de resignación, sino una necesidad, una voz del presente y del pasado que nos dice que los desaparecidos y las desaparecidas nos hacen falta a todos y todas.
Ante esta situación, en respuesta a los múltiples llamados que han hecho las familias buscadoras, queremos convocar a dar un abrazo colectivo, un grito solidario, un canto por la memoria, un baile por la justicia. Un esfuerzo pequeño, pero combativo y cariñoso. Por ello, a sabiendas de que las artes son lenguajes que trascienden ruidos, hemos decidido realizar el Resonancias del Caracol por Nuestr@s Desaparecid@s. Memorial Musical, una actividad en la que distintos artistas hombres, mujeres y otroas, así como organizaciones sociales y personas solidarias, sumaremos nuestra solidaridad con familias y organizaciones de madres y familias buscadoras. Realizaremos dicha actividad el próximo 23 de noviembre, a las 13 hrs en el Monumento a la Revolución de la Ciudad de México. Próximamente más información.
Porque l@s desaparecid@s nos faltan a tod@s
RED UNIVERSITARIA ANTICAPITALISTA
Octubre de 2024
PD. Mientras nos preparábamos para lanzar esta iniciativa y comenzar la difusión, nos hemos enterado de las agresiones y amenazas contra los pueblos zapatistas. Nosotros, nosotras, nosotroas, tenemos como inspiración al EZLN. Cómo ya dijimos, nosotros, nosotras, nosotroas, pensamos que la guerra que se vive en México encuentra en los pueblos originarios y en las madres buscadoras a su principal resistencia. Es sin duda el EZLN uno de los proyectos de alternativa de vida y organización social más importantes en el mundo. Por ello, en cada acción que realicemos para llevar a cabo este Resonancias, también estará la exigencia de alto a la guerra contra las comunidades zapatistas.