Communique from the Indigenous Revolutionary Clandestine Committee—General Command of the Zapatista Army for National Liberation
Mexico
August 17, 2019
To the People of Mexico:
To the Peoples of the World:
To the National Indigenous Congress—Indigenous Governing Council:
To the National and International Sixth:
To the Networks of Support and Resistance and Rebellion:
Hermanos, Hermanas, Hermanoas:
Compañeras, Compañeros, Compañeroas:
We bring you our word. The same word as yesterday, today, and tomorrow. It is the word of resistance and rebellion.
In October of 2016, almost three years ago, during the 20th anniversary of the National Indigenous Congress [CNI], the sister organizations of the National Indigenous Congress and the EZLN made a commitment to go on the offensive in our defense of our Territory and Mother Earth. Persecuted by the bad government, by caciques, by foreign corporations, by criminals, and by the law, and as we accumulated insults, derision, and dead, we the originary peoples (the guardians of the earth), decided to go on the offensive and circulate the words and actions of resistance and rebellion.
With the founding of the Indigenous Governing Council [CIG] and the selection of its spokesperson, Marichuy, the National Indigenous Congress gave itself the job of taking words of warning and organization to the brothers and sisters of the city and countryside. Meanwhile, the EZLN also went on the offensive in its struggle with its words, ideas, and organization.
The time has come to hold ourselves accountable to the CNI-CIG and its spokesperson so that their peoples can decide if we have lived up to what we promised. But it is not only the CNI-CIG that we are accountable to; we also have a pending debt with the organizations, groups, collectives, and individuals (especially those in the Sixth and the Networks [of Rebellion and Resistance], but not only them) that throughout Mexico and the world concern themselves with our Zapatista peoples. These are people who, whatever their calendars, geographies, and habits may be, disregard the walls, borders, and sieges that are erected to divide us so that their hearts can continue to beat close to our own.
Adagio-Allegro Molto in E minor: A Possible Reality (from the Notebook of the Cat-Dog)
“As you know, madness is like gravity…all it takes is a little push.”
The Joker in the role of Heath Ledger (or was it the reverse?)
Nobody knows for sure how it all started. Not even the Tercios Compas [Zapatista media], who took up the task of reconstructing the sequence of events, could pinpoint the exact moment and event in which the story I’m about to tell you began.
According to one version, SubGaleano is responsible for everything. Others say SubGaleano only started it and it was Subcomandante Insurgente Moisés who took it to completion.
See, what happened was that in one of his texts, SubGaleano mentioned a February 2011 program in which the journalist Carmen Aristegui asked if then-president Felipe Calderón Hinojosa was an alcoholic, and added that the nation should be informed about the health of the president. She was fired in retaliation. Up to that point in the story there is no disagreement—and you can confirm that’s what happened by referring to news articles from that time.
The problem really begins when SubGaleano added something like, “Madness, as pointed out by a misunderstood sage of the human soul, is like gravity: all it takes is a little push. To hold Power unlawfully is just that irresistible push that all those above long for, and it begins with three simple words, “I rule here.” If you think anyone in the media is going to question whether the current president is lacking in any of his mental faculties (let’s be clear, he didn’t say “crazy”), don’t hold your breath, because nobody will dare to do so.”
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Desde la costa hasta la sierra el calor abraza el territorio de Santa María Ostula. Su tierra rojiza y ocre adorna las casas de adobe y palma, mientras los tamarindos se tienden frente al mar y las milpas se levantan más atrás en las montañas. Quien tiene la oportunidad de posar la vista sobre la comunidad nahua de Ostula es testigo de este paraíso, ejemplo de perseverancia en la lucha por el territorio y la autonomía indígena.
San Diego Xayakalan es una de las encargaturas costeras que da entrada al territorio ostuleño por el norte. Circulando por “la doscientos” —carretera federal que comunica varios estados del pacífico mexicano— se llega a ella al encontrar el filtro de seguridad comunitario, primero de varios que la Guardia Comunal mantiene instalados para procurar la seguridad y como puntos de acceso.
El pasado 29 de junio Xayakalan celebró sus 10 años de vida. Con presencia de representantes de las 23 encargaturas que hoy conforman Santa María Ostula —pequeñas comunidades que hoy se rigen bajo la asamblea general y cuentan con estructuras y cargos comunitarios propios—, así como de otros pueblos, organizaciones y colectivos; las mujeres, hombres, ancianos, niñas y niños de la comunidad nos recibieron para rememorar juntos el camino andado.
Xayakalan se fundó en 2009 tras la recuperación por la vía de los hechos de más de 1000 hectáreas de territorio que se encontraba en manos de pequeños propietarios y bajo el control del crimen organizado.
El nombre de San Diego Xayakalan alude a Diego Ramírez, primer comunero asesinado por células del cartel de la región. Las familias que hoy habitan la comunidad, queriendo honrar su memoria, la llamaron San Diego, seguido de Xayakalan que en náhuatl significa tierra de Xayakates: personajes míticos que danzan burlones haciendo todo tipo de travesuras a manera de una tradición que en sí representa la insumisión histórica indígena ante el orden colonial español y en general ante cualquier imposición ajena.
Preparando la fiesta
Días antes pudimos observar los preparativos para la conmemoración. Por comisiones y turnos de trabajo, todo el pueblo se afanó en los arreglos.
Asistíamos a la organización colectiva del evento, de por sí ya una fiesta, que recibía a sus invitados e invitadas con una manta en donde podía leerse: “Décimo Aniversario (por la) Recuperación de Nuestras Tierras, Comunidad Santa María Ostula, Xayakalan, 28 y 29 Junio 2019”.
Bajo la sombra de la enramada y junto a la capilla de la Virgen de Guadalupe, en lo más alto del terreno, las mujeres de la comunidad preparaban presurosas y alegres las tortillas en su fogón comunitario. Mientras, animados también, los hombres tejían adornos de palma para decorar el lugar, a la vez que colocaban la vestimenta tradicional y figuras asemejando a los Xayakates y a los Bartolos (personajes de las pastorelas) a uno y otro lado del templete.
Una exposición fotográfica que se alistaba a ser montada daba cuenta de los rostros de la lucha y la belleza del territorio. Entretanto los muchos niños y niñas correteaban de un lugar a otro, haciéndonos reflexionar que este proceso ha permitido que la juventud y niñez de Xayakalan, mucha de ella nacida durante la resistencia y que por ello es poseedora de una fuerte identidad, hoy pueda crecer y divertirse con libertad.
Por tiempos inmemoriales aquí es nuestro
Al día siguiente, 29 de junio, se inició temprano. Tras la misa, seguida de un gran desayuno, se convocó a las y los presentes a formar parte de una marcha hasta los linderos de la comunidad.
Partiendo de la enramada, espacio de reunión de la asamblea comunitaria, comenzó el recorrido con la Guardia y autoridades comunales al frente hacia el paraje de Las Bugambilias, una fracción de tierra que todavía se encuentra en disputa.
Bajo un sol apabullante se escucharon los ¡Ostula Vive, la Lucha Sigue!, ¡Ostula no se vende, Ostula se defiende! o ¡Vivan los pueblos originarios, viva Zapata, viva EZLN, Viva Ostula! que animaron a todas y todos los que ahí acompañamos hasta el punto denominado “las tres majahuas”, colindancia que la gente anciana de la comunidad recuerda les fue reconocida por resolución presidencial en 1964. Sin embargo, y como consta en los títulos primordiales, su territorio va mucho más allá.
Este acto simbólico de recorrer el territorio hasta sus linderos incluyó la intervención de las autoridades de Ostula y su encargatura Xayakalan que, en palabras de su Jefe de Tenencia y Encargado del Orden, compartieron parte del proceso de resistencia y agradecieron la presencia de las y los que llegamos desde otros lugares.
Quisimos venir para saber en dónde llegamos (…) en este trayecto tuvimos muerte y levantones. Seguimos luchando por nuestras tierras que nos las han heredado nuestros ancestros. Nosotros somos de lucha y vamos a seguir luchando por nuestros chiquitines que vienen aquí atrás de nosotros (Jefe de tenencia Sta Maria Ostula).
Estamos contentos por cumplir estos diez años de aniversario, de lucha por nuestra tierra recuperada (…) Agradecerles a todos aquí y a iniciar este día aquí con esta marcha con todos los compañeros que vienen de diferentes lugares (Encargado del Orden de Xayakalan).
Ostula resiste desde siempre, Ostula no olvida
La resistencia en Ostula no es sencilla pero camina a paso firme. En el aniversario mucho se habló de ello, porque diez años no son pocos y todo lo ocurrido durante este tiempo ha marcado profundamente a este valeroso pueblo.
Se recordó a los 35 compañeros asesinados y los otros 6 compañeros desaparecidos, en una constante organizativa que, como mencionó el comandante de la Guardia Comunitaria, Germán Ramírez, viene de lejos y todavía continúa.
En varios testimonios resonó que las luchas “no tienen fin”, reafirmando que esta experiencia que se viene construyendo “no es de inicio” sino que es la continuidad de “los antepasados”, porque este, como muchos otros procesos organizativos, trasciende los tiempos y muestra de ello son las diversas luchas por la defensa territorial y sus todavía prácticas de autogobierno indígena.
Orgullosas sonrisas se vieron durante la narración de una parte de la memoria histórica que expuso la herencia combativa de los ostuleños. Considerados los mejores flecheros de la región, se relató cómo la corona española les encomendó la protección de los piratas. Y que por esta tradición defensiva, que ya venía desde antes, se les conocía como “los centinelas del mar del sur”, antecedente y fundamento jurídico-histórico de la actual Guardia Comunal.
Durante estos últimos 10 años, como allí se dijo, la lucha ha consistido en “organización, organización, recuperación, traición y reorganización.” Y aunque la Guardia Comunal es fundamental para la seguridad comunitaria, este proceso se construye también asistiendo a la asamblea general, fortaleciendo sus estructuras y respetando los acuerdos, cargos y comisiones de trabajo.
Ostula es, en efecto, el movimiento armado que les ha permitido alejar al crimen organizado, pero también es la cocina compartida, la enramada y sus asambleas, el trabajo de la tierra, las faenas en el campo y los turnos en los filtros, sus playas libres del turismo gentrificador y las mujeres que participan y defienden con voz y presencia el territorio. Aquí la resistencia se teje día con día, habitando la tierra, cuidándola y, como presenciamos, en la participación de sus fiestas y recuperación colectiva de la historia y la cultura. Todo ello hace posible la vida comunitaria, incluyendo lo que en muchos otros lugares del país o comunidades cercanas hoy no tienen: la seguridad.
“Así quisiera yo que mi comunidad fuera” (Compañero de la vecina comunidad indígena de Pómaro)
Aun cuando ya son varias batallas las ganadas, la guerra de despojo en contra del pueblo de Ostula continua.
Los intereses económicos del capital neo-extractivista y mercantil siguen siendo la riqueza forestal y biodiversa de las montañas, las playas y puertos para el turismo y el acceso comercial, y el hierro en los cerros para la explotación minera. Como ahí se dijo: “Primero (fue) la tierra, después fue el mar y ahora sabemos que son esas piedras que están allá arriba”.
Frente al acecho de los poderes locales en forma de partidos, caciques y narcoparamilitares, las encargaturas organizan su autodefensa indígena. En un país en donde el poder político y la fuerza del Estado está a disposición del poder económico y criminal, ello representa todo un golpe al sistema.
Es un sistema muy vicioso y si nosotros fallamos quién sabe qué va a pasar con nosotros. Aquí hay un lema que dice en nuestra comunidad: “Nokni amo ximuyolpacho” “¡Ánimo compañeros, no rajemos!”
Momentos agridulces se vivieron. Se recordaron los agravios, las injusticias, las traiciones y a quienes ya no están presentes pero viven en la memoria. Historias estremecedoras por las que en algún momento del conversatorio se pidió no aplaudir al finalizar el testimonio.
Por defender su territorio de intereses ajenos, en ésta última década la comunidad ha sido duramente golpeada. Particularmente después de la recuperación de tierras y durante las reconfiguraciones de varios cárteles del narcotráfico que han perseguido a sus líderes, asesinado y desaparecido a compañeros y comprado a algunos otros.
Tampoco han estado exentos de la represión y agresiones por parte del Estado. El 19 de julio de 2015 el ejército mexicano, junto con la Policía Federal, implementaron un operativo para apresar al entonces comandante general de la Guardia Comunal. El resultado fue una incursión al territorio de Ostula por parte de las fuerzas armadas, quienes abrieron fuego contra la población civil asesinando a Hidelberto Reyes García de 12 años de edad.
Este tipo de agresiones no son hechos aislados. Se trata de una violencia sistémica que parece normalizarse más allá de cualquier alternancia en el gobierno. Dijera el Subcomandante Moisés, vocero del EZLN, “cambia el capataz, pero el finquero es el mismo”, ya que en los apenas ocho meses de la “supuesta transformación”, el gobierno en turno ha acelerado los proyectos de desarrollo capitalistas y la militarización sobre el territorio indígena. A consecuencia de esto los ataques narcoparamilitares y asesinatos a defensores comunitarios también se han agudizado.
Festejar que Xayakalan Vive
Tras los duros testimonios, la jornada prosiguió conforme a su programa. Era el momento de dar entrada a los Xayakates con sus travesuras, transición perfecta al acto cultural para disfrute de todo el pueblo.
Particularmente emotiva fue la entonación de El Corrido de Xayakalan que, en voz de una compañera invitada y con la guitarra de Ezequiel, reconocido músico de la comunidad, relata el momento preciso de la toma territorial y nacimiento de Xayakalan diez años atrás.
Corrido de Xayakalan, compuesto por Pedro Leyva, asesinado en octubre de 2011. Canta la compañera Silvia.
En este aniversario, además de la danza, el teatro, la música y la comida, la ceremonia y las palabras de las y los compañeros y compañeras, Ostula nos mostró una vez más que la lucha por la autonomía es constante y que vivir es resistir, habitar es luchar y festejar es hacer la memoria presente.
¡Vivan los 10 años de lucha y resistencia de Xayakalan!
¡Vivan la comunidad de Santa María de Ostula!
¡Qué viva la Guardia Comunal y las Encargaturas de Ostula!
Escucha aquí todas las participaciones del evento:
To the Zapatista Army of National Liberation
To the National Indigenous Congress
To the Indigenous Governing Council
To the Women of the CNI-CIG
To the Women who Struggle
To the CIG Support Networks
To the Networks of Resistance and Rebellion
To the National and International Sixth
To the Media
We who subscribe this letter – workers in the social sciences, the arts and the humanities, activists and feminists – we come together to express our genuine concern for what is happening in Mexico and specifically for what is happening in Chiapas and in the indigenous regions where the Zapatistas, members of the original people, tribes and nations that are part of the National Indigenous Congress (CNI) live.
The incarnate struggle of resistance against capitalism, machismo and patriarchy of the Zapatistas and the National Indigenous Congress (CNI) have inspired and continues to inspire us. Their struggle is like a mirror where we can reflect, that encourages us to walk in an incarnated way, in our own places, times and ways, in our own struggles for autonomy and against all those dominations, violences, dispossessions, discriminations and exploitations that manifest in a thousand forms in indigenous and not indigenous territories.
We are actively awaiting and walking in many places and sharing what we have (un)learned looking at your 25 and 500 years of collective resistances.
We add our voice to those who affirm that the current Mexican government’s strategy is one strategy of war more than for security and we agree with the criticisms against ongoing Mexican nationalist development projects for the Mayan region and the Tehuantepec Isthmus (Istmo de Tehuantepec). We are outraged by the murder of women, young people; and indigenous and black communities’ leaders in México and all over Abya Yala.
All of this not only worries us, but also encourages us to carry out different actions in different spaces as our incarnate support to the Jornadas por la Vida contra la Guerra (Campaign for Life and against the War).
That is why we shout with a strong collective voice: !The war against the Zapatistas, the CNI members and the indigenous and black peoples of all over Abya Yala, must stop now!
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En el marco de las acciones que diversas organizaciones, colectivos y redes nacionales e internacionales están realizando desde el pasado mes de mayo para denunciar la creciente militarización en territorio zapatista y la guerra narcoparamilitar declarada a los pueblos del CIPOG-EZ (Concejo Indígena y Popular de Guerrero-Emiliano Zapata) en Guerrero; el pasado 13 de junio tuvo lugar en el Café Zapata Vive de la Ciudad de México, un “Conversatorio contra la militarización”.
En dicho evento participaron las Madres y Padres de Ayotzinapa, el CIPOG-EZ los colectivos Decolonize This Place y Semillas Collective de Palestina y Nueva York, la Coordinadora Metropolitana Antipatriarcal con el CIG y compañeras de la comunidad Otomí radicada en la colonia Roma de la CDMX.
La línea que atravesó la mayor parte de las participaciones reveló que “la militarización no tiene fronteras” y que sus incursiones obedecen a intereses estratégicos del capital.
Particularmente, se advirtió sobre la estrategia de seguridad nacional impulsada por el gobierno actual de Andrés Manuel López Obrador (Guardia Nacional) y las graves repercusiones para los movimientos que resisten en este país. Se mencionó que, contrariamente a los discursos de democracia, libertad y justicia que pregona AMLO en su Cuarta Transformación, atrás se esconde la continuidad de un capitalismo manchado de sangre y “una estrategia contrainsurgente y paramilitar dirigida, financiada y estructuralmente diseñada, en contra de los movimientos sociales”.
Sobre la incursión militar y crisis actual en el estado de Guerrero, se recordó, a más de 56 meses de la desaparición forzada de los 43 estudiantes normalistas, la participación del ejército, así como los recientes asesinatos de los compañeros del CIPOG- EZ Julián Cortés Flores, José Lucio Bartolo Faustino, Modesto Verales Sebastián, Bartolo Hilario Morales e Isaías Xanteco Ahuejote y el cerco narcoparamilitar en el que se encuentran sus comunidades por defender su territorio y luchar por la autonomía de su pueblo. También se recordó al compañero Samir Flores Soberanes, activista opositor al PIM (Proyecto Integral Morelos) asesinado el mes de febrero.
Don Melitón Ortega, de los Padres/Madres de Ayotzinapa, intervino para expresar la realidad que se vive en el estado de Guerrero y el papel represivo del ejército en la historia de nuestro país con intenciones de sofocar “todo intento de resistencia de los pueblos de México”, de acuerdo a la lógica del Estado y sus instituciones de “controlar e imponer, a como dé lugar, su modelo neoliberal”. También mencionó el papel del ejército en la vigilancia e infiltración de los movimientos.
Igualmente, uno de los estudiantes normalistas de Ayotzinapa mencionó la situación tan preocupante que viven los estudiantes y cómo, de manera particular, el Estado los ataca para “meter miedo a las personas que quieran entrar a estudiar a la normal”. Tal fue el gravísimo ataque en el que desaparecieron y asesinaron a sus compañeros: “Es triste recordar al pueblo esta situación que hizo el Estado en contra de nosotros como normalistas aquella noche del 26 y madrugada del 27. Es injusto”. E invitó como estudiantes y pueblos a mantenernos atentos desde una posición crítica ante los gobiernos y el Estado, no sólo en Guerrero sino en todo el país.
Los representantes del CIPOG-EZ que asistieron compartieron su reflexión y la crítica situación de sus comunidades, manifestando que “hay una guerra de exterminio en contra de los pueblos que resisten”. Hicieron un llamado a alzar la voz y decir NO a la guerra de exterminio a los pueblos originarios desde las iniciativas promovidas por el CNI-CIG; asímismo, a participar en una CARAVANA que reivindique la vida y la dignidad de los pueblos originarios y rompa el cerco narcoparamilitar en el que se encuentran, pues éste ha ocasionado graves repercusiones humanitarias. También hicieron un llamado a los organismos internacionales de derechos humanos “para que cumplan con su labor de vigilancia para que no se ejecute ni masacre a los pueblos originarios y a las organizaciones sociales”. Afirmaron, al igual que sus predecesores en la participación, “que en Guerrero la cosa está muy grave, vivimos una etapa desastrosa e inhumana”.
Por su parte, los colectivos “Decolonize this Place” y “Semillas Collective” compartieron la situación que se vive en Palestina debido a la militarización. En voz de uno de sus integrantes, denunciaron la ocupación ilegítima por más de 100 años de los territorios palestinos y que, al igual que las luchas de resistencia aquí en México, allá también luchan por la vida y en contra de una guerra que “combina neoliberalismo, colonialismo, apartheid, corrupción, guerra, crimen, todo en el nombre de la defensa de la ley y el orden del Estado y los partidos”. Y lanzaron la pregunta: ¿De qué manera es posible luchar contra esa maquinaria de muerte? A lo que respondieron: “De todas las formas posibles”. Con la digna rabia, creando sistemas propios de defensa y de solidaridad y uniendo las luchas para “amplificar nuestras voces”.
Una compañera de la India compartió su reflexión en torno al “mismo enemigo colonizador de Palestina” y la importancia para otras luchas de la cosmovisión zapatista y los principios del CNI. Aseveró que, como en México y muchos otros países, la India tiene partidos que se revisten de izquierda pero no lo son, y ello se observa en la lucha constante de los pueblos originarios contra la minería, problema que también afecta a aquellos territorios. Al igual que en Chiapas o en Guerrero, allá también se ha utilizado la militarización y la paramilitarización para reprimir las resistencias.
Como parte del contexto local, se reconoce que en la CDMX también se libra una lucha contra el despojo y la discriminación, misma que la comunidad Otomí radicada en la colonia Roma ha librado desde hace más de 20 años. En palabras de compañeras representantes de la dicha comunidad: “Tenemos que organizarnos y defender lo que es nuestro porque eso es lo que pelearon nuestros antepasados desde muchos años atrás. Desde hace más de 500 años estamos sufriendo lo mismo: el despojo y la discriminación. Por eso hemos venido caminando, porque nos sentíamos igual que los zapatistas: solos”.
Los testimonios compartidos por los participantes en el conversatorio sirvieron para reflexionar y comprender el papel de la militarización en esta etapa neoliberal del capital. Su presencia se traduce en desaparición y desplazamiento forzado, asesinatos y un sin fin de violaciones a los derechos humanos. Urge pues “desmontar esta guerra de los poderosos en contra de la vida y de la humanidad”.
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En el transcurso de las semanas recientes hemos documentado diversos hostigamientos y amenazas contra La 72, Hogar-Refugio para personas migrantes, ubicada en Tenosique, Tabasco. Las 87 organizaciones que conforman la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos” (Red TDT), expresamos nuestro apoyo y solidaridad ante esta nueva ola de agresiones, derivadas de su trabajo en defensa de los derechos de las personas migrantes.
Desde su apertura en 2011, La 72 ha acompañado a más de 100 mil personas migrantes en su paso por México en busca de condiciones de vida digna. La 72 ofrece asistencia humanitaria, asesoría y gestión migratoria, realiza acciones de incidencia nacional e internacional y también ha denunciado a autoridades, crimen organizado y redes de trata y tráfico de personas. Todo ello con el objetivo de generar mejores condiciones de tránsito para las personas que se ven obligadas a hacerlo. Realizan un trabajo totalmente gratuito con un alto sentido de dignidad. Desafortunadamente, han recibido amenazas y hostigamientos por parte del crimen organizado, y autoridades estatales y federales.
Sin embargo lo que hoy nos resulta sorpresivo e inaceptable es que, en el contexto de la actual política de control y disuasión de la migración, y tras los señalamientos públicos vertidos por el Presidente Andrés Manuel López Obrador sobre un presunto mal manejo de dinero en albergues, instancias públicas del estado de Tabasco, busquen criminalizar y difamar a esta organización que es parte de la Red TDT.
En este sentido, el anuncio de la Unidad de Inteligencia Financiera de Tabasco (UIFT)FOOTNOTE: Footnote criminaliza a priori el trabajo de las personas y organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes. Es claro que sus señalamientos en torno a lo que llaman la “detección de operaciones de lavado de dinero en albergues para la atención de migrantes en territorio tabasqueño” tienen el claro objetivo de criminalizar el legítimo trabajo de defensa de los derechos de las personas migrantes, así como debilitar la estructura civil de protección y acogida a personas migrantes en México.
De la misma forma, las declaraciones del subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación (Segob) Alejandro Encinas, en las que se basó el comunicado de la UIFT resultan preocupantes. Si bien Encinas las negó por medio de un tuit en el que señaló “Yo nunca he hecho las declaraciones ahí señaladas y mucho menos la Subsecretaría de Derechos humanos, población y migración de @SEGOB_mx hace trabajo de inteligencia financiera”, lo que se requiere es un posicionamiento institucional claro por parte del Subsecretario que, en términos legales, es el responsable máximo de temas de migración y derechos humanos en nuestro país.
Nos resulta muy llamativo que tras situaciones recientes que pretenden poner en entredicho la labor que realiza La 72, venga este acto intimidatorio y criminalizante desde el ámbito estatal. Nos referimos concretamente a la nota de un periódico estatal, así como perifoneos locales, en los que se realizan acusaciones infundadas contra el albergue, pero particularmente contra su director, Ramón Márquez. Además de esto, La 72 enfrenta de forma reiterada a actos de vigilancia, acoso y amenazas.
Así, el hostigamiento y las agresiones oficiales que hoy se concretan contra La 72, se constituyen en un mensaje muy claro para las personas y colectividades defensoras de migrantes: por encima de la soberanía, están los acuerdos con Washington y será criminalizado quien suponga un obstáculo a los deseos de Trump.
Por ello, hoy más que nunca:
Exigimos el cese inmediato del proceso de criminalización contra La 72 y las personas y colectividades defensoras de derechos humanos de personas migrantes.
Instamos al Gobierno de la República a reiterar su compromiso con los derechos humanos, evitando criminalizar a un sector fundamental de la sociedad que ha mostrado un profundo compromiso con quienes llegan a México en busca de refugio, lo cual es emblemático del pueblo mexicano.
Exigimos que se establezca un proceso de diálogo entre gobierno y organizaciones de la sociedad civil, orientado a distinguir los patrones que ocurren en el contexto del acompañamiento solidario a las personas migrantes en tránsito, de aquellos que utiliza el crimen organizado para sus actividades.
Finalmente hacemos un llamado a la sociedad para cerrar filas en torno a las personas defensoras de migrantes. La historia de nuestro pueblo no debe estar escrita por un despotismo indolente, sino por una solidaridad receptiva y generosa.
Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos”
(conformada por 87 organizaciones en 23 estados de la República mexicana):
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San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México.
A 21 de junio del 2019
Boletín No. 21
Rechazamos la cotidiana discriminación en contra de la comunidad LGBTTTIQA+
El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, AC (Frayba) nos unimos a las diferentes acciones globales por 50 años de lucha y resistencia por la igualdad de los derechos de la comunidad Lesbica- Gay- Bisexual- Transgénero- Transexual- Travesti- Intersexual- Queer – Asexual y otras identidades. (LGBTTTIQA+)
Es necesario avanzar en la deconstrucción de una sociedad machista, patriarcal, homofóbica, transfóbica y lesbofóbica, construir una sociedad inclusiva que estimule a adultos, jóvenes, niñas y niños a respetar las diferencias. El desafío es enfrentar y erradicar la discriminación y la violencia cotidiana tanto en los espacios públicos como en los privados.
Rechazamos todas las formas de discriminación en contra de la comunidad LGBTTTIQA+ que se basen en la manifestación o expresión por parte de una persona y/o colectivo de su orientación sexual, identidad y/o expresión de género.
El Frayba cuenta con información que en el marco de las acciones antipriarcales que se están realizando en San Cristóbal de Las Casas, integrantes de la Colectiva Chuvajetik han sido víctimas de actos de agresiones verbales, discriminación, así como mensajes de burlas, hostigamiento y amenazas de muerte a través de las redes sociales.
La Colectiva Chuvajetik ha trabajado durante tres años por los derechos de la comunidad LGBTTTIQA+ en San Cristóbal de Las Casas, fundamentalmente en acciones de sensibilización a la población para visibilizar la homofobia y la discriminación, hacia la construcción de una sociedad respetuosa e incluyente.
Las defensoras y defensores de derechos humanos de la comunidad LGBTTTIQA+, familiares y colectivos que las respaldan, se encuentran en riesgo y vulnerabilidad ya que se enfrentan a actos que violentan la vida, la integridad y la seguridad personal.
Recordamos que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha indicado que: «Los Estados deben generar un clima de respeto en donde todas las personas, incluidas las personas LGBTI, y quienes defienden sus derechos, puedan expresar sus pensamientos y opiniones sin temor a ser atacadas, criminalizadas o estigmatizadas por hacerlo».
El Frayba solicita a las autoridades del estado de Chiapas brinde las protección necesaria y suficiente para las personas participantes de la Marcha por el Reconocimiento y Respeto de Todas las Formas de Amar, que se realizará el 22 de junio de 2019, de la Unidad administrativa al parque de Los Héroes, en San Cristóbal de Las Casas; en el marco del mes del orgullo de la diversidad sexual.
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«No es cosa de otro mundo lo que nosotros hacemos», dicen dos compañeros del Concejo Indígena y Popular de Guerrero – Emiliano Zapata (CIPOG-EZ). «Es la forma en que vivimos, como viven los pueblos». Tranquilos a pesar del hostigamiento, las amenazas y el dolor por sus cuatro compañeros recientemente asesinados, cuentan cuál es el objetivo central de su organización: la reconstitución de los derechos de los pueblos amuzgos, tlapanecos, nahuas, mixtecos y mestizos de Guerrero.
No es casualidad que su horizonte coincida casi perfectamente con el lema del Congreso Nacional Indígena (CNI). Prácticamente desde su fundación, el CIPOG-EZ ha formado parte del CNI. En 2017, Lucio Bartolo Faustino —asesinado el 4 de mayo pasado junto a Modesto Verales Sebastián— fue elegido concejal del Concejo Indígena de Gobierno (CIG) y acompañó, junto a los pueblos de la Montaña de Guerrero, el recorrido de María de Jesús Patricio, Marichuy, por esa región. Uno de los compañeros del CIPOG-EZ lo dice claramente: trabajan «para que los siete principios [del mandar obedeciendo] se realicen, para que no sean solo un sueño».
Precisamente por esos principios, las decisiones y los proyectos que acompaña el CIPOG-EZ se construyen desde abajo, tejiendo consensos en asamblea. La educación, la salud, la agronomía y la seguridad autónomas se construyen así: «nuestra propuesta se basa en el proceso de la plática con los pueblos».
Ese proceso, insisten, no es un ‘invento’ del CIPOG-EZ. Es la forma en que de por sí los pueblos se organizan. Las comunidades que conforman hoy el CIPOG-EZ tienen una historia centenaria de lucha que, en los últimos 25 años ha cristalizado en el movimiento por la autonomía de Guerrero: el Consejo Guerrerense 500 años de resistencia; la Coordinadora Regional de Autoridades Indígenas primero y la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) después.
En 2014 los pueblos organizados en torno al CIPOG-EZ buscaron reconstituir sus sistema de seguridad y justicia comunitarias, acompañando la formación de la policía comunitaria de la CRAC de los Pueblos Fundadores (CRAC-PC-PF). Hasta hoy, el principio es el mismo: más allá de cualquier institución, las decisiones sobre la vida colectiva las toman los pueblos mismos a través de sus asambleas. El nombre no es, tampoco, una ocurrencia: las comunidades son las fundadoras y depositarias de la herencia de lucha por la autonomía en Guerrero, las que han acompañado el caminar del CNI y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
Fotografía: Cristian Leyva
Desde entonces, cuentan los compañeros, los pueblos han buscado construir «una alternativa de vida, propia de las comunidades». Esa alternativa es un verdadero horizonte, es la forma de vida de los pueblos. En 2015 se fundó en el ejido Buenavista, municipio de San Luis Acatlán, Radio Zapata: una emisora libre y comunitaria cuyo objetivo es fortalecer la defensa del territorio. Allí mismo, en un terreno donado por la asamblea se prepara la construcción de un Centro de Saberes, uno de los proyectos más ambiciosos del CIPOG-EZ. Así lo explican:
Los Centros de Saberes son una propuesta educativa para resolver en colectivo y de manera autogestiva nuestras demandas y necesidades: seguridad y justicia, defensa del territorio, alimentación, producción y mercado interno, información, educación y salud comunitaria. Para rescatar nuestra cultura, nuestra memoria y la experiencia de nuestras comunidades.
Por lo que se viene, pensamos que el futuro del Territorio Comunitario y el futuro de los pueblos Ñu savii, Me´phaa, Nahua y Ñomdaá requiere, ahora como antes, de la fuerza organizativa de nuestras comunidades y de la autonomía de nuestras instituciones y organizaciones.
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Este es un mensaje de preocupación por la vida, por la dignidad. Los que firmamos esta carta estamos preocupados por lo que está pasando, nuevamente, en aquel rincón olvidado del sureste mexicano que se convirtió en el corazón de la esperanza y la rebeldía, Chiapas.
Este no es un manifiesto ideológico ni una declaratoria de postura frente a los cambios políticos que están ocurriendo en México, es un mensaje de genuina preocupación por lo que se siente que se avecina en ese abajo que después de 25 años, de 500 años, sigue resistiéndose al exterminio y al olvido. Nos preocupan aquellos que durante un cuarto de siglo han luchado por su autonomía, que han puesto la dignidad por encima del pragmatismo político, que han sido un ejemplo de libertad en un mundo encadenado por el miedo, nos preocupan los Zapatistas.
Nos preocupa enterarnos de la creciente actividad militar en los territorios de las comunidades Zapatistas. Vemos que en medio de la compleja situación de seguridad que vive México, el camino de la militarización del país está tomando más fuerza aún. Es una señal de alerta que bajo la muy cuestionada estrategia en torno a la Guardia Nacional, ésta sea como ha ocurrido tantas veces una fuerza de “seguridad” que no distinga entre crimen y resistencia, entre crueldad y digna rebeldía. Es contradictorio que cuando los datos del propio Gobierno de México indican que la zona Zapatista es de las de más bajo índice delictivo, la estrategia de seguridad se dirija de manera amenazante ante esas zonas que son de los pocos santuarios de libertad y seguridad para el México de abajo. Eso más que una estrategia de seguridad parece una estrategia de guerra.
Aunque entre los firmantes estemos un conjunto diverso de personas que podemos ver la administración de Andrés Manuel López Obrador con esperanza o escepticismo, todos somos personas que soñamos con un Mundo distinto, mejor. Los que nos sumamos a estas palabras creemos que un cambio en México no puede ocurrir bajo una sombra de pragmatismo político, cediendo ante presiones que llevan al autoritarismo, al despojo y a la violencia en beneficio del 1%, ni con la descalificación de voces críticas que con su autenticidad y consistencia se han ganado el respeto del mundo.
Vemos un proceso creciente de hostilidad hacia resistencias auténticas, históricas y legítimas que se oponen a proyectos como el Tren Maya, el Corredor Transístmico y el Plan Integral Morelos, entre otros. Nos preocupa enterarnos de los recientes homicidios de integrantes del Congreso Nacional Indígena y del Consejo Indígena de Gobierno. Nos preocupa la posibilidad de que esta nueva administración, como sus antecesores, liberales o conservadores, nuevamente orille a los pueblos indígenas al borde del exterminio.
El mundo está mirando con ojos y corazón lo que pasa en México y en Chiapas.
¡Alto a la guerra contra los Zapatistas y los Pueblos Indígenas de México!
FIRMANTES INTERNACIONALES
Noam Chomsky
Arundhati Roy
Boaventura De Souza Santos
Raúl Zibechi
Yvon Le Bot
Michael Hardt
Oscar Olivera
Hugo Blanco Galdós
Jasmin Hristov
Joe Foweraker
Eric Toussaint
Michael Löwy
Carlos Taibo
Pedro Brieger
Manuel Rozental
Mauricio Acosta
Vilma Almendra (Continuar leyendo…)