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(Español) Día 84 en la huelga de hambre: el Tribunal israelí niega la apelación de al-Qiq para ser transferido a un hospital de Cisjordania y prácticamente lo condena a morir
Fuente: Resumen Latinoamericano

Maan / 16 de de febrero 2016.- El Tribunal Supremo de Israel rechazó el martes una solicitud del periodista en huelga de hambre, Muhammad al-Qiq, para ser trasladado a un hospital en la ocupada Cisjordania, dijo el jefe de la Comisión Palestina de los detenidos y Asuntos de ex detenidos.
Issa Qaraqe dijo que la decisión del tribunal israelí mostró su “persistencia deliberada de matar” a al-Qiq, un periodista palestino en su día 84 de huelga de hambre contra su “detención administrativa”.
Qaraqe caracterizó al Tribunal Supremo de Israel como una “herramienta de matar,” que “se dio cuenta” de que al-Qiq estaba al borde de la muerte, pero se negó a tomar la decisión de “salvar su vida”.
El comité médico en el Hospital HaEmek en Afula está considerando en las próximas horas o días, poner en marcha el tratamiento de alimentación por la fuerza, a lo que repetidas veces se ha negado al-Qiq.
Antes de la decisión del tribunal fue conocido un video de al-Qiq que muestra al periodista retorcerse en la cama del hospital gritando de dolor. La fecha exacta cuando se tomó el video es desconocido.
Truth will set us free
Eugenia Gutiérrez, colectivo Radio Zapatista
México, febrero de 2016.
¿Estigmatizada o nerviosita?
Pude haber sido santa. Tenía las marcas divinas, las de los clavos en las manos y en los pies. Amanecí cundida de llagas planas y oscuras que brotaron de la noche a la mañana en varios puntos de mi cuerpo, distribuidas de forma bastante simétrica. Me pasó algo como lo ocurrido a Francisco de Asís, María Magdalena de Pazzi, Catalina de Siena o Pío de Pietrelcina. Fue hace unos tres años, un día cualquiera. Las llagas inesperadas, que se mostraban solas o se agrupaban en pequeños cúmulos de cuatro y cinco, me provocaban dolor y comezón. Mi buena costumbre de tener limpias las uñas y mi decisión de soportar el suplicio y no rascarme hasta no saber qué ocurría, ayudaron a que las llagas no se infectaran tanto. Pero me asustaba verlas crecer en diámetro y altura de manera incontrolable.







