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Hay personas así… | ͶÀTIꟼAƆ ⅃Ǝ | Octubre de 2024

Hay personas así…

En los distintos rincones del mundo y en todo el planeta, en las partes y el todo, suele suceder que hay personas así…

  Que dice “NO”, cuando la mayoría asiente con resignado desinterés.

  Que levanta la frente, cuando la mayoría la inclina.

  Que descree, cuando el credo oficial se impone en la mayoría.

  Que tiene principios, cuando la mayoría inventa coartadas.

  Que busca verdad y justicia, mientras la mayoría se pierde.

  Que camina para encontrar, cuando la mayoría se sienta a esperar.

  Que lucha, cuando la mayoría se rinde.

  Que dice cuando habla, aunque la mayoría repita.

  Que, al mirarse en el espejo se encuentra, mientras las mayorías le exigen perderse en ellas.

  Que vela, aunque la mayoría duerma.

  Que se entrega, mientras la mayoría se administra.

  Que se insubordina, cuando la mayoría acata.

  Que es dispar, mientras la mayoría se asemeja.

  Que escucha hoy el tétrico sonido del mañana, aunque la mayoría sólo el ruido del pasado falso oiga.

  Que se inconforma, mientras la mayoría se resigna.

  Que abre los ojos, aunque la mayoría los cierre.

  Que grita, mientras la mayoría se ensordece con consignas.

  Que se abre paso, batiéndose entre escombros, sangre, huesos, lodo y mierda, eligiendo destino, ritmo y compañía, mientras la mayoría traga los sapos que aparecen en la trillada ruta de la mentira.

  Que ni perdona ni olvida, aunque la mayoría profese la religión de la apatía.

  Que piensa críticamente, mientras la mayoría consulta el dogma de moda.

  Que lucha porque es su deber, y no para ser parte de la mayoría.

  Que es apenas una grieta, cuando la mayoría se hace muro.

  Esas personas.  Tan pequeñas.  Tan distintas.  Tan diferentes.  Tan minoritarias.  Tan necesarias.

  Esas personas ahí están.  Aunque no sean nombradas, aunque la mirada del Poder no las tome en cuenta, aunque no las escuchen arriba, aunque no aparezcan en encuestas y estadísticas.

  Esas personas…

  Para ellas nuestro corazón.

  Nuestro oído atento a su mirada.

  Nuestra palabra buscándolas.

  Nuestro abrazo común a pesar de geografías y calendarios.

  Para ellas, y con ellas, la fiesta de los encuentros…

Desde las montañas del Sureste Mexicano.

El Capitán.

México, octubre del 2024.

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La Voz de la Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal

Las Abejas de Acteal | Agresión en Campamento Nuevo Yibeljoj, antecedentes y contexto

Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal
Tierra Sagrada de los Mártires de Acteal
Acteal, Chenalhó, Chiapas, México

Al Congreso Nacional Indígena
Al Consejo Indígena de Gobierno
A la Vicaría de Justicia y Paz de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas
A las y los Defensores de los Derechos Humanos
A los Medios Libres y Alternativos
A los Medios de Comunicación Nacional e Internacional
A la Sociedad Civil, Nacional e Internacional

Hermanas y hermanos:

Denunciamos agresión en el Campamento Por la Paz de Nuevo Yibeljoj perteneciente a la Organización Las Abejas de Acteal, reinstalado el pasado 6 de agosto del año 2024[1].

Hechos

PRIMERO: A las 8 de la noche del día 28 de septiembre del presente, llegaron en el Campamento Civil Por la Paz de Nuevo Yibeljoj en estado de ebriedad pero no inconscientes los señores Elías y Juan, ambos de apellidos Méndez Gómez pertenecientes al paraje Centro Nuevo Yibeljoj afiliados al municipio oficial de Chenalhó. INSULTARON A LOS COMPAÑEROS INTEGRANTES DE LAS ABEJAS DE ACTEAL, DESPUES se retiraron. Una hora después como a las 9 de la noche, regresaron CON MAYOR AGRESIVIDAD. Elías Méndez llegó insultando ADEMÁS DICIENDO que lo que hacen Las Abejas no está bien, que “el terreno en donde están no les pertenece, porque no colaboran en la comunidad…” MIENTRAS TANTO Juan empezó a jalar y romper la lona con la que cubrimos nuestra casita construida el pasado 6 de agosto. Después, Elías empezó a jalar la lona y LUEGO AVENTÓ HACIA FUERA JUNTO CON UNA LÁMINA. LOS COMPAÑEROS QUE ESTABAN AHÍ DE GUARDIA le pidieron a JUAN Y ELIAS que se calmaran y se retiraran del lugar, que el asunto se puede resolver de manera pacífica con sus autoridades. Antes de retirarse Elías Méndez se presentaron como, “los grupos de borrachos bravos”, que, “no le tienen miedo a nada” y que pueden, “destruir toda la casa si quieren”.

DESPUÉS DE QUE SE RETIRARON DEL CAMPAMENTO, LLEGARON jactándose en la tienda del señor Domingo Sántiz Sántiz predicador evangélico de la iglesia pentecostés quién también esta persona nos acusó de “provocadores”, durante una audiencia que tuvimos el pasado 5 de septiembre en la presidencia de Chenalhó.

SEGUNDO: EL SEÑOR Elías Méndez Gómez, DE NUEVA CUENTA, el día 29 de septiembre del mismo año, increpó a UNO DE NUESTROS COMPAÑEROS en las inmediaciones del Campamento Nuevo Yibeljoj. FUE JALONEADO POR ELÍAS MIENTRAS EL DECÍA QUE que estaba preparado para unos tiroteos.

TERCERO: Aclaramos, que Elías Méndez Gómez, ya había venido a insultarnos dos veces antes; en una de ellas golpeó el espejo de la camioneta de uno de nuestros compañeros que la tenía estacionado en nuestro campamento.

CUARTO: Otro caso de agresión FUE POR PARTE DEL SEÑOR MIGUEL VÁZQUEZ PÉREZ DEL PARAJE YIBELJOJ CENTRO QUIEN AGREDIÓ A UNO DE LOS HIJOS DE NUESTROS COMPAÑEROS YA AGREDIDO. LA AGRESIÓN DEL SEÑOR MIGUEL VAZQUEZ CONSISTIÓ EN TOMARLO DEL CUELLO DE FORMA VIOLENTA y que le dijera si están entrenando para ser del grupo “El Machete”.

(Continuar leyendo…)
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CDH FrayBa

Denunciamos el incremento de la violencia a integrantes del Frayba

San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México
19 de septiembre de 2024

Boletín No. 22

Denunciamos el incremento de la violencia a integrantes del Frayba

    • Allanamiento, amenaza de muerte, difamaciones, seguimiento como los actos más frecuentes.

    • Reafirmamos nuestro compromiso de seguir caminando al lado del pueblo organizado que defiende sus derechos humanos.

El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba) tiene 35 años de promover y defender los derechos humanos en Chiapas. En esta travesía por la defensa de derechos, ha documentado y acompañado a víctimas y sobrevivientes de graves violaciones a derechos humanos que buscan acceso a la justicia frente a la impunidad, principalmente en el marco del Conflicto Armado Interno que aún no se ha resuelto.

Desde su inicio, el Frayba ha sido objeto de constante vigilancia, intimidación, hostigamiento y amenazas tanto de agentes no estatales vinculados a los gobiernos, autoridades estatales, federales y del Ejército mexicano, así como pronunciamientos públicos estigmatizantes por parte de altos funcionarios, por realizar el trabajo de defensa de los derechos humanos, el cual ha molestado los señalamientos de las violaciones a derechos humanos que cometen. El común denominador es la falta de investigación, identificación y castigo a los responsables.

Desde 2021, hemos alertado el incremento de la violencia y violaciones de los derechos humanos en Chiapas.

Desde el mes de enero en Palacio Nacional y directamente por el presidente Andrés Manuel López Obrador hemos registrado cuatro ataques, agresiones y deslegitimación de nuestro trabajo. Lo que ha desatado una serie de actos en cascada de agresiones digitales a nuestras cuentas institucionales.

En los meses de julio, agosto y septiembre hemos documentado amenazas de muerte y recientemente el allanamiento a la casa de un integrante del Frayba como un modo de intimidación y de amenaza. Los comentarios hostiles, la difamación y el desprestigio a nuestro trabajo sigue siendo una constante. Se suma la extorsión, intimidación, vigilancia y agresiones verbales, y varios de ellos vienen de actores vinculados a los gobiernos municipal, estatal y federal.

A pesar de que el Frayba cuenta con Medidas Cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el Estado mexicano no ha garantizado la protección de las personas defensoras de derechos humanos que integran el Frayba. Las omisiones del Estado al no realizar una investigación seria y exhaustiva encaminada al conocimiento de la verdad sobre los hechos y las fuentes de riesgo dado a conocer, afecta el trabajo diario, tiene un efecto amedrentador para ejercer la defensa de los derechos que se reclaman de manera justa ante la autoridad que violenta, porque sabe de facto que existe un pacto de impunidad.

En el marco de la Declaración de Naciones Unidas sobre el derecho y el deber de los individuos, los grupos y las instituciones de promover y proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales universalmente reconocidos, es fundamental destacar que, toda persona tiene derecho a promover y procurar la protección y realización de los derechos humanos y libertades fundamentales en los planos nacional e internacional. Además, cada Estado tiene la responsabilidad primordial y el deber de proteger, promover y hacer efectivos todos los derechos humanos y libertades fundamentales, por tanto, el Estado mexicano tiene la obligación de garantizar y proteger a toda persona frente a toda violencia, amenaza, represalia, discriminación, negativa de hecho o de derecho, presión o cualquier otra acción arbitraria resultante del ejercicio legítimo de la defensa de los derechos humanos.

Lo anterior reflejan el compromiso de la comunidad internacional para asegurar que los derechos humanos sean respetados y protegidos en todas las circunstancias, y que los Estados desempeñen un papel activo en la promoción y protección de estos derechos.

Es claro que el Gobierno no cumple a cabalidad con la protección en el territorio mexicano, hoy estamos en medio en una crisis profunda de los derechos humanos y una violencia generalizada y criminal que se decanta en todas las esferas de la vida, el gobierno de la Cuarta Transformación no pudo, no puede parar la vorágine de la violencia, al contrario, los riesgos van en aumento y con ello a quienes defiende los derechos humanos tal como es en Chiapas.

A pesar de la ineptitud gubernamental, desde el Frayba, reafirmamos nuestro compromiso de seguir caminando al lado del pueblo organizado que defiende sus derechos humanos con el mismo espíritu de solidaridad, esperanza y humanismo que aprendimos de jTatik Samuel. Hacemos un llamado a la sociedad civil nacional e internacional para pronunciarse y sumar la voz de exigencia por el respeto al trabajo de promoción y defensa de los derechos humanos para seguir construyendo la paz. Nos solidarizamos con los pueblos, organizaciones y colectivos que han sido reprimidos y criminalizados por defender sus derechos, su tierra y territorio, estamos convencidos que desde abajo y a la izquierda estas las alternativas para seguir tejiendo organización y comunidad.

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Un maratón en las montañas del sureste mexicano | ͶÀTIꟼAƆ ⅃Ǝ | Septiembre de 2024

UN MARATÓN EN LAS MONTAÑAS DEL SURESTE MEXICANO.

Septiembre del 2024.

  Hace semanas, los grupos de jóvenes zapatistas tuvieron reuniones para ver cómo podían promover el tema del común entre ellos y con los jóvenes partidistas.

  Tuvieron entonces la idea de un maratón (de 23 kilómetros) en caminos de terracería con pendientes pronunciadas (es decir, “lomas” -como les decimos acá-).

  En su plan se trataba de que no hubiera premios de beneficio personal entre los que ganaran.  En cambio, el objetivo era que el premio fuera una base productiva para empezar primero con los colectivos de sus pueblos.  De ahí el siguiente paso es que se puedan crear proyectos del común, donde se involucren a los jóvenes partidistas.

  Los premios fueron entonces animales de pie de cría de pelibuey y de animales de granja.  Aunque las parejas de pelibuey serían para los primeros lugares, todas y todos los participantes tendrían la paga para comprar pollos e iniciar sus proyectos para granjas colectivas.  El GAL (Gobierno Autónomo Local) de cada pueblo, va a cuidar que se cumpla el compromiso y va a pedir informes.

  Esto fue lo que me explicaron que harían y (son zapatistas pues), así lo hicieron.

  Eligieron la fecha del 16 de septiembre para así celebrar el inicio de la guerra de independencia y el lugar que en ese proceso -y a lo largo de toda la historia de esta geografía llamada “México”-, tuvieron y tienen los pueblos originarios.

  Según me cuentan los Tercios Compas de la zona (Nota: los “Tercios Compas” son grupos de jóvenes zapatistas que hacen el trabajo de medios de comunicación: desde tomar videos, editarlos, hacer grabaciones, programas de radio y sonidistas; hasta “cubrir” lo que acontece en sus pueblos, regiones y zonas), el maratón inició a las 3 de la mañana hora nacional (4 de la mañana hora zapatista suroriental), y, desde dos puntos de partida, convergerían en el Puy (o “caracol”) de Dolores Hidalgo.  Habría categoría de “jóvenas” y de jóvenes, es decir, de mujeres y varones.

  Aunque no había límite de edad, se inscribieron unos 200 jóvenes y “jóvenas” zapatistas.  Su edad promedio andaba por debajo de los 20 años, pero la mayoría son jovencitas y jovencitos de entre 12 y 16 años.

  Los grupos juveniles que no participan corriendo en el maratón, se organizaron de modo que unos cubran la salida con consignas de animación; otros de la llegada con porras y dianas; otros van en camiones animándolos en el camino por si alguien se desmaya, y con música y palabras del común a su paso por las comunidades; y otros se encargan de las pláticas sobre la independencia, la entrega de los premios a quienes participaron, y el baile del final.

  Quienes llegaron primero lo hicieron unas 3 horas después de la salida.  Pero la mayoría todavía estaba a un tercio o la mitad del camino.  Se consultaron entre quienes eran coordinadores sobre si ya se recogía y se trasladaba en los camiones a los faltantes.  Se acordó que les fueron preguntando a quienes estaban en camino.

  Según me cuentan, las compañeras a las que se les ofreció que se subieran al camión, lo rechazaron respondiendo, palabras más, palabras menos, algo como “Claro que no. De por sí vamos a llegar a donde hay que llegar, de repente dilata, pero vamos a llegar, aunque sea arrastrándonos”.  Al saber de esa respuesta, los varones tuvieron que negarse también a ser “rescatados”.

  Y, en efecto, todas y todos fueron llegando.  En la noche bailaron.  Y así fue como transcurrió el festejo del 16 de septiembre… en las montañas del Sureste Mexicano.

Doy Fe.

El Capitán.
México, septiembre del 2024.

P.D. DE MORALEJA FRENTE A LA TORMENTA. – Hubo varones y compañeras que mantuvieron el paso y el ritmo, y completaron el desafío en los primeros lugares.  Los demás explicaban: “es que se prepararon con tiempo porque ya sabían lo que iban a enfrentar”.

P.D. CHISMOSA DE AUTOGOL DE GÉNERO. – El enviado especial zapatista en el lugar de los hechos me cuenta: “Los varones llegaron a la meta y se derrumbaron agotados.  Con calambres y cubiertos de tierra, tirados en la explanada del caracol, sólo escuchaban las consignas y la bulla.  Uno de los corredores confesó: “uh compa, acaso estoy pensando de baile, ahorita me duele hasta la gorra”.  En cambio, las compañeras sólo tomaron agua y preguntaron a qué hora iba a ser el baile.  Mientras un grupo de jovencitas reía y bromeaba entre sí sobre cómo habían terminado, una de ellas declaró: “Preguntamos de la hora del baile para ver si alcanzamos a bañarnos, o nos bailamos así como estamos de por sí, que ya somos del color de la tierra”.  Todas sonreían contentas.  Habían completado 23 kilómetros de una ruta ingrata, en cuyas lomas hasta los vehículos automotores batallan.

  Mmh, creo que esto no lo voy a poner.  Sería reconocer que las compañeras tienen más resistencia que los compañeros, y la solidaridad de género me impide hacerlo.  Así que borren esta parte.

P.D. AL CHISME. – Y tal cual, a la hora que empezó el baile, sólo las jóvenas levantaban el polvo al ritmo de las cumbias.  Sólo después de un buen rato, y en lo que se llama “orgullo de género”, los varones se incorporaron.  Renqueando y haciendo muecas de dolor, pero sin perder la compostura, decían: “Estamos bien, es sólo un nuevo modo de bailar que acabamos de inventar y que se llama “Cumbia de Esto te pasa por no prepararte para lo que viene”.

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  Ecos de un baile lejano y un teclado compiten con grillos desentonados.  Un chispazo y el olor de tabaco apenas delinean una figura en el dintel de la champa.  La noche es ya reina y señora en las montañas del sureste mexicano.  Arriba la madrugada, con una nagua de estrellas y una luna de borde mellado como medalla en el pecho, mueve las caderas al ritmo de la “cumbia del Común”.

De nuevo doy fe.
El Capitán.

Imágenes y videos grabados por Los tercios Compas
Audio «En la noche», Amparanoia y Manu Chao 

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La Voz de la Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal

Las Abejas no podemos callar la verdad ni quedarnos al margen de la realidad que vivimos, la violencia continua su proceso de deshumanización

Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal

Tierra Sagrada de los Mártires de Acteal

Acteal, Chenalhó, Chiapas, México.

13 de septiembre del 2024

Al Congreso Nacional Indígena

Al Consejo Indígena de Gobierno

A la Comisión Interamericana de Derechos Humanos

A las y los Defensores de los Derechos Humanos

A los Medios Libres y Alternativos

A los Medios de Comunicación Nacional e Internacional 

A la Opinión Publica 

Hermanas y hermanos:

 

Hoy nos encontramos para unir nuestras voces en un solo grito, el grito urgente de la ¡PAZ! Desde 1997 hasta este año 2024, cada mes denunciamos la impunidad que vivimos por la masacre de Acteal, exigiendo la no repetición, pero las masacres se han multiplicado a lo largo y ancho de nuestro estado, sin embargo, estamos aprendiendo de nuestros mártires representados en las cruces, signo de la entrega no violenta de Jesús, a dar luz con su palabra. “Ustedes son luz para el mundo, no se puede esconder una ciudad construida sobre un cerro. Ni tampoco se enciende una lámpara para ponerla debajo de un cajón sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en la casa. (Mt. 5, 14-15) Estamos aquí, porque creemos que en medio de las tinieblas tenemos que dar razones de la luz que guíen nuestros pasos hacia la paz.

Porque nos preguntamos ¿Cómo llegamos en nuestro estado, a ser controlados por los señores de la muerte? Controlados por las empresas que saquean nuestros recursos naturales, controlados por el crimen organizado, y controlados por el gobierno estatal, y los presidentes municipales, sospechosos de ser cómplices de los grupos armados, ¿será qué por eso operan y controlan los pueblos con el poder del dinero y de las armas, detrás del poder político? 

Ya no sabemos quién gobierna el estado, quién informa con otros datos al presidente de la república Andrés Manuel López Obrador, que afirma, que la violencia es propaganda de los conservadores, negándose a creer en la verdad de nuestra palabra y sufrimiento. 

Sentimos que las autoridades caminan al revés, como lo muestran los hechos que se vive en los diferentes Municipios: El ejército, detiene a la gente, y no a los criminales, el pueblo pone los muertos y la Guardia Nacional protege a los sicarios. Las autoridades locales esconden su irresponsabilidad en los gobiernos estatal y federal, mientras el crimen organizado, actúa con impunidad: obligan a los jóvenes a trabajar para ellos, en los enfrentamientos los ponen al frente como carne de cañón, bloquean caminos, controlan la circulación, saquean las casas, desplazan comunidades, disparan armas de alto calibre, detonan bombas con drones, sembrando el miedo y el terror por donde pasan… porque saben que no habrá consecuencias, porque no les importamos. A las familias y personas que se niegan a tomar partido, las amenazan y/o asesinan, sin que los defienda quienes tienen la obligación por ley, de proteger sus derechos más elementales.

Las Abejas no podemos callar la verdad ni quedarnos al margen de la realidad que vivimos, la violencia continuúa su proceso de deshumanización, de pueblo en pueblo y de comunidad en comunidad, pero tenemos la esperanza, en que los caminos de la verdad, del amor, la justicia que nos llevan a la paz siempre han ganado. Pareciera que el mal es invencible, pero al final, sabemos que fue vencido por el Resucitado, esta es nuestra verdad y nuestro camino. 

“Y por eso nosotras y nosotros, hoy, estamos llamados a ser actores de esperanza”.

Jtotik Samuel Ruiz 

A todas nuestras hermanas y hermanos que les han robado LA PAZ y la tranquilidad Nuestra oración y nuestra solidaridad 

Y porque la paz es una necesidad humana, que necesitamos, para vivir en armonía,

 EXIGIMOS a los tres niveles de gobierno:

• Una LEY RETORNO que de seguridad a todos los desplazados para el regreso a sus respectivas comunidades. 

• DESARMEN a los grupos armados y, 

• GARANTIAS de SEGURIDAD a todos los habitantes de Chiapas 

¡VIVA LA PAZ Y LA NO VIOLENCIA!

Desde Acteal, Casa de la Memoria y Esperanza.

Atentamente,

La Voz de la Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal.

____________________________________________________________
Victorio Pérez PacienciaJuan Pérez Santis
PresidenteTesorero 
  
______________________________
Alfredo Jiménez Pérez
Sub Presidente


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Provincia Eclesiástica de Chiapas |Diócesis de San Cristobal | Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez | Diócesis de Tapachula

Comunicado de la Provincia Eclesiástica de Chiapas en el marco de la Peregrinación por La Paz en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez

Foto de portada: Radio Pozol

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Un Cuento. El Pájaro T´i. | ͶÀTIꟼAƆ ⅃Ǝ | Septiembre de 2024 | #EZLN

Un Cuento.

El Pájaro T´í.

  Fue a la hora del pozol.  Las compañeras insurgentas me platicaron de los múltiples accidentes, caídas y choques forzados en sus aprendizajes de andar en bicicleta.

  Lo de choques forzados es explicable: cuando perdían el control de la bicicleta y se olvidaban de frenar, elegían rápidamente dónde estrellarse para, así, detenerse.  En veces un árbol, otras el portón de un potrero y, las más de las veces, una zanja.

 Les pregunté por qué no mejor sólo frenar.  Así me respondieron: “De por sí lo pensé, pero la bici no entiende lo que pienso.  Hasta le grito, pero no obedece y se sigue, y entonces entra mi miedo”, explicaba una compañera mientras la sanitaria le hacía curación de los arañazos y heridas que consiguió, ya lo imaginarán, cuando decidió “detenerse” contra un alambre de púas.  Sí, podía ser peor, ahí cerca abundan las cuevas.

  “Pero si te avisaron”, le dice otro compa, “clarito lo escuchaste al pájaro”.

  ¿Qué pájaro?, pregunté.

  “Es un pájaro que te avisa que algo malo puede pasar.  No es que de por sí va a pasar, sino que tal vez pasa si no estás alerta y preparado.”

  De ahí siguió una discusión sobre el nombre del pájaro.  Unos decían que “Tii”, otras que “Titil” o “Titil Mut”.  El Subcomandante Insurgente Moisés, que maneja otra variante de la lengua tzeltal, dijo que es “T´í”.

  “En cho´ol le decimos “Tyi’j”, me informa una compañera, “cuando lo encontramos en el camino empieza a gritar, como que si fuera que se asusta y rápido se va volando.  Y ahí donde dicen eso de que está avisando que algo malo va a pasar

  Dos compas insurgentes mecánicos (uno de vehículos automotores y el otro de bicicletas), me explicaron: “que sea que te alerta, te avisa, te advierte que algo malo puede pasar.  Por ejemplo, que hay nauyaca, o viene carro, o que se va a ponchar la llanta…

  “O que te vas a caer de la bici”, agregan mientras miran el desastre que el “frenado radical” dejó en el brazo de la compañera.

  “No es que va a pasar, como quien dice, irremediablemente.  Pero te avisa y ahí tú ves si le haces caso o no”.

  Después de multitud de anécdotas (casi todas ellas de cuando su niñez), que confirmaban los avisos del pájaro “T´i”, quedaron discutiendo: una compañera decía que “depende, si es que hace tres veces y como que está muy apurado, es que está cerca la desgracia y, ni modos, tienes que prepararte”.  Otra: “pero si regresa y hace así (ella prolonga el monosílabo del canto, “tiiii”), quiere decir que era su mentira o que ya pasó el peligro”.

  Unos días después, antes de iniciar la práctica con la bicicleta, el pájaro cantó varias veces.  Todos lo escucharon, pero pensaron que el peligro era para alguien más, no para ellos en lo individual.

  Por supuesto que alguien se cayó y se raspó la rodilla.

  “Es que no lo hiciste caso al pájaro, si claro te está diciendo que te puedes caer”, le reclaman.

  “Sí lo hice caso, pero pensé que no a mí me va a pasar, sino a ti porque no limpias la cadena y la tienes toda oxidada”, se defiende.

-*-

  En todas las partes de ese todo que llamamos “Planeta Tierra”, la naturaleza advierte, alerta, avisa que algo malo puede pasar.  Las ciencias y las artes replican la advertencia.

  Hay quien entiende y se prepara.

  Hay quien entiende, pero piensa que no es a él al que le va a pasar.

  Hay quien entiende, pero se dice a sí mismo que él usa automóvil particular y no bicicleta.

  Y hay quien no entiende el cuento.

Tan-tan.

Desde las montañas del Sureste Mexicano.

El Capitán.
México, septiembre del 2024.

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Imágenes de Puentes Imposibles: III. Una Carta | ͶÀTIꟼAƆ ⅃Ǝ | Agosto de 2024

Imágenes de Puentes Imposibles:

III

Una Carta.

Agosto del 2024.

  En realidad, la carta es muy breve.  Llegó desde el Cauca, en la geografía llamada Colombia, con una solicitud del pueblo originario hermano Nasa.  Creo fue a finales del 2022.  Esperen… sí, llegó el 31 de octubre de 2022.  Los hermanos Nasas pedían que se difundiera un artículo en la página de Enlace Zapatista, o sea que se publicara ahí.

  Yo leí el texto con atención, confronté los datos y pensé: “si se publica en la página, nadie le va a hacer caso.  Y creo que lo que les interesa no es tener muchas “vistas”, sino que lo que ahí se dice lo lean y entiendan acá, en las montañas del Sureste Mexicano.  Entonces vamos a hacer algo mejor que publicarlo en la página de Enlace Zapatista: lo voy a pasar a la dirección política organizativa zapatista.  Que sean ellas y ellos los que lo valoren como lo que es: un puente imposible.”  ¿Por qué “imposible”?  Ahora lo verán:

  En esos días, las compañeras y compañeros jefes estaban ya discutiendo y desmenuzando lo que un año después, sería conocido como “El Común”.

  Las reuniones eran frecuentes, intensas y agotadoras.  Lo sé porque me asomé a varias de ellas y por lo que me iba platicando el Subcomandante Insurgente Moisés.

  Ya desde entonces se asomaba “El Común” en el horizonte, pero en ese momento estaban en las preguntas “¿Qué somos?”, “¿Dónde estamos?”, “¿A dónde vamos?”

  El impacto que la llamada “Gira por la Vida. Capítulo Europa” había tenido en el zapatismo producía su efecto.  Durante semanas, en las reuniones del Comité y en las asambleas de las comunidades, las distintas delegaciones que visitaron las variadas geografías de la Europa de abajo y a la izquierda, informaron basándose en sus apuntes.

  Con y por las delegaciones, el zapatismo había constatado la destrucción que la “modernidad” y el “progreso” producen en los territorios “desarrollados”, la mal llamada “civilización occidental” -que, paradójicamente, está al oriente nuestro-.  Y habían encontrado la semejanza con los diferentes en todos los sentidos: la resistencia y la rebeldía frente a la Hidra, el sistema capitalista.  El todo y las partes.

  En palabras del Subcomandante Insurgente Moisés, coordinador de ese capítulo de la Gira por la Vida: “Está cabrón, tenemos que apurarnos”.

  El balance era para preocupar:

  El proceso acelerado de destrucción del tejido social en México;

 los fracasos evidentes de las izquierdas electorales (el “progresismo”) ya no digamos en transformar las bases de un sistema criminal, también en administrarlo así fuera en la medianía de la mediocridad (erigir la “corrupción” como fuente y causa de todos los males, en lugar de verla como lo que es: un efecto… y fracasar también en el combate a ella), la “toma del Poder” – en realidad la llegada al gobierno por cualquier vía-, no era sino un relevo en el puesto de capataz (presuntuoso, soberbio y autoritario con la peonada, y dócil y humilde con el finquero);

 las protestas cada vez más fuertes y terribles por parte de la naturaleza frente a las guerras de conquista del Capital;

 el avance coordinado del llamado Crimen Organizado y los megaproyectos;

 la migración y las poblaciones desplazadas (los países desarrollados asediados por los efectos de las guerras y políticas de conquista en los llamados territorios “periféricos”);

 la violencia cruel y sádica contra mujeres y otroas (la agresión a lo diferente como nueva religión fanática);

 la niñez convertida en víctima propiciatoria (el sistema sacrificando el futuro de la humanidad en el altar de la ganancia);

 el resurgimiento de las guerras con argumentos nacional-fascistas;

 la normalización de la catástrofe; el colapso pues;

 todo llevaba a una conclusión aterradora: lo que habíamos previsto y advertido décadas antes (y que entonces fue objeto de burlas y desprecios), se estaba cumpliendo.

  El futuro de entonces es ya el presente.

  Pero todo esto ya lo sabe usted.  Que obre en consecuencia, pues ya es otra cosa.

-*-

  Pero volviendo a la carta del Cauca que pedía difusión del texto, le pasé el escrito al Subcomandante Insurgente Moisés y le llamé la atención sobre una parte.

  El Subcomandante leyó el texto y la parte subrayada, levantó la mirada y me preguntó: “¿Tú les contaste?”.  “Claro que no”, les respondí, “no conozco a esos hermanos”.  El SubMoy: “Es que es como si hubieran estado en las reuniones”.

  Y es que, en reuniones de meses previos, el comité, la dirección política-organizativa zapatista había estado discutiendo de los “ismos”.

  La parte subrayada del texto dice:

  En el camino aprendimos que la voz que enseña es Uma Kiwe, nuestra Madre Tierra; ella indica el camino y las estrategias… aunque no han faltado quienes quieran ponerse como asesores del proceso o dar la línea.  Hubo un momento, en 2016, en que el proceso decidió abrir sus puertas a otras luchas para conversar y visibilizar. A partir de allí empezaron a llegar todos los ismos, y todos quisieron poner su línea o evangelizar nuestro proceso con sus contenidos teóricos.

  Todos esos ismos, ecologismo, anarquismo, marxismo, feminismo, maoísmo, institucionalismo, desarrollismo son todos construcción y legado de Occidente, y aunque en los territorios se van tejiendo con los saberes autóctonos, llevan el sello de la racionalidad occidental. Todos los ismos han sido muy valiosos en apoyo y juntanza con este proceso; algunas personas se han mostrado respetuosas; otras, colonialistas. En su momento fue necesario decir: «todos los ismos son bienvenidos, pero aquí somos y vamos a seguir siendo indígenas nasas». La liberación de la Madre Tierra va más allá de los cañaduzales. El saber nasa, que viene de Uma Kiwe, es el sustento de esta lucha, y si tenemos contradicciones es precisamente por esa batalla que se da en el corazón entre nuestro ser nasa y la imposición occidental capitalista.

  Frente a la falsa disyuntiva entre la institución o la revolución, los pueblos proponen rutas alternativas para habitar este presente; las coordenadas del debate desbordan un esquema cartesiano, y nos muestran, con sus formas de habitar y organizarse en la minga, la asamblea, la celebración, las tulpas y rituales, otros modos de vida posibles. Cuando nos preguntan: «¿Rebelión? ¿Revolución? ¿Reforma? [decimos que] lo nuestro es el wët wët fxi’zenxi»

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  En las reuniones de meses anteriores, los comités habían estado recapitulando su historia y, en ella, el paso de todos los “ismos” habidos y por haber, dando órdenes.  Ninguno aportó nada que valiera la pena.  Y claro, también que hubo y habrá gente que sólo vino a sacar lo que podía.  Y se fue cuando ya no pudo sacar más.  No eran “ismos”, sólo eran, y son, unos sinvergüenzas.  Y unas (no olvidar la paridad de género).

Vale.  Salud y acá, además de lodo y dignidad, lo que hay es un “ismo” muy otro: zapatismo.

Desde las montañas del Sureste Mexicano.

El Capitán.

Agosto del 2024.

P.D.- El texto completo se puede consultar en https://www.ecologiapolitica.info/63-andrea-fajardo-camacho/

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Imágenes de Puentes Imposibles: II. Un Libro | ͶÀTIꟼAƆ ⅃Ǝ | Agosto de 2024

Imágenes de Puentes Imposibles:

II

Un Libro.

Agosto del 2024.

El libro llegó unos días antes.  En ese entonces las jefas y jefes zapatistas estaban en una reunión.  Analizan, valoran, proponen.  El tema es el común.  Ojalá y el Subcomandante Insurgente Moisés algún día les haga saber el resultado del balance.  O sea, cómo va todo esto del común en tierras zapatistas.

  El asunto es que estaba yo preparando una plática que me tocaba dar.  Y entonces llegó el libro.  Sólo lo hojeé.  Está en una lengua que desconocemos, que desconozco, y que, después de investigar, supe que era “esloveno”.  Supongo que hay una edición en inglés (se adivina en el índice), pero a nosotros nos mandaron la edición en “esloveno”.

  Llevé entonces el libro a la reunión y se los mostré a los jefes y jefas.  Les pregunté por qué o qué había pasado para que su palabra, como zapatistas, apareciera en un idioma que, hace más de 30 años, ni siquiera sabíamos que existía.

  Esperé unos segundos y seguí: “yo les voy a decir por qué.  Y les voy a contar una historia.  Su historia de ustedes.  La historia del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.”

-*-

  Al terminar la plática y en la hora del pozol, se arremolinaron en torno al libro.  Les pregunté qué decía el libro.  Sonriendo respondieron que no sabían.  Les dije: “Qué tal que nos están insultando y nosotros sin saber, porque no entendemos esa lengua”.  “No lo creo”, replicó uno de ellos, parte de la delegación, “porque nos invitaron y ni siquiera nos conocen, nos alimentaron, nos hospedaron en sus lugares de ellos y nos mostraron lo que es su lucha.  Nos enseñaron, pues.  Entonces quiere decir que nos respetan, así como nosotros los respetamos a ellos.  No creo que en este libro estén mal hablando”.

  Una compañera, también delegada, miraba fijamente el libro.  Lo tomó en sus manos y me dijo, con mirada retadora: “oí capitán sup, claro te digo que no entendemos su palabra que está aquí escrita.  Pero lo sabemos y entendemos su lucha porque estas personas nos lo mostraron.  O sea que lo vimos y lo aprendimos.  Así que no importa su lengua de esas personas, lo que importa es lo que son.  Y lo que vimos es que son personas luchadoras.”

  Otro compa interviene: “y son como nosotros los pueblos zapatistas, porque no les importa si eres de “otra” planeta, lo que vale es que luches contra la Hidra.  Porque “la” sistema no se fija qué lengua hablas, sino que como quiera te explota, te reprime, te roba, te desprecia.”

  Una compañera no ha dejado de reír.  Me dice: “cómo crees, capitán sup, si nos recibieron bien bonito, con cantos y cohetones.  Se miraba claro que estaba muy feliz y contento su corazón”.

-*-

  “Resulta que cuando llegamos en ese lugar teníamos miedo, pena. Teníamos miedo de hablar.  Porque vimos que son muy diferentes la gente de allá.  O sea, me refiero que son muy altos y nosotras chaparritas.  También ellos son hueros y nosotros de piel oscura.  Lo que si nos costó más es que no hablan el castellano, más que hablan su idioma.  En el momento que nos tocó dar la plática, como nos tocó con otro equipo de compas, ahí nos animaban los compas para empezar a dar la plática y sí empezamos.  Aunque la verdad si nos costó, porque cuando estábamos explicando, el traductor nos paraba cada rato porque tenía que traducir cada parte. Así fuimos acomodando.  Teníamos que hablar cachito por cachito para que se pueda traducir bien y completo. Y el traductor hay palabras en castilla que no entiende.  Nosotras teníamos que estar muy pendientes y concentradas para no perder en la cabeza lo que tenemos que explicar.   O sea que son diferentes en todo, pero son como nosotros en la lucha.”

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  “Es en Los Balcanes”, me aclaró antes el Subcomandante Insurgente Moisés.  “Ellos no se organizaron como países para la Gira por la Vida, sino por toda una zona que así le dicen de los Balcanes.  Bien organizados estaban.  Como no reconocen fronteras, entonces no están peleando que si tú eres de tal país o de tal modo.  Cuando les estoy platicando del zapatismo, les dije que nos acusaron de querer “balcanizar” el país.  Y entonces aplaudieron y gritaron.  Ya luego entendí que para ellos esa palabra quería decir “unir cuando hay acuerdo”, porque, a pesar de guerras muy fieras, ellos se luchan juntos, pero separados.  Se unen en la lucha contra la división que les ponen los de arriba.  Pero no es que hay quien manda y quien obedece, no.  Se ponen de acuerdo.  Se coordinan pues.  Y también trabajan la tierra.  O sea que también luchan por la vida.  Para nosotros, con el viaje, que sea la Gira, lo que cambió es que antes no sabíamos que hay otros pueblos como nosotros que no se rinden al monstruo y que se rebelan.  Lo de los Balcanes fue un muy buen aprendizaje, porque ellos se unen, pero no pierden su independencia o sea su particularidad.  Cuando hay algo común, entonces rápido se ponen de acuerdo y, sin perder lo que es cada quien, se hacen uno.  O sea que están separados, pero juntos.  Si alguien entenderá lo del común que nos proponemos, son esas organizaciones hermanas.  En la ruta de los Balcanes estaba el todo y las partes.”

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  Sigue el Subcomandante insurgente Moisés: “Como, al igual que el pueblo Saami, no se presentaron como país, me reuní con ellos para ver cómo querían ser nombrados.  Ellos respondieron cosas como esta:”

  Para nosotros, la redacción correcta es la ruta de los Balcanes. Ésta no es (sólo) descripción geográfica, sino principalmente política.

 Durante siglos, los Balcanes han sido el Otro de Europa, la parte salvaje, indómita, incivilizada de Europa: un campo de pruebas de todo tipo de explotación colonial, bélica, capitalista y extractivista, por un lado, y un espacio en el que todos los estereotipos orientalistas de Europa están presentes, proyectado en el otro.

 Ha sido un espacio de grandes conflictos nacionalistas, resultando en muchas guerras, incluida la de los 90 que fue para nuestra generación, nacida en la última década de la Yugoslavia socialista, una experiencia muy formativa cuando éramos niños.

Entonces, cuando nosotros, como anarquistas, antifascistas y antiautoritarios comenzamos a ser políticamente activos, la perspectiva balcánica siempre fue clara para nosotros: la única forma de superar las divisiones nacionalistas y el odio es construyendo los Balcanes desde abajo, conectando cada colectivo y movimiento en ellos. Durante las últimas dos décadas (desde los años de la antiglobalización, la lucha contra las guerras en Afganistán e Irak, y más tarde todas las luchas de trabajadores, estudiantes, solidaridad migrante, feministas, medioambientales, etc., se realizaron a través de los Balcanes.

  No estamos conectados en una organización, más bien, funcionamos como colectivos independientes en cada territorio (conocidos como diferentes estados balcánicos, como Eslovenia, Croacia, Serbia, Rumania, Bulgaria, Grecia, Macedonia, Kosovo, etc.). Tenemos un evento común una vez al año (Balkan anarchist Bookfair), que es un espacio de encuentro y reflexión para todos los colectivos que de otra manera operan en sus propios territorios.  En ocasiones, como en el caso de la visita zapatista, o la ruta migrante en 2015, trabajamos juntos en esta red descentralizada de solidaridad balcánica.

Entonces, en resumen, para nosotros el concepto de Ruta de los Balcanes es un concepto político, y preferimos usarlo, en lugar de hablar de actividades en cada país. La preparación de la visita zapatista se hizo a través de reuniones comunes de todas las coordinaciones nacionales en diferentes territorios, y siempre tuvo ese sentimiento internacional balcánico, para trabajar juntos y crear un espacio común de lucha.

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Vale.  Salud y que los intentos de hegemonía y homogenización no arruinen todo… de nuevo.

Desde las montañas del Sureste Mexicano.

El Capitán.
Agosto del 2024.

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Imágenes de Puentes Imposibles: I. Un Rábano… | ͶÀTIꟼAƆ ⅃Ǝ | Agosto de 2024

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I

Un Rábano…
(O una cebolla, depende del caso, o cosa, según)

Agosto del 2024.

  No, no me refiero a que me importe un ídem lo que digan en contra por defender a su precioso preciso.  Ni de que, como “progresistas”, son rojos por fuera y blancos por dentro. Hablo de un rábano rábano.  De la verdura, pues, que llaman “rábano”.

  Esta pequeña historia empieza en el Viaje por la Vida, capítulo Europa.  Antes de que salieran, le pedí a unos compañeros y compañeras que me mandaran fotos de lo que vieran y les llamara más la atención en los lugares que les tocarían.

  Y en efecto.  Después de las fotos y videos de la salida, de cómo se quedaron inmovilizados en un aeropuerto porque perdieron la conexión (gracias al apoyo del equipo de apoyo), empezaron a llegar imágenes de distintos lugares.

  No, contra lo que se pueda pensar, las fotos no eran de monumentos, sitios turísticos, paisajes, paseos o selfies.  Eran de las cosas que les llamaban la atención, gracias a la importancia que la delegación le daba a quienes eran sus anfitriones: personas, grupos, colectivos, organizaciones y movimientos tan distintos en color, tamaño, raza, lengua, cultura y motivación, que parecía imposible que una misma mirada pudiera abarcarles.  Sin embargo, en la mirada zapatista se unían.  “Nuestra familia de acá”, decían cuando caminaban los suelos de la Europa insumisa, la que no desmaya, la que no se rinde.  Ahora, ya en tierras zapatistas, no es raro escuchar “nuestra familia de allá”.

  Había fotos de animales, de plantas, de las comidas que recibían, de la gente, de las montañas, de los “modos” de las familias de “allá”.

  De entre todas, la que más me llamó la atención fue la foto de un rábano.  Claro que yo, como enemigo a muerte de las verduras, pensé que era una cebolla morada.  Incluso así la catalogué: “foto de cebolla morada”.

  Ya luego, cuando regresaron, la compañera que tomó la foto me aclaró que no era cebolla, sino un rábano.  Con emoción cuenta:

  “Acaso es cebolla.  Es un rábano, pero muy otro.  Es de diferente tamaño y de otro color, pero por dentro es rábano.  O sea que es muy diferente que acá en mi hortaliza, pero es igual.  Y estaba muy bonito el rábano.  Y también siembran puerro.  Que es diferente, pero es igual.  Y lo que me llamó la atención es que cultivan, o sea que trabajan, para darles a otras personas que no tienen comida.  O sea que no es que lo quedan con el fruto de su trabajo, sino que lo comparten con los que necesitan.”

  “Y esas familias de allá, ¿acaso se desaniman?  No, aunque no hay tierra para sembrar, lo buscan el modo.  Por ejemplo, pura piedra y como quiera lo hacen su hortaliza.  Lo que hacen es ir a buscar buena tierra, la acarrean y la ponen sobre la piedra o en macetas.  ¡Y ahí lo tienen su hortaliza!”

  “Yo antes tenía mi hortaliza sólo en la milpa.  Pero en el viaje aprendí que también se puede en la casa.  Entonces también hice hortaliza en el sitio donde vivo.  Y tengo rábanos y puerros.  Son diferentes a los de la familia de allá, pero son iguales.”

  “No, que no es cebolla, es un rábano.  El lugar se llama “Bulgaria”, capital del país que se llama “Sofía”.  Le corregí entonces y ella sólo dijo “es lo mismo”, y siguió:

  “Habíamos estado antes en una geografía que se llama “esloveña” y ahí también aprendimos de sus modos de cómo son y cómo luchan.  En Francia nos tocó quedar abandonadas.  Y mientras nos tocó quedar en la casa de una compañera que no hablaba nada de español, y yo pues hablo cho´ol así que mi español es muy otro.  Mi equipo era de puras mujeres, tzotzil, tzeltal y cho´ol, y nuestro trabajo era dar plática de como mujeres que somos.  Entonces nos había acompañado una ciudadana de México que se tuvo que regresar a su casa.  Y cuando se fue nos dijo “no se preocupen, aquí les voy a instalar una aplicación que traduce.  Ustedes sólo le hablan al celular y ya el celular lo escucha, lo traduce y lo habla en la lengua que le digan”.   Pero tras que el celular no entiende el “espa-cho´ol”, ni el “tzotsi-ñol”, ni el “tzelta-ñol”, entonces traducía otra cosa diferente a lo que queríamos decir.  Y la compañera que nos daba posada, pues nomás se reía.  Y sufrimos un poco bastante, porque queríamos ir al baño y no sabemos dónde es.  Y no sabemos cómo decirle a la compañera.  Y ni modo de hacernos ahí frente a ella.  Pero con señas entendió y ya nos mostró dónde es.”

  “Es que no llegó el equipo que nos va a llevar a otro lugar.  Y nosotras, porque éramos varias compañeras que quedamos botadas ahí, pensamos si ya nos vamos a quedar ahí toda la vida.  Y luego, pues no sabemos mero el modo de esa geografía.  O sea que sufrimos.  Pensamos si ya vamos a morir y estamos tristes porque ahora quién va a cuidar la milpa y los animalitos.  Pero entonces pensamos que no hay problema, porque seguro los compañeros zapatistas van a ver de cuidar.  Pero ya luego nos encontraron y nos rescataron, y ya”.

  “Estábamos organizadas, como de por sí.  Entonces pues hacía mucho frío y está oscuro, y en la casa de la compañera de Francia no tienen luz.  O sea, no tiene luz de la ciudad, sino que tiene su propia luz.  Tiene su luz aparte.  Entonces prendimos las luces de la casa y, mientras unas preparábamos el desayuno, otras están viendo de calentar agua para bañar.  Y tras que entonces empieza a sonar una alarma muy fuerte y salimos corriendo porque pensamos que la casa va a explotar.  Corrimos a buscar a la compañera, que ya es de edad y siempre está sonriendo, y le contamos de la desgracia.  Pero ella mucho se reía y luego, con el traductor, nos explicó que no se puede todo al mismo tiempo.  Que cada cosa a su tiempo.  Nos reímos también.  Pero antes íbamos a morir del susto.”

  “Esa compañera vive sola.  No le da miedo.  No vive en la ciudad.  Ella prefirió vivir en la montaña.  Y ahí lo tiene su casa, en medio de la montaña.  Está en una organización que lucha en contra de los centros nucleares.  Y ahí tiene sus compañeras de lucha.  O sea que está sola, pero no.  También está acompañada”.

  “No puedo decir su nombre de la compañera porque no sé si es su nombre civil o de lucha, entonces pues no.  Y sí tenemos fotos de ella, pero no podemos publicar porque antes hay que pedirle permiso, o sea si autoriza.  Y entonces hay que usar el traductor y mandar hasta su casa, pero no tiene señal de celular ahí.  Pero sí cuéntalo la historia.  De repente sus compañeras lo leen y le cuentan a ella cuando la vean.”

  “Ella nos pidió que dejáramos nuestra huella como pintura en unos como costales.  Para acordarse de nosotras, dijo.  Nosotras le pusimos “Gracias.  Los llevamos en nuestros corazones”.  Y es cierto, esa compañera nos dejó huella con su corazón.  La verdad es que sí nos hallamos con la compañera.  O sea que sí estábamos perdidas, pero no.  Porque con esa compañera nos hallamos”.

  “No, acaso estamos pensando del marido o el novio.  No, ni nos acordamos.  Lo que extrañábamos era la milpa y los animalitos.  Pero no lo vayas a publicar eso, porque yo a él le dije que sí lo pensé mucho”.

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  Odio decirlo, pero parece que la verdura es la política por otros medios.

Vale.  Salud y, como no dijo Lenin, la calabaza es el enemigo principal.

Desde las montañas del Sureste Mexicano.

El Capitán.
Agosto del 2024.