Noticias:

mujeres

image/svg+xml image/svg+xml
radio
Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo UCIZONI y Campamento Tierra y Libertad

Carta abierta al presidente Andrés Manuel López Obrador: UCIZONI

Señor Presidente:

Por este medio le damos nuestra palabra para decirle que: en la ejecución del megaproyecto Corredor Interoceanico del Istmo de Tehuantepec, desde marzo de 2019 y hasta esta fecha se han venido violando de manera constante los derechos de los pueblos indígenas. Ejemplo de ello fue la gran cantidad de irregularidades que caracterizaron a las consultas indígenas, siendo por ello meras simulaciónes. Hemos venido denunciando que el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec se ha venido imponiendo a través del engaño y la violencia. Se ha criminalizado a los pueblos que se oponen al proyecto; la represion judicial es un claro ejemplo de lo que aquí señalamos, por lo que al menos 47 autoridades locales y defensores comunitarios de los ejidos Mixes de Paso Real, Estación Sarabia, Mogoñe Estación y más recientemente a hombres y mujeres mixes de Mogoñe Viejo, así como de otras comunidades istmeñas han sufrido y sufren persecución judicial.

Señor presidente Andrés Manuel López Obrador no se puede justificar la agresion policiaco militar, no se pueden defender los violentos desalojos ocurridos el 21 de marzo y 28 de abril en contra de ejidatarios y ejidatarias mixes de Mogoñe Viejo, Guichicovi Oaxaca. Señor Presidente, la lucha de los pueblos no debe ser descalificada ya que es falso que sea un reclamo económico de una familia, y que existan líderes nylon. La lucha del pueblo de Mogoñe Viejo ha sido y es encabezada por la autoridad comunitaria que atiende el mandato de la asamblea. Por ello desmentimos sus declaraciones, y más que justificar la represión le solicitamos que usted atienda la demanda y reclamos de los pueblos. No es reprimiendo y dividiendo a los pueblos como se construirán un presente y un futuro justo para nuestras comunidades, las cuales son las dueñas históricas de las tierras del Istmo de Tehuantepec. No lo olvide usted.

Atentamente.

Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo UCIZONI y Campamento Tierra y Libertad.

A 5 de mayo 2023.

radio
Cátedra Jorge Alonso

Invitación: 𝑰𝒏𝒕𝒆𝒓𝒏𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒂𝒍𝒊𝒔𝒎𝒐 𝒄𝒓𝒊́𝒕𝒊𝒄𝒐 𝒚 𝒍𝒖𝒄𝒉𝒂𝒔 𝒑𝒐𝒓 𝒍𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂

Estamos a unos días de la Conferencia Inaugural que dictará Gilberto López y Rivas para la Cátedra Jorge Alonso 2023.

¡Les esperamos!

𝐂𝐚́𝐭𝐞𝐝𝐫𝐚 𝐉𝐨𝐫𝐠𝐞 𝐀𝐥𝐨𝐧𝐬𝐨 𝟐𝟎𝟐𝟑
𝑰𝒏𝒕𝒆𝒓𝒏𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒂𝒍𝒊𝒔𝒎𝒐 𝒄𝒓𝒊́𝒕𝒊𝒄𝒐 𝒚 𝒍𝒖𝒄𝒉𝒂𝒔 𝒑𝒐𝒓 𝒍𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂: 𝒉𝒂𝒄𝒊𝒂 𝒍𝒂 𝒄𝒐𝒏𝒔𝒕𝒓𝒖𝒄𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒅𝒆 𝒉𝒐𝒓𝒊𝒛𝒐𝒏𝒕𝒆𝒔 𝒇𝒖𝒕𝒖𝒓𝒐𝒔 𝒅𝒆𝒔𝒅𝒆 𝒍𝒂𝒔 𝒓𝒆𝒔𝒊𝒔𝒕𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂𝒔 𝒚 𝒂𝒖𝒕𝒐𝒏𝒐𝒎𝒊́𝒂𝒔

LINKS PARA EL PÚBLICO – INSCRIPCIONES A LAS SESIONES DE CADA DÍA:
𝐂𝐨𝐧𝐟𝐞𝐫𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚 𝐢𝐧𝐚𝐮𝐠𝐮𝐫𝐚𝐥 (9 de mayo): Las resistencias de los pueblos originarios como el internacionalismo del siglo XXI: https://bit.ly/40oJ0qh
𝐌𝐞𝐬𝐚 𝟏. (16 de mayo) La importancia de las mujeres en los procesos revolucionarios: https://bit.ly/3zdb2Ji
𝐌𝐞𝐬𝐚 𝟐. (23 de mayo) Otro arte, otra cultura y otros medios de comunicación: https://bit.ly/3TP9uyL
𝐌𝐞𝐬𝐚 𝟑. (30 de mayo) El internacionalismo en el siglo XXI para transversalizar las luchas: https://bit.ly/3ZiSDW4
𝐌𝐞𝐬𝐚 𝟒. (6 de junio) Opciones civilizatorias frente a la crisis global: https://bit.ly/3nwHnIk

Evento convocado desde la Cátedra Jorge Alonso, el CIESAS, la Universidad de Guadalajara.

radio
El rumor de las multitudes

Reflexiones hacia la despatriarcalización y desjerarquización de la academia

English
Português

Nos manifestamos por mundos despatriarcales y desjerarquizantes

Publicado el 28 de abril de 2023 en El rumor de las multitudes

Las denuncias públicas por abuso sexual y extractivismo intelectual contra Boaventura de Sousa Santos nos han interpelado a reflexionar colectivamente sobre los retos encaminados hacia la despatriarcalización y desjerarquización de la academia.

Ante la publicación de la entrevista a la Weychafe, compañera e intelectual Moira Millán, en el diario El Salto, así como del capítulo intitulado “The walls spoke when no one else would: Autoethnographic notes on sexual-power gatekeeping within avant-garde academia” –“Las paredes hablan lo que nadie más dirá: Notas auto-etnográficas sobre el poder-sexual como control de acceso en la academia progresista” (Viaene, Laranjeiro y Tom)”–, no solamente no podemos callar sino que debemos señalar que, desde tiempo atrás, hemos venido levantando la voz y llevando a cabo acciones concretas personales y colectivas, en nuestros propios espacios académicos, universitarios, activistas, organizacionales y en nuestras colectivas, redes y movimientos para denunciar, combatir las jerarquías de saber/poder intrínsecas a la Academia, así como la violencia de género, el acoso y el abuso sexual. Sin embargo, reconocemos que todo lo que hemos logrado hacer y caminar sigue siendo insuficiente y requiere no parar, redoblar esfuerzos, tejer más y más luchas, sintonizarnos mejor para poder parar/transformar de raíz las actuales guerras y violencias contra las mujeres, la Madre Tierra, les otres, les niñes y los pueblos del mundo.

No podemos olvidar que el patriarcado es la forma más antigua de dominación. La humanidad aprendió a dominar en el cuerpo de la mujer, como bien lo afirman los diversos feminismos de Afro/Abya-Yala/Latinoamérica. El patriarcado es una configuración onto-epistémica que privilegia la jerarquía, la apropiación, la negación de lxs otrxs, el control, el fetichismo de las cosas, la reproducción, la violencia y las guerras. Moldea profundamente las subjetividades y afecta la vida de todes. La Academia ha sido uno de sus pilares más efectivos, pues ha participado activamente en la creación de dicha visión de mundo instrumental, objetivizante, competitiva y jerárquica a través de sus prácticas naturalizadas de saber/poder.

(Continuar leyendo…)

radio
El rumor de las multitudes

Reflexões rumo à despatriarcalização e deshierarquização da academia

Español
English

Manifestamo-nos por mundos despatriarcais e deshierárquizantes.

Diante da publicação da entrevista com a Weychafe, camarada e intelectual Moira Millán, no jornal El Salto, assim como o capítulo intitulado “The walls spoke when no one else would: Autoethnographic notes on sexual-power gatekeeping within avant-garde academia” – As paredes falaram quando ninguém mais faria: Notas auto etnográficas sobre o poder-sexual como controle de acesso na academia progressista (Viaene, Laranjeiro e Tom)–, não somente não podemos permanecer em silêncio, mas devemos ressaltar que, há algum tempo, temos levantado nossas vozes e ações pessoais e coletivas concretas, em nossos próprios espaços acadêmicos, universitários, ativistas, organizacionais. Para, portanto, em nossas coletivas, redes e movimentos denunciar, combater as hierarquias de conhecimento/poder intrínsecas à academia, bem como a violência de gênero, o assédio e o abuso sexual. No entanto, reconhecemos que tudo o que conseguimos fazer e encaminhar ainda é insuficiente e exige não parar, redobrar nossos esforços, tecer mais e mais lutas, sintonizar-nos melhor para parar/transformar radicalmente as guerras e violências atuais contra as mulheres, a Mãe Terra, outres, niñes e os povos do mundo.

Não podemos esquecer que o patriarcado é a forma mais antiga de dominação. A humanidade aprendeu a dominar no corpo das mulheres, como afirmam os diversos feminismos de Afro/Abya-Yala/América Latina. O patriarcado é uma configuração onto-epistêmica que privilegia a hierarquia, a apropriação, a negação dxs outrxs, o controle, o fetichismo das coisas, a reprodução da violência e das guerras. Ele molda profundamente as subjetividades e afeta a vida de todes. A Academia foi um de seus pilares mais eficazes, pois tem participado ativamente na criação de tal visão de mundo instrumental, objetificante, competitiva e hierárquica, através de suas práticas naturalizadas de saber/poder.

A crise civilizatória pela qual transita o planeta Terra é o resultado do cis-heteropatriarcado em sua conexão histórica com o capitalismo, os colonialismos, o antropocentrismo e as hierarquizações raciais, sexuais e capacitistas. Este é o contexto complexo que invocamos ao denunciar as múltiplas formas de violência contra as mulheres, que têm sido uma constante na história. É a mesma origem que desencadeou o Terricídio (Moira Millán), uma poderosa cosmopolítica conceitual cunhada pelo Movimento de Mulheres Indígenas e Diversidades pelo Bem Viver, que teve origem no Puelmapu Mapuche há já uma década.

Diante da intensificação da barbárie cis-heteropatriarcal com as crises policêntricas, reafirmamos nossa determinação de fazer o que já temos feito e não apenas dizendo ou subscrevendo: continuar a lutar encarnada, diária e situacionalmente para avançar em direção à criação de sociedades verdadeiramente pós-patriarcais, pluriversas, centradas no cuidado, na cooperação, na liberdade e erradicação de todas as formas de hierarquia subordinante – sociedades nas quais todas, todos e todes, junto com os demais seres vivos, possam coexistir “nosótricamente” (em radical alteridade), em mútua criação e, como nos diz a ecofeminista venezuelana Liliana Buitrago, no exercício amoroso da interdependência (“chat” do “Pacto Ecosocial del Sur”). Nosso compromisso com este projeto coletivo em construção tem sido –e é– de nosso trabalho diário. Mas sabemos que ele ainda requer a criação sustentada de sociedades e academias (portanto, com um “a” minúsculo e no plural) muito diferente das atuais.

A Academia: um campo de disputa

A Academia (com A maiúscula e no singular) é para nós um campo de disputa e aí estamos, sem dúvida, posicionadas(os) todos e todas nós que ousamos entrar nele, dialogar com ele, desafiá-lo, habitá-lo e/ou co-construí-lo a partir da prática cotidiana. Muitas(os) de nós ocupamos este espaço por decisão e convicção e sabemos minuto a minuto o que estamos enfrentando. É por isso que o manifesto “Todos sabemos” nos ressoa e interpela quando afirma que o extrativismo epistêmico é estrutural e não apenas um evento isolado na academia. Quando afirma que a Academia é hierárquica e hierarquizadora e que promove a acumulação de poder por aqueles que estão no topo. Muitos deles, nos últimos tempos, têm sido acusados de abuso e assédio moral e sexual. Neste contexto, as mulheres que denunciam são questionadas, enquanto o denunciado se apresenta, então, como uma “vítima”.

Vale acrescentar que, em geral, os sistemas de denúncia de assédio sexual e moral, bem como o extrativismo epistêmico, longe de abordar e reparar os danos, muitas vezes resultam em meras declarações que dão a impressão de que algo será feito, mas no fundo “servem como movimentos performativos que validam o não fazer realmente nada” (por exemplo, Sara Ahmed). De igual maneira deve-se ter em conta que, tanto a forma que toma o assédio como as respostas institucionais, são frequentemente diferenciadas, especialmente quando se trata de acadêmicas, ativistas e intelectuais de grupos subalternizados e racializados. Quem se importa com elas? (Yu Derkys) Quem está disposto a ouvir estas queixas? Quantas mulheres racializadas e subalternizadas não estão cansadas de falar e falar e de que ninguém as escute? Quem está disposto a arranjar tempo para ouvir e ser interlocutor no meio do não-tempo-violento-e-sistêmico em que vivemos?

A Academia não deixa de ser um reflexo de uma sociedade semeada de opressões e rebeliões, com a diferença de uma autonomia reconhecida para proteger o pensamento crítico. Isto é, muitas vezes, instrumentalizado para proteger aqueles que ocupam posições de poder. Os abusos sexuais, tal e como acontece no resto da sociedade, são a parte visível de um sem-fim de práticas cis-heteropatriarcais e machistas que vão desde a cumplicidade entre acadêmicos(as) ao publicar e recircular citações, até os abusos e assédios sexuais que tem sido e estão sendo constantemente denunciados.

Mulheres indígenas e a Academia

Em novembro de 2018, em Buenos Aires, em um jantar informal para compartilhar nossas vidas e lutas, a companheira Moira Millán compartilhou com vários de nós o que agora foi publicado no jornal El Salto. À distância, pode-se perguntar: por que Moira o compartilhou apenas em um espaço privado? Por que ela não havia apresentado a correspondente denúncia legal? Em sua entrevista, Moira menciona suas razões. Se somos severamente autocríticos, podemos nos perguntar: por que nós –seus ouvintes– não agimos contundentemente e, naquele exato momento, a instamos e acompanhamos a apresentar a denúncia correspondente junto às instituições acadêmicas às quais o denunciado pertencia ou com as quais colaborava, em um claro papel de liderança intelectual transnacional? Diante do que ouvimos, o que fizemos? 1) Apoiar Moira e o movimento do qual ela faz parte, nos espaços acadêmicos para os quais a tínhamos convidado. 2) Articular incansavelmente –vários de nós– com ela e com o movimento, assim como com outras companheiras e movimentos, para buscar melhores maneiras de enfrentar as violências e expropriações. 3) Fortalecer o tecido transnacional de alternativas autonômicas de facto e sem pedir permissão.

Vale acrescentar que no dia seguinte ao mencionado jantar, começou o painel para o qual tínhamos convidado Moira Millán e as compañeras do Movimiento de Mujeres e Diversidades Indígenas pelo Bem Viver, tudo no marco do “Primeiro Fórum Mundial do Pensamento Crítico” e da 8ª Conferência Latino-Americana e Caribenha de Ciências Sociais da CLACSO. Lá tivemos a oportunidade de fazer, com Moira, nossas outras convidadas e a plateia, o primeiro ato político-acadêmico para exigir um lugar decente para realizar nosso painel. Em seguida, procedemos a uma ocupação coletiva para ter acesso a um dos auditórios maiores. A gota d´água para este levante foi a acomodação impossível da cadeira de rodas na qual se transportava a colega feminista Mercedes Olivera (que em paz descanse), que era nossa comentarista. A cadeira de Mercedes não podia sequer caber no minúsculo espaço que nosso painel havia merecido. Após a ocupação, já no auditório grande, continuou a participação de Moira e de todas as mulheres indígenas convidadas por nosso Grupo de Trabalho “Corpos, Territórios, Resistências” (GT CUTER).

Um auditório lotado encorpou contundentemente o painel e a palavra das convidadas. De certa forma, o ato de rebeldia que protagonizamos –convidadas, anfitriãs e público–, se traduziu em algo como: Não passará um único tratamento indigno para as mulheres racializadas, subalternizadas! Estes eram tempos em que a CLACSO aprovava a entrada de mais e mais grupos de trabalho que incluíam mulheres líderes, intelectuais e sábias(os) de territórios comunais. Portanto, acreditamos que nossa “revolta coletiva” estabeleceu um precedente importante.

As palavras e ações de Moira estavam em sintonia com as nossas e nos ajudaram a ratificar o caminho –pessoal e coletivo– que trazemos durante décadas, antes de 2016, quando começamos a ser o Grupo de Trabalho CUTER: habitar as instituições acadêmicas e universitárias das quais fazemos parte, as instituições alternativas que estamos construindo com mulheres, as/os outres, povos em resistência, de forma digna e respeitosa, procurando não cair no ventriloquismo e no extrativismo. Abrir espaços dentro e fora das academias para ir posicionando o tipo de trabalho/vida/luta que elas e nós (“nosotras(os)”) praticamos.

Cotidianamente, nos diferentes territórios que habitamos (incluindo o território acadêmico), minuto a minuto, caminhamos com nossa corpa e senti-pensamentos, ações concretas para enfrentar as violências, opressões e guerras. Esta é a maneira pela qual diferentes membras do Grupo de Trabalho CUTER abraçamos, encorpamos e retecemos “a rede da vida” (Lorena Cabnal e a Rede de Curandeiros Ancestrais do Feminismo Comunitário Territorial) de mãos dadas com as mulheres indígenas, afrodescendentes, afrodiaspóricas, camponesas, populares, alter-urbanas, assim como de diversidades sexuais, em diferentes tempos e geografias.

As saídas do labirinto: insuficientes e perigosas

Respeitamos e compreendemos os diversos caminhos que as denunciantes de abuso e assédio sexual tomam na busca de justiça, reparação dos danos, assim como para conseguir a cura de toda a sociedade. Acreditamos que no centro de nossas reflexões e denúncias de assédio sexual e o extrativismo epistêmico deve estar o cuidado. É importante levar em conta o tempo daquelas(es) que, tendo sido violentadxs, compartilham suas experiências em confidencialidade. Respeitar o tempo para curar é uma forma de cuidado. Isto significa não tomar o direito de expor publicamente uma experiência de assédio sexual e extrativismo epistêmico sem o consentimento explícito e o acompanhamento da pessoa que foi violada. Fazer isso revitimiza e promove o punitivismo ao invés da reparação. Em poucas palavras, no centro estão as vítimas, seus tempos e momentos.

Em muitos casos, as denunciantes seguem a via legal ou jurídica. De fato, hoje, os movimentos de mulheres e movimentos de povos em resistência estão simultaneamente nos tribunais e nas ruas se mobilizando. Surge obrigatoriamente, então, a pergunta: de que tipo de justiça estamos falando? Como podemos alcançá-la? Qual via –das muitas possíveis– tomar? Quem nos sentimos chamadas(os) a acompanhá-las? E tudo isso sabendo que, mesmo nos países ditos “democráticos”, a justiça dispensada pelo Estado é comprada e em países não democráticos, mais de 95% da violência de gênero fica impune. Dito isto, não é estranho dizer que não podemos esperar muito da justiça cis-heteropatriarcal oferecida pelas instituições acadêmicas ou pelo Estado.

Sabemos que o aparelho punitivo e a cultura do castigo são parte essencial da estrutura do Estado e das sociedades modernas e que, através delas, se perpetuam as sociedades carcerárias articuladas à extração e a acumulação, com sistemas de justiça que afirmam manter a “segurança e a ordem”, ao mesmo tempo em que se enfurecem contra populações empobrecidas, marginalizadas e racializadas.

Como aponta um texto recente sobre o anti-punitivismo feminista, nenhuma saída está livre de contradições e complexidades. Além disso, estamos conscientes da importância de reconhecer que “o debate sobre o anti-punitivismo não pode cair na fácil tentação de acomodar-se com o teórico” (Laila Serra). Esta é a tentação institucional e academicista. Para o anti-punitivismo feminista, é necessário entrar na “tempestade política do pôr em prática” das justiças, embora o horizonte teórico-político possa/deva ser a autogestão feminista das violências e a visão abolicionista da sociedade e da justiça. Como bem dizem as autoras: “a autogestão coletiva das violências à margem do Estado [do aparato da lei e do aparato punitivo que lhe está subjacente] é uma alternativa que ainda está em construção” e, acrescentamos, apresenta outros riscos e desafios.

Somos testemunhas da digna rabia que Moira expressa em sua denúncia e com ela, muitas mulheres que não receberam a atenção necessária e que seguem padecendo a violência do sistema cis-heteropatriarcal, acadêmico e de despossessão em diferentes territórios. Como trabalhadoras(es) das Ciências Sociais, membros do GT CUTER, resistimos com e entre os povos –mulheres, homens, crianças, jovens e comunidades enraizadas na terra. As denúncias que vamos acompanhando ou encorpando em processos, trajetórias de pesquisas colaborativas, e pesquisas a partir de ações coletivas nos permitem afirmar que o subconsciente cis-heteropatriarcal também se reproduz em muitos coletivos e coletivas, organizações e movimentos alter-nativos. Quebrar as mulheres, por via sexual, é parte da despossessão e do domínio imperialista-capitalista-homocêntrico que busca aniquilar a dignidade pessoal e as subjetividades coletivas e comunais.

Nós nos convocamos e lhes convocamos a seguir criando lugares concretos de des-hierarquização do poder e lugares de cura diante da impunidade institucionalizada e sancionada pelo Estado. Como trabalhadoras e trabalhadores das Ciências Sociais em interseção com artistas, ativistas e feministas territoriais e comunais, continuaremos desmascarando e combatendo, pessoal e coletivamente, qualquer forma de humilhação, extermínio e cooptação de mulheres nos territórios, e persistiremos em seguir nos curando do sistema cis-heteropatriarcal nos diferentes lugares onde estivermos, do gênero que sejamos, dos territórios que habitemos e das histórias que escrevemos e caminhamos.

Os movimentos de vítimas de violações de direitos humanos enfatizam quatro critérios que nos parecem eminentemente aplicáveis aos casos de abuso e assédio sexual: o direito à verdade, à reparação, à não repetição e à justiça. Neste sentido, instamos as diversas instituições acadêmicas (nacionais, latino-americanas, caribenhas e transnacionais) envolvidas –de uma forma ou de outra– em casos de abuso e assédio sexual e extrativismo epistêmico a reverem seus protocolos e comitês de ética e violência epistêmica e de gênero. É, sem dúvida, importante declarar “tolerância zero e rejeição ao assédio sexual” (CLACSO), mas acreditamos que isto é insuficiente.

Acreditamos que em todos os espaços onde nos movemos e atuamos como trabalhadoras(es), ativistas e feministas devemos continuar trabalhando coletivamente e em conjunto com as autoridades institucionais na implementação de protocolos, comitês e políticas internas (explicitamente acessíveis) para promover mecanismos apropriados e expeditos para prevenir, denunciar, debater e agir contra atos de abuso e assédio sexual, contra atos de violência de gênero e epistêmica. Cada instituição acadêmica nacional geralmente tem comissões e códigos ad hoc; as coordenadorias acadêmicas supranacionais devem ter, revisar e atualizar tais instâncias permanentemente. E se não as têm, devem criá-las. Não é suficiente –pelo que já argumentamos acima– deixar o trabalho para as “comissões independentes”. Repetimos, é insuficiente, e até mesmo perigoso, pelas razões já argumentadas.

Nos deixa sem fôlego e nos indigna a resposta de Boaventura de Sousa Santos reduzida à “vingança” diante das ex-estudantes denunciantes via auto-etnografia. “A própria teoria social feminista nos indica que não há lugar, nenhum sujeito intocado pelas relações de dominação e suas interseções”. Para nos emanciparmos delas, para empurrá-las para trás, temos que olhá-las no rosto, reconhecê-las em nós, não tentar esconder em que partes de nós elas habitam… É trazendo-as à tona, debatendo-as, que nasce a possibilidade de mudança” (Lang e Segato).

Sabemos também que precisamos de comunidades acadêmicas e sociais dispostas a debater em profundidade, a aprender permanentemente, a expandir nossa imaginação e a (re)criar coletiva e permanentemente processos emancipatórios –práxis libertadoras– diante das omissões, indiferenças e qualquer expressão de revitimização das mulheres violentadas e das diversas comunidades afetadas. Acreditamos que o que também está em jogo é a construção coletiva de sociedades justas, relacionais e curativas; outros mundos possíveis aqui e agora, como dizem e fazem as, os, oas zapatistas.

radio
Campaña internacional "Semillas que florecen. Justicia para Bety y Jyri"

A Bety Cariño, quien cumpliría 50 años este 8 de abril de 2023

El 8 de abril de 2023, Alberta “Bety” Cariño Trujillo cumpliría 50 años. Fue asesinada el 27 de abril de 2010, cuando paramilitares emboscaron a una caravana en su camino a la comunidad indígena de San Juan Copala, Oaxaca, México. En el ataque murió también Jyri Jaakkola, un activista finlandés, y varias personas resultaron heridas.
Recordamos a Bety con esta video-entrevista y seguimos exigiendo justicia:
Sembrando sueños, cosechando esperanzas: Bety Cariño

Campaña internacional “Semillas que florecen. Justicia para Bety y Jyri”

radio
Contextual

“No era la primera vez que me trataban como criminal”. Crónica del trato a migrantes por autoridades mexicanas.

Lucia Ixchíu es periodista y activista guatemalteca exiliada en España. En medio de los cuestionamientos por el trato a migrantes de autoridades mexicanas, el 23 de marzo fue retenida arbitrariamente a su llegada a nuestro país. Esta es su crónica.

Por Lucia Ixchiu | Contextual.mx

Éramos más de cincuenta personas encerradas en un cuarto pequeño, con calor, sin comida, sin acceso al baño y con muy poca agua. Ninguna de las más de 50 almas sabíamos por qué nos encontrábamos allí, aunque al mirar a mi alrededor me percaté que todas veníamos de un perfil racial específico.

Comencé a preguntar a la gente que estaba allí antes que yo, si sabían qué hacían allí, les pregunté si tenían alguna idea, algunas ya tenían más de siete horas de estar en este lugar, pero nadie sabía nada. La gente tenía miedo, nos habían quitado los teléfonos y los papeles [pasaportes], había un silencio y una tensión que se sentía en el aire.

Una mujer pegaba de gritos, quería que le dieran explicaciones, quería saber por qué estaba allí retenida, daba de gritos y golpeaba las ventanas de un cuarto vacío en donde estaba encerrada. Comenzó a llamar la atención de más, no dejaba de gritar y en ese momento me dieron ganas de sumarme al reclamo, pero inmediatamente fue agredida por dos policías mujeres que la golpearon, empujaron y encerraron en el baño. Todas las personas que estábamos allí sentimos miedo, yo que siempre he sido buena para hablar y gritar en ese momento me sentí pequeña al ver lo que le hicieron. Entendí que nos iba a tomar tiempo y que sería muy difícil, si es que lográbamos salir de allí.

Yo tenía 12 horas de vuelo detrás de mí, me había cruzado un océano entero, había comido muy poco porque la comida de avión no me gusta. Llegué al aeropuerto de la Ciudad de México el 23 de marzo del 2023 a las 17 horas y 30 minutos, el vuelo había llegado antes de la hora programada… no tenia idea de lo que me esperaba.

(Continuar leyendo…)

radio
Kurdistán América Latina

Actriz brasileña encuentra inspiración en la revolución de las mujeres de Rojava

Las mujeres en Rojava, en el noreste de Siria, luchan contra el sexismo y el patriarcado con prácticas revolucionarias, que deberían ser conocidas por todo el mundo, dijo el domingo la bailarina y actriz brasileña Rojda Dendara.

Dendara viajó a Rojava hace un año para explorar la revolución de las mujeres y compartir su conocimiento artístico. Se sintió atraída por la democracia y el federalismo de Rojava, que investigó exhaustivamente antes de decidir mudarse allí, según una entrevista brindada a JINHA.

Dendara se ha involucrado en actividades artísticas que sirven a la revolución de Rojava, al combinar la danza folclórica con la contemporánea. Además, promueve el teatro para crear un lenguaje artístico único con la gente de Kurdistán.

“Soy bailarina y también hago danza expresionista y teatro. Cuando estuve en Brasil, en 2017, investigué a las mujeres rusas que lucharon en la Segunda Guerra Mundial. Un amigo actor me preguntó: ‘¿Por qué no investigas a las mujeres kurdas?’. En ese momento, no sabía nada sobre la Revolución de Rojava”, dijo la artista brasileña.

La Revolución de Rojava, liderada por las ideas del líder kurdo Abdullah Öcalan, ha inspirado a muchos luchadores internacionalistas y anticapitalistas de todo el mundo a unirse a las Unidades de Protección del Pueblo (YPG), el Batallón de Libertad Internacionalista y las Unidades de Protección de la Mujer (YPJ) en la lucha contra ISIS. Otros llegaron a la región para compartir sus conocimientos artísticos.

Dendara ha participado en muchos proyectos en Rojava, incluida una obra de teatro y un video musical titulado “PKK Epic”, en el que contribuye con bailes. A pesar de las dificultades de adaptarse a una nueva cultura, Dendara ha encontrado la experiencia rica y satisfactoria.

Ahora, la actriz y bailarina espera llevar lo que aprendió a Brasil y presentar la Revolución de Rojava a su gente.

“Las mujeres han dado una gran lucha en Rojava, y están trabajando con el corazón y el alma para eliminar la mentalidad sexista y patriarcal –remarcó-. Mi esperanza es que no solo el pueblo brasileño, sino todos, se familiaricen con esta lucha y respeten la Revolución del Kurdistán de Rojava”.

 

Fuente: JINHA / Medya News / Traducción y edición: Kurdistán América Latina

radio
Avispa Midia

México tembló el 8M

Fuente: Avispa Midia

Por Jeny Pascacio

“La Fiscalía no hace nada, no sé qué hacer, mi hijita fue asesinada. ¿Por qué nos tratan así?, ¿qué le hicieron a mi hija?, ¿qué pasó con ella?, y no me dicen nada. ¡Pido justicia para todas!, pido que el gobernador Rutilio Escandón Cadenas haga algo, que ayude a las mujeres, no que sólo esté en su curul haciendo nada”, fueron las palabras de Flor, madre de Paola Yazmín, asesinada en una escuela pública federal de la capital de Chiapas.

Madres y familiares de víctimas de feminicidio realizaron un mitin en la entrada de la Fiscalía General del Estado, en Tuxtla Gutiérrez. Foto: Jeny Pascacio

El mismo mensaje resonó en cada entidad de México, a propósito del Día Internacional de la Mujer que este 2023 convocó a miles de mujeres a alzar la voz, hartas del doble discurso y simulaciones de los gobiernos. “Cada vez somos más”, se escuchó en la conmemoración en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.

10 mujeres por día

De acuerdo a estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Pública, sólo en enero de 2023 se contabilizaron 68 feminicidios en el país. Oaxaca, Estado de México, Veracruz, Ciudad de México, Jalisco, Nuevo León y Chihuahua ocupan los primeros lugares.

El Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) dio a conocer que el 2022 cerró con 3,755 asesinatos de mujeres, de los cuales sólo 968 casos fueron reconocidos como feminicidio. “Es decir, únicamente en estos casos se acreditaron las razones de género”, explicó el OCNF e hizo hincapié que a pesar del subregistro, en México fueron asesinadas 10.28 mujeres al día. Los 2,787 casos restantes, las autoridades los catalogaron como homicidios dolosos, sin contar los “suicidios” que no se investigan como feminicidios.

A decir del delito de feminicidio, la Ciudad de México es uno de los focos rojos y este 8 de marzo las avenidas principales fueron pintadas de color púrpura para exigir una vida libre de violencia.

Para la marcha los distintos grupos de mujeres se congregaron en la Glorieta de las Mujeres que Luchan, el Monumento a la Revolución y la Estela de Luz donde realizaron el pase de lista de las víctimas de feminicidio, también de las no identificadas.

Algunas se adelantaron al Zócalo desde antes de las tres de la tarde (hora programada para marchar), así también las organizaciones de madres buscadoras y de víctimas de feminicidio; artistas, niñas, niños y estudiantes.

El operativo de las mujeres policías estuvo en puntos estratégicos y el gobierno federal dijo que las actividades transcurrieron con saldo blanco. Este jueves (9) las pintas que dejó la ola púrpura a su paso fueron borradas.

En el Estado de México, que también ocupa los primeros lugares a nivel nacional en feminicidios, partieron de diferentes municipios del Valle de México para unirse a la mega marcha de la Ciudad de México.

Mientras en Jalisco más de 50 mil mujeres tomaron las calles en tres marchas que tuvieron como destino distintos puntos, la Glorieta de las y los desaparecidos; la marcha que culminó en la Glorieta de la Minerva, y la que concluyó en frente al Palacio de Gobierno.

En Tamaulipas, un estado con altos índices de violencia y que en enero pasado registró dos feminicidios, la marcha fue aprovechada por el gobierno municipal que convocó a una caminata en los límites con Estados Unidos y acompañadas de una funcionaria del vecino país.

En San Luis Potosí las mujeres manifestaron el enojo y hartazgo generalizado en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) y el Palacio de Gobierno estatal, edificios ubicados en el centro histórico.

Algo similar ocurrió en Morelos donde las mujeres rompieron los vidrios del Palacio de Gobierno en Cuernavaca ante la inacción de las autoridades por erradicar la violencia contra la mujer.

Tijuana, Yucatán, Tabasco, Sonora, Chihuahua, Michoacán, Sinaloa, Quintana Roo Querétaro, Baja California Sur, Chilpancingo, las mujeres también marcharon antecedidas por las familias víctimas de feminicidios, sobrevivientes, maternidades e infancias.

Al final de los recorridos en todas las entidades, las mujeres tapizaron los edificios con pancartas con mensajes exigiendo justicia y por doquier, fotografías de mujeres víctimas de feminicidio.

En el piso, las paredes, puertas y aceras escribieron los nombres de feminicidas y violentadores que caminan libres por las calles de México.

La colmena

En Chiapas, Flor, madre de Paola Yazmín que fue asesinada y hallada el 8 de diciembre de 2022, estuvo acompañada de sus hijas y de más madres y familiares de víctimas de feminicidio que previo a la marcha conmemorativa del Día Internacional de la Mujer realizaron un mitin en la entrada de la Fiscalía General del Estado (FGE), en Tuxtla Gutiérrez.

También en diciembre del año pasado, Casandra Isabel Arias Torres fue levantada por un grupo armado durante un festejo familiar en Berriozábal, Chiapas. Los hombres armados quitaron los teléfonos celulares a los invitados para eliminar la evidencia; la joven continúa desaparecida.

Isabel, madre de Casandra, también contó su historia e hizo el reclamo a las autoridades frente a la Fiscalía de Chiapas que dirige Olaf Gómez Hernández, a quien las madres de víctimas de distintos delitos contra mujeres exigieron tomar el cargo y dejar el discurso de: “fue en la administración pasada”.

Foto: Jeny Pascacio

Más de 10 familias acudieron con pancartas y su voz a Fiscalía, procedentes de varios municipios del estado al sur de México. Otras madres y hermanas enviaron cartas que fueron leídas por activistas, mientras los uniformados resguardados al interior del edificio de la Fiscalía fotografiaban a las mujeres que no dejaron de repetir la palabra ‘justicia’.

En Chenalhó, las mujeres integrantes de la Sociedad Civil Las Abejas de Acteal conmemoraron el 8M con una jornada de ayuno y oración, después de una caminata que realizaron del crucero Majomut hasta la ermita de los mártires de Acteal.

Las mujeres contaron sus experiencias en las luchas, “en este caminar”, hablaron sobre la violencia institucional que no respeta sus derechos por ser parte de la resistencia y la lucha.

“Somos abejas y por eso nos atacan quieren saber si tenemos fuerza y valor para defendernos… pero nos han despertado”, dijo una de las mujeres que tomaron la palabra. “Como mujer creí que no era valiente, pero un día no le tuve miedo a los hombres”.

“Vean su fuerza como mujeres, el valor y la capacidad que tenemos. No es ahora que nos damos cuenta, no es hasta ahora que las mujeres empezamos a salir adelante, a defendernos, a ver nuestro valor… como mujeres les invito a que no tengamos miedo que sigamos en esta lucha y en esta resistencia”.

 

radio
Kurdistán América Latina

“¡Vamos con Jin Jiyan Azadî hacia la revolución de las mujeres!”

El Movimiento de Mujeres de Kurdistán se refirió al Día Internacional de la Mujer Trabajadora y denunció el sistema patriarcal que mantiene al mundo en una crisis permanente. Desde el movimiento aseveraron que igualmente la resistencia de las mujeres crece en todos los continentes.

A continuación publicamos la declaración completa:

Como pueblo kurdo y mujeres kurdas, saludamos el 8 de marzo, en un momento en que las crisis provocadas por la modernidad capitalista amenazan nuestro derecho a vivir. Nuestra determinación de resistir a las fuerzas que violan nuestro derecho a vivir, tanto como nuestro dolor y pérdida, es muy decidida e inquebrantable. Las razones de nuestra lucha son más fuertes que nunca. La dominación masculina, la alianza del Estado y el capitalismo siguen atacando a las mujeres, convirtiéndose en una guerra entre sistemas.

Las prácticas de las corporaciones multinacionales, la nueva cara del fascismo, las dictaduras y el colonialismo se entrecruzan con los ataques a la libertad de las mujeres y el saqueo de la naturaleza. Los conflictos dentro de las estructuras de poder hegemónicas y sus políticas impulsadas por el beneficio por encima de las mujeres y la sociedad, no conducen a otro futuro que no sea el de la guerra, la migración, la destrucción, la violencia y la pobreza: el sol de la humanidad se oscurece. En todas las regiones del mundo hay una oleada de explotación y ataques por parte de la dominación masculina. Sin embargo, desde Afganistán hasta Abya Yala, desde la India hasta África, la resistencia de las mujeres está creciendo en todas las partes del mundo.

Nosotras somos la ola más fuerte de esta resistencia. Sabemos que no podemos vivir si no tejemos nuestras vidas con la resistencia cada día. Lo sabemos incluso por lo que hemos vivido en el último año. Hemos dicho que el capitalismo y el fascismo son la destrucción social. Y, por desgracia, esta afirmación fue confirmada de nuevo por el terremoto que ocurrió el 6 de febrero en nuestro país, Kurdistán, y en las ciudades de Turquía y Siria. La sucia alianza del AKP/MHP y las políticas fascistas sólo agravaron aún más las consecuencias del desastre. Se ha convertido en un crimen contra la humanidad. Conocemos la cara más sucia del fascismo por los gritos de las mujeres y las niñas y niños sepultados bajo los escombros y por sus vidas enterradas. Hemos dicho que el sistema dominado por los hombres conduce al infanticidio femenino. Lo sabemos por nuestro país, Kurdistán.

Sabemos de los ataques diarios, de los asesinatos de mujeres pioneras y de las ocupaciones que llevaron a cabo en presencia de fuerzas internacionales cuando no consiguieron derrotar la “Revolución de las Mujeres”, donde todavía respira una esperanza de libertad para todos los pueblos del mundo, en Rojava, Kurdistán Occidental.

Sabemos que el Estado turco, que se ha vuelto tan brutal que ha asesinado con armas químicas a guerrilleras que con sus 30 años de experiencia en autodefensa, han inspirado coraje, confianza en sí mismas y habilidades de autodefensa en las mujeres. Conocemos el fascismo que ha expulsado a las mujeres de la política y de las administraciones locales; el fascismo que no permite que haya mujeres diputadas y alcaldesas elegidas por la voluntad del pueblo, causándoles terribles consecuencias y encerrándolas en la cárcel.

Conocemos sus vergonzosas leyes que silencian y detienen a mujeres académicas y periodistas que intentan hacer públicas las injusticias y las prácticas del fascismo. Son mujeres que insisten en la verdad. A ellas se las detiene, pero al mismo tiempo se permiten los matrimonios infantiles y se deja en libertad a los pederastas y violadores. Conocemos bien esta red de corrupción por el hecho de que anuló el Convenio de Estambul y se llevó por delante las enormes conquistas de los derechos de la mujer con una sola palabra del dictador.

Conocemos a quienes tienen miedo de la liberación de la mujer, incluso de su cabello, asesinando a Jina Amini. Experimentamos lo brutal que puede ser esta mentalidad cuando asesinaron a nuestras camaradas Sakine Cansız, Fidan Doğan, Leyla Şaylemez y diez años después a EvinGuyi en París. Todo empezó cuando las mujeres se organizaron para protagonizar la revolución. Allanaron el camino de la revolución femenina y lo hicieron con la vía del paradigma democrático, ecológico y de liberación de la mujer, no con la mentalidad del sistema.

En el camino revolucionario, los estudios sobre la mujer han apoyado a la Jineolojî. Comenzó compartiendo la resistencia de las mujeres kurdas por una vida libre y sus experiencias con las mujeres del mundo. Empezó por encontrar la fórmula mágica para liberar la vida proclamando “JIN JYAN AZADI”. Por esta razón, nuestra mayor respuesta el 8 de marzo en todo el mundo son las palabras de la KJK (Komalên Jinên Kurdistan, Comunidad de Mujeres de Kurdistán): “BI JIN JIYAN AZADÎ RE BER BI ŞOREŞA JINÊ!” – ¡VAMOS CON ‘JIN JIYAN AZADI’ A LA REVOLUCIÓN DE LAS MUJERES!”.

FUENTE: Kurdistán América Latina

radio
PCI-Ucizoni

OAXACA | Soldados confrontan pueblos indígenas que se oponen a megaproyectos

8 marzo de 2023.

Mientras las mujeres indígenas se movilizaron este día, en nuestra región para exigir respeto a sus derechos y demandarle al presidente de la República, Andrés Manuel Lopez Obrador, el cese de los despojos y la salida de los elementos de la Secretaria de Marina, unos 20 elementos de esa dependencia al mando del vicealmirante Juan Carlos Vera y del capitan Jorge Bremon Zamorano volvieron a presentarse de manera intimidatoria, en el plantón que tienen establecido los y las campesinas mixes en el tramo del ferrocarril, Mogoñe Viejo-Vixidu. Este Plantón cumple el día de hoy 10 días.

El dia de ayer una comisión de campesinos fue recibida por el gobernador del estado Salomón Jara quien se comprometió a instalar una mesa de diálogo para atender los reclamos de los y las ejidatarias afectadas. UCIZONI condena el uso de fuerza militar para imponer un megaproyecto, violando los derechos históricos de los Pueblos originarios.

Atentamente

PCI-UCIZONI

Página 4 de 45« Primera...23456...102030...Última »