Por Renata Bessi y Aldo Santiago

ONGs conservacionistas, empresas y gobiernos impulsan en la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático (COP26), que se realiza en Glasgow, Escocia, hasta el 12 de noviembre, las llamadas Soluciones Basadas en la Naturaleza (SBN) como una solución a la crisis climática mundial. Sin embargo, dichas soluciones fueron clasificadas como una “peligrosa estafa” por 257 organizaciones, redes y movimientos de 61 países. “Es un concepto que el gobierno del Reino Unido, las mayores empresas contaminadoras del mundo y la industria de la conservación intentan vender”, se pronunciaron en un comunicado.

Desde la perspectiva de las SBN la idea es que las empresas que contaminan paguen a la industria conservacionista para que cerquen bosques o planten árboles. En cambio, las empresas compensarían el daño climático provocado por sus emisiones de CO2 con el carbono absorbido en el área de bosque que mantienen con pagos. Para comercializar este reclamo de compensación de emisiones se utiliza un documento al que se denomina crédito de carbono.

Las organizaciones denuncian que dichas soluciones no atacan las causas reales del calentamiento global, es decir, la quema de combustibles fósiles, petróleo, carbón. La solución, para ellas, está en dejar el petróleo en el suelo y eso no está en discusión en la conferencia.

Además, las SBN generarán la expulsión de los pueblos y comunidades que viven en una relación integral con los bosques. “(…) Cercarán los espacios vitales de los pueblos indígenas, de las comunidades campesinas y de otras comunidades que dependen de los bosques, y reducirán la ‘naturaleza’ a un mero proveedor de servicios para compensar la contaminación de las empresas y para proteger las ganancias de las empresas que mayor responsabilidad tienen por el caos climático”, sostienen las organizaciones.

Para comprender de forma más detalla qué son las Soluciones Basadas en la Naturaleza, las consecuencias para la naturaleza y los pueblos, Avispa Midia entrevistó a Winnie Overbeek, miembro de la coordinación del Movimiento Mundial por los Bosques Tropicales (WRM, siglas en inglés), organización que, desde hace tres décadas, viene apoyando a las comunidades en los tres continentes con bosques tropicales, que luchan contra las amenazas a sus bosques. “Es nuestro trabajo alertar estas comunidades sobre las nuevas formas de despojo que muchas veces se presentan como soluciones”, dijo.

A continuación presentamos la edición de una larga entrevista realizada con el integrante del WRM.

¿Cuáles son los orígenes de las SBN?

La conversación sobre este tema se inició entre 2009 y 2010 en el ámbito de esas conferencias que discuten el caos, no más la crisis, sino el caos climático, en el ámbito de las Naciones Unidas. Ha sido promovida principalmente por una organización que se llama Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), que congrega más de 90 gobiernos y también otras ONGs conservacionistas, entre ellas The Nature Conservacy (TNC), Conservation International, WWF y Environmental Defense Fund.

Utilizan el discurso de que es importante proteger los ecosistemas que restan en el mundo y  alegan que esas áreas naturales son importantes para ayudar a mitigar los impactos de los cambios en el clima.

Esa discusión se fortalece entre 2016 y 2017, después del Acuerdo de Paris, que es el primer acuerdo sobre el clima después de muchos años de estas conferencias. Ahí estuvieron las ONGs conservacionistas haciendo lobby para que los bosques del mundo fueran el foco en la discusión sobre la mitigación de los cambios climáticos. Viene de ahí ese debate de las SBN.

¿Por ser algo reciente, existe un consenso de lo que realmente son las SBN y de cómo debe funcionar?

En 2017, la TNC hizo un artículo donde ellos comienzan a explicar más lo que sería esas SBN. Ahí se empieza hablar de las Áreas Naturales Protegidas (ANP) como forma de mitigar las emisiones de carbono de las corporaciones. Pero también que las SBN pueden ayudar en el bienestar de las comunidades y en la seguridad alimentaria. Ellos comienzan a ampliar de manera que cualquier cosa cabe en eso. Aún en las conferencias del clima todavía no tienen una definición de lo que serían las SBN. Ahora en Glasgow ellos están hablando sobre ello.

En mi visión ellos no tienen una visión clara de su definición y tampoco de la acciones que las caracterizan, es un concepto en el cual están intentando meter muchas cosas. Sin embargo, es claro que es una nueva tendencia empujada por las entidades conservacionistas, con una alianza fuerte con las grandes corporaciones y con el gran capital.

¿Cómo analizas la participación del gran capital?

La última conferencia del clima que yo acompañé, en 2019, en España, tuvo un evento para presentar las SBN. En la mesa estaba la TNC junto a representantes de las mayores corporaciones del mundo, principalmente de petróleo. Todo indica que esas grandes empresas que destruyen mucho, contaminan mucho y contribuyen con el caos climático, están abrazando ese concepto como una solución, están haciendo propuestas y usando ese concepto para mitigar sus emisiones de carbono, sus impactos climáticos y también, en nuestra visión, es para distraer y poder continuar con toda la destrucción que están causando.

Es una propuesta del gran capital minero, petrolero, pero no solamente de ellos. La novedad es que todos los sectores que representan el capital productivo están involucrados en esta iniciativa. Por ejemplo, el sector de informática, estamos hablando de Microsoft, Google. Y también el sector financiero. Es así que todos esos sectores que tienen un gran impacto sobre el clima están juntos en esta propuesta, sin que aún ellos mismos sepan qué es lo que están diciendo exactamente con eso. Es una gran brecha para que todo pueda caber dentro.

¿Las empresas tienen participación directa en la COP de Glasgow?

Cada vez más el poder corporativo de las empresas está dentro de la COP. Yo no sé exactamente qué año, pero algunos años atrás las empresas consiguieron sentarse en la mesa y les fue permitido ser parte de las negociaciones, antes no era posible. Nosotros como organizaciones sociales no podemos, pero ellas sí pueden.

¿Cuál ha sido la efectividad de los acuerdos que se llegan en estas conferencias?

En cada COP se establecen apenas compromisos voluntarios. El propio Acuerdo de Paris, firmado en la COP 21, por más que haya sido celebrado, establece compromisos de reducción de emisiones de carbono, pero la propia implementación no es dirigida por leyes, son compromisos voluntarios. Yo personalmente no tengo una gran expectativa de ninguna COP. Y además no están discutiendo el problema central.

¿Cuál es el problema central?

El problema del clima, las causas del calentamiento global, es la quema de combustibles fósiles, petróleo, carbón y de eso no tienen ninguna mención en el Acuerdo de París, no hay ni una vez la palabra petróleo. La solución está en dejar el petróleo en el suelo. Pero este debate no está presente. La propuesta de las SBN está llegando con mucha fuerza en Glasgow. El hecho de los 100 países que firmaron el protocolo para conservar los bosques – monetizando esta conservación – es una señal de eso; aunque con eso no se ataque la causa del problema.

Claro que es importante conservar los bosques y eso lo saben las comunidades desde hace mucho tiempo, pero para resolver la crisis y el caos climático hay que dejar el petróleo debajo del suelo, solo hay un camino y eso no está siendo discutido.

¿Cómo funciona la monetización de los bosques?

El articulo 6 del Acuerdo de Paris prevé los mercados de carbono. ¿Qué es un mercado de carbono? Pues está relacionado a las nuevas tendencias de SBN. Al proteger los bosques, se puede generar créditos de carbono que son colocados en los mercados de carbono. Estos créditos pueden ser comprados por la industria que continua utilizando combustibles fósiles en su producción. Continúa utilizando combustibles fósiles porque no quiere ceder los lujos que obtienen con sus actividades. Entonces, es una gran oportunidad que ellos tienen para comprar los créditos de conservación de los bosques para continuar contaminando.

En la práctica ¿cómo funciona?

Una gran empresa que emite una gran cantidad de carbono, por ejemplo la Unilever, empresa productora de alimentos procesados, calcula cuánto carbono emite y promete que va a reducir a cero. Pero ¿cómo funciona esta reducción? No es que van a dejar de emitir, otros lo van hacer para ellos. ¿Quienes son esos otros? Puede ser otra empresa que va a plantar árboles y va a capturar carbono del aire. Ahí ellos hacen un cálculo de las emisiones de la empresa que serán compensadas con la captura de carbono. Calcularon que Unilever necesita 4.4 millones de hectáreas de bosques para compensar sus emisiones.

En el fondo, creo que las SBN son más un estrategia del capital para continuar creando nuevos mercados, para entrar en territorios que hasta entonces no había conseguido alcanzar como los bosques y hasta mercantilizar el modo de vida de comunidades que hoy viven en armonía con la naturaleza. Estas comunidades que viven de los bosques no están separadas de la naturaleza, pero los mecanismos de las SBN promueven la separación ya que necesitan de bosques deshabitados para poder comercializarlos.

Es una nueva fase capitalista verde en un mundo completamente debilitado, climáticamente y ecológicamente, que necesita de intervenciones y transformaciones culturales. Es más un capricho del capital para continuar lucrando con la crisis ecológica, la crisis climática.

¿Cuál es la relación entre REDD+ y SBN?

Las Soluciones Basadas en la Naturaleza no es más que la continuación de REDD+ (Reducción de Emisiones derivadas de la Deforestación y la Degradación de los bosques). Son mecanismos con la misma lógica, con discursos distintos. Con REDD+ el foco del debate era la deforestación, es decir, qué hacer para disminuir la deforestación. Ahora ya no hablan de eso, dicen que tenemos las soluciones para el caos climático y están basadas en la naturaleza y ¿quién está contra la naturaleza?, ¿quién está contra encontrar soluciones? Pero ellos no explican exactamente que es eso.

Una diferencia importante es que van a incluir el agro negocio en las SBN, para hacerlo menos impactante. Otra vez una falsa solución porque ellos no están pensando en parar de extraer petróleo para hacer fertilizantes, porque están pensando ampliar el agro negocio sobre tierras de campesinos.

¿Cuál es tu análisis sobre la inclusión de organizaciones indígenas en la implementación de programas de financiamiento para la conservación de los bosques?

Es una cuestión bastante delicada. De todos esos proyectos REDD+ que hemos acompañado, donde viene una ONG, una empresa para proteger los bosques, casi todos, si no es que todos, tienen problemas. Las comunidades pasan a tener restricciones para usar los bosques. Al final son historias de muchos conflictos internos, división, mentiras y contradicciones.

El desafío es debatir sobre REDD+ y analizar el desastre que representó no solo para las comunidades sino también para la deforestación, que continua aumentando. Entonces pienso que tenemos que profundizar ese debate, porque eso va a seguir ocurriendo.

Las ONGs conservacionistas, paralelamente a la conferencia del clima, tienen otra conferencia sobre biodiversidad. Va a ocurrir presencialmente a principios del próximo año en China. Tienen una propuesta para proteger 30% de las áreas boscosas del mundo, de ecosistemas y, más, para crear un área protegida que corresponde a 30% del mundo, en tierra y mar. Eso sería mas o menos duplicar las ANP que tenemos hoy.

En nuestra experiencia de 30 años de WRM, tenemos certeza de una cosa, donde hoy existen bosques es porque existen comunidades que los cuidaron. En la visión de naturaleza de las ONGs conservacionistas no hay espacio para las personas, para las comunidades, no hay espacio para las mujeres, para los niños, para los ancianos, para los indígenas y, si ellos quieren quedar, será de la manera que las ONGs y las empresas establezcan.

Solo para citar un ejemplo, acabo de estudiar un caso, que resultó en un artículo que será publicado este mes, sobre uno de los proyectos de REDD+ más grandes del mundo, en la República Democrática del Congo, administrado por el WWF.

Es un desastre, una falta de respeto, una imposición de arriba hacia abajo, pero ellos presentan este proyecto como si la comunidad tuviera una gran participación. Y lo que viene con las SBN es mucho mayor

¿Qué está en juego en Glasgow?

El objetivo de los diversos actores en Glasgow es tener ahora un mercado reconocido, formal, oficial. Eso representa una disputa de poder entre ellos.