Texto: Radio Pozol

San Cristóbal de las Casas, Chiapas. 12 de abril. “Su ánimo nos da fuerza a nosotros como familiares para luchar con ellos. Aunque hayan días que la desesperación nos hagan caer hasta las lágrimas, sabemos que tenemos a alguien en cautiverio: un hijo, un hermano un esposo, un padre que nos necesita, y aunque estemos cansados, con hambre, frio, y noches sin dormir, seguimos su ejemplo de lucha”, expresan familiares de indígenas injustamente presos en diferentes penales de Chiapas, esto a 30 días de haber iniciado una huelga de hambre para exigir que su caso sea revisado y que el Estado haga cumplir la Ley contra la tortura, a la cual fueron sometidos cuando fueron encarcelados; como lo han corroborado organismos no gubernamentales, como el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba), y el Grupo de Trabajo No Estamos Todos (GTNET).

“Por ellos y con ellos luchamos hasta obtener la libertad, de donde los tienen secuestrados, hasta que veamos el día en que se derrumben las rejas y veamos una madre con su hijo, una esposa con su pareja, e hijos con su padre juntos. No nos rendiremos”, afirman las familias de los presos, los cuales han estado 30 días, injiriendo sólo agua y miel. “Se imaginan un lugar al que las personas tengan que llegar a los límites para ser escuchados”, pregunta el GTNET, en la conferencia de prensa de este día vienes en San Cristóbal. “Que se investigue los casos de tortura”, exige el Frayba, luego de que este día se anunciará una mesa de dialogo con secretario de gobierno. En adelante los indígenas presos realizaràn un ayuno parcial, y en caso de que en 20 días de plazo u otras medidas tomarán.

“Hoy en día se encuentran muy cansados muy débiles, la mayoría han perdido 10 kilos. El deterioro físico de ellos es más notable cada día, pero con una fuerza interior que sorprende. Una fuerza y una valentía que han juntado desde hace muchos años que han estado encerrados injustamente, para conseguir la libertad que un día les fue arrebatada”, comparten las familias de los presos en conferencia de prensa.

“El cansancio, la debilidad no es un impedimento para seguir de pie y seguir alzando sus voces hasta que sean oídos. Sus voces reclaman libertad y justicia, y el bien común de todo el penal. Los familiares estamos muy tristes y preocupados por la salud de los compañeros. Hacemos un llamado al gobernador Rutilio Escandón, a que tome cartas en el asunto lo más pronto posible”, exigen los indígenas chiapanecos, porque sus familias tienen “hambre de justicia, hambre de libertad, hambre de ser tomados en cuenta, hambre de ser respetados”.

Comunicado del Grupo de Trabajo No Estamos Todxs a 30 días del inicio de la huelga de hambre contra la injusticia