Persiguiendo a Major
Mumía Abú-Jamal

mumia

(Descarga aquí)  

Su nombre es Major – (éste es en verdad su nombre); Major Tillery, del Oeste de Filadelfia. Aún cuando tenía la reputación de gángster, en la cárcel éso no es importante. Fue como un prisionero que estudió en la cárcel y llegó a tener buén dominio de las leyes que Major estremeció hasta las paredes de la prisión con el muy famoso caso legal conocido como Tillery versus Owens, sobre las condiciones de vida en la prisión donde antes era común duplicar los habitantes de una celda (ponían cuatro prisioneros en cada celda). Éso fue declarado contra la Constitución de los Estados Unidos. El departamento médico de la cárcel también fue declarado contra la Constitución y, además, las codiciones de vida en partes de la prisión fueron declaradas en violación de la Constitución.

Poco después de su gloriosa victoria, Major Tillery fue transferido a una prisión en otro estado del país. ¿Venganza? Seguro que éso parece así.

Hace varios meses, Major me vió en la biblioteca, y tuvo una grave impresión por mi apariencia, mi modo de caminar y mi bajo nivel de atención. Major discutió conmigo, insistiendo que fuera a la enfermería de la prisión.

Resistí diciéndole que estoy bién; o que pronto estaría sano. Major dijo, “Compa – Yo te estoy viendo – tu piel se está descomponiendo, estás tan cansado que no puedes estar despierto. ¡Tú no estás bién de salud, Mú!”

Major hizo más. Fue al superintendente de la prisión, advirtiéndole que si Jamal no era hospitalizado inmediatamente, Jamal podría morir. El superintendente le respondió, “Yo le sugiero que no se preocupe tanto por otro prisionero, y que se preocupe más por Usted.” Inmediatamente Major le respondió: “Éso es lo que estoy haciendo, porque ese prisionero es my hermano – ¡Y yo quiero para mi hermano lo mismo que quiero para mí!”

Desde ese día, Tillery fue diariamente víctima de hostigamientos, de registros diarios, y fue despedido de su trabajo como Facilitador de los Presos. Major fue transferido – primero al otro lado de la cárcel, y poco después a la cárcel cercana, SCI- Fráckville. Una vez allí, Major tuvo otra sorpresa: fue castigado por mala conducta: tráfico de drogas (suboxone), por usar estampillas en sus cartas. ¡Le dieron 6 meses en celda solitaria!

Aquí está el único problema con esa acusación. En Fráckville (como en Mahanoy), todas las estampillas son cortadas de los sobres de las cartas en la celda de correos, antes de que los presos reciban su correspondencia. Tillery demandó ser acusado por la policía del Estado para probar la falsedad de la acusación. La prisión se negó a hacer éso. ¿Retaliación? Ciértamente parece así.

Para hacer peor las cosas, Major Tillery, y docenas de otros presos, están sufriendo de sarpullidos en la piel sin tener el cuidado médico necesario. Major está en celda solitaria no por uso de drogas, si no por algo que los administradores de las prisiones odian y temen sobre todas las cosas: la unidad de los presos; la solidaridad de los prisioneros.

El 5 de setiembre de 2015, Major Tillery cumplirá 65 años de edad, en celda soliataria por descarada retaliación.

©’15maj