Los familiares de los 49 bebés que murieron y de los 70 que resultaron heridos por el incendio de la Guardería ABC, en Hermosillo, Sonora, protestaron junto con algunos sobrevivientes para exigir justicia y que se cumplan las condenas contra los particulares y funcionarios que dictó el juez primero de distrito de la entidad el año pasado.

Explicaron que la sentencia condenatoria no se ha cumplido por estar suspendida hasta que un Tribunal Unitario de Circuito resuelva el recurso de apelación interpuesto contra la misma.

“Exigimos al magistrado Edmundo Páez Alcalá que se pronuncie y ratifique la sentencia”, señalaron.

Por otro lado, demandaron al director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Mikel Arriola, que se reúna con los padres “para que víctimas sobrevivientes de esta tragedia reciban una justa atención”.

Estela Páez Gill, una de las madres de las víctimas, cuestionó: cuánto más tiempo habrá que esperar para que se imparta justicia “a nuestros hijos muertos y lesionados a ocho años de la tragedia”. Añadió que a pesar de que los responsables deberían estar presos, las condiciones jurídicas “no están dadas para que esto suceda”. “Hay 19 procesados, pero lamentablemente no todos van a pisar la cárcel, para mí los verdaderos culpables son el ex gobernador de Sonora, Eduardo Bours, así como los dueños de la guardería de los cuales sólo dos están en proceso”, acusó.

“Ya existe una sentencia condenatoria no definitiva por culpa del poder judicial de la Federación. Al magistrado Páez Alcalá no le importa el transcurso de tiempo, que haya una recomendación de la CNDH, un dictamen de sus superiores, los ministros de la Suprema Corte como máximo órgano de justicia del país, una sentencia condenatoria del juez primero de distrito en Sonora y tengamos la calidad de víctimas de violación de derechos fundamentales. Exigimos justicia para nuestros hijos y demás niños”.

En tanto, Julio Márquez, padre de uno de los niños víctimas, lamentó que sin importar que entró en vigor la ley 5 de junio en 2011, que debería garantizar la seguridad a los menores en las guarderías, hasta hoy han sucedido 60 muertes, de las cuales cinco fueron en la Ciudad de México, dos en el estado de México y tres en Sonora. No obstante, hay algunas entidades que no cuentan con una ley sobre la materia, como son Nuevo León, Oaxaca, Tlaxcala, Veracruz y Campeche, explicó Márquez.

En junio de 2009 49 bebés murieron por un incendio en la Guardería ABC y por lo menos 70 resultaron gravemente heridos, pero las autoridades aún no actúan de manera eficaz para otorgar justicia a los padres y la atención médica debida a los sobrevivientes, aunque se hayan cumplido ya 8 años desde la tragedia.