1

(Descarga aquí)  

El pasado 26 de enero, como parte de las actividades que se realizaron durante la jornada por Ayotzinapa, se llevó a cabo un “funeral para Julio César Mondragón”. Familiares del normalista asesinado montaron guardia junto a un féretro vacío en la Procuraduría General de la República (PGR), y exigieron justicia para el normalista.
Al respecto manifestaron lo siguiente:

“1.-Mauro Taboada Salgado no fue detenido por el homicidio de Julio Cesar Mondragón Fontes, fue detenido porque supuestamente se le encontró en las calles de Iguala, portando un arma de fuego.

2.-La procuraduría no cuenta con otra prueba que señale la relación de Mauro Taboada Salgado más que un par de líneas en la declaración de “El cabo Gil”.

3.-Mauro Taboada Salgado no fue consignado por el homicidio de Julio César, ya que no se cuentan con elementos para procesarlo por ello. Mauro fue procesado por el delito de portación de arma de fuego.

4.-Julio Cesar Mondragón fue víctima de tortura y ejecución extra judicial en un ataque tumultuario, por ningún motivo aceptamos la teoría del asesino solitario. Las múltiples fracturas que Julio sufrió en tórax y cráneo, las marcas de arrastre que se observan en su cuerpo y el desollamiento de su rostro como mensaje de terror, no son ni pueden ser cometidas por un solo individuo.”

Después del funeral simbólico, los familiares de Julio César Mondragón acompañaron la marcha de los padres de Ayotzinapa. Al final del evento, en un mitin realizado en las puertas de  la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), los oradores coincidieron en que al Estado no le importa llegar a la verdad sobre la noche del 26 de septiembre, pues siguen empeñados en reforzar “la mentira histórica”.

DSC07252

DSC07370

Ciudad de México 26 de enero  2016.