La comunidad nahua de Santa María Ostula vive actualmente un ambiente de seguridad que no se había visto en años. Posiblemente sea uno de los territorios –junto con Cherán, en la meseta p’urhépecha– más tranquilos del país. Su estabilidad no es el fruto del buen desempeño de las autoridades estatales o de las fuerzas policiacas federales o militares, es únicamente el resultado del esfuerzo y la lucha de muchas personas, mujeres y hombres, que han arriesgado todo, para que la vida sea digna y no una migaja. La carretera 200, camino que comunica esta comunidad con otras vecinas y con otros municipios, ha sido testigo fiel de que fueron los Caballeros Templarios, el ejército, la marina y varios cuerpos policiacos, los responsables de muertes y desapariciones, no de seguridad alguna.

En esta franja costera, perteneciente al municipio de Aquila, los caminos lucen ahora radiantes, las playas en calma y quienes visitan por descanso o deporte (surf) se encuentran en un ambiente de relajación que difícilmente se puede conseguir en otros lados. Definitivamente, un periodo diferente se consolida entre la población nahua de Ostula, que sin bajar la guardia, se aboca a la construcción de proyectos y respuestas a las demandas fundamentales para asegurar la vida.

Fotografía: Heriberto Paredes

El pasado 24 de diciembre, el comandante de la policía comunitaria y coordinador regional de las fuerzas rurales (autodefensas), Cemeí Verdía, consiguió su libertad y salió del penal moreliense de Mil Cumbres. Finalmente, el juez no encontró elementos para consignarlo por homicidio y ordenó su libertad, a pesar de que Verdía haya pasado casi 6 meses de encarcelamiento. Hace pocos días tuvimos la oportunidad de charlar con él para tocar algunos asuntos respecto a su reincorporación a las tareas de seguridad y al cómo veía la comunidad en este su nuevo regreso.

«La comunidad sigue tranquila, aquí se están desarrollando proyectos productivos para impulsar el campo, continuará el reparto agrario en Xayacalan y también estamos viendo cómo atraer las visitas nacioanles e internacionales para que conozcan nuestras playas y se de cuenta la gente de que todo está bien; para que se den cuenta de que nuestra policía comunitaria ha logrado mantener la tranquilidad, y que esto ha permitido el desarrollo de nuestro pueblo», expresó Cemeí con total seguridad. Durante la entrevista, comenta el proceso que ha pasado desde su salida de la cárcel y su perspectiva acerca de las necesidades en materia de seguridad que se mantienen urgentes en el resto de Michoacán y en todo el país.

Fotografía: Heriberto Paredes